Inicio
‼️⚠️No se acepta comentario irrespetuoso, molesto, desagradable, malintencionado, o que insulte/denigre a algún lector y busque pelea; será eliminado y el usuario bloqueado sin previo aviso.⚠️‼️
Cualquier queja o inconveniente comunicarse a esta cuenta (dualitymask) o a mi cuenta de respaldo: dualitymaskk
Atte: Dua🌷
+Historia corta.
+Romance.
+Drama.
+Fantasía.
Parte uno.
Hoseok hizo una mueca de disgusto mirando a las familias caminar y divertirse en aquel parque. Estaba harto de no poder ser como ellos, estaba harto de su nueva vida.
Se rió irónicamente por aquella ultima palabra, ¿podría considerarse tener una nueva "vida" cuando ciertamente no estaba vivo?
Bufó y comenzó a deambular por el lugar esperando al Guía que le diría como largarse del mundo humano. Ya había tenido suficiente de estar junto a los vivos cuando él no era uno. Si se ponía a pensar, llevaba semanas desde que había dejado de ser un ser vivo, tampoco sabía la razón del porqué a pesar de no ser uno estuviera alrededor de ellos. Sería divertido si al menos pudiera ver a sus amigos pero, já, nadie podía verlo y no recordaba ni siquiera quienes eran sus amigos.
—Alma número ocho mil seiscientos cuarenta y nueve millones que actualmente se encuentra encuentra atrapado en el mundo humano hace exactamente un mes —dijo alguien detrás suyo, Hoseok se giró y casi resopló de alivio al ver que se trataba de un Guía. ¡Al fin! Los Guías eran seres muy ocupados, le había llevado demasiado contactar con alguno y por primera vez lo había logrado con éxito—. ¿Para qué me necesitabas?
—¿Para qué te necesitaba? ¿Acaso no es obvio?
El alto apenas curvó una comisura de sus labios como si sus palabras fueran algo divertidas: —Alma número ocho mil seiscientos cuarenta y nueve millones, te pediría que fueses más puntual. No tengo tiempo para adivinanzas el día de hoy.
Jadeó indignado, ¿le estaba hablando en serio?
—Primero deja de llamarme alma ocho mil no sé qué, me llamo Hoseok-
—Vaya, veo que recuerdas tu nombre —interrumpió con sorpresa—. Aunque no es algo sorprendente teniendo en cuenta el tiempo que llevas divagando, supongo que eso también significa que sabes la razón del porqué estás aquí, me pregunto entonces para que me has convocado a este encuentro.
—Tal vez sea porque... ¡Solo recuerdo mi nombre! —soltó—. Todo este mes estuve esperando por respuestas, he hablado con otros como yo-
—Te refieres a otras almas.
—Si, si, eso —dijo sin poder acostumbrarse a que era un simple alma ahora—. He estado hablando con muchos de ellos y todos han tenido una visita de algún Guía apenas llegaron aquí, ¡y yo no! ¡Ni siquiera fue fácil convocarte a ti!
—Es cuestión de suerte, no habemos muchos Guías últimamente. —Hoseok comenzaba a enfurecer por lo tranquilo que hablaba y era aquel ser frente a él—. Algunos tardan meses en convocarnos... En fin, me llamo Kim Namjoon y seré tu Guía a partir de hoy para reinvindicar la ausencia de mis compañeros. Puedes preguntarme lo que quieras.
—¿Por qué mejor no me dices que demonios hago aquí si se supone que jodidamente me morí?
El tal namjoon volví a sonreír de esa forma que lo ponía nada más que violento porque parecía que se burlaba de él.
—Fácilmente podría decirse que es por tu lenguaje y manera de expresarte. —Hoseok abrió la boca para protestar pero el más alto frente a él elevó una mano callándolo—. Pero la realidad es que cuando un alma está divagando por el mundo de los vivos puede ser por tres razones; no se quiere ir, ha dejado algo sin resolver ó porque hizo cosas malas y tiene la oportunidad para reivindicarse.
Hoseok alzó una ceja con curiosidad, ¿podría ser posible que haya dejado algo sin resolver? ¿Tal vez la deuda del internet? Se rió internamente.
—Cuando hablo de algo sin resolver me refiero a aquellos que murieron cuando no era su tiempo y que dejaron muchas cosas sin terminar, éstos solo encontrarán el camino cuando recuerden que les falto terminar. Es el caso de algunos enamorados, ellos encuentran el camino cuando recuerdan a su pareja y ven que superó su muerte o al menos seguirá adelante —explico como leyendo sus pensamientos—. Entonces, ¿ahora recuerdas algo?
—Enamorados —repitió como un gesto de asco—. Yo jamás saldría con una sola persona, estoy seguro que era un rompecorazones.
Namjoon rió bajo: —¿En serio? ¿Es ese entonces el pecado que te condenó a estar deambulando entre los mortales? ¿El romper corazones?
El pelinegro se encogió de hombros: —Podría ser. Pero siento que en realidad estoy aquí porque hice algo muy malo.
—¿Sientes?
—Si, creo que era un chico muy malo y peligroso así que por eso estoy aquí.
Una vez más, su Guía rió bajo: —Si eso es lo que sientes... Entonces deberás reivindicarte para que se te perdonen por tus pecados y encontrar el camino al cielo.
—Si —afirmó Hoseok—... ¿Y cómo lo hago?
—Bueno, esa es la parte difícil —respondió Namjoon, y Hoseok se asustó un poco pero intentó calmarse mirando a hacia la gente que seguía paseando por el parque—. Debes buscar un humano y hacer cosas buenas por él.
Frunció el ceño y soltó una risa: —¿Eso es todo? ¿Así de fácil? Creí que habías dicho que era difícil, qué exagerado.
Reía aliviado casi saboreando y sintiendo el camino al cielo acercándose a él. Su humano sería la persona más feliz del mundo.
—Me alegra que encuentres esto divertido y fácil —comentó Namjoon—. Ahora ve a buscar a tu humano... Ah, recuerda que debe ser alguien que sea bueno de verdad y merezca ser feliz. En caso contrario, no contará.
—¿Uh? ¿Y cómo sabré que el humano que elija es alguien bueno de verdad y que merece ser feliz?
Fue clara la expresión de satisfacción en Namjoon: —Deberías estudiar al humano por mucho tiempo para descubrirlo.
—¿Qué? —soltó comenzando a desesperarse—. No, no, no puedo puedo seguir perdiendo más tiempo. Es horrible estar aquí sin saber que hacer o a donde ir, es horrible que nadie sepa de tu existencia, es horrible no tener con quien hablar ni recordar nada. ¡Tienes que ayudarme a salir de aquí cuanto antes! ¡Has dicho que serías mi Guía!
Si hacía falta suplicarle más, lo haría. Hoseok ya no quería estar ahí atrapado ahí, quería ser libre.
—Está bien —dijo Namjoon como si hubiera estado esperando aquellas palabras—. Sígueme.
Hoseok lo siguió detrás muy obediente, pero no caminaron mucho. En realidad cruzaron el parque y se detuvieron frente a varias personas conversando.
—Ése será tu humano —dijo Namjoon indicando hacia un chico que estaba solo. Hoseok miró con curiosidad.
Era un chico castaño claro, muy lindo que estaba mirando su teléfono con audífonos puestos. Muy distraído como para notar que alguien lo miraba.
—¿Eso es todo? ¿Ahora solo debo cumplir con sus deseos como un especie de padrino mágico y encontraré el camino a la libertad o cielo como sea que le llamen?
Namjoon rió bajo pero negó de una forma que Hoseok solo supo que se vendrían malas noticias. Maldijo internamente, ¿por qué tenían que complicar las cosas?
—No debes cumplir sus deseos, debes asegurarte de que sea feliz con pequeñas cosas, algo así como hacerle ver el lado positivo a las cosas-
—¿Qué? ¿Y cómo se supone que haré eso? —Hoseok interrumpió—. Oh, ya sé, ya entendí. Podría materializarme en carne y hueso para luego acercarme y fingir que somos amigos.
—Por supuesto que no, empezando porque está prohibido materializarse y hacer amigos humanos. Tendrás que encontrar una forma de hacerlo feliz.
Hoseok miró al chico "su humano" y frunció el ceño. —¿Y cómo se supone que lo haré feliz? Ya parece feliz con su celular. ¿Quién no es feliz cuando está con el celular?
Namjoon suspiró cansado.
—... No lo es —respondió con seguridad—. Está pasando por un momento muy duro. No diré nada más que eso, intenta pensar tú cómo resolverlo.
Se cruzó de brazos mirando al chico y pensando que esto sería un desafío pero que la verdad no lo asustaba, no creía que fuera difícil encontrar cómo hacerlo feliz. Tal vez podría hacerlo encontrar una moneda en el suelo, no recordaba mucho de su vida como humano pero estaba seguro que eso lo hacía feliz. Encontrar dinero.
—Sencillo —remarcó Hoseok con seguridad e hizo un movimiento de manos hacia Namjoon—. Ya puedes irte, no te necesito.
—Ah... Olvidé mencionar un par de cosas más.
Hoseok se quejó: —¿Y ahora qué?
—El número de humanos buenos y que merezcan ser felices es escaso. Muy escaso. Por lo que detrás de un humano como éste deben haber varias almas. Tendrás que competir contra otros —aclaró, Hoseok lo miró con cara de "no puedo creer que digas esto justo ahora"—... porque solo uno podrá ser el elegido como el que logró el objetivo de hacer feliz al humano. Solo al mejor se le dará otorgará el camino a la libertad, el resto deberá buscar algún otro humano y volverlo a intentar.
—... Es broma, ¿cierto?
—Nop —contestó mirándolo entre serio y divertido—. Aunque claro, hay casos especiales en los que se puede elegir a dos almas que hayan hecho cosas buenas por el humano.
—¿Cuáles son esos casos especiales? —preguntó presintiendo que no le gustaría mucho la respuesta.
—Las dos almas deben ser pareja.
Se rió superficialmente. —¿Eso es un caso especial? Qué estupidez. Bien, no me importa porque todo aquel que esté detrás de mi humano lo aniquilaré. No competiré contra nadie.
—Como tú digas, Hoseok —dijo de una forma casi irónica—. Volveré en unos días, suerte.
—Espera-
Frunció el ceño porque Namjoon desapareció. No podía creer que se fuera tan rápido sin preguntar si tenía más dudas. ¿Qué clase de Guía era? Negó con la cabeza y decidió mirar a su humano, aquel que seguía escribiendo en su celular con audífonos puesto. Hoseok suspiró frustrado porque algo le decía que este humano era totalmente aburrido, de esos que solo están en redes sociales y no tienen amigos ni le gusta socializar. Ya se veía a sí mismo dormirse de pie esperando que aquel humano hiciera algo interesante.
Estaba seguro que pasaron horas cuando vio que el humano se levantó y comenzó a caminar, Hoseok se puso en acción y lo siguió. Creyó que se iría a encontrar con alguien pero por lo contrario descubrió que el humano solo caminaba y caminaba por unas calles que cada vez se hacían más desérticas. Aquel humano estaba solo, pero no solo físicamente, solo en general. Entonces las palabras de Namjoon vinieron a su mente.
Namjoon había dicho que el humano que había elegido para él debía tener muchas almas detrás suyo porque no habían muchos humanos buenos como él, pero hasta ahora no había visto a ningún alma detrás de ese humano. Era extraño.
Por un momento pensó que el humano iría a su casa pero no fue así, fue a otro parque y una vez más se sentó en un asiento, sacó su teléfono móvil y se puso los audífonos. Hoseok frunció el ceño. Tal vez su humano era tan aburrido que por eso ninguna otra alma estaba detrás suyo.
Aquel parque también estaba lleno de gente pero desde el sector que miraba al humano no había ni un alma... bueno, a excepción de él, claro. Nadie lo podía ver pero de igual forma le gustaba estar escondido y a solas. Hoseok se apoyó en la pared de cemento esperando a que el humano hiciera algo interesante pero algo más llamó su atención.
Sintió a alguien mirándolo.
Hoseok se giró y miró hacia esa persona. Era un tipo de cabello castaño oscuro el que lo miraba fijamente como si estuviera por matarlo. Hoseok lo miró de abajo a arriba preguntándose porque ese tipo lo miraba así pero decidió volver a su humano porque era el único que importaba si quería ser libre.
Solo que entonces, recordó un detalle. Hoseok era un alma. Es decir, ningún humano puede mirarlo a menos que decida materializarse. Así que... ¿cómo aquel humano-
Su espalda chocó con fuerza contra la pared de cemento causándole dolor, fue sostenido por su garganta. Una mano lo aplastaba y luego otra se posó sobre la misma. Ahormándolo. Hoseok miró al responsable comenzando a ahogarse aunque no necesitará de aire para vivir.
—¿Quién te crees para seguir a mi humano? —gruñó quien lo sostenía, mirándolo de forma asesina. Hoseok se dio cuenta que aquel era un alma también—. Park Jimin es mío. De Kim Taehyung. Búscate a otro o te haré desaparecer, ¿entendiste o quieres que te lo dibuje? —amenazó ahorcándolo mas.
Hoseok lo miró sorprendido uno segundos pero pronto comenzó a reír. Aquel tal Taehyung lo miró confundido, no sabía con quien se estaba metiendo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro