No siquiera se dio cuenta de la hora, ni el tiempo que llevaba ahí.

Sus fluidos mezclados, los jadeos continuos y el sonido de la cama rechinando

Dan sintió un líquido llenar su interior y un gruñido grave del pelinegro.

—Mierda. —susurro Jaekyung al ver que el condón se había roto.

Bueno, no se perjudicaba mucho.

Amaba la vista de su semen saliendo del interior de Dan.

El único ligeramente preocupado por todo eso fue el mayor, quien miro con temor al pelinegro.

—¿Fue lo que creo que es? —pregunto Dan confundido.

Jaekyung asintió orgulloso y solo recibió un leve golpe en el pecho.

—El médico dijo... —susurro Dan, pensando las peores posibilidades.

El menor solo se levantó de la cama y se dirigió a la ducha.

—No te alteres Dan, no pasará nada. —hablo él. —Ven, vamos a bañarnos.

El mayor negó con la cabeza, si iba con Jaekyung solo significaba una cosa.

Más sexo...

Todo su cuerpo dolía, estaba cansado y con hambre.

No toleraría encerrarse unas horas más con el pelinegro.

Definitivamente no.

Jaekyung al no verlo avanzar se acercó a él, con el fin de molestarlo.

—¿Qué pasa Kim Dan? —sonrió el menor al ver al pelicastaño ligeramente sonrojado. —¿Hay algo que te incomode?

El mayor, se acurruco un poco y empezó a balbucear incoherencias.

—¿De verdad nos vamos a bañar? —preguntó Dan tímidamente.

Jaekyung rió por un momento, las reacciones del mayor lo estaban divirtiendo.

Su rostro rojo, su mirada desviada y su cuerpo temblando ligeramente.

Era obvio lo que el otro pensaba.

"Oh pequeño pervertido" dijo mentalmente Jaekyung.

—Claro, ¿qué más se podría hacer en la ducha? —preguntó el pelinegro. —O... ¿Deseas hacer algo Kim Dan?

Dan bajo la mirada, notoriamente avergonzado.

—Umm, nada. —susurro él tímidamente. —Pero, promete que solo nos bañaremos, ¿verdad?

El menor rió ante lo dicho.

—Es obvio que si. —contesto Jaekyung, tomando con "delicadeza" a Dan y llevándolo a la ducha con él.

—Es relajante, ¿verdad? —preguntó el pelinegro al sumergirse en el jacuzzi.

El pelicastaño no podía afirmarlo realmente, nunca había usado uno.

Cuando había mencionado sobre bañarse, pensó una ducha, no un jacuzzi.

Y se encontraba apoyado en la esquina, lo más lejos de Jaekyung y dándole la espalda.

El menor sonreía, definitivamente era una hermosa vista.
Hasta le daban ganas de unas cuantas rondas más.

Negó lo pensado, llevaban horas haciéndolo y definitivamente una vez más y Dan se desmayaria.

De solo pensarlo, le daba pereza, el tener que llamar al médico, limpiarlo por su cuenta o simplemente cargarlo a su habitación.

Algo extraño pasaba con él, nunca se había puesto a pensar en alguien después del sexo.

Nuevamente, negó mentalmente, concentrándose en la persona que tenía adelante.

Jaekyung lo acercó un poco, haciendo que Dan salte ligeramente por la sorpresa.

—Ummm... —susurro el pelicastaño. —Usted dijo...

¡Oh por favor!
Sabía que no debía ingresar a la ducha que en realidad era jacuzzi con Jaekyung.

—Solo te voy a lavar el cabello. —mencionó el pelinegro. —Te vez incómodo.

Dan suspiro, definitivamente el menor lo estaba poniendo nervioso.

¿Acaso era una imaginación suya? ¿O Jaekyung lo estaba provocando?

El pelinegro simplemente sobo los cabellos de Dan, masajeando y dejándose llevar por la suavidad de él.

Para ser pobre, tenía muy bien cuidado su cabello.

Enjuago con cuidado, pudiendo sentir un fino olor a fresas con flores.

Dan poco a poco iba relajandose, cayendo en el pecho del pelinegro.

—Tiene razón. —susurro el mayor. —Es relajante estar así.

Jaekyung sonrió, definitivamente se estaba acostumbrando a la presencia de Dan.

En un instante cambio su semblante, ¿a qué se refería con eso?

¿Acostumbrarse a una persona?

¡Que tremenda idiotez!

Separó a Dan de él, y salió de la ducha ligeramente fastidiado.

—¿Paso algo? —pregunto el pelicastaño confundido.

—Nada, tengo algo que hacer. —habló Jaekyung para luego salir del lugar.

El pelinegro se fue a la sala, después de cambiarse y limpiar su habitación.

Comió una fruta y puso una película que lo ayudaría a concentrarse en sus pensamientos.

El sonido del celular vibrando, obligó a Jaekyung a contestar.

—Dime. —habló simplemente el pelinegro.

—Jaekyung... ¿Viste las noticias?

Ante tales palabras, Dan, que pasaba por ahí, escucho y se asustó.

Su mente comenzó a imaginar las peores cosas que podían existir.

Una de ellas, fue el hecho de que lo descubrieran "preparándose" en el auto de Jaekyung.

Él había dicho que las lunas eran polarizadas, ¿alguien los había visto?

Luego imagino, si alguna vez los vieron besarse.

Dan se encontraba confundido, incluso culpable.

¿Por qué los peores escenarios tenían que relacionarse con él?

—¿Qué pasó? —preguntó Jaekyung al ver a un tímido y asustado, Dan.

Sinceramente a él no le importaba nada.

Hablaron de su lesión, pero él se encargó de demostrar que era un campeón.

Si alguien mencionaba que lo vieron besando o haciendo algo con Dan, tampoco le molestaría.

En el siglo que se encontraban, casi todo era aceptado. Incluso las relaciones poliamorosas.

Además, él no era gay, si no, bixesual.

Y cualquier otra cosa, no se le ocurría nada.

Los combates oficiales habían parado, por el asunto de los embarazos masculinos y la afección de hormonas.

Cada atleta, incluyendo mujeres, se encontraban realizándose exámenes para verificar si había algún cambio importante en sus cuerpos.

Entonces... ¿Cuál sería la "sorprendente" noticia?

Continuará...