―¡Destruiremos a cualquier equipo con el que nos crucemos! ¡ Será la manera más rápida de salir de aquí! ¡Solo los idiotas se aventuran a lo más profundo del tablero de la guerra para encontrar a un inexistente golem de la libertad! ―declaró abiertamente el segundo Alfil negro al grupo de oficiales que lo rodeaban.

Los peones que tenían su propio grupo, escucharon dichas aseveraciones.  

―¿Qué haremos si nos encontramos con la Suprema Comandante Camila? ―declaró el Peón Nº 01 al grupo completo de peones de su equipo negro.

―Haremos lo que ese cavernícola nos ordene, no podemos desobedecer, son las reglas. Solo espero que nos crucemos con otras razas extraterrestres ¡Prefiero suicidarme antes que matar a mi prometida! ―respondió con determinación uno de los peones.

Todos lo miraron con recelo escondido, en el fondo entendieron que para sobrevivir tenían que sacrificarlo en la primera oportunidad, ya que era altamente probable que, en un posible futuro cercano, los boicotee con el fin de salvar a su prometida.

―No te preocupes Matt, nosotros te apoyamos. ―Todos asintieron con un movimiento de cabeza.

―Hijas... ¡Fórmense en línea recta, es una orden! Parece que los tengo que educar ―exclamó con deleite el Rey negro, mientras miraba libidinosamente a la Peón Nº 06. 

TODOS LO MIRARON CON DESPRECIO.