Jungkook después de terminar toda su jornada de clases, se dirigió a su casa a paso despacio, hoy había decidido no traer su moto quería ir caminando, aunque estaba algo lejos su casa le daba igual.

Estaba pensando en cómo hacerle para que sus padres no lo obligarán a ir a ese dichoso campamento.

Bueno, si sus padres lo logran convencer sería la primera vez que obtendrían un sí de su parte, aunque también quería que sus padres estuvieran feliz, pero ellos sabían que no le gustaba estar rodeado de gente y mucho menos de puros alfas.

Porque aunque fuera alfa puro el no soporta mucho los aromas, su nariz es muy sensible aunque eso nadie lo tiene que saber.

[...]

Una vez llegó a su casa, se dirigió a la sala donde estaban sus padres.

— Buenas tardes, señor Jeon y señor Park — saludo con su hermosa sonrisa.

— Jeon Jungkook, ¿Que te hemos dicho que nos digas papás? — preguntó el señor Jeon.

— Ese título se les fue el día que se empeñaron en que yo hiciera amigos — contestó de forma dramática y se cruzó de brazos para después sentarse en el mueble que se encontraba enfrente del de sus padres.

— Pero hijo, lo hacemos por tu bien — contestó su padre omega.

— Lo sé, pero no quiero que sea así, saben que mi alfa es quien se niega no yo y ustedes ya sabes porque —comentó agachado la cabeza después de decir eso.

— Todo estará bien, no todos son iguales bebé — comentó el omega Jeon y después Jungkook asintió resignado.

— ¡Ya llegó el omega más hermoso del mundo! — grito alguien desde la entrada de esa gran casa.

— ¿Dónde está, que no lo vio y dudo mucho que seas tu? — preguntó con algo de duda Jungkook.

— ¡Jungkook! — lo regañaron sus padres.

Escuchando la risa de sus hijos después de eso, a los hermanos les gustaba burlarse del uno al otro.

— Espero y te vaya bien en ese campamento, mi querido hermano — dijo el omega de forma burlona.

Jungkook solo rodó los ojos, para después irse a su habitación dejando a sus padres y hermano en la sala.

[...]

Taehyung se encontraba sentado en la mesa donde siempre espera a sus amigos o viceversa.

Había llegado más temprano de lo que normalmente llegaba, tenía sueño ya que no había podido dormir bien.

Después de unos minutos sintió una presencia detrás de él y volteo a ver quién era y se encontró con su amigo omega Park Jimin.

— Hola, Minnie — saludo.

—Hola, Taetae — devolvió el saludo — ¿Se puede saber por qué el señor Kim, llegó más temprano que todos? —pregunto de broma.

—El reloj se paró y en la noche no me di cuenta hasta cuando llegué aquí y vi que no había nadie —respondió con un puchero.

Jimin río por la desgracia de su amigo. De repente vieron entrar a alguien más a la cafetería, era nadie más que Jeon Jungkook.

—Oh, mira es Jeon, vamos a hablarle — comentó Jimin.

—¿Qué, por qué? — pregunto algo confundido Taehyung.

— ¡Jungkook Huyng! —exclamó el único omega en el lugar.

Jeon volvió al lugar donde le hablaban, algo confundido frunció el ceño y se acercó lentamente.

—Mande —fue lo único que dijo al llegar al lugar.

— ¿Cómo estás? — pregunto Jimin.

Taehyung solo escuchaba lo que Jimin platicaba con Jeon.

—Estoy bien ¿y ustedes? —comentó tranquilo.

—Yo estoy bien —contestó Jimin y después los dos voltearon a ver a Taehyung que se había mantenido en silencio.

— Oh, y-yo estoy bien — respondió algo nervioso y no sabía el por qué.

— Oh, que bueno que estén bien —comentó con una sonrisa sin mostrar los dientes — Bueno, si me disculpan me tengo que retirar, tengo que ir a dejar el permiso a la directora —comentó haciendo un mini puchero que no se dio cuenta.

Que tierno se ve haciendo esos pequeños pucheros — pensó Taehyung.

— ¡Suerte! — comentaron Kim y Park al mismo tiempo.

— Gracias, ahora si me retiro — dicho eso se marchó.

— Él es muy formal y cortante — comentó tranquilamente Taehyung y Jimin estuvo de acuerdo.