¡Adiós Shadow!
Aun falta un capitulo XD. Pongan nombres en los comentarios y veré cual será el nombre para el desconocido ^_^
-Carajo...- la voz de Bendy, en esos momento siendo una gran criatura de tinta, era mucho más gruesa y con una ligera distorsión, casi parecía de película de terror. -¡No podre resistir mucho más!- gruño rodeando con sus brazos a Shadow, usando toda la fuerza que tenia para mantenerlo quieto pero el monstruo no dejaba de luchar, gruñendo y golpeándolo continuamente.
-¡Lo sé y lo siento!- grito Mickey eliminando más criaturas con el disolvente. -¡Pero debemos esperar a que Ink y Mug salgan!-
-¡Maldición!- el demonio fue empujado con un buena golpe al pecho, retrocediendo un par de pasos. Apretó los puños firmemente y los levanto pero antes de golpear a la criatura, algo salio expulsado desde el costado de su cabeza. Decidió no prestarle atención a aquello, empezando a lanzar golpes e ignorando como podía los tentáculos ajenos que empezaban a robar su tinta.
-¡GHA!- Ink giro en el aire, girando las orejas de manera tope y apenas logrando recuperar equilibrio, dejando escapar un suspiro mientras volaba ligeramente. Soltó un chillido cuando algo choco contra ella, aferrándose a su cuerpo y logrando que cayera por un momento, manteniéndose en el aire y recuperar equilibrio con mucho esfuerzo. -¡¿Mug?!- abrazo al mencionado, feliz de verlo. Bajo lo más rápido que pudo, levantando la mano para aparecer sus martillos y eliminando a varias criaturas. -¿Estás bien?- lo miro con preocupación.
-Si, estoy bien- Mug sonrío enormemente. -Tú...tienes el corazón ¿cierto?-
-...No...- miraron lentamente hacia arriba, queriendo pegarse a si mismo al ver al corazón manchado a gran altura y bajando a velocidad tortuga. -Que mala suerte...-
-¡Y eso va a ser peor!- señalo que una criatura con alas se acercaba al corazón.
-¡No!- pero una mano negra mucho más grande se le adelanto, cerrando el puño alrededor del brillante órgano.
-¡Bendy!- todos los toons vieron con preocupación al demonio, ligeramente más pequeño, ser lanzado al piso. Shadow lo empezó a golpear, gruñendo con enojo. Un avión amarillo y con lunares negros apareció, disparando hacia Shadow y logrando distraerlo. Ink corrió, haciendo aparecer un gran martillo y golpeándolo con el, lanzando a la criatura fuera del lugar.
-No tenemos mucho tiempo...- murmuro, el avión desapareciendo cerca del suelo y dejando caer de pie al gato negro.
-Oh no...- Félix hizo una mueca. Ink se volteo, viendo un montón de tinta empezando a escurrirse por el suelo.
-Gha...- una figura, en medio de todo ese mar negro, gimió. Cup salto, acercándose.
-No tienes nada de suerte, ¿eh?- le sonrío ligeramente, arrodillándose a su lado.
-C-Cállate...t-tonto- gimió el demonio.
-¡¿Estás bien Bendy?!- Ink se mantuvo alejada, mirando a su alrededor y aplastando a las últimas criaturas que estaban de pie.
-P-Podría e-estar mejor...- Cup le ayudo a sentarse. -...p-pero tengo e-esto- sonrío débilmente, separando las manos y mostrando el corazón brillante. Ink se acerco, sonriéndole al demonio.
-Debemos destruirnos antes de que...- el suelo tembló y un rugido resonó. -Oh no...- la criatura estaba ahí, agazapada y con unas enormes alas negras saliendo de su espalda. -Oswald...- el conejo la miro de reojo, sin mover un musculo. -Llévate a los que puedas a arriba de algún edificio cuando te de la señal-
-Bien- asintió.
-Cup...- este la miro. -...¿puedes llevarte a Bendy?-
-Claro- miro nuevamente a la criatura.
-Mickey...- el hizo un ligero sonido, señal que estaba escuchando. -...¿puedes quedarte?-
-Si...- el ratón trago, sintiendo todo el cuerpo tenso.
-¡Ahora!- grito, agarrando el corazón y corriendo con el ratón tras ella. Shadow rugió, siguiéndolos e ignorando a los demás. Se detuvieron al llegar a los edificios, viéndose sin salida. Ink dejo el corazón flotando frente a ella e hizo aparecer su martillo, mientras que Mickey apretaba firmemente su pincel.
-Estoy listo cuando tu lo estés- hablo el ratón al ver a Shadow acercarse. -¿Ink?- ella miraba fijamente el corazón, sus manos temblando visiblemente.
-Y-Yo...- el rostro del desconocido de le vino a la mente y no pudo evitar estremecerse. -...N-No p-puedo...- murmuro. El monstruo, una vez que estuvo cerca, rugió y pisoteo, el piso temblando ante el movimiento.
-¡Ink!- grito Mickey cuando una gran mano lo agarro, levantándolo del suelo y acercándolo al rostro del monstruo, quien le rugió en la cara.
-¡Mickey!- miro con preocupación como Shadow empezaba a acercar al toon a su boca llena de colmillos. La coneja miro el corazón con tristeza, sintiendo las lagrimas empezando a correr por sus mejillas. -L-Lo siento mucho...- alzo su martillos y sollozo, bajándolo con fuerza...y rompiendo el corazón en miles de pedazos. La criatura rugió de dolor, revolviéndose en su lugar pero sin soltar al ratón, quien saco como puso su mano y apunto con el pincel, disparando un chorro de disolvente. Ink salto, manteniéndose en el aire con ayuda de sus orejas y encogiendo las piernas.
-¡Mickey, no!- Oswald, sobre uno de los edificios cercanos, vio con preocupación como la criatura se derretía pero no soltaba al ratón. -¡Detente!- pero Mickey no escucho, si no que aumento el chorro que salía de la punto del pincel y gruño, sintiéndose cada vez más cansado. Shadow, con un último gruñido, termino de disolverse y todo quedo en silencio.
-Mickey...- la coneja sollozo, viendo que solo quedaba un gran charco de tinta pero sin pista alguna del ratón. Dejo que sus pies tocaran el suelo, las lagrimas corriendo libremente por sus mejillas. Sintió a los demás acercarse, todos en silencio.
-Esto...no puede ser...- negó Félix con tristeza. Mug lloro, abrazando el brazo de su hermano. Cup trago con fuerza, sintiendo un gran nudo en la garganta. Bendy, con el brazo de Cup a su alrededor para mantenerlo de pie, gruño pero lagrimas silenciosas corrían por sus mejillas, mezclándose con la tinta que aun manchaba su cuerpo.
-L-Lo siento...- Ink apoyo su mano en el hombro de Oswald, quien se mantenía callado y rígido, con los puños firmemente apretados.
-Ese idiota...- la voz del conejo de la buena suerte amenazaba con romperse. -...le dije que se detuviera-
-Era nuestra oportunidad...- todos se tensaron. -...no podíamos desperdiciarla- se voltearon, viendo con gran sorpresa al mismísimo Mickey Mouse, quien les sonreía con gran alegría.
-¡Mickey!- Ink y Mug fueron los primeros en reaccionar, corriendo hacia él y abrazándolo con fuerza.
-Sabia que no podías morir tan fácilmente, roedor- sonrío Bendy.
-Es bueno verte sano y salvo Mickey- Félix se acerco, acariciándole la cabeza y sacando una sonrisa al otro toon. Oswald se mantuvo en silencio, sus ojos fijos en el ratón.
-¿Cómo lo hiciste?- Ink lo miro a los ojos. -¡Por un momento creí que el disolvente te alcanzo!-
-Yo también- rio el roedor con nerviosismo. -Pero alguien me ayudo-
-¿Eh?- ladearon la cabeza.
-Fue un placer~- un fantasma apareció tras Mickey.
-¡¿Tú?!- Ink y Mug se sorprendieron, era el mismo desconocido que encontraron dentro de Shadow pero esta vez su piel era blanca, vestía con un traje y con un pequeño sombrerito adornando su cabeza, sus ojos verdes mirándolos con diversión.
-Sip~- rio. -Pensé que necesitarían...un poco de ayuda- llevo sus manos tras la espalda, sonriéndoles suavemente.
-Dijiste...- Mug titubeo. -Dijiste que te liberaríamos si rompíamos el corazón-
-Es cierto- asintió con tranquilidad. -Soy libre de esa cárcel y ahora, puedo hacer lo que quiero e ir a donde quiero-
-Eso es bueno- sonrío Ink.
-Empecemos- Oswald hablo con seriedad, llamando la atención. -Aun tenemos que devolverle el color a muchos lugares y personas-
-Buena suerte~- el fantasma se desvaneció antes de que pudieran decir algo.
-¡Tramposo!- Ink y Mug bufaron, cruzándose de brazos.
-Esto nos llevara muuucho tiempo- murmuro el demonio.
-Ya lo creo- asintió el de pantalones rojos.
-Tenemos mucho trabajo- suspiro el gato. Todos empezaron a caminar, excepto el conejo y el ratón.
-Mickey yo...- Oswald trago, sin saber que decir.
-No te preocupes- la sonrisa de Mickey se veía forzada. -Ayudare en todo lo que pueda y me iré, tal y como dije- empezó a caminar, dejando al conejo solo.
-Rayos...- murmuro Oswald con las orejas bajas. Suspiro con tristeza, empezando a caminar sumido en sus pensamientos.
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