Pov Mabel

Me levanté temprano ese día ya que queria comenzar la mañana lo antes posible para estar con mis amigas, luego de trabajar en la cabaña claro, esperaba ir con ellas a comprar e ir a comer unos helados hasta que se nos congelen los cerebros.

Sin dudas un buen comienzo.

Fui corriendo al baño para poder ducharme, al entrar cerré la puerta y dejé mi toalla en la cortina del baño, coloqué la ropa que me pondria encima del lavamanos para seguidamente quitarme mi pijama, después me amarré mi cabello en una cebolla alta con tal de no mojarme el cabello, entonces fue que encendí la regadera para tomar la medida del agua y seguidamente ducharme.

Al terminar la ducha, me sequé con la toalla y me empecé a vestir, lo que tenia puesto era un short de mesclilla, un sueter con el cuello circular y las mangas abultadas hasta las muñecas en donde se cerraban, el sueter era naranja con estrellas de color durasno, mi cabello estaba en una trenza con una diadema rosa, tenia unos pendientes de estrellas amarillas grandes que dejaban ver mis sarcillos de plata sencillos arriba de mi oreja derecha, un collar del planeta saturno en color verde, mis medias moradas platinadas mas unas convers negras, para mi era un conjunto sencillo.

Tras terminar de vestir tomé mi pijama y la doble para seguidamente guardarla en el gabetero de mi armario, tras eso fui y tomé la toalla para colgarla en el baño y secarla, enseguida corrí escaleras abajo para empezar la mañana con un desayuno hecho por el tío Stan, aunque al bajar no logré escucharlo, extrañada fui a la cocina pero no ví nada preparado o si acaso a mis tíos, enseguida fui a sus cuartos para despertarlos mas estos se encontraban vacios, me empecé a asustar por lo que corrí al laboratorio del tío Ford con la esperanza de que estuvieran ahí, mas al bajar no los encontré, desesperada subí con tal de ver si se habian ido dejando una nota, corrí nuevamente a la cocina y busqué la dichosa nota mas no la encontré por ningún lado.

Me empecé a asustar, hasta que una extraña explosión me sacó de mis pensamientos, habia sonado no tan lejos de aquí por lo que rapidamente me dirigí a donde creia haber escuchado la explosión con la esperanza de encontrar al tío Stan y al tío Ford.

Salí de golpe por la puerta hacia el bosque en donde pensé podria encontrarlos, corrí entre ramas, árboles y arbustos de espinos con tal de hayar al responsable de ese estruendo.

Otro estruendo.

Habia escuchado la siguiente explosión algo lejos pero sabia que estaba cerca, sin pensarlo avance con mas rapidez hacia ese ruido, con cada paso sentia que me acercaba mas a mi objetivo. Un estruendo más. Ese se escuchó justo en frente de mí, ya lo habia encontrado, al llegar pude ver un claro en donde estaba el tío Ford con una de sus tantas armas apuntando a una silueta que no pude identificar muy bien, la cual tenia como una clase de hilos azules saliendo de sus dedos, estos hilos tenian amarrado al tío Stan, preocupada me acerqué sin mediar las consecuencias, al hacerlo dí señal a mis tíos y a la extraña silueta de donde me encontraba, en ese momento estaba aterrada de que podria hacerme o a mis tíos.

-¡¡Mabel/Niña!!

Ford se estaba acercando a mí con tal de cubrirme pero la silueta fue mas rapida y lo atrapó con sus hilos haciendo que soltara el arma y colocandolo al lado del tío Stan para que no recuperara el arma.

-¡Ven aca! Por aquí todos flotamos y tenemos cajones llenos de dulces para ti. – Esa voz me hizo sentir escalofrios, esto era demaciado para una fria mañana de verano.

Voltee para dirigir mi mirada al arma que habia caido de las manos del tío Ford, corrí a ella para tomarla pero una rafaga me distrajo y al voltear a la ubicación del arma ví a un sujeto de piel gris que tenia en sus manos el arma de mí tío.

-¿Por qué estas aquí? – Dije cambiando drasticamente su voz a una mas distorsionada pero calmada que podria confundirse con tres personas hablando a la vez.

No contesté ya que trataba de asimilar que o quien estaba delante de mí.

Frente a mí estaba un chico alto, de cabellos cafés muy oscuros, de piel gris como dije anteriormente, tenia iris oscuras haciendo que la pupila no pudiera diferenciarse facilmente haciendo competencia con los ojos de una muñeca, portaba un traje negro casí en su totalidad ya que podian verse reflejos en gris en donde deberia estar la camisa blanca, en la cabez tenia un par de cuernos algo inusuales, ya que uno era mas grande y torsido que el otro, el cual estaba curveado hacia adelante y estaba algo chueco, portaba en su mano izquierda un tatuaje de una estrella de seis picos, mientras que en la derecha tenia una equis, aunque no se porque.

-Sonríe, ya que en un abrir y cerrar de ojos; puedes estar muerta – Sin esperarlo se abalanzó hacia mí mas yo lo esquive a tiempo.

-¿Quién eres?

-Me conoces, mas no lo recuerdas – Eso solo me confundia mas.

-¿Qué haces aquí?

-Cumpliendo un trabajo.

-¡Habla con coherencia!

-Una vida sin homicidios es para mí como una vida sin alimentos para ustedes. – Sin esperarlo rompió ante mis ojos el arma del tío Ford mientras sacaba de sus dedos los mismos hilos azules con tal de atarme, mas logré salir de su campo de aterrizaje para que no me inmovilizara.

En un momento de distracción lo perdí de vista, no sabia donde podia encontrarse por lo que aproveché para tratar de liberar a mis tíos, mas cuando estaba a un metro de distancia frente a mi se formó una niebla espesa que no me dejaba ver nada, la niebla me cubria de la luz del sol y me era dificil saber por donde debia pisar.

-¿Por qué tratas de salvarlos? – Volteaba a todas partes tratando de encontrar a ese sujeto mas no lo encontraba.

-¡Sal de donde estes! ¡Cobarde!

-Las personas cobardes son las que fingen ser valientes.

-¿Q-q-que?

-Un gran ejemplo es alguien conocido... Tu hermano...

Me paralicé por un momento ante esas ultimas palabras ¿Cómo era que conocia a mi hermano?

-¿Cómo sabes de él?

-Él era tu sombra, las sombras siempre son siniestras – Me molesté por como le dijo y trate de embestirlo mas no lo logré.

-No le digas así a mi hermano, él no es mi sombra.

-Solo yo podia verlo, hasta que un día tomó su verdadera forma y... Murieron todos – Me empezaba a alarmar, sus palabras cada vez tenian menos sentido.

-¿De que estas parloteando?

-Él era tu sombra, hasta que decidió tomar una forma distinta... El ende demoniaco que vivia en él se rebeló, y antes de que pudiera hacer algo... Murió por él mismo, y así murieron todos en vida por su perdida.

Aunque odiara decirlo, tenia un poco de razón, con lo de que morí en vida por su perdida, pero eso de que su ende demoniaco tomó el control era ridículo, no sabia que creer.

-¿Por qué tan callada? – De repente ya no estaba y la niebla empezó a dispersarce – ¿Las sombras te asustan pequeña?

-¡No te tengo miedo!

-Todos tenemos miedo de algo.

-Estas equivocado.

-No son las cosas reales las que asustan, si no, lo que imaginamos en ella.

Sin previo aviso los hilos que ataban a mis tíos se aflojaron dejandolos libres, pero antes de que pudiera abrazarlos ese chico de tez grisacea se me colocó en frente de mí portando en su rostro una sonrisa que estaba dispuesta a partir de un golpe cuando volvió a hablar.

-Nunca te sientas solo, porque realmente nunca lo estaras. – Y así sin mas...

Se desapareció.

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SUSPENSO-CHAN!!!

Ok no :v

Ya volví mis queridas fujoshis del mal :D

Y con nuevo cap ^w^

Lamento haber tardado :c pero es que no tenia ideas y cada que podia venia y escribia un cachito de la historia :'v

Pero bueno, ya volví y renovada mis bebes :D

Las frases en cursiva negritas son sacadas del libro "FRASES DE TERROR" de Mxcxbre

Espero verlas pronto~

Sin mas me despido~

Bye-byeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee~♥