Siguiendo con Milo.

Aiacos: ¡Milo! - gritó saliendo de los arbustos, aunque al ver que lo tenían agarrado gritó- ¡¿Que le están haciendo a mi hermano atrevidos?! - gritó mientras salía de donde estaba y junto a él dos chicos más que venían con él.

Shura al ver esto rápidamente soltó a Milo, mientras se hacían hacia atrás con Saga y Camus, los que venían acompañando al recién llegado rápidamente se acercaban a ellos de forma amenazante, así que no les quedó de otra más que irse antes de que los alcanzarán, Milo únicamente vio con pena cómo el chico con aquel encantador acento francés se iba, por lo cual suspiró con tristeza, ni siquiera se presento.

Aiacos: ¿esta bien? No te hicieron nada ¿verdad? - preguntó mientras vio cómo su hermano triste suspiró.

Milo: no, ni siquiera nos presentamos - aseguró triste.

Aiacos: Milo cuantas veces voy a tener que repetirte que no te juntes con desconocidos quien sabe que te hubieran hecho esos tipos si no llegábamos - aseguraba.

Milo: solo exageras Aiacos, tú tienes la misma condición que mamá y yo y mírate nadie te a hecho algo ¿por qué me harían algún daño a mi? - preguntó molestó mientras se cruzaba de brazos.

Aiacos: que no haya permitido que tú te enterarás de que muchos se han querido pasar de listos conmigo es otro asunto, pero claro que me pasa y es por eso que te cuido, los chicos normales nos miran como algo exótico con lo que quisieran experimentar y lo sabes, no me gustaría saber que te hicieron algún daño y ni siquiera hablemos de papá, jamas me lo perdonaría por favor Milo solo obedece mis ordenes y quédate conmigo ¿entiendes? - pidió mientras vio cómo su hermano suspiro.

Milo: esta bien Aiacos, si con eso están contentos - respondió resignado, Aiacos al ver el rostro de tristeza de su hermano se sintió mal, pero lastimosamente era una realidad a la que no quería exponerlo, ni el, su madre o su padre, por eso lo cuidaban.

Aiacos: por favor no hagas esto Milo mamá nos habló de esto ¿no? "Tengan cuidado con quien quiera venir a endulzarles el oído, algún día se casaran pero no tienen que irse con el primer idiota que aparezcan enfrente" - le recordó mientras Milo únicamente suspiró aún con sus brazos cruzados - toma... te tienes que tomar la segunda dosis para no tener problemas - le pidió mientras vio a su hermano ver molestó la pastilla, misma que tomó, vio por unos momentos y después la lanzó al lago para después irse caminando de ahí - Milo... - llamó serio mientras lo seguía.

Radamathys y Minos únicamente se vieron entre sí, confundidos por el comportamiento de ambos hermanos, pero decidieron no preguntar, así que únicamente los siguieron por donde se habían ido.

Mientras tanto.

Con Saga, Shura y Camus.

Después de que creyeron estar lo suficientemente lejos, pararon de correr para poder recuperar el aliento, Camus únicamente se mantuvo en silencio, pensando en esas personas.

Shura: vaya que eso fue extremo - aseguró.

Saga: si, no creí que eso del hermano fuera cierto y mucho menos de que aparecería tan rápido - respondió mientras recomponia su postura, para después suspirar - vaya que carácter tiene... no se supone que un doncel deba ser así - aseguró mientras Camus únicamente suspiró.

Camus: hay algunos donceles que tienen carácter, no todos son tímidos Saga - respondió.

Saga: ¿enserió? Porque mi mamá no es de esos - respondió.

Camus: por cierto... ¿a que se referían con lo de la iniciación? - preguntó.

Shura: jaja, nos dijiste que nunca habías tenido pareja ¿no? Nosotros queríamos conseguirte una hoy - respondió en son de burla mientras Camus únicamente negó.

Camus: idiotas - les dijo mientras se ponía a caminar.

Shura: jaja, no seas así Camus - respondió mientras lo seguían.

Mientras tanto.

En otro lugar.

Caminaban despacio por aquel puente, no querían tirar esos barriles o el agua podría contaminarse, según palabras de su jefe.

Caronte: a presurate Myu, que ya me tiemblan las piernas por la altura - aseguró.

Myu: eso intento, pero mi pregunta es si saben que esto es peligroso porque lo sacan de las minas - aseguró mientras seguían, aunque de lo cansado que ambos estaban, Myu no aguanto más y soltó el barril, lo que provoco que Caronte también lo soltara por el peso, haciéndolo caer al agua y destruyendo el puente por donde ambos estaban cruzando. Por suerte ambos lograron agarrarse de un extremo de la cuerda para no caer.

Continuará...