—Todavía no me has dicho que fue todo eso que paso entre tú y santiago —.me preguntó Malena por tercera vez ese día, yo estaba ignorando ese tema porque me sacaba un poco de quicio pensar en Santiago y en como se avía portado esa noche de las carreras.

—Solo te diré que es un pesado y ya no quiero hablar de él, mejor vamos que tenemos una horas antes de irnos a la casa —.le dije entrando al edificio donde me tocaba una de mis materias y ella tenía una materia en ese edificio también.

—¿Ya sabes que ponerte para la fiesta? —.me preguntó mientras subíamos las escaleras al segundo piso.

—No creo ir —.confesé.

—Como que no Sofía, si por lo que pasó con santi... —.la mire mal. —Vale, vale tranquila —.sonrió —Anda vamos no podemos dejar mal a Marta mira que nos ha invitado, solo vamos un rato y disfrutamos un poco —.me dijo y lo pensé y era mejor eso a quedarme en la habitación sin hacer nada.

—Vale vamos y así nos distraemos un rato — terminamos de subir la escalera. —Nos vemos en una hora para ir juntas a la residencia —.le dije.

—Claro me envías un texto cuando salgas —.me dio un beso en la mejilla y se fue a su clase y yo entré en la mía, me tocaba hoy pintar con carboncillo y eso me tenia nerviosa pues no lo había hecho nunca.

—Tomen sus cosas y escojan un espacio para comenzar la clase —.nos dijo el profesor y yo me acerque al escritorio y tome una pequeña caja que tenía los materiales y luego me senté al fondo justo al lado de la ventana y mire la hoja en blanco frente a mí.

Me sentía como si fuera una pintora a punto de comenzar su obra de arte.

—Listo van a tener que retratar un rostro, el que quieran y solo tienen 45 minutos y ya después los evaluaré, así que comiencen —.dicho eso mi mente se puso en blanco, no sabía a quien pintar así que me puse a pensar y unos ojos se me vinieron primero así que no lo pensé mucho y tome un carboncillo y comencé con mi retrato, sentía como mis manos trazaban cada parte del lienzo y ya después de unos 10 minutos tenía un par de ojos mirándome fijamente y era una mirada intensa que me erizo la piel y me dispuse a pintar un poco la cejas, la nariz y los labios.

No era una pintura del rostro completo si no más bien como si estuviera en la oscuridad y solo se pudiera apreciar sus ojos, nariz, sus cejas y sus labios, no pude evitar posar mis dedos allí y mirar el retrato había quedado increíble y me sorprendí ver lo buena que era pintando con carboncillo y más ver que ese rostro ya lo conocía.

Carajos nadien podía ver este retrato ahora que hacia.

—Listo ya pasó los 45 minutos vamos a mirar qué tal quedó todo —.yo seguía con mis dedos sobre los labios de la pintura y me puse nerviosa, no creía que alguien lo reconociera, el profesor llegó a mi lado y llevó su mano a su quijada y observo fijamente el retrato y su ceja se arqueo.

El profesor tendría unos 40 y tanto años, era de cuerpo ancho y bajito pero era guapo no se podía negar tenía un encanto natural y su piel era un poco morena, alguna de las chicas le echaban el ojos discretamente.

El profesor me miró y sonrió de lado.

—Señorita Valdez veo que tiene un talento, no es fácil llegar a un retrato así — .me fue señalando los ojos, la nariz y el resto. —Esto es profundo y muestra una mirada potente, ¿Lo conoce o solo vino a su mente? —.se refirió al chico del retrato y mi garganta se sintió seca, claro que lo conocía pero no lo dije.

—Solo lo imagine profesor —.este asistió y se fue al frente para hablarnos a todos.

—Muy bien eso a sido todo por hoy, le quiero felicitar porque he visto mucho talento hoy —.dijo y me miró —Se pueden llevar sus retratos nos vemos la próxima clases —.dicho eso, rápido agarre la hoja y la enrolle no quería que Malena la viera porque si no después quién la aguanta, salí del salón y le envié un texto.

Sofia:

" Ya salí te espero en la entrada ".

Malena:

" Ok nos vemos allá ".

Me dirigí a la salida y alguien me tropezó por el hombro desde atrás.

—Mira por donde caminas niña —.era santiago quien me había tropezado y me miraba con una sonrisa burlona en sus labios.

—¿Eres idiota oh qué?, si haz sido tú el que me ha prácticamente empujado —.respondí molesta.

—Me vale —.y se dirigió a la acera donde estaban sus amigos.

Yo me detuve cuando estaba por llegar a la acera y mis ojos se fijaron en los chicos que estaban sentados en sus motos y Darío al verme vino hacia mi y yo me detuve un poco lejos de ellos no queria ver a Santiago.

—Hola Sofía ¿Cómo estás? —.me dio un beso en la mejilla.

—Bien y ¿tú cómo estás? —.le pregunté.

—Bien estaba esperando que saliera Malena para verla — me confesó y me sonrió y yo igual.

—Ya sale, mira allí viene —.el volteo y la miro venir y ella cuando lo vio apresuró el paso, yo vi con disimulo a Santiago y este me miraba con el ceño fruncido y un escalofrío me recorrió la espalda.

Mis labios se secaron de pronto y pase la punta de mi lengua por ellos y ese movimiento hizo a Santiago apretar su puño y miró hacia otro lado, así que no lo mire más.

—Ollé pensé que ya te habías ido —.Malena le dijo a Darío cuando estuvo a nuestro lado.

—Ya casi me iba —.se miraron con una sonrisa y yo me sentí sobrar allí.

—Malena si quieres te espero por allá —.le señale una banca al lado de la salida.

—Tranquila Sofía ya yo me voy, solo quería verla —.se volteó hacia ella. —Te veo en la noche —.le dijo y está asistió con la cabeza.

—Hasta la noche —.respondió.

—¿Nos vamos? —.le dije.

—¿Qué tal tu clase? —.miró la hoja enrollada en mis manos. —¿Puedo ver?.

—Bien y no quedo horrible —.mentí pero está en un movimiento rapido me la quito de las manos y cuando la iba a abrir le grite que no. —No... Malena no lo habrás —.pero ya era tarde lo miro y luego miró sobre mi hombro y luego al papel, luego sobre mi hombro y luego a mi, yo sentía mi corazón palpita con fuerza y podía sentir una mirada en mi espalda.

—¡¡¡Joder Sofía!!!, esto si es interesante —.miró la hoja por última vez y la enrollo y miró sobre mi hombro y una sonrisa cínica brotó de sus labios, así que yo le arranque la hoja y la puse en mi bolso pero sin cerrarlo todo ya que sobresalía gran parte de la hoja enrollada.

—No digas más nada nos vamos —.le dije un poco molesta y está asistiendo nos giramos a la salida y mi corazón dio un brico cuando sentí esa mirada penetrante en mi y nuestra mirada conecto por unos segundos.

—Disculpa solo quería ver —.me decía Malena cuando ya íbamos caminando a la residencia y agitó su mano en dirección a Darío y luego volvió a mirarme. —De verdad perdón —.hizo un puchero.

—Nadien puede saber de esto por favor —.la mire y le supliqué con la mirada.

—Jamás diría algo —.en eso se escucharon las motos acelerar y yo apreté mi manos en las azas del bolso y Malena si volteo ya que las motos pasaría por nuestro lado. —Allí vienen los chicos y te digo algo —.escuché cerca de mi oído —Santiago viene y te está mirando a ti, no a ti, no Sofía olle deja eso —.le gritó Malena cuando sentí un jalón en mi bolso y una moto acelerando.

Malena siguió gritándole a Santiago y yo quedé paralizada allí.

—Joder Sofía esto a sido mi culpa — senti mis mejillas arder por lo que iba a pensar de mi, ¿Qué habia sido todo eso?.

—Y-Yo, el retrato, lo tiene —.y lleve mis manos a mi cara. —No, Malena lo verá, ¿Ahora qué hago?.

—Seguro no se da cuenta que es el —.me dio ánimos.

—Como no se dará cuenta, Dios es su retrato estoy perdida ahora seré estúpida, aparte de loca y torpe —.Malena frunció el seño y me miró.

—¿Loca y torpe? —.me preguntó.

—Si eso fue lo que me dijo el día de las carreras, lo querías saber ¿no?, allí está pues, mejor vámonos necesito una ducha y no salir más nunca.

—¿Y la fiesta? —.yo la mire mal.

—¿Como voy a ir?, si alguien mira el retrato —.Le dije.

—Tu lo niegas y ya, o mejor vamos y si el está allí hablamos con el y le pedimos que lo devuelva —.me dijo y yo rode los ojos.

—Tú crees que me la dará, si él no soporta estar en un mismo lugar que nosotras —.finalice y nos quedamos en silencio y nos fuimos a la residencia ya vería como hacía.

Cuál sería su reacción al mirarse retratado, ¿le gustaría?, ¿Le asustaría ?, Joder que enrollo.