Lo unico que Tyson era distraerse un poco, así que decidió ir al muelle del gran lago en el que ya había estado en el desafío anterior. Su equipo había salido victorioso de el desafío, pero esto era indiferente para él, ya que de todos modos no le importaba mucho la competencia y simplemente queria alejarse del bullicio y ajetreo de su ciudad.
Se sentó en la hierba, pues no se fiaba de las imperfectas e inestables tablas de madera que formaban el muelle. Era ya de noche y hacía un poco de frío, así que se quitó la chaqueta de la cintura y la puso en su regazo para calentar sus piernas un poco, ya que estas estaban destapadas porque Tyson había optado por usar unos pantalones cortos ese día.
Disfrutaba del silencio y el aire puro, ahora que tenía la oportunidad iba a disfrutarla. Se permitió cerrar los ojos unos segundos. Tan inmerso estaba en su mundo que no notó cuando cierta pelinegra que estaba buscandole le encontró.
Hailey solo decidió quedarse de fondo para no molestar al chico, pero este tenía mucha intuición y consiguió captar su presencia, aunque tardó unos cuantos minutos en sentirla detrás de él.
-Se que estas ahí, Hailey.-Habló el pelinegro en voz alta, aún de espaldas a la pelinegra. Lo dijo para que la chica supiera que le estaba hablando a ella. Soltó un suspiro.- Puedes quedarte aquí, si quieres claro. Lo que hagas no me importa.
Por más que dijera que no, si le importaba. Le gustaba estar a solas, pero esa chica le llamaba bastante la atención y le gustaría pasar más tiempo con ella. Por lo general odiaba a las personas altamente extrovertidas, pero ella era extrovertida de una manera que... le interesaba.
Hailey, al tener su aprobación decidió sentarse a su lado a disfrutar esa hermosa noche con el chico pelinegro.
Ella justo había acabado de cenar y había decidido ir a dar un paseo, ya que disfrutaba de este tipo de actividad fisica donde puede ir a su ritmo y apreciar la naturaleza mientras tanto. No pretendía encontrarse con Tyson, pero le agradaba la idea de pasar tiempo a su lado.
Ninguno de los dos dijo nada, ya habían hablado suficiente a lo largo del día. Pero tampoco hizo falta. Pasaron un tiempo en un agradable silencio, cómodo para los dos, pues a Tyson no le agradaba hablar de todos modos y Hailey no quería interrumpir los pensamientos del pelinegro.
Enseguida la pelinegra sintió frío también. Por más que iba más abrigada que Tyson, ella siempre había sido muy friolera. El chico notó esto. Cogió la sudadera de su regazo y se colocó detrás de la espalda de la chica para colocar la prenda en sus hombros. Esta dejó de tiritar, y le agradeció aquel gesto al pelinegro.
Cuando las luces que iluminaban la oscura noche comenzaron a parpadear supieron que era su señal para irse de vuelta a la cabaña.
Emprendieron el camino manteniendo ese silencio.
-Gracias- Tyson decidió hablar a mitad del camino. Tenía la mirada al frente, pero era obvio que le estaba hablando a la chica. Esta se giró a verle al oirle hablar, pero continuó caminando.- Gracias por acompañarme.- aclaró.
-De nada- dijo ella.
La chica sonrió, haciendo que Tyson empezara a sentir una extraña sensación de calidez en el pecho. Nunca lo había sentido, pero se sentía bien sin duda.
Iba a estar bien acompañado en ese programa, quizás hasta disfrutaba su estadía.
Primer capitulo de esta serie de "one-shots" con nuestros personajes en el genero opuesto. Personalmente el Hayson (¿les gusta este nombre para el ship?) me gusta más que el Huntess.
Me atreveria a decir que, mientras en la version original ya sabeis que el Huiden es mi otp, en la genderbend me decanto por estos dos, almenos en mi forma de escribirlos.
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