Terminaron de colocar el equipaje dentro de la casa y Shawn con bastón en mano se comenzó a pasear por entre los diferentes espacios. Era pequeña, con dos habitaciones, una salita, un comedor pequeño y una cocina también pequeña, integrada al comedor. El abogado se sentía en paz por primera vez en mucho tiempo y ese espacio era lo bastante acogedor y tranquilo para terminar de recuperarse y volver a empezar.

Hailey: Está muy bien ¿no?

Shawn: Si, me gusta y no está tan lejos de la ciudad así que será muy fácil que Andrea venga a quedarse conmigo.

Hailey: Y el pueblo es muy pintoresco y tranquilo, creo que estarás bien y te ayudara a recuperarte del todo.

Shawn: Eso espero, porque estoy un poco cansado de ser una especie de inválido.

Hailey: Paciencia, además Shawn estás haciéndolo muy bien teniendo en cuenta como llegaste a ese hospital.

Shawn: (pensativo) Sí, oye y por cuanto tiempo crees que será prudente estar alejado de la cuidad.

Hailey: Pues no lo sé, veremos como se presentan las cosas, por ahora es mejor así, Mendizábal está muerto pero tenemos que descubrir si queda alguien todavía queriéndolo vengar

Shawn: Ya. (dijo tristemente)

Hailey: (lo miró un instante) Tranquilo, todo está saliendo bien.

Shawn: Es que no sé, igual estoy aqui y

Hailey: Y que?

Shawn: (mirándola) Nada. tonterias, quieres un cafe?

Hailey: (sorriendo levemente) Vale pero te ayudo.

Shawn: Pues si que con una mano solo no garantizo que salga un cafe decente.

Ambos se dirigieron a la cocina y Shawn cogia la cafetera y colocaba un poco de cafe mientras que Hailey sacaba un par de tazas de la alacena Sin darse cuenta Shawn habia derramado un poco de agua y se giró de improviso para buscar un trapo en el mismo instante que Hailey hacia lo propio para buscar un par de cucharitas. Quedaron frente a frente y lo bastante cerca como para mirarse fija y claramente a los ojos Shawn se fue agachando hacia ella, sus frentes ya se rozaban, él iba a besarla cuando la inspectora le puso un dedo en los labios en señal para que se detuviera.

Hailey: (en voz muy baja) Primero tienes que terminar de sacar a alguien de aqui (tocando su frente) y de aquí (tocando su pecho a la altura de su corazón) cuando lo logres ya veremos.

Shawn: (separándose de ella lentamente pero sin dejar de mirarla) Podremos ser amigos mientras tanto?

Hailey: Claro que si, ya lo somos un poco no?

Shawn: (sonriendo) Si.

En eso la cafetera comenzaba a emitir el sonido caracteristico de que la bebida estaba lista y Shawn, se giró para apagarla mientras Hailey le alcanzaba las tazas

Luego de una hora y cuarto de camino, llegaron a la pequeña casa y Andrea bajó corriendo, dejando a su madre sacando las dos mochilas de cosas que habian empacado por la mañana Estaba apunto de tocar el timbre parada de puntitas cuando la puerta principal se abrió y Shawn aparecia sonriente en umbral de la puerta.

Andrea: Papi!!!! Me ganaste

Shawn: ¡¡¡Llegó mi princesa!!! Ven aqui y dame un beso Andrea, se le acercó y este agachándose hasta la altura de su hija, se dejó abrazar y besar por la niña.

Andrea: Papi, puedo ver mi habitación?.

Shawn: Claro mi amor, anda que yo espero a tu mami que traiga tus cosas

Andrea: Vale

Andrea entró corriendo a la casa mientras Shawn volteaba a ver a Camila quien ya se acercaba hacia el abogado

Shawn: Hola

Camila: Hola ¿como sigues?

Shawn: Mejorando

Camila: Si te veo, has recuperado algo de peso no?

Shawn: Algo, pero pasa, te ayudo con eso

Camila: No, no hace falta.

Ambos entraron a la casa y Camila colocó todo en uno de los sofás.

Camila: Oye esto esta muy bonito.

Shawn: Si ¿no?

Camila: No te puedes quejar, te tratan bien.

Andrea: Papi ¡¡que bonito!!! Mi cama es enorme!!!

Camila y Shawn se miraron y sonrieron

Shawn: ¿Quieres un cafe?

Camila: No puedo quedarme Shawn, que me queda más de una hora de viaje y he quedado para cenar temprano hoy.

Shawn: bueno No importa donde vas a cenar?

Camila: A ningún lado, cenamos en su casa (mirándolo no sabiendo si continuar) es que.

Shawn: Oye mientras no entres en detalles me puedes contar lo que quieras.

Camila: (mirándolo un instante antes de proseguir) Es que necesitamos algo de privacidad a gritos con todas estas prisas y Andrea siempre por ahi bueno.

Shawn: Ya entiendo, oye pensándolo bien, si me contaras los detalles no estarian mal ¿no? (mirando hacia arriba y bromeando) tú sabes el sueño de todo hombre eso de dos mujeres. (haciendo un gesto con los dedos).

Camila: (golpeandolo suavemente) Que gracioso.

Shawn: Jajajajajaja.

Camila: Me alegra que vayas recuperando tu sentido del humor. (mirando su reloj) bueno me voy que es tardisimo, paso por ella el domingo por la tarde?

Shawn: si esta bien

Camila: (acercándose y abrazándolo) Cuidate ¿si? oye y afeitate Shawn

Shawn: ¿Por que? no te gusta mi look a lo Indiana Jones, va con el paisaje asi medio salvaje.

Camila: Si claro, tú eres un Indiana Jones después que lo mordió un León ¿no?, digo por maltrecho.

Shawn: (sonriendo) Bueno creo que mi pinta no le disgusta a todo el mundo ¿eh?

Camila: Ah ¿si? ya me contarás de eso. bueno (subiendo la voz) ¡¡¡Andrea me voy!!!

Andrea: (corriendo hacia la sala y abrazándose de la pierna de su papa) Ya mami

Camila: Pórtate bien hija y no lo hagas trabajar mucho a tu papa que aun le duele su pierna.

Andrea: Si mami, yo lo cuido

Camila: Vale, ven dame un beso (Andrea obedecia) bueno nos vemos Indiana.

Shawn: Jajajaja, chau.

Camila: Chau.

Camila salió rumbo al coche mientras Shawn y su hija, parados en el umbral la despedian Shawn la siguió con la mirada hasta que desapareció y luego entro con la niña dentro de la casa.

Camila condujo lo más rápido que pudo y llegando a su casa, se metió en la ducha de inmediato Luego de su baño, estuvo como una hora, tratando de encontrar algo apropiado para ponerse finalmente se decidió por un vestido negro, sencillo era lo suficientemente sugestivo, al verse en el frente del espejo, la psicóloga sonrió en señal de aprobación y también de imaginarse la reacción de Lauren al verla.

Lauren estaba terminando de meter el pescado en el horno y se disponia a hacer la ensalada cuando escuchó que llamaban a la puerta. Agarro un paño se secó las manos y caminó hacia la entrada. Al abrir y ver a Camila, la pintora se quedó boquiabierta y la psicóloga sonrió al comprobar que su plan daba resultados.

Camila: (acercándosele y dándole un pequeño beso en las labios) Hola

Lauren: Hola

Camila se separó de ella y entró en la casa mientras Lauren aun apoyada en la puerta la seguia con la mirada sin atinar a hacer nada.

Camila: (llegando casi ya a la cocina) Uy que bien huele, traje vino blanco, está fresco, dijiste pescado verdad?.

Lauren: (saliendo de su estado) Eh.... si, pescado, pescado... ¿que dijiste que traias? (cerrando la puerta)

Camila: Vino blanco cariño (enseñándole la botella).

Lauren: Si está estupendo, genial, estaba... (pasando por el costado de Camila y sintiendo nuevamente ese perfume que le fascina) haciendo la ensalada.

Camila: Te ayudo?

Lauren: (tratando de volver a concentrarse en la ensalada) No, no hace falta, encárgate tú del vino si?

Camila: ok

Lauren comenzó a sacar las verduras y trató de comenzar a cortarlas, pero al tener a Camila ahi tan cerca, en ese vestido que le quedaba de muerte le hacia la tarea bastante complicada. Por su parte, Camila terminó de abrir la botella y sirvió dos copas, se acercó a Lauren por el otro lado del mostrador y se la ofreció.

Camila: Amor? toma

Lauren: Gracias

Camila: Por nosotras

Lauren: (sin dejar de mirarla) Por nosotras

Ambas estaban frente a frente con el mostrador de la cocina entre ellas. Lauren quiso volver a sus verduras, sacó una zanahoria y la puso sobre la tabla de picar, la cortó de Rереntе рor la mitad y miro a Camila nuevamente.

Lauren: ¿Camz?.

Camila: Si

Lauren: Creo que.

Camila: Que?.

Lauren: Creo que cenaremos más tarde..

La agarro de la mano y la llevó hasta el pie de la cama Al girarse, la psicóloga pudo reconocer esa miranda penetrante, de deseo en la pintora Lauren trataba de calmar su respiración, la cual se agitaba cada vez más Cerró los ojos y extendió una de sus manos para con sus dedos rozar lentamente la mejilla de aquella mujer Fue inevitable que toda su piel se erizara ante tal contacto. Abrió las ojos y se encontró con su mirada total y exclusivamente para ella y por ella Camila entonces abrió un poco sus labios y la pintora terminando de acercarse atrapó dichos labios entre los suyos Comenzaron a besarse desenfrenadamente, alimentándose cada una del aliento de la otra Sus lenguas se buscaban ahora con desesperación mientras la temperatura corporal subia considerablemente Camila abrazó contra su cuerpo a Lauren, necesitaba satisfacer esa necesidad de sentir su cuerpo pegado al suyo Esto no hizo más que encender mucho más a la pintora al sentir esos suaves pechos rozando los suyos.

Camila: Te Amo (le susurró mientras la pintora besaba apasionadamente su cuello) me encanta como eres, como me miras, me besas como me haces sentir.

Con cada cosa que la pintora escuchaba de esos labios, iba intensificando más sus caricias, dejándose envolver totalmente por ella, seducir por ella, embriagar por ella Subió sus manos por su espalda y fue abriéndole el vestido para luego introducir ambas manos, la acarició unos segundos sin dejar de besarla y luego fue deslizándole el vestido hasta que cayó al suelo. Segundos despuės, el sujetador corría la misma suerte Lauren se separó de ella y la observá Camila abrió los ojos y se miraron nuevamente La psicóloga era perfectamente consciente como era Lauren, siempre con la sensibilidad a flor de piel y más aun que cuando pintaba, lo era cuando hacian el amor, Sin quitarle los ojos de encima, le fue quitando la camiseta y luego también el sujetador Siguiendo el recorrido de una de sus manos con la mirada, la psicóloga acarició primero suavemente su rostro, luego su cuello, despacio, sintiendo la suavidad de su piel, hasta que llegó a rozar sus pechos Lauren cerró los ojos y se abandonó a la sensación que aquello le producia Posteriormente la pintora comenzó a ser besada con suavidad primero, con impetu, después inclinó su cabeza hacia atrás totalmente abandonada a las caricias que Camila le regalaba mientras devoraba sus pechos Al sentir que la psicóloga llegaba aún más lejos, pues comenzaba a abrirle el pantalón, Lauren se separó de ella y le cogió la mano.

Camila: ¿Que?

Lauren: Si me tocas ahora voy a acabar de inmediato y aun no quiero (acercándose a ella cogiéndole el rostro) quiero disfrutarte, necesito disfrutarte.

Camila la miró sonriente, lentamente se quitó las bragas delante de ella y acto seguido se echó en la cama. Lauren sin apartar sus ojos de aquella mujer, se terminó de desvestir completamente para luego colocarse sobre ella Lauren le estaba haciendo el amor con absoluta pasión, recorriendo y saboreando cada centimetro de su cucrpo, llenándola por completo.

Camila: (sintiendo que ya perdia el control de todo, le dijo entre gemidos) Dejame tocarte ¡por favor! Lolo (aun dentro de ella)

Se detuvo un momento y separó un poco sus piemas para facilitarle el trabajo a la psicóloga, quien se deslizó de inmediato dentro de su sexo. la pintora dejó escapar un pequeño gemido ante el movimiento que comenzaba a hacer Camila dentro de ella. Sus cuerpos estaban ahora unidos, entrelazados, moviéndose ritmicamente, mientras volvian a conectar con sus miradas.

En eso el sonido del timbre de la puerta se escuchó fuertemente y de inmediato Lauren cerraba los ojos y giraba el rostro en esa dirección.

Lauren: (casi si voz) Pero que.

Camila: (sin detenerse) No por favor mi amor no pares no tenemos que abrir.

Lauren volvió a mirarla y bajó el rostro para besarla nuevamente intentando retomar lo que estaba haciendo, En eso el timbre volvia a escucharse.

Lauren: (cerrando los ojos y deteniendo el balanceo) ¡¡¡Mierda!!!.

Camila: (cogiéndole el rostro con la mano libre y forzando a que la mirara) Mirame si? (Lauren posaba sus ojos en ella) concéntrate en mi, amor, olvídate del resto, como haces cuando pintas (besándola en los labios) como lo haces cuando pintas, (mordia ahora su oreja) quiero venirme junto contigo (le susurró entre gemidos) junto contigo.

Lauren poco a poco fue perdiéndose nuevamente en ella, aislando despacio el resto de los sonidos de su mente, concentrándose en sus manos, en aquella piel que se estremecia con el roce, perdidas en esa danza que ambas hacian, sus ojos nuevamente se encontraron, diciéndolo todo en silencio, ese silencio conjunto que ahora las rodeaba, ese mundo intimo donde solo existian ellas, volvia a aparecer, refugiándose totalmente en él. El timbre sonó una vez más. pero esta vez ellas ya estaban bastante lejos de ahi.

Los primeros rayos de la mañana se empezaban a colar por entre las cortinas, y una pequeña brisa se colaba por entre la ventana semiabierta. Más allá sobre la cama Camila y Lauren, sentadas una en frente de la otra se miraban sonrientes, mientras la psicóloga le daba de comer en la boca.

Camila: ¿Está rico bebé?

Lauren: Si mucho, bueno a estas horas cualquier cosa es un majar y más aun si tú eres quien lo pone en mi boca.

Camila le sonrió llevándose un trozo de queso a la boca. Ummm exclamó.

Camila: ¿Que hora será?

Lauren: (acercándose y besándola en los labios) Que importa..

Camila: (dibujando las facciones de su cara con uno de sus dedos) ¿Sabes?.

Lauren: ¿Que?

Camila: Nunca me habia sentido asi.

Lauren: Asi ¿cómo?

Camila: Con esta sensación de de no sé que lo puedo todo, te miro y siento que lo puedo todo, que no me hace falta nada más... me siento plena esa es la palabra.

Lauren sonrió mientras se acercaba una vez más a ella y la besaba dulcemente y luego se volvía a separar lentamente para mirarla tiernamente, era como si el tiempo con ella pasara lentamente haciéndolo todo como de otro mundo, otra dimensión.

Lauren: ¿Tienes sueño?

Camila: Un poquito y tú?

Lauren: Yo estoy acostumbrada a no dormir y más ahora.

Camila: Más ahora por qué?

Lauren: Porque no me interesa domir si te tengo a mi lado pero vamos a acomodarnos ven.

Lauren se echó primero y le hizo un gesto a Camila para que se acomodara junto a ella de tal forma que pudiera abrazarla La psicóloga apoyó su cabeza en el pecho de la pintora mientras le acariciaba suavemente el hombro y parte del brazo Al poco rato Camila se quedaba profundamente dormida Lauren cerró los ojos y se dejó inundar por su olor por el sonido acompañado de su respiración, sonrió al caer en cuenta que esa mujer era la única que finalmente habia logrado entrar en su mundo, ese mundo tan particular, tan intimo y silencioso y que a muchos les parecia impenetrable y extraño Y por primera vez en su vida no se sintió sola, por primera vez sentia que alguien le pertenecia de verdad y ella a alguien, por primera vez esa mujer de rostro triste solo tenía ganas de una sola cosa sonreir, se giró y la miró dormir.

Lauren: (casi imperceptible) Dejaria de dormir si con eso pudiera mirarte asi toda la vida Mi amor.