"Solo quería decirte que te esperaré lo que haga falta"  Te Amo

Camila se quedó unos instantes leyendo la nota, cuando de pronto llamaron a la puerta de su despacho. Dobló la nota y la metió dentro de su bolso y se levantó a abrir.

Camila: Hola Vero, ven pasa.

Vero: Gracias Doctora Ambas se sentaron en el sofá.

Camila: Estoy muy contenta por ti, ¿cómo lo llevas?.

Vero: No me lo puedo creer aún, en dos días estaré por fin fuera de aquí, no sé, me siento.. ni siquiera sé como me siento.

Camila: (sonriendo) Es normal, cuando uno espera tanto algo y está a punto de cumplirse, cuesta hacerse a la idea pero verás como todo va bien, ahora tienes que prepararte para retomar tu vida fuera de aquí. ¿Tienes ya pensado donde ir?

Vero: Si, me iré donde mi hermana hasta que pueda empezar a trabajar y ya de ahi, veré de alquilar algún lugar donde pueda tener a mis niños los fines de semana.

Camila: Bueno, ya sabes si necesitas algo me avisas vale?

Vero: Por ahora estaré bien, no se preocupe, pero gracias por todo doctora y gracias por todo lo que hizo por mi en el tiempo que estuve aqui.

Camila: No tienes que agradecer nada Vero, a mi me basta con verte bien.

Vero: Bueno me voy, que tengo que pasar por la oficina de la directora a llenar unos papeles, la veo luego.

Camila: Muy bien, a hablamos.

Vero: (abriendo la puerta) Ah! Y por favor digale a la pintora esa que se prepare ¿eh? Que otra vez me tendra merodeando por ahi.

Camila: (sonriendo levemente) Vale se lo dire.

Alex terminaba de vestirse cuando sintió que llamaban a la puerta, secándose el pelo con una toalla en la cabeza se acercó a la entrada y abrir, encontrándose con Lauren que lo mirmba con cierta vergüenza. Alex la miró unos instantes para luego hacerle un gesto con la cabeza para que entrara. La pintora termino de entrar con las manos dentro de los bolsillos y se giró a ver a su amigo.

Alex: (lanzando la toalla sobre el sofa) Vaya la hija prodiga ha vuelto, que sepas que estoy muy enfadado contigo, es que solo a ti se te puede ocurrir hacer algo asi ¡¡joder!!

Lauren: Alex, todo lo sé esta bien? siento mucho haberlos tenido preocupados.

Alex: Preocupados, enfadados, joder y encima dejas a esa pobre mujer esperando cual Penélope tu regreso, eso no se hace cariño.

Lauren: (Tristemente) Lo sé, la cagué vale? podrias ya parar de reprocharme? (mirándolo a los ojos) ¿podrias abrazarme?.

Alex: (la miro extrañado, en todos las años que la conocia, era la primera vez que Lauren le pedía un abrazo) Venga ven aquí.

Lauren se acercó al muchacho quien le abria los brazos y se abrazó fuertemente a él, hundiendo el rostro en su hombro. Se sintió inmediatamente reconfortada al sentir el contacto de alguien querido.

Lauren: Gracias.

Alex: (separándose y mirándola a los ojos) Que te dijo? ¿Porque hablaron verdad?.

Lauren: (asintiendo) Me ha pedido tiempo

Alex: Bueno era de esperarse si ser tu amigo es por si dificil, imagino lo que debe ser estar enamorada de ti ¡¡joder!!

Lauren: No sé Alex, es que tengo miedo de que Camila no sé ya no quiera volver conmigo justo ahora que estoy preparada para darle todo ¡¡¡Mierda!!!.

Alex: (cogiéndole el rostro) Ey, Laur tranquila ¿vale? Mila te quiere, me consta, pero es que este tiempo se la ha pasado muy mal tienes que dejarla que se le pase.

Lauren: (sentándose en el sofá) Parece que mi vida no dejará de ser un desastre nunca.

Alex: Ya tampoco seas exagerada oye te acuerdas todo lo que luchaste por tenerla nuevamente (Lauren asentia) pues no te rindas ahora Vuelve a luchar por ella vale?.

Los dias transcurrian y Lauren habia ido un par de veces a casa de la psicóloga pero no habia podido encontrarla, dejándole tan sólo un par de notas por debajo de la puerta. Esta separación se le estaba haciendo extremadamente dificil a ambas, por un lado Camila si bien la echaba de menos, aun no podia sentirse segura con respecto al cambio de Lauren. Por el otro lado, Lauren buscando siempre la manera de acercarse, pero no sabiendo muy bien como hacerlo, pues queria respetar el espacio que sabia perfectamente la psicologa necesitaba. Sin embargo todos los dias se las ingeniaba para hacerle saber a la psicóloga que estaba cerca y pendiente, con una nota, o una pequeña flor amarilla dejada en el parabrisas de su coche Era jueves y feriado, Lauren salió temprano a correr durante una hora y luego de darse una ducha rápida salió rumbo a casa de la psicóloga. Nerviosamente tocó el timbre y esperó. A los pocos segundos Camila abria la puerta. Lauren entonces al verla enmudeció, shock se la quedó mirando, vio sus ojos, los cuales la miraban con cierta sorpresa y su corazón se le encogia dentro.

Camila: Hola.

Lauren: Hola...Eh... pensé en pasarme un rato... porque... porque como hoy es feriado y... no se si te apetecia ir a dar un paseo.

Camila: Justo Andrea y yo ibamos a salir.

Lauren: (bajando la mirada tristemente) Ahh bueno... bueno... otro... otro dia será.

Iba a marcharse cuando Camila se dirigió a ella.

Camila: Nos vamos al zoológico, si te apetece puedes acompañarnos.

Lauren: (Girándose con ojos de ilusión) Me encantaría, pero no quiero molestarte de verdad.

Camila la miró con una sonrisa leve, era evidente para la psicóloga que su corazón pertenecía por completo a aquella mujer y por más miedos que ahora sintiera, no podia negar la verdad de sus sentimientos.

Camila: No me molestas, además creo que Andrea le hará ilusión.

Se miraron un instante, Lauren sintió como su respiración se agitaba, cuantas ganas tenia de besarla, cuantas ganas de abrazarla y no soltarla nunca. No supo como se contuvo y se quedó ahi anclada en el piso haciendo tan solo lo que en ese momento podia hacer, contemplarla. El momento fue interrumpido por Andrea que salia corriendo a saludar a la pintora.

Andrea: Hola Lolo

Lauren: (agachándose y abrazando a la niña) Hola Andy, cómo estás"

Andrea: Bien, mi mami me va a llevar al zoo, quieres venir?.

Lauren: ¡Me invitas!

Andrea: Si, mami Lolo va venir con nosotras.

Camila: Bien mi amor

Andrea: ¿Lolo?

Lauren: Dime

Andrea: Ya no quieres a mi mami?

Camila miró a su hija con absoluta sorpresa mientras Lauren se quedaba helada

Lauren: (aclarando la voz) Por qué... ¿por qué me preguntas eso?.

Andrea: Porque ya no duermes con ella.

Lauren: (sintiendo que todos los colores del espectro cromático se le subian al rostro) Si la quiero mucho Andy no solo eso la Amo (miró entonces a Camila) nunca he dejado de hacerlo.

Andrea: Bueno nos vamos?

Camila fue por unas cosas a su habitación mientras Lauren alzaba a Andrea en brazos y caminar con ella hacia el coche.

Lauren: sabes una cosa pequeña andy? (Andrea negaba con la cabeza) hoy pideme lo que quieras te lo has ganado ¡¡eres un angelito!!

Estuvieron paseando por el zoológico cerca de hora y media. Andrea parecia que tenía energia acumulada para un año porque no paraba de correr de aqui para allá mirándolo todo. En eso la niña estaba dándole de comer a los patos mientras Camila y Lauren se habian sentado en una banca a descansar un poco.

Camila: Sabias que Vero ya salió de prisión?

Lauren: (mirándola con sorpresa) En serio?

Camila: Si, por buena conducta, le bajaron la sentencia de lo que le faltaba.

Lauren: (sonriendo) Eso es estupendo, jajaja, me alegro mucho por ella.

Camila: Me dio un recado para ti.

Lauren: Ah ¿si? Cual?

Camila: Que te prepares que ya estará nuevamente rondándote.

Lauren: Jajaaja, estoy segura que lo hará, que buena noticia me has dado Camz

La psicóloga no pudo evitar quedarse mirando al verla sonreir, uno de los rasgos que más le gustaha de ella. Lauren entonces se percató de esa mirada y fijó sus ojos en Camila. Esta última al verse descubierta, giró el rostro hacia el frente.

Camila: Sabia que te alegrarias.

Lauren, siguió mirándola y lentamente rozó con sus dedos una de las manos de la psicóloga, la cual estaba apoyada sobre la banca. Camila sintió una descarga eléctrica por su piel y su respiración se agitó levemente. Al ver que Camila no la retiraba siguió acariciando sus dedos muy suavemente.

Lauren: ( le susurró al oido apenas para que ella solo escuchara) Te echo mucho de menos.

Camila, tragó saliva y se giró mirándola con una sonrisa tímida para luego levantarse y dirigirse hacia donde estaba su hija Siguieron caminando por una media hora más hasta que fue momento de regresar. Lauren se despidió de Andrea y luego mirando a Camila

Lauren: Gracias, por dejarme pasar el dia con ustedes.

Camila: De nada.

Lauren: Chau

Camila: Chau

[•••]

Alex iba y venia de la cocina con bandejas y las iba acomodando sobre la mesa del comedor. Lauren por su parte estaba con brocha en mano terminando su último cuadro. Desde ese el dia del zoológico no habia vuelto a ver a Camila, quien habia salido de viaje a un congreso de psicologia por una semana. Y eso la tenia bastante baja de ánimo, pero como siempre su pintura era el mejor bálsamo para ella y llevaba dias sumergida en un lienzo La pintora dio un úllimo vistazo a la pintura terminada y se quedó contemplándola varios minutos, con una sonrisa melancólica grabada en el rostro. En eso su concentración se veia interrumpida por Alex que la llamaba desde el comedor.

Alex: Laur coño, ya métete en la ducha, no tardarán en llegar los invitados.

Lauren: Ya voy además tampoco es que vayan a venir doscientos invitados Alex, seremos 4 gatos vamos que yo no soy tan popular como tú.

Alex: (caminando hacia ella) Ya pero los que vienen, lo hacen para saludarte porque te quieren vale? Además es la primera vez de mucho tiempo que aceptas que te haga algo por tu cumplean...

Alex se quedó en silencio al ver la pintura que Lauren acababa de terminar, su rostro se tomó rapido triste y acercándose a la pintura quiso tocarla.

Lauren: Está fresca aún.

Alex: (secándose las lágrimas) Como has podido recordar tan bien su rostro.

Lauren: (abrazándolo con una mano) Es así de claro como lo tengo en mi mente, además se parecia a ti.

Alex: Ya.

Lauren: Vanga no te me pongas triste vale?

Alex: (dándole un piquito en los labios) Vale, venga tú a la ducha ya

Lauren: bueno

A las dos horas Alexa, Paco y Taylor habian ya llegado y charlaba con Lauren, mientras Alex salia de la cocina portando una bandeja con algunos bocadillos.

Taylor: Oye y esto, está delicioso, quien lo ha hecho?

Alex: Como que quien querida, yo por supuesto.

Alexa: No sabia de tus dotes culinarias

Alex: No sabes de muchas dotes mías querida.

Alexa: (siguiéndole el juego) Me encantaria conocerlas

Alex: (acercándose a ella) Lo siento cariño pero creo que no eres mi tipo, aunque no pierdas las esperanzas, podrias de repente convertirme

Todos soltaron la carcajada ante el comentario del muchacho En eso el timbre volvía a sonar y Alex dejando la bandeja en la mesita de centro se dirigia a la puerta. Al abrirla, Vero aparecía con una torta en las manos.

Alex: ¡¡No lo puedo creer!! Veróniquita (dándole dos besos) ¡¡¡Llegaste!!!, pasa, pasa y dame eso.

Vero: Dónde esta la dueña de casa!!.

Lauren desde la sala divisó a su amiga y sonrió de oreja a oreja, levantándose inmediatamente y corriendo hacia ella.

Lauren: ¡¡¡Joder!!!, ¡¡Que sorpresa!!.

Vero: (abrazándose con la pintora) Feliz cumpleaños, ¿qué? Creías que me lo iba perder.

Lauren: Vente que te presento a unos amigos (llegando a donde estaban sentados todos) Chicos quiero presentar a una gran amiga mia, Verónica, ellos son Paco, Alexa y Taylor.

Vero: Encantada y pueden decirme solo Vero.

Todos: Hola!!!

Alex: ¿Que te tomas guapa?

Vero: Una cervecita estaria bien, gracias

Alex: Enseguida, oye Paco vente y me ayudas no?

Lauren: Oye cómo te va todo?

Vero: Bastante bien, mi cuñado me ha dado trabajo en una de sus tiendas, no me puedo quejar, me están ayudando un montón

Lauren: Que bueno, no sabes como me alegra que estés afuera y bien.

Vero: Gracias, оуe у Mila?

Lauren: (bajando la mirada) Ella. ella está de viaje en un congreso.

Vero: (intuyendo que algo pasaba) No me digas que tienen problemas

Lauren: Si, algunos.

Vero: ¿Y tiene arreglo no?

Lauren: Eso espero.

Alex al cabo de media hora, habia puesto música y habia animado a todos a bailar, mientras Vero y Lauren estaban enfrascadas en una conversación al pie de la ventana. Al rato, Lauren se dirigió a la cocina por unas cervezas, mientras que Vero por insistencia de Alex se unió al grupo de baile. Al rato, la puerta del piso de Lauren se abria y por el umbral de la puerta aparecia Camila, quien sonrio al ver el alboroto que armaban los chicos. Alex la vio y sonrió de oreja a oreja acercándose de inmediato a ella

Alex: (abrazándola) Que bueno que estés aquí.

Camila: Hola Alex.

Alex: A la otra le va dar un ataque cuando te vea.

Camila: (sonrió timidamente) Donde está?.

Alex: En la cocina.

Camila: Vale, voy a saludarla.

Lauren estaba sacando y destapando las cervezas, luego de acomodar algunos bocaditos.

Camila: ¡Feliz cumpleaños!

Lauren se giró de inmediato y al verla una de las cervezas resbaló de sus manos estrellándose en el piso. Camila saltó al sentir el sonido del vidrio contra el piso. Sin embargo Lauren ni se inmutó, estaba totalmente perdida en ella, concentrada en ella.

Camila: Lo siento, no quise asustarte.

Lauren: (volviendo a la realidad) Eh... no me asustaste no esperaba verte hoy.

Camila: En realidad llegué ayer por la noche.

Lauren: Como te fue?

Camila: Muy bien, fue todo muy interesante.

Lauren: Me alegro.

Camila: (mirándola fijamente) Te compré esto recién me di cuenta que es muy dificil encontrar un regalo para ti.

Lauren: El que estés aqui es suficiente para mi.

Camila le extendió una pequeña cajita y se la dio.

Lauren: Gracias.

Camila: De nada.

Lauren abrió la cajita y encontró un anillo de plata, simple, sin grabados de ningún tipo La pintora sonrió y miró nuevamente a la psicóloga.

Lauren: Es precioso gracias (colocándoselo en el dedo pulgar).

Camila: De nada creo que será mejor que limpies eso, la cerveza se está expandiendo por todo el suelo.

Lauren: (mirando hacia abajo) ¡Mierda!

Camila: ¿Te ayudo?

Lauren: Eh no, no te preocupes, quieres tomarte algo?.

Camila: Una copa de vino blanco, gracias.

Lauren: Vale (abrió el refri y sacó la botella, sirviéndole una copa a la psicóloga y se la dio) secaré esto y voy ala sala.

Camila: Bien.

Camila se dirigió hacia la sala, mientras Lauren cerraba los ojos y trataba de controlarse. Miró su dedo y sonrió Luego de dejar en orden todo en la cocina, con dos cervezas en la mano, volvio a reunirse con sus amigos. Estando ahi pudo divisar a Camila, quien bailaba una balada algo lenta con alex. Ambos reian relajadamente. Se quedó viendo embobada, tanto que no se había dado cuenta que Vero se le había acercado.

Vero: De haberlo sabido, te hubiera traido un babero de regalo de cumpleaños.

Lauren: (Girándose hacia su amiga) Lo siento, toma tu cerveza.

Vero: Gracias.

Lauren no podia evitar que sus ojos se desviaran hacia donde la psicóloga.

Lauren: Sabes que ella y yo nunca hemos bailado.

Vero: Que??.

Lauren: (dándole un sorbo a su cerveza mientras seguia con la vista fija en Camila) Si, nunca hubo la oportunidad.

Vero: Bueno que mejor dia que hoy.

Lauren: No creo que ella quiera bailar conmigo.

En eso Camila se encontraba con los ojos de Lauren, quien la miraba desde el otro lado de la sala y como pasaba siempre, volvieron a perderse la una en los ojos de la otra

Vero: (Quien no se perdia ningún detalle le susurró al oido) Yo creo que si quiere.

En eso Camila bajaba el rostro y se volvia a concentrar en Alex, terminando asi de bailar la canción. En eso comenzaba a sonar los acordes de una balada mucho más lenta que la anterior y entonces Vero cogió la cerveza de las manos de Lauren.

Vero: Si no mueves ese culo ahora y vas a sacarla a bailar esta canción te asesinó aquí mismo.

Lauren, metiendo las manos en los bolsillos de sus jeans, comenzó a caminar lentamente hacia la psicóloga, quien de espaldas a ella, charlaba con Paco y Alex. Este último al ver que su amiga se acercaba, cogió a Paco de la mano.

Alex: Nos perdonas Camila un momento pero voy a bailar con el chico más guapo de la fiesta

Camila: Claro, claro.

Camila se giraba y se topaba con la pintora quien se encontraba a apenas a unos centimetros de ella. Se miraron nuevamente a los ojos, ambas sintiendo que un nudo ya conocido en el estómago se les empezara a formar.

Lauren: (absolutamente nerviosa) Quieres... ¿quieres bailar?

Camila la miró con ternura al verla hecha un manojo de nervios y simplemente asintió Fue entonces la pintora quien termino de acercarse a ella y la rodeó por la cintura mientras que Camila colocaba sus manos sobre los hombros de esta. Lauren al sentir su cuerpo en total contacto con el de la psicóloga, cerró los ojos, dejándose embriagar por ese perfume que la volvia loca Comenzaron a moverse despacio al ritmo de la música, rozándose sintiéndose la una a la otra dándose cuenta mucho que se echaban de menos, lo mucho que querian estar asi, la una en brazos de la otra Lauren entonces se separó un poco de ella, lo suficiente para que pudieran mirarse Sus ojos en ese momento lo decian todo, el espacio desapareció, la gente, quedando solo ellas y la música Lauren instantes después, apoyó su frente contra la de Camila y cerró los ojos, al sentir ese dolor en el pecho, ese corazón acelerarse, tomó aire Despacio fue subiendo una de sus manos para acariciarle una de las mejillas Al contacto, Camila cerró los ojos he hizo fuerza para que sus piernas no fueran a fallarle Luego la pintora, deslizó sus dedos a esos labios, esos labios que deseaba más que cualquier otra cosa en ese momento Lauren volvió a cerrar los ojos y le susurró.

Lauren: Te Amo, Te necesito déjame entrar en tu vida nuevamente Camz (mientras comenzaba a respirar con dificultad)

Lauren: (acariciándola aún) Yo no puedo estar más sin ti... no puedo

Y fue entonces que la pintora terminó de acercarse a ella y posó sus labios en los de ella mientras deslizaba la mano por su cuello La comenzó a besar con besos cortos, para luego cuando la psicóloga separó ligeramente los labios, terminó por atraparlos en los suyos sus lenguas se buscaron de inmediato y ambas profundizaron aquel beso, completamente ajenas a donde y con quien estaban Al rato se separaron y volvieron a mirarse, para luego abrazarse y seguir bailando la una pegada a la otra.

Camila: Es la primera vez que bailamos tú y yo

Lauren: (mirándola con una sonrisa) Sí y espero de verdad que no sea la última.

Dejando que las notas de aquella música las llevara, volvieron a besarse tiernamente unos segundos más, dándose la vida entera en aquel beso, como lo habían hecho desde el primer momento...