Hacia la cocina
Siguiendo en el campamento.
Abrieron la puerta tan lento cómo pudieron, Minos se asomó a ver, viendo a uno que otro compañero suyo y algunos profesores, únicamente dio una pequeña señal con la mano mientras comenzaba a gatear para tratar de hacer el menor ruido posible.
Quien le siguió fue Camus y seguidamente de él los gemelos, dejando únicamente a Shura con los demás, quien se encargaría de abrir la puerta cuando llegarán, Aiacos un poco preocupado se dirigió a su hermano quien estaba hablando un poco con Aioros y Mü.
Aiacos: ¿Cómo te sientes? - preguntó.
Milo: siento dormidos los brazos y las piernas, pero no hay ninguna molestia más, no te preocupes - afirmo sonriendo.
Aiacos: todo va a estar bien ¿si? Traerán un poco de agua y comida para todos - aseguró.
Milo: perdón... si no diera asco el medicamento podría tragarlo sin agua - se disculpó.
Aiacos: Si, estoy seguro que si mamá no se la pasará consintiendo tus exigencias de niño pequeño no estaríamos en este problema - dijo mientras vio a su hermano reír - no te preocupes por eso, después de todo había que salir a conseguir algo de comida, no sabemos cuanto tiempo le tomará a papá llegar y el postre que nos hizo mamá aunque puede saciar bastante el hambre se acabará en cualquier momento.
Milo: ¿Que crees que este haciendo mamá en estos momentos? ¿Papá le habrá dicho algo? - preguntó, mientras veía al mayor negar.
Aiacos: no creo que lo sepa, de lo contrario ya habría policías aquí seguramente y también él estaría aquí y en cuánto lo que está haciendo bueno, supongo que estará haciendo gelatina para cuando regresemos - dijo mientras Milo únicamente suspiró.
Mientras tanto.
Con Minos y los demás.
Se habían quedado escondidos en la esquina de la primer cabaña continúa a la de ellos, mientras veían algo bastante peculiar en un zombi que había al frente y es que este, parecía querer entrar en ese lugar, se golpeaba una y otra y otra vez contra la puerta mientras gruñia.
Camus: ¿será que habrá alguien ahí? - preguntó.
Minos: no creo, se vuelven locos y se amontonan cuando nos ven, pero cuando dejan de hacerlo pierden el interés en el último lugar donde nos vieron y se van - respondió.
Kanon: sea cómo sea, se ve idiota golpeándose contra la puerta - se burlo mientras que Saga únicamente le dio un pequeño golpe en la mano.
Minos: tendremos que rodear, no podemos arriesgarnos a que nos vea o podría alertar a los demás - aviso mientras comenzaron a gatear hacia atrás de la cabaña para seguir.
Mientras avanzaban, Camus recordó algo, por lo cual preguntó.
Camus: Saga... - llamo en un susurró.
Saga: ¿Que pasa? - preguntó.
Camus: ¿Dónde se quedó Deathmask? Él estaba con nosotros cuando esto empezó - preguntó mientras el peliazul pasó a ver a su gemelo, el cual únicamente se alzó de hombros mientras seguían.
Kanon: no lo se, desde que ese hombre mordió a la profesora, lo vi correr pero le perdí el rastro segundos después - respondió mientras Camus únicamente suspiró preocupado.
Saga: tranquilo Camus, de todos los que estamos aquí él es el que tiene más posibilidades de sobrevivir en este lugar y con estas cosas, estará bien, debió haberse ido sin decir nada para encontrar a Afrodita y esconderse los dos, tranquilo está bien y perfectamente escondido, estoy seguro de eso - aseguró mientras el menor únicamente suspiró.
Minos: Shssssst... - pidió mientras se asomó un poco, aunque rápidamente se volvió a meter para después decir - carajo, hay dos al frente - susurró preocupado.
Saga: ¿Que hacemos ahora? - preguntó mientras veía al peli plateado alzarse de hombros, por su parte Camus únicamente se puso a pensar, logrando idear algo rápido por lo cual sin decir nada únicamente comenzó a regresar tan sigilosamente cómo habían estado avanzando ante la mirada confusa de los mayores.
Continuará...
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