"Así que, el que piensa estar firme,mire que no caiga"
(1Cor.10:12)

Nunca pensé que me costaría tanto dormir por estar pensando en un chico, era imposible sacarlo de mi cabeza, sus ojos, esa manera de ser tan atrevido, estaba totalmente atrapada en su encanto, y tan solo lo había visto una sola vez. Luego de un largo tiempo puede quedarme dormida. Hasta que escuché el sonido más desagradable, la alarma eso significaba ir a la universidad. Era estudiante de Medicina de esas que se pasean con el estetoscopio al cuello, solo para parecer mucho más interesantes e inteligentes aunque eso no quiere decir que no lo fuera, solo era porque todas las de mi año lo hacían. Aunque a pesar de querer aparentar, siempre era diferente a las demás, la boba del grupo o la cristiana aburrida, por eso odiaba tanto la semana en la uni, si no fuera porque de eso dependiera mi futuro no me verían más en la universidad y no tendría que soportar los comentarios negativos. Lo único que me mantenía viva allí era Isaac y Melodi. Melodi era una amiga que conocí en la uni que aún sin ser cristiana era una excelente persona, era súper popular entre los demás pero se mantenía siendo mi amiga sobre toda las cosas, decía que en mí encontraba paz y no era igual a las demás. Era una chica súper guapa su pelo era castaño claro el cual caía a la altura de sus hombros y sus labios quedaban perfectos con labial, mucho más de rojo como siempre los traía, resaltaba su piel tan blanca, sus ojos eran cafés los cuales quedaban detrás de gafas para la vista que la hacían lucir muy cool.

—Alan vas llegar tarde, baja a desayunar —gritó mi mamá desde la cocina
Apurándome como siempre, bajé rápidamente y me despedí de ella, no acostumbraba a desayunar pero como siempre ella me quería obligar

—Alan desayuna

—No mami estoy retrasada —dije y con prisa cogí mi bolso que estaba tirado en el suelo

—Oye te cuidas

—Ok te quiero —dije y salí a toda prisa.

Fuera de mi casa estaba Issac, siempre íbamos juntos a la escuela vivía a una cuadra de mi casa, cuando digo yo, que éramos inseparables, a la verdad lo quería un montón.

—Oye pensé que no ibas a salir —dijo con cara de burla

—Isaac no es para tanto por favor.
Es que verdaderamente el maquillaje me robaba mucho tiempo, y decir que ese día me había decidido por algo sencillo, había resaltado mis ojos con un sombra naranja y un perfecto delineado, pinté mis labios de un rosa pálida casi natural para no quitarle la escencia a los ojos. En cuanto a mi uniforme aún abotonaba algunos botones de mi camisa, debido a que estaba retrasada salí con toda prisa.

—Qué crees pasamos por Melodi? —preguntó

—Si, no la queremos oír el resto de la semana protestando por dejarla votada —dije en tono burlón haciendo reír a Isaac.

Eso era casi perder el aliento cada vez que llegábamos a casa de Melodi era gritar hasta no poder más, de verdad no sabía en qué parte de la casa se metía. Luego de haber tocado varias veces y gritar por fin nos abren la puerta
Pero para mi sorpresa

—Hola
No puede ser, era él, qué estaba haciendo el chico nuevo en casa de mi mejor amiga, esto no puede estar pasando. Me quedé parada allí sin saber que hacer.

—Bueno y tú piensas quedarte parada allí hasta cuándo —preguntó arqueando un ceja y dibujando una sonrisa ladina de labios cerrados en su rostro.
Esas palabras hicieron eco en mi cabeza, las escuchaba, pero la única reacción en mi fue comenzar a ponerme muy nerviosa sin ninguna explicación.
No podía hablar solo estaba parada como una boba hasta que Isaac tuvo que hablar por mí, es que realmente las palabras no salían de mi boca

—Hola, ¿Melodi se encuentra ? —preguntó Isaac algo confundido

—¿Quién eres? —preguntó él

—Soy Isaac un amigo de ella y tú?

—Soy Rodrigo su primo. Parece que a tu amiga le comieron la lengua.
Nuevamente se enfrascaba en molestarame, claro, le era divertido verme así de perturbada.

—No, es solo que no habla con extraños —dijo Isaac algo molesto por la forma en la que me miraba este chico, sus ojos entre cerrados como analizando lo que estaba pasando, esta tensión en el aire. De alguna manera solía estar siempre a la defensiva cuando se trataba de mí.

—Podemos pasar —dijo nuevamente Isaac.

—Claro hombre —respondió Rodrigo en tono burlón

Isaac entró y subió las escaleras conocía perfectamente donde estaba el cuarto de Melodi
Yo por mi parte continuaba paralizada en el mismo lugar, sin saber que hacer ni como actuar, me sudaban las manos y temblaban, no podía controlar mis emociones quería pero no podía moverme. Esto era increíble, su primo, no, es que no puede estar pasando esto. Y que llevaba puesto? Era el uniforme de medicina , es que no era posible que fuera estudiante de medicina también. Yo ni me movía estaba paralizada y él no dejaba de mirarme, lo que me tenía muy incómoda así q decidí preguntar.

—Oye qué tanto me miras ? —dije en tono molesto .Pero por dentro era una tormenta de emociones estaba nerviosa, asombrada, inquieta, era demasiado para expresar en palabras.

—Es que eres muy.... nada olvídalo —respondió dejándome intrigada por saber que iba a decir
Así que decidí insistir:

—Muy que
La curiosidad se unió a mi tormenta de emociones, era muy que?, que podría estar pasando por su cabeza, acaso era lo que pensaba, diría que era muy linda, sería tan directo así. No tenía idea, solo quería saber.

—De verdad quieres que te lo diga —dijo mirándome directamente a los ojos, sus labios ligeramente levantados de un solo lado lo que dejaba ver una sonrisa sádica

—Ya empezaste, así que por favor podrías terminar —dije intentando disimular mi curiosidad y lo nerviosa que estaba ante su mirada tan penetrante.

—Ok tú lo pediste —respondió él

Este tipo estaba loco de remate comenzó acercase y no sé por qué razón esta vez no me alejaba, hasta quedar justo frente de mí, de seguro que mis mejillas estarían ruborizadas por tenerlo tan cerca, podía ver cada uno de sus lunares, y sus ojos regalaban una mirada intensa que me atrapaba por conpleto; podía sentir su respiración acariciando mi nariz que lograba oler el aroma su colonia varonil, estaba totalmente deslumbrada, fue hasta entonces que me di cuenta que había cogido un mechón de mis cabellos que estaba suelto a ambos lados de mi cara y jugaba con el dándole vueltas entre sus dedos, con esa expresión de burla q había visto en dos ocasiones en su rostro. Entonces desperté y no me quedo más q gritar.

—!Oye !,que haces suelta mi cabello —grité porque creí que de esa manera lograría ocultar lo nerviosa que estaba.

—Espera, que te digo lo que tienes tanta curiosidad de escuchar. Que eres muy .....fea —dijo sin más y comenzó a reír a carcajadas

Estaba sorprendida de como en su rostro se dibujaba una sonrisa para nada discreta, estaba divirtiéndose de mi cara de boba.

Ahí me di cuenta que era un gran inbécil lo empujé con todas mis fuerzas y fue justo cuando toqué su pecho y sentí sus músculos totalmente en forma, por un momento me quedé sin saber que hacer pero retiré rápidamente mis manos de su pecho, no sé ni porque pasó ese pensamiento por mi cabeza no lograba aclarar mis ideas.

—Qué pasa? te gusta lo que tocas —dijo de manera pervertida

—Aléjate de mi estúpido —le grité con todas mis fuerzas. Intentando alejarme lo más posible de él, no soportaría esa cercanía nuevamente entre nosotros.

Me adentré más a casa de Melodi sin mirar atrás, cuando sentí que me tomaban de la muñeca y tiraban de mi haciéndome retroceder hasta quedar justo frente a él.

—Por momentos me haces pensar que me tienes miedo, es la segunda vez que sales corriendo sin despedirte ¿crees que te dejaría escapar esta ves —dijo él

—!Súeltame! ¿Qué te pasa? por que razón actúas así, tú no me conoces —dije safando mi muñeca dentro sus dedos de un tirón. Estaba totalmente confundida, por mi cabeza pasaban miles de pensamientos que no me permitían aclara mis ideas.

—¿Eso cres Alanis, que no te conozco? —dijo él mirándome con ojos entrecerrados, analizando mi reacción.

—Qué pasa?.
Se escuchó desde las escaleras, era Isaac que intentaba descifrar la situación, tenía sus labios apretados y sus cejas levantadas, se notaba algo enojado.

Cuando escuché la voz de lssac me estremecí, estaba totalmente avergonzada de la situación, sabía que me tocaba un discurso luego cuando estuviéramos solos.

—Nada,no pasa nada —respondí rápidamente .

Estando segura de lo nerviosa que podría estar sonando, mi respiración agitada no me dejaba casi ni hablar, solo alcancé a decir esas palabras, mis manos temblaban las cual apretaba contra mis piernas para evitar que todos lo notaran.

—Tranquilo amigo solo le comentaba que era estudiante de medicina que si me podría ir con ustedes, a lo que respondió que si.
Ahí estaba él para hacer más difícil las cosas.
Gracias a Dios y Melodi se apresuró hablar dejando sin tiempo a Isaac de reaccionar.

—Claro que si eres mi primo con quien más te irías? Chicos este es mi primo que viene a pasar la uni acá, se va a estar quedando en mi casa. Rodri estos son mis amigos Isaac y Alan.
Melodi nos presentaba sin saber que ya por desgracia conocía a su primo.

—Mucho gusto. Espero que nos llevemos bien ,verdad Alanis?
Él siempre intentando dejarme en evidencia, no entendía la actitud de este chico me tenía confundida.

Yo para variar estaba sin poder moverme, intentaba controlar mi respiración agitada debido a todo lo que había pasado, así que preferí quedarme callada, no sé que tenía este chico que me hacía ponerme así.

—Mejor nos vamos ya, no queremos llegar tarde! —exclamó Isaac. En tono molesto

—Relájate amigo te veo tenso- dijo él de manera obvia que lo hacía para molestar.

—Qué es lo que le pasa a este? —dijo Isaac totalmente cabreado, sus mejillas estaban rojas y cada vez apretaba más los labios, sus puños estaban cerrados con fuerza a ambos lados del cuerpo.
No entendía el motivo de su reacción estaba algo fuera de lugar.

Esto no me estaba gustando nada, conocía a mi amigo solía ser paciente, pero no era nada agradable cuando lo hacían enojar así que decidí interrumpir cuando Melodi me quitó las palabras de la boca

—Vamos chicos dejen la bobería no pasa nada, nos vamos ok

Todo el camino estuve en silencio, no dejaba de pensar, era un río de emociones, acaso este chico me gustaba, como era posible? solo lo había visto un par de veces .
Sabía que estaba mal pero parecía estar loca donde quedo "Controlando tus emociones en vez de que tus emociones te controlen a ti " frase que amaba. Acaso donde estaba dejando a Dios dentro de mis pensamientos? Por qué estaba pasando esto? Sabía que este chico estaba desordenando mis ideas y no sabía por qué? Solo me repetía una y otra vez a mí misma que estaba mal.
Estuvimos todo el camino como nunca sin decir una palabra había mucha tensión en el ambiente, hasta que por fin llegamos y nos despedimos. Para mi suerte él era un año mayor, al igual que Melodi así que no me lo tendría que topar en clases. Pero sabía que había llegado el momento de que Isaac me preguntara por lo que estaba pasando, cosa de la que realmente no quería hablar.

—Alan que pasa, primero te pasas el domingo hablando con él al finalizar el culto. Y ahora hasta puede acariciar tu cabello? —me dijo con ojos gachos no lograba descifrar si era vergüenza o tristeza.

No sabía que había alcanzado a ver eso, así que no sabía que responder, realmente estaba avergonzada, para él era un chica que nunca dejaría que me hicieran eso. Es que ni yo sabía que me estaba pasando. Así que como siempre decidí hablar sinceramente con él, o quizás eso era lo que quería creer.

—No pasa nada, el chico me está molestando pero no te preocupes yo lo pongo en su lugar —dije dudando de mis palabras, realmente no sabía si sería capaz de ponerlo en su lugar.

—Estás segura que no está pasando algo más? —dijo mirándome directamente a los ojos como intentado encontrar respuestas en ellos

—De qué hablas ? —pregunté haciéndome la tonta a lo que parecía obvio. Si le permitía eso a este chico sin conocerlo que más podría ser.

—De que te guste, sabes que ni pensar en eso ¿verdad?
Al decir esto su expresión cambió ya no era tristeza era impotencia lo que podía ver en su rostro.

—Claro que no, acaso no me conoces. Yo sé lo que debo hacer Isaac no me lo tienes que recordar ok. No hables más tonterías y vamos a clases .
Inmediatamente esquivé el tema. Me sentía acorralada ante la pregunta de Isaac así que lo mejor era cortar el tema. Ya era suficiente con la lucha que tenía dentro de mí.
Sin más que hablar subimos al piso para el turno, el cual era de Introducción a la clínica como casi siempre a primera hora.

Realmente estoy perdida no se que me está pasando no me reconozco. Esto atormentaba mi cabeza todo el rato en medio de las clases. No pude prestar atención a nada. Hasta que por fin terminó el horario de la mañana.

Luego de haber terminado las clases de la mañana, me fui almorzar casi siempre iba con Melodi ya que Isaac se quedaba en el laboratorio, pero decidí ir sola ya que sabía que iba a estar con su primo y lo menos que quería era toparme con él, tenía que por todos los medios alejarme de él.
Estaba sola como casi siempre que no estaba con Melodi o Isaac. Cuando comienza a sonar mi móvil, número desconocido estaba insegura pero conteste.

*Llamada:
—Hola, Hola, Quién es?

Nadie respondía ,pero sabía que alguien estaba allí podía sentir su respiración del otro lado del teléfono, me quedé desconcertada por unos minutos intentado descifrar quién pudiera ser hasta que decidí colgar. Seguramente solo era un equivocado.
No habían pasado dos minutos cuando nuevamente sonaba mi móvil.
Número desconocido
Esta ocasión no pensaba responder así que colgué.
No sé que estaba pasando en estos días todo era extraño.
Cuando de repente me entra un mensaje.

*Mensaje:
—Estás segura de que no te conozco Alanis? Si es así, que me impide hacerlo?

No esto no podía ser como tenía mi número y quien se creía para escribirme así sin más.

Aquí les dejó el segundo capítulo esperó y les haya gustado.

No se pierdan el próximo hay cositas nuevas 😁💜

No olviden dejar sus estrellitas. Gracias.😁