Reina-Valera 1960
1ª Tesalonicenses 4:7
Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación.

Ya era suficiente, este chico me gustaba mucho y quería hablarle, estar cerca, conocerle osea no quería poner más distancia entre nosotros y Melodi me dio las palabras exactas así que basta de dudas.
Me paré y fui lo más rápido que pude hasta quedar frente a él.

Entonces fue cuando me quedé justo allí al frente de él como una boba mirando sus ojos tan penetrantes, lo miraba tan fijamente que podía ver mi reflejo en sus ojos, me miraba tan intensamente que todo el cuerpo me temblaba, dio un paso hacía mi mientras mordía su labio inferior, estaba tan cerca de mí que rozaba su nariz con la mía.
Cuando desvió su rostro a un lado tocando por accidente con sus labios la punta de mi oreja, inmediatamente me estremecí ante su contacto, entonces susurró en mi oído:

—Me encantas Alan —susurró y luego estableció contacto visual nuevamente conmigo.

Yo seguí allí deslumbrada con él, era encantador, esos ojos, esos labios, la manera tan linda en la que me trataba me dejaba sin aliento.

—Yo...quería —trate de decir algo pero mi voz se apagó por completo.

—¿Tu querías qué? —me preguntó él y al mismo tiempo acariciaba mi mejilla con su dedo pulgar.

—Yo solo quería hablar contigo sobre.... —tartamudeando inteté decirle pero en ese mismo instante sentí su mano en mi nuca obligándome acercar mi rostro a él, tanto así que mis labios tocaron los suyos por instantes porque rápidamente me separé, pero entonces el se acercó mucho más hasta sentir la presión de sus labios contra los míos, sus manos bajaron suavemente hasta mis hombros y entonces sentí que se había detenido el tiempo que solo éramos él y yo. Todo en mí temblaba un extraño hormigueo que recorría mi cuerpo, era como de pánico y a la vez placer, mis ojos abiertos podían ver su rostro tan perfecto y alcanzaba a ver sus ojos cerrados, entonces cerré los míos y me dejé llevar. Sus labios acariciaban los míos con tanta ternura pero a la vez podía sentir que era un beso demandante y cuando se separó me encontaraba tan débil que dejé caer mi cabeza sobre su pecho, para no venirme abajo.

Fue increíble esa sensación, nunca pensé que podía sentir tantas emociones en un solo instante, me imaginé de mil formas mi primer beso pero nunca pensé que sería como este.
La sensación que sentí fue increíble, saber que estaba besando al chico que me gustaba y que él me correspondía fue maravilloso.
Nunca antes había sido capaz de dejarme llevar de esta manera, realmente no sabía si estaba mal o sí estaba bien solo quería quedarme allí .

—Realmente no sé si está bien esto, ahora tengo muchas dudas —dije en voz baja mientras retiraba mi cabeza de su pecho.

—Alan de verdad no creo que después de esto tengas dudas. No puedes imaginarte las ganas que tenía de besarte, y ahora no pienso dejarte ir —afirmó él mientras gentilmente acariciaba mis hombros.

—Creo que aún tenemos mucho de que hablar —agregué

—Y yo estoy dispuesto hablar todo lo que quieras —dijo mientras deslizaba sus dedos por mi brazo hasta tomar mi mano. Dándome una sonrisa de labios cerrados.

—Pero también creo que ahora no es el momento indicado. Aludé bajando la cabeza.

Pero antes de que pudiera responderme empezó a sonar mi teléfono interrumpiendo nuestra conversación.

Y de momento se detuvo mi respiración y todas mis emociones fueron cambiadas para una sensación de culpa. Era Isaac el que me estaba llamando, realmente no tenía el valor de tomar el teléfono pero sabía que debía hacerlo. No sé por que él siempre me hacía volver a la realidad.

Me decidí a tomar la llamada pero antes le hice una seña a Rodrigo de que no hablara, mientras él me miraba con ojos entrecerrados intentando averiguar porque siempre tenía esta reacción cuando Isaac estaba cerca.
Llamada:
—Dime —respondí intentando disimular lo inquieta que estaba.

—¿Oye dónde estás? ya va empezar el turno de la tarde —preguntó él con tono de preocupación.

—Sí ya voy en camino no tardo- agregué y rápidamente colgué el teléfono.

Esta situación me había hecho perder la noción del tiempo, el tiempo se había detenido para mí hasta que Isaac me hizo volver a la realidad.

—No logro entender tu relación con Isaac ¿por qué siempre cambia cuando él está cerca? —replicó Rodrigo un poco molesto por la situación.

—Mira Rodrigo ahora mismo no puedo hablar, necesito irme porque tengo el turno de la tarde y se me había olvidado por completo. Hoy por la noche tengo iglesia si quieres podemos hablar después del culto —sugerí y sin darme cuenta me despedí dándole un beso en la mejilla.

Realmente había pasado los límites con este chico cómo podía despedirme con un beso en la mejilla cuando antes ni siquiera quería tenerlo cerca.
Él se quedó allí parado mientras yo me alejaba. De camino al aula solo pensaba como había dicho de hablar con él después del culto si sabía que era algo casi imposible. Estaría Isaac, estaría todo el mundo mirando y comentando, realmente no sé dónde tenía la cabeza cuando dije eso.

Entonces llegué al aula y entré rápido viendo que aún el profesor no había llegado. Isaac me miraba directamente intentando averiguar dónde había estado y cuando se decidió a preguntar justo entró profesor.

****
Luego de clase Isaac y yo nos fuimos juntos porque Melodi y Rodrigo aún tenían clases, y como se nos estaba haciendo costumbre íbamos totalmente en silencio.

Al entrar a casa saludé rápidamente a mi mamá y subí las escaleras para mi cuarto quería estar un tiempo a solas.
No lograba sacarme de la cabeza el beso con Rodrigo, fueron tantas emociones en un solo momento que era imposible olvidarlo.
Y entonces me venía la cabeza lo estúpido que había sido quedar con él para hablar después del culto.

Y fue cuando se me ocurrió la idea de llamar a Melodi para planear algo ya que aún no tenía el valor de hablar libremente con Rodrigo.

Llamada:

—Hola Melody

—Hola amor que pasa

—Nada solo estaba pensando si cuando termines las clases puedes pasar por mi casa.

—Oye tan pronto ya quieres volver a ver a mi primo.

—No seas boba quiero que vengas tú sola ok. Ni se te ocurra traer a Rodrigo contigo.

—Está bien no te preocupes no llevo el amor de tu vida, paso por ahí cuando termine las clases besitos .Te quiero.

—Ok entonces nos vemos más tarde Besos.

Tenía que por todos los medios arreglar esta estupidez que había cometido.

Ya Alan está enamorada?
Como arreglará el problema en el que se había metido?
Pues para saber no te pierdas el próximo capítulo.

Quiero darle las gracias a los que me han leído y me han dado su apoyo no saben cuánto vale eso para mi.De verdad muchas graciasssss
Los quiero 💜😘😍