Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 7. El último error


Era 30 de mayo. Se suponía que debían entregarme la nota del bendito examen, rogué para que la susodicha me diera una grata sorpresa, porque sino... podía esperarme lo peor.

Había pasado media hora y ya me habían dado la calificación, y como me suponía, rogar no me sirvió de nada. Había sacado un 5, estaba aprobado, pero para pasar el año debía haber sacado una nota mucho más alta, alrededor de un... 10, obligadamente... en teoría suspendí el año, y no sabía cómo se lo tomarían mis padres. Decidí que lo mejor sería ocultarles por el momento todo a mis padres. 

Una vez recogí mi nota, me fui directo a casa. Durante el camino me carcomí tanto la cabeza que al entrar por aquella puerta de roble barnizado me salieron estas palabras sin siquiera poder retenerlas, fueron tan repentinas, que incluso yo no fui la única en enarcar una ceja:

-¡Malos días!

-¿Todo bien Abril? ¿No tienes nada importante que contarnos a mí y a tu padre?- Comentó mi madre

-...- Tragué grueso. 

Seguramente ya sabían todo, y cómo no. La dirección nunca confíaba en nadie y lo primero que hacía era informar sobre la vida escolar, los cambios de personalidad, el descenso de las notas o cualquier cosa que los hijos intentáramos ocultar a nuestros patrones con tal de no llevarnos la reprimenda del siglo

-Abril, ya sabíamos tu nota, la directora habló primero con nosotros, y hemos decidido... que te cambiamos de instituto...- "Uf... qué alivio, pensé que... espera ¿¡Cómo!?" Y esa fue mi reacción al escuchar esas cuatro asquerosas palabras que no hicieron más que empeorar todo.

-¿Pero por qué mamá?- Intenté mantener la calma, quién sabe, igual me salían con otra "sorpresita" simplemente por levantarles la voz un poquitito.

-Porque desde que eras pequeña te ha ido mal en ese recinto, y pensamos que un cambio de ambiente no te haría daño.- "Pirqui disdi qui iris piquiñi ti hi idi mil in isi ricinti... agh" Estaba tan concentrada en hacerle burlas a mis padres que no fue hasta más tarde que me di cuenta de la gravedad de la situación

-Espera... ¿C-cambiar de ambiente? ¿Q-quiere decir que...?

-Nos mudamos.

-¿¡Están locos o que les pasa!? ¿¡Acaso os habéis oído!? Ambos nacieron aquí, crecieron aquí, se conocieron aquí, formaron su vida aquí, se casaron aquí. Literalmente todos vuestros mejores momentos están en este lugar. Los cimientos de vuestra vida entera se construyeron aquí, los abuelos de los abuelos de sus abuelos hicieron aquí su vida, y yo quiero hacer lo mismo.- Dije más alterada de lo que tenía planeado.

Sinceramente, en ese momento pensé que mis padres me concederían ese deseo que me prometieron desde pequeña. Ese que nunca pedí y guardé con tanto anhelo para en un futuro usarlo cuando realmente lo necesitara, creyendo que mis padres me lo concederían y que harían lo imposible por lograrlo. Pero entendí que mi visión sobre ellas había sido completamente errónea. 

Pensaban que estaban haciendo lo mejor para mi, pero realmente solo se preocupaban por ellos mismos. A fin de cuentas, eran ellos los que querían estar en otro lugar, no yo.

-No puedes cambiar nada Abril, nos mudamos y punto.- La decepción se reflejo en mis ojos.

Mi madre sólo desvió su mirada, y mi padre me mandó a mi cuarto a hacer las maletas de la manera más fría posible.

No podía hacer nada contra la opinión de ella, y menos si él también pensaba que era lo correcto de igual forma.

Antes me preocupaba suspender el año, porque de esa forma ya no estaría en la misma clase de Níquel, pero ahora  estaría a miles de millas lejos de él.

"¿Y si se olvida de mí? ¿Y si llega una chica nueva, guapa, lista, mejor que yo y se enamora de ella?" Mi mundo se desplomaba más rápido de lo que pensaba.

Tras unos minutos preparando las maletas...

20:00pm. 

Habíamos empezado nuestro viaje, la carretera daba mucho miedo y estaba oscureciendo.

Era tanta la negrura que inundaba los largos caminos de asfalto, que literalmente no se veía nada. Mi única distracción era la conversación que estaba manteniendo con Nick por WhatsApp;

Nick
Te extraño mucho Abril, han pasado solo unos minutos y tu ausencia es muy notoria...

Abril
Yo también te extraño Níquel, y me rompe el corazón tener que alejarme tanto de ti, no sé que se les pasaba por la cabeza a mis padres a la hora de decidir esta locura...

Nick
Te quiero...y mucho, me hubiese gustado despedirme de ti en persona princesa...

Abril
Nicky... tengo miedo...

Nick
¿De qué? Sabes que puedes confiar en mí, ¿Verdad, linda?

Abril
Buf... Okey, tengo miedo... de que te olvides de mí, y sí ¿Llega una chica nueva? Más atenta, cariñosa, linda... mejor que yo... ¿Y sí por culpa de mis estupideces, por las que no acepté tu propuesta, te enamoras de ella y te pierdo para siempre?... sé que suena muy egoísta, pero ahora me doy cuenta del gran error que cometí...

Me arrepentí de mandar aquel mensaje, al final, por más que quisiera... sí era egoísta...

Abril

Lo siento... olvídalo... simplemente haz tu vida, olvídate de mi, será lo mejor que puedes hacer... :).

Nick
Princesa... no me voy a olvidar de ti, y si llega una chica nueva; prometo que no me fijaré en ella... sí, quizá fuiste un poco... bueno... y cometiste un error, pero mi corazón te pertenece a ti. Quiero que te quede claro una cosa, ni aunque me lo pidas me olvidaré de ti... Te quiero Abril

Abril
Gracias, y yo a ti❤

Realmente le necesitaba, siempre estaba levantándome el ánimo...

En lo que levanté la mirada me percaté de que habíamos entrado en una zona que no me gustaba para nada... estaba todo muy oscuro, incluso más que antes, no había ni una luz... todas estaban rotas, y eso era indicio de que esa carretera había estado abandonada por el ministerio durante muchos años, además el camino era largo, muy largo.

Tras un espantoso recorrido en el que los faroles no hacían más que parpadear como en esas películas de terror de Hollywood, nos encontramos con la primera y única luz sana. Pero la situación empezaba a salirse de control; mis padres discutían, y se podía observar que era una de esas pocas peleas en las que, si no fueran humanos, ya se habrían desgarrado el uno al otro.

Además, al ver el rostro de mi hermano (situado al otro extremo del coche, junto a la puerta derecha), pude comprobar que estaba igual o incluso más asustado que yo. Por suerte yo no escuchaba nada de todo aquel desmadre, los cascos con música a tope me lo impedían, y es que en viajes tan largos como estos me relajaba demasiado desconectarme del mundo de ese modo. Y aunque no podía oír nada, sí que podía ver, y los aspavientos que mis padres realizaban con fiereza solo eran sinónimo de que aquello había empeorado.

Fue entonces, cuando mi padre, desesperado por tener la razón en la discusión y sanjar el tema con lo que él decía como siempre, soltó el volante para utilizar ambas manos para expresarse de manera bruta y agresiva. No podía quitarles la mirada de encima con el terror recorriendo mis entrañas, el sudor frío deslizándose por mi frente, y miles de imágenes de un desastroso accidente dibujándose en mi mente. 

Y tan solo minutos después, ocurrió. 

Mi padre no pudo tomar el control del carro, que se desvió hacia el otro oscuro carril, por el que venía algún imbécil sin las luces puestas. Ambos coches colisionaron estruendosamente, todos salimos despedidos de los asientos y acabamos desparramados por el suelo. 

Yo volé (N/A: Y voló, y yo volé con él, y volé por el arbolao :V) bastante lejos del resto de cuerpos, inertes o no, que descansaban en el asfalto. Me di un golpe lo suficientemente duro como para desmayarme al instante. Tiempo después, no sé cuánto pasó, volví a despertar viendo aquella imagen tan escalofriante de todos los trozos de coche esparcidos por el suelo, el carro del otro tipo en llamas, mi hermano siendo aplastado por la puerta de nuestro propio vehículo.

Mi piel se erizó y, a pesar de que todo me dolía, saqué las fuerzas suficientes como para levantarme y caminar arrastrando mis pies cual zombie en The Walking Dead. Pasé por al lado de los cuerpos de mis padres, y algo me dijo que no habían salido bien parados de eso. No quise llorar, no en ese momento. Mi hermano me necesitaba fuerte y estable, y sobretodo necesitaba confiar en que sus papis volverían con él cuando se recuperaran...

Me acerqué a él e intenté sacarle aquella pesada puerta negra de encima, pero fue en vano. Estaba siendo fuerte y resistente, pero habría sido un milagro el poder levantar  12 kilos de una. Así que opté por arrastrarlo a él con cuidado

-Toby, por dios despierta... ¿me escuchas?- Comencé a moverlo desesperadamente esperando una respuesta, una señal de vida, de su parte y la conseguí. Suspiré aiviada- Toby, escúchame, todo irá bien ¿vale?, llamaré a la ambulancia- si es que conseguía alcanzar mi teléfono destrozado que estaba a poco de distancia de mi. Pero ya estaba agotada, no creía poder llegar- y vendrán por nosotros

- Pero... ¿Y... mamá? ¿Y papá?- Sabía que estaban heridos gravemente, quizá hasta muertos, pero no es lo que él necesitaba escuchar en ese momento

-Ellos... ellos estarán bien, no te preocupes, tu... tu solo intenta no dormirte... no... no... te duermas...

Pero fui yo la que acabó rindiéndose ante el dolor y esas inmensas ganas de dormir, lo último que escuché fue la distorsionada voz de mi hermano:

-¿A-abril?, ¡Abril!...

No podía aguantar, me sentía débil y mi cuerpo no se retendría por mucho más tiempo, pero tenía esperanzas en que todo saldría bien. 

La ambulancia venía en camino, ya podía oírlos; paramédicos, policías... Se acercaban y no entendía cómo se habían enterado.

Entonces mi cabeza cayó de lado, dejando la fuerza atrás, y vi que mi brazo estaba estirado y mi dedo corazón había caído justo en el botón de llamada de emergencia, y al instante me dejé llevar, me dormí.

Eso. Eso sí que había sido un milagro.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro