¡Debemos salir!
Si reconocer la canción que canta Ink, ¡son increíbles! XD
-Habla...ahora- gruño Ink, rompiendo el silencio.
-Eres impaciente...- rio el desconocido. -Yo era igual...tu sabes, antes de todo esto-
-¿Antes?- los ojos de Ink se abrieron lo más que podían, su martillo desapareciendo en una pequeña nube de humo. -¿Tú eres...?- dudo por un momento. -¿...el lado humano de Shadow?-
-Shadow, ¿eh?- el de piel negra rio ligeramente. -Bonito nombre...- acaricio con aire ausente el corazón que un mantenía entre sus manos. -Si...se podría decir que soy su lado humano-
-¿Como llegaste aquí?- pregunto Mug bajando la mano pero manteniendo los ojos sobre el desconocido.
-Hace unos años, buscaba trabajo...no podía conseguir nada...hasta que un hombre me ofreció ser su asistente a tiempo completo. No era muy exigente y yo estaba desesperado, así que acepte- se encogió de hombros. -Él era una especie de dibujante y quería...- frunció el ceño, como si estuviera esforzándose por recordar. -...quería crear un toon perfecto. Uno que nunca pudiera ser olvidado y que se ganara el amor de todas las personas en el mundo-
-¿Un toon perfecto?- Ink y Mug ladearon la cabeza, confundidos.
-Estaba bastante loco, en mi opinión-... el ser oscuro rio ligeramente. -...pero me pagaba, así que nunca le dije nada- paso sus dedos por el corazón, este flotando ligeramente entre sus manos. -Un día, llego completamente chiflado...gritando y rompiendo cosas, no se detenía...él...- bajo la cabeza.
-¿Te hizo daño?- Mug lo miro con tristeza.
-Me noqueo en realidad- suspiro. -Recuerdo dolor...oscuridad...una voz pronunciando palabras extrañas...- se levanto. Era dos cabezas más alto que Ink y Mug. -Y me desperté en una pequeña habitación, convertido en un ser de tinta-
-Pero...- Ink se mordió el labio inferior, indecisa. -...¿de donde vino Shadow entonces?-
-Él lo creo- la miro con seriedad. -Intento utilizarme para crear al toon perfecto. Él pensó...pensó que si el toon tenia una esencia humana llamaría más la atención o algo por el estilo- se paso una mano por la cara. -El tipo estaba loco, no pude ni puedo encontrar una razón valida para todo esto- suspiro. -Termino creando un monstruo casi indestructible y que ama devorar tinta, dejándome atrapado aquí dentro-
-¿Y nosotros?- la coneja frunció el ceño. -Shadow tuvo la oportunidad de comerme en mi casa y cuando estuve en Disney...tuvo la oportunidad de comerse a todos y cada uno de nosotros pero no lo hizo-
-No tengo un gran control sobre él, es mucho más fuerte que yo pero pude tener el control por momentos y logre evitarlo- se rasco la nuca. -Pero tú...- la miro fijamente. -...no recuerdo haberte visto-
-¡¿No?!- gruño. -¡Tienes un dibujo de mi en tu habitación!-
-¿Eras tú?- ella frunció el ceño. -Con razón me eras tan familia-
-¿Perdón?- se cruzo de brazos.
-Te vi en un sueño y te dibuje- se encogió de hombros. -Sentí que era importante-
-Aja...- llevo las manos a la cintura. -Si tu lo dices-
-¿Sabes como derrotar a Shadow?- pregunto Mug dando un paso adelante.
-El corazón- extendió las manos con este en ellas. -Si lo rompen, me liberaran y la criatura ya no será inmune al disolvente- sonrío. -Podrán derretirlo-
-¿Que pasa con los mundos y personajes incoloros?- Ink lo miro con curiosidad.
-Solo deben pasar la tinta que quede de la criatura y todo obtendrá nuevamente su color- se encogió de hombros.
-Genial~- Ink movió las orejas, volando ligeramente para estar a la altura del desconocido. -Dos problemas menos pero...¿sabes como salir de aquí?- apunto hacia atrás. -Porque en serio no quiero usar la salida trasera-
-Hay otra salida, pequeña- rio, extendiéndole el corazón. Ella rodó los ojos, agarrándolo y acunándolo contra su pecho, dejándose caer de pie.
-¡Excelente~!- sonrió Mug. -Ahora, solo debemos...- todo tembló de golpe.
-¡¿Qué esta pasando?!- Ink estaba haciendo equilibrio para no caer.
-¡No lo sé!- los temblores se volvieron más violentos, hasta detenerse de la nada.
-Se...detuvo- suspiro la taza con alivio.
-Que suerte...- suspiraron de alivio...pero todo tembló nuevamente y todo se volteo. Los toons se tensaron, sintiendo su mundo girar y sintiéndose caer.
-¡Te tengo!- el desconocido, con los pies firmemente en la superficie a pesar de estar de costado, extendió la mano y logro atrapar a Mug.
-Gracias- sonrío pero escucho un grito. -¡INK!- ella había soltado el corazón, dejándolo flotando, y ahora estaba gritando mientras caía, desapareciendo en la oscuridad. -¿Q-Qué fue lo que paso?- pregunto una vez que todo se enderezo.
-Alguien debe estar luchando contra la criatura...- murmuro ligeramente. Alzo a Mug con un brazo, mientras que con el otro agarraba el corazón. -...y le debe de estar dando una buena golpiza- rio ligeramente.
-¿Que haremos con Ink?- pregunto el pequeño con preocupación.
-La buscaremos- camino con tranquilidad, saliendo de lo que antes era su cárcel y se detuvo en el borde, mirando hacia abajo. Dejo escapar un suspiro y salto, sintiendo las pequeñas manos aferrarse a sus hombros. Sus pies tocaron fondo después de unos minutos de caer, el corazón dándoles una leve iluminación pero sin ser de mucha ayuda. -¿Ink?-
-¡¿Dónde estas Ink?!- grito Mug, su voz haciendo eco a su alrededor.
-¡NO SÉ!- la voz femenina se oía temblorosa.
-¡Sigue hablando y te encontraremos!- grito el de piel negra.
-¡Esta bien!- se escucho un quejido. -¡Pero apúrense, no tengo mucho en mente!- el desconocido empezó a caminar, siguiendo la voz ajena. -¡Tu crees que loco estoy y una caricatura soy!- era una canción al parecer. -¡Para silbar y un bote navegar pero te aseguro que soy mucho más, veras!- la voz se oía más fuerte. Hasta que, gracias a la luz del corazón, pudieron verla: estaba enterrada hasta un poco más abajo del pecho, con las manos descansando sobre el piso y con la cabeza inclinada ligeramente hacia atrás, aun cantando. -¡De odio entero mancharas y el suelo entero haz de inundar...!-
-¡Ink!- Mug salto de los brazos ajenos apenas estaba cerca, arrodillándose junto a ella y sonriéndole.
-¡Me encontraron~!- sonrío con gran alivio. -¡Ahora sáquenme, porfis~!-alzo los brazos, abriendo y cerrando repetidamente las manos.
-¿No puedes volar?- pregunto Mug.
-¡No, mis orejas están tan atrapadas como la parte de abajo de mi cuerpo!- gruño.
-Deja de llorar- ríe el desconocido, agachándose y agarrándola desde abajo de los brazos, levantándola con facilidad.
-Gracias- murmuro cuando sus pies tocaron el suelo. -¿Que hacemos ahora?- miro hacia arriba. -Estamos muy lejos de donde empezamos y lo peor, estoy pegajosa- se acaricio las orejas, haciendo una mueca al sentir algo viscoso y pegajoso en ellas.
-Te ayudo- el de piel negra se sentó tras ella, empezando a pasar sus manos por sus orejas. -Deben irse ahora- hablo cuando termino. -Quien sabe lo que puede estar pasando ahí fuera-
-¿Realmente...?- Ink acuno el corazón contra su pecho, mirándolo con tristeza.
-¿...te destruiremos?- pregunto Mug, mirándolo con preocupación.
-Me liberaran y eso me es más que suficiente- agarro una mano de cada toon, besando el dorso de estas y sonriéndoles ligeramente. Ink lo miraba con las mejillas encendidas, mientras que Mug lo miraba con confusión. -Fue un placer conocerlos~- apenas dijo esto y un agujero se abrió bajo ambos toons, llevándoselos rápidamente y en medio de gritos. -...Buena suerte chicos...- sonrío dulcemente, sintiéndose tranquilo.
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