18
❝Tiempo de orden❞
Encontrar un lugar donde quedarse era difícil. Demasiado difícil. Extremadamente difícil. Taehyung se había percatado de ello de la forma más dura posible cuando había visitado varios lugares y la ilusión de haber hallado un lugar se hacía presente, pero todo se había ido en picada cuando los precios llegaban a sus oídos u ojos. ¿Desde cuándo la vida era tan cara?
Tenía un trabajo principal relativamente estable y algunos otros para tener algo de dinero extra, pero no estaba en una situación económica muy buena como para gastar tanto en un arriendo. Necesitaba comer, vestirse, para el transporte y pagar una que otra cosa que no estaba en sus planes. Si destinaba todo su dinero en un lugar que principalmente utilizaría solo para dormir, seguramente terminaría comiendo del heno de los caballos. Estaba claro que para comida no le iba a alcanzar, a no ser que comprara lo más barato, lo cual, de seguro, le iba a terminar haciendo que gastara dinero para un doctor por una alimentación deficiente.
Cuando vivía con Jimin la situación era diferente. En ocasiones el dinero no le había alcanzado y el otro chico le había apoyado un poco, pero vivir solo era un tema totalmente distinto. Si no tenía, simplemente no tenía. Por eso es que hallar un lugar adecuado y accesible para su bolsillo era algo que de momento no estaba logrando.
Hasta cierto punto, incluso estaba pensando en regresar a la ide de vivir en el automóvil que sus abuelos le habían regalado, pero estaba seguro de que si quería tener un lugar para compartir con Sohyun, lo más adecuado era un hogar en donde poder cocinar y sentarse por horas a charlar, y lamentablemente un automóvil después de cierto rato dejaba de ser tan cómodo. Solo para los viajes era algo divertido, ¿pero todos los días? Definitivamente no. ¡Ni las piernas se podían estirar!
Pero saliendo del mundo de sus pensamientos por un momento, regresó a concentrarse en esperar tranquilamente a un lado del auto para ver a su amiga cuando apareciera. Había sido un día agotador, pero sabía que por lo menos por unos días más tenía un lugar donde dormir. Todo gracias a Sohyun, quien se había portado tan bien con él brindándole su apoyo y estando ahí cuando pensaba que ya no podría más.
Pasaron unos cuantos minutos y finalmente la vio salir. Se enderezó bien para que lo notara, aunque claramente Sohyun lo podía notar a la perfección, incluso si seguía en esa posición más relajada, después de todo, era bastante alto como para no verlo. Cuando la chica se encontró más cerca de donde estaba él, estuvo por llamarla con un gesto de mano, pero mejor pensó en sorprenderla, y fue así que se escondió detrás de un árbol esperando a que estuviera frente a él.
—¡Sohyun!
Aunque las cosas no resultaron como Taehyung había planeado.
La aludida se giró para ver de quién se trataba. No era muy común que alguien le llamara en la calle mientras iba caminando. Además que la mayoría intentaba no llamar la atención. ¿Quién rayos había gritado su nombre? No demoró mucho en obtener una respuesta a ello.
—Jimin...
—Tú... ¿De casualidad has visto a Taehyung? Él está contigo, ¿verdad? —So presionó sus labios en una fina línea, sin saber muy bien qué responder. Tae, por su parte, permaneció en su escondite. Claramente había reconocido esa voz y su silueta era una que conocía muy bien—. Fue contigo, ¿cierto? —insistió.
—¿Por qué tendría que estar conmigo? ¿Pasó algo?
Era una situación tensa. Mientras Jimin y Sohyun se observaban, Taehyung estaba a unos cuantos metros intentando no ser descubierto. Él tan solo quería buscar a su amiga para regresar juntos, pero por lo visto las cosas no podían marchar tan bien como en los últimos días. Qué Jimin apareciera así... Realmente sentía que no tenía el derecho de hacerlo.
Por una parte porque no lo quería ver, y por otra... No quería que nadie más terminara involucrado, mucho menos Sohyun.
—Mierda. Dime que estás bromeando. Él debe estar contigo, no hay forma. ¿Dónde más podría estar..? ¿Pudo haber regresado con sus abuelos? Pero tan rápido no lo veo posible... A él no le gusta preocuparlos.
—Ya, ya. Está conmigo, así que no te alteres —le aclaró. Ya llamaban suficiente la atención al estar parados en medio de la calle como para que sucediera algo que hiciera que resaltaran todavía más—. Sé lo que pasó entre ustedes y, aunque el problema no tiene nada que ver conmigo, estoy un poco descolocada. Me dijiste que cuidara de Taehyung y no le hiciera daño, pero tú, siendo su mejor amigo, literalmente lo botaste a la calle. Sinceramente no sé con qué cara vienes a preguntar por él-
—Espera, las cosas no fueron así.
Taehyung quiso rodar los ojos. Estaba lo suficiente cerca para escucharlos y se estaba arrepintiendo de haber llegado temprano. Si se hubiera demorado un poco más, no tendría que haber escuchado esa charla sin querer.
Ver a Jimin le había hecho sentir el estómago pesado.
—¿Entonces? ¿Cómo es que sucedieron las cosas?
—Todo es debido a mi padre. Él no quiere que me relacione con Taehyung. Me amenazó con dejarme sin dinero, sin hogar y yo... Yo no tengo nada más. Dependo completamente de él. No tuve más opción, Sohyun. Él simplemente descubrió unas fotos del pasado que tengo con Tae y una cagada que me mandé y aprovechó todo eso para usarlo en mi contra. Formó todo un escándalo, hasta me amenazó con que buscaría a Taehyung.... La única forma que tenía para protegerlo era alejándolo de mí, ¿comprendes? Estoy metido en problemas y no lo quiero arrastrar conmigo. No sé qué es lo que pueda hacer mi papá si logra encararlo.
Fotos... Sohyun se preguntó si acaso eso era lo que le quería decir la hermana menor de su amigo. ¿Qué clase de fotos tenían que ser para que un padre se pudiera poner tan furioso al punto de querer quitarle las cosas a su hijo? Sabía que no era su asunto y que eso era lo que menos le tenía que importar, sin embargo, era algo difícil de ignorar sabiendo que entre Taehyung y Jimin había sucedido... ¿algo?
Estaba mal que pensara en ello, pero no pudo dejar de darle vueltas al asunto. Nada justificaba la actitud tan extremista que mencionaba el chico, o eso quiso creer. Pero tenía que haber sido lo suficiente llamativo como para que su padre hubiera reaccionado de la forma en que lo hizo. ¿O acaso solo era un hombre malo que no podía aceptar una amistad?
En cuanto a la cagada que se había mandado, ese era ya otro tema que sin duda podía ser más complejo.
—Sé que no me corresponde, Jimin. Pero... ¿Qué contenían las fotos como para que tu papá reaccionara así? ¿Un abrazo o una tomada de manos? Hablando se pueden solucionar las cosas y si no era nada realmente malo... Una situación así se podría solucionar de forma más fácil —intentó apaciguar la reacción de Jimin, quien se veía muy acongojado.
—Bueno... Uh, nosotros en realidad ¿hicimos algo? ¡Aunque en mi defensa estábamos borrachos! —dio un fuerte suspiro antes de seguir hablando—. Mi papá no sabe que soy... bisexual. Él en realidad cree que todo esté tiempo he sido gay y que le estaba ocultando que estaba en una relación romántica con Taehyung. Pero entre nosotros no hay... ni tampoco hubo algo más que amistad —pasó una de sus manos por su cabello, tirando los mechones hacia atrás—. Estoy seguro de que aunque le intente explicar un montón de veces, no lo va a comprender. Él me quiere casado con una mujer y con hijos, pero por los errores que he cometido no va a ser fácil que me crea.
Se formó un silencio.
Sohyun realmente esperaba algo así, pero en verdad no pensaba que hubiese sido verdad. Aquella vez mientras estaba acostada y Taehyung y Jimin discutían, había escuchado que por lo visto habían estado a punto de tener sexo o algo así, pero una cosa era meterse con alguien en juego y otra muy distinta le parecía el tomarse fotos haciendo algo. Era un tema de ellos si lo habían hecho, pero que se hubiese filtrado indicaba que al parecer no había sido muy secreto.
Ni siquiera sabía si se trataba de eso, pero podía suponer, ¿no?
—No sé qué más decirte... Los asuntos familiares pueden ser muy complicados y por lo visto en este caso está en lo extremo de complejo, pero al menos pudiste hablar bien con Taehyung y explicarle lo que pasó. Se supone que los mejores amigos están para poder apoyarse y contarse las cosas, pero tú actuaste solo por tu bien incluso si tenías la intención de protegerlo. Además, si es algo que los involucra a los dos, él también tiene derecho a saber lo que pasó.
—Solo jugábamos, pero mi papá reaccionó de más. Como te dije, Taehyung es virgen, así que nosotros nunca hicimos algo que pasara la línea —Sohyun se sintió incómoda. Quería irse de ahí lo antes posible—-. Te lo cuento porque no sé a quién más se lo podrías decir... Ni tampoco quiero que te armes ideas que no son.
—No necesitas darme explicaciones, Jimin. Es su vida. ¿Sabes? Fue mi error preguntar de más, y precisamente a ti. Los temas pendientes entre ustedes deben ser hablados entre ustedes. Yo solo soy amiga de Taehyung y lo estoy apoyando como puedo, pero meterme en su pasado o cuestionar cosas que hizo... No. No es tema mío.
Jimin dio un fuerte suspiro.
—Le hice daño a Tae, Sohyun. Al menos dándote explicaciones no me siento como alguien tan basura, ¿si? Además... yo creo que entre tú y él hay algo, y no quiero que surjan malos entendidos si es que esto se extiende más. Sé que tú no deberías ser parte de esto, pero espero que me comprendas también. Al igual que tú, quiero que él esté bien, y si sé que junto a mí no es posible... ¿Qué más puedo hacer?
¿Qué malos entendidos podrían surgir? Entre ella y Taehyung no había nada romántico. A lo más surgía ese ambiente extraño y uno que otro coqueteo natural, pero de ahí en más no creía que se pudiera dar algo por hecho. Solo eran amigos. Se ayudaban mutuamente y estaban viviendo juntos mientras el chico conseguía un lugar donde quedarse. Era algo raro que alguien le comentara eso. Le hacía sentir confundida y algo descolocada. Sumando a eso lo que estaba pasando con su papá, la ansiedad no tardó en carcomerla desde su interior.
Tal y como las cosas entre Jimin y Taehyung eran entre ellos, los temas entre Tae y ella eran algo que ellos verían. No había necesidad de que alguien más opinara sobre cómo se veían o qué podían ser.
—Bien, dejemos esto hasta aquí. Debo ir a casa y no puedo retrasarme más —no quería ser grosera, pero su tono de voz no había sido especialmente el más amable—. Espero que las cosas te vayan para mejor. Y aunque no me hiciste nada a mí, verte no me hace sentir especialmente bien. Quien está más afectado por esta situación es Taehyung y...
El nombrado apareció. Ambos lo vieron cuando se paró entre los dos.
Y aunque hubiese preferido escapar o hacerse el tonto, no pudo seguir escondiéndose después de todo lo que había escuchado. Quien había sido su mejor amigo por tantos años había preferido sincerarse en medio de la calle frente a quien había dicho no le caía del todo bien. Todas sus palabras le habían llegado, pero no quería que el pasado siguiera saliendo a la luz cuando se encontraba tan blando emocionalmente por todo lo que había sucedido.
Al parecer Jimin nunca había sido del todo sincero con él y le dolía haberse enterado de esa forma. Era comprensivo, un buen amigo, ¿por qué le había costado tanto decirle las cosas como correspondía?
—Sohyun no tiene nada que ver en esto, Jimin. Si necesitas hablar de esto con alguien, es conmigo. No es justo que la pongas en una situación difícil por algo que no le corresponde, incluso si no tienes a nadie más a quien decirle.
—¿Y qué querías que hiciera si mis mensajes y llamadas no eran tomados por ti? Aunque no lo creas, también estaba preocupado por ti.
—Será por algo, ¿no? Nos tocará hablar de este tema, pero aún no es el momento. Estoy muy dolido por tus acciones. Quedan cosas por hablar, lo sé, pero en medio de la calle tras un día pesado... No, existen otras instancias. E insisto, es algo entre tú y yo, no vuelvas a meter a So, por favor.
Jimin quiso abrir su boca para hablar, pero nada salió. Estaba tan acostumbrado a que Taehyung le hiciera caso y le prestara atención que sinceramente no podía creer que el tipo a su lado fuera el mismo de hace unos meses. Aunque hasta él mismo había cambiado en todo ese tiempo. No era alguien que lo podía juzgar.
—Bien, lo lamento. Toma el tiempo que necesites y contáctame cuando estés listo para hablar —su rostro tenía una expresión amarga. Parecía que incluso podría ponerse a llorar—. Y también me disculpo contigo, Sohyun. No quise incomodarte. Lo siento por todo el drama —su vista regresó al chico a su lado—. Tus cosas que dejaste están en la bodega, te paso las llaves para que puedas ir cuando quieras. Me aseguré de que no les pasara nada malo.
Y sin más, tras pasarle las llaves, hizo un suave asentimiento de cabeza y se marchó dejándolos solos. Al parecer esa calle siempre iba a presenciar encuentros que tuvieran relación a ellos.
Algunos más agradables que otros.
—Perdón, Tae. Yo tampoco tuve que haber insistido con el tema —se disculpó siendo consciente de que su amigo había quedado afectado por lo que acababa de suceder. Claro que los había escuchado.
—Está bien, no te preocupes. También fue mi culpa por haberme escondido tras el árbol. Para la próxima vez te preguntaré si quieres que te venga a buscar para no llegar de sorpresa y que pase algo de este estilo —se acarició la nuca, intentando disminuir la tensión que se había acumulado tras todos esos minutos—. ¿Te parece si ya nos vamos?
—Claro. Tengo algo que comentarte y creo que te puede poner un poquito feliz. Pero necesito que lleguemos a casa para hablar más tranquilos, y de paso comer algo, que estoy muerta de hambre. No almorcé muy bien por estar viendo un trabajo en grupo.
Sus pies comenzaron a moverse para ir hacia el auto. Y, con algo de suerte, la tensión comenzó a disminuir de a poco. Cada uno puso un gran esfuerzo para dejar de lado lo que había sucedido.
—Compré unos bocadillos cuando venía de camino hacia acá. Están en el auto esperando a que los comas. Ya luego podemos cenar algo más contundente. También descubrí una canción muy buena, estoy seguro de que cuando la escuches te va a gustar.
—Ya lo creo. Nunca me decepcionas con tu buen gusto por la música.
Y así, dejando atrás por un un momento el episodio que acababa de ocurrir, se subieron al auto y encendieron la radio para escuchar un poco de música mientras charlaban de regreso a casa.
El trayecto de vuelta cada vez era más conocido por Taehyung, quien se había propuesto aprenderlo bien para no decepcionar a su amiga llevándolos por calles que nada tenían que ver con su destino. Sohyun lo había notado, y por ello es que una sonrisa se coló en su rostro al ver a Tae tan concentrado en su recorrido. Si lo pensaba bien, era un gesto muy lindo de su parte, como también lo era que la fuera a buscar a pesar de que tenía que estar cansado por trabajar.
Era un chico muy esforzado, de eso no tenía dudas.
La imagen de él buscando un nuevo lugar para vivir llegó a su cabeza. Ser joven sí que era difícil, mucho más si no se tenía ninguna red en la que apoyarse. Pero por lo menos el último tiempo se estaban teniendo al otro, y aquello era algo impagable.
De tener un hogar vacío, pasó a tener una grata compañía, la cual la ayudaba mucho a no sentir esa soledad que en ocasiones parecía dominar hasta lo más profundo de su corazón. Y, sin duda, todo se iba a poner todavía mejor con la buena noticia que le tenía. Era complicado aguantar las ganas de contárselo ahí mismo, pero conociendo un poco mejor a Taehyung, sabía que sí se lo decía en el auto podían terminar chocando.
Tal vez era una exageración, pero era una posibilidad entre tantas otras.
Por otro lado, estaba segura de que la noticia le quitaría un gran peso de encima, o al menos eso esperaba. Aunque su pensamiento se vio interrumpido cuando un sonido de tripas pareció sonar incluso más fuerte que la misma música. Se quiso hacer la desentendida, mirando hacia fuera, pero la profunda mirada de Taehyung recayó en ella.
—¿Me pasarías un bocadillo? Qué vergüenza, la panza me sonó muy fuerte.
Sohyun en ningún momento lo había escuchado, pero prefirió creer en la palabra de su amigo. Por lo mismo le pasó un bocadillo en lo que la luz del semáforo se ponía en rojo para que Tae pudiera comer tranquilo.
—Creo que también voy a tomar uno.
—¡Claro! Los compré para que pudiéramos compartir.
Y viéndolo terminar de comer el bocadillo mientras el semáforo cambiaba a verde, Sohyun supo en que había hecho bien con la decisión que había tomado.
—Gracias. Para la cena haré algo muy delicioso para compensarte por los bocadillos y por el aventón de regreso a casa.
—Me gusta como suena eso, aunque también me gustaría ayudar. Si la preparamos entre los dos más rápido podremos comer.
—Está bien. Diste en el punto clave. Por ahora... Toma otro bocadillo, yo también comeré otro, aunque hay que dejar espacio para la cena, así que no exageremos.
○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○
Publicado: 07/08/2022
Mi meta es llegar a los 40 capítulos sin beso entre estos dos. #Bromis. Ojalá le puedan seguir dando amor a la historia <3
○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○
Publicado: 23/09/2024
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro