|24| Yoon-Gu
Tan pronto Dan despertó, sintió un fuerte dolor de cabeza seguido de todos los recuerdos en su mente. Yoon-Gu ya no estaba en esa habitación, así que de manera tranquila posicionó su rostro sobre la almohada y dio un grito ahogado que estaba reteniendo desde hace algún tiempo.
Más tranquilo bajó a la cocina dónde encontró al pelirrosa con el menor en una situación algo comprometedora, pero se separaron inmediatamente al ver como Dan iba retrocediendo lentamente.
—-Oh, no quería interrumpir —- susurro el pelicastaño —- Lo siento.
El pelinegro rio, golpeando ligeramente el abdomen del actor —- No te preocupes, es culpa de Heesung.
Al momento de desayunar, pronto los recuerdos volvieron a su mente.
Flaschback...
Tan pronto como salió de ver a su abuelita, suspiro con algo de dificultad.
Su primer plan era pasear un poco para luego volver a casa, pero se vio interrumpido al chocar contra el pequeño pelinegro quién se encontraba distraído.
—-¿Yoon-Gu? —- se preguntó Dan al verlo -— ¿Qué haces por aquí?
El menor saludó animadamente, para luego hablar —- Mi médico vino a este hospital, solo quería consultarle algo.
El pelicastaño asintió ante eso —- ¿No vienes con Heesung? —- preguntó este sin intenciones de incomodarlo.
El menor negó ligeramente, frunciendo el ceño —- Por cierto... Tienes tiempo, me gustaría que me acompañes.
El mayor asintió sin ningún problema, mientras más tiempo estuviera fuera, mejor.
Todo pasó tan rápido que no le dio tiempo para asimilar que ya se encontraban fuera del hospital.
—- ¿Quieres ir a tomar algo? —- preguntó sonriente el pelinegro —- Tengo la tarjeta de Heesung —- dijo señalando ese pedazo de metal precioso.
El mayor negó inmediatamente avergonzado, sintiendo como el más pequeño tenía algo tan valioso, le hacía sentir mal el hecho de gastar demás.
—- Vamos Dan —- susurro el menor haciendo un puchero con la mirada de cachorrito —- Aún no quiero volver a casa —- dijo con una mirada de desagrado.
Luego de unos minutos de silencio, el mayor volvió a negar haciendo que el pelinegro bajara la mirada.
—- Oh, lo siento por insistir —- susurro el pelinegro —- Seguro Jaekyung debe estar esperando y estoy incomodando. ¡No vemos luego!
El menor estaba listo para irse cuando sintió como el pelicastaño tomaba su mano y asentía —- Vamos a comer algo —- dijo firmemente, sorprendiendo a Yoon-Gu, quien solo sonrió extrañado.
Ambos, caminaron lentamente hasta llegar a un restaurante que tenía buena fama por ser tanto elegante, privado y con comidas deliciosas.
El pelinegro aburrido, pidió algo que podía tomar, no algo que quería pero pidió un poco de licor dulce para Dan porque pensaba que tomaba normalmente.
—- Pareces peleado con Heesung —- susurro Dan después de ese primer sorbo de licor, sin querer fastidiar al menor —- Disculpa que toque el tema así, no se qué me pasa.
El pelinegro solo alzó los hombros, restándole importancia.
—- Yo siempre me peleo con él —- suspiró el pelinegro con la mirada fruncida —- Lo extraño aquí es, tú y Jaekyung.
El mayor se encontraba sorprendido pero solo asintió, tomando más de esa bebida y pidiendo al mesero una botella entera.
—- ¿Está bien que pidas tanto? —- preguntó el menor —- Yo no puedo tomar.
El pelicastaño asintió —- Tengo buena tolerancia al alcohol.
El menor no dijo nada más, solo puso los ojos brillosos cuando vio esa lasagna caliente venir a su mesa con ese vaso de maracuyá.
—- ¡AH! —- gritó frustrado Dan, asustando ligeramente al pelinegro —- Joo Jaekyung es un completo idiota.
Yoon-Gu rió ligeramente, confirmando eso —- Eres muy bueno para un idiota como él.
El pelicastaño golpeó ligeramente la mesa con su vaso, disponiéndose a tomar más y afirmando lo que dijo el menor.
—- Sus cambios de humor me tienen harto —- gruño casi en un susurro este —- Ni que estuviera afectado por hormonas o embarazado.
El pelinegro se sorprendió ante esa nueva faceta de su amigo, nunca pensó verlo tan... ¿Molesto?
En definitiva algo muy grave había hecho el pelinegro.
—- Es tan cambiante que... Agh —- continuó frustrado el mayor —- ¿Sabes? Me pidió ser enamorado o una mierda así.
Disimuladamente, Yoon-Gu escondió la botella que el pelicastaño había pedido.
—- Y después, unas malditas horas después —- dijo mientras apretaba los puños —- Coquetea con un jovencito y me grita por una estupidez.
El pelinegro abrió los ojos sorprendido, acercándose más a la mesa, escuchando atentamente todo lo que este le decía.
—- Me gritó porqué le dije "amor" —- gruño Dan —- ¿Qué? ¿Acaso es un pecado?
El menor puso mirada de asco, juzgando internamente a Jaekyung pero también sintiendo como el pelicastaño se apresuró mucho.
—- Yo aún no le digo así a Heesung —- mencionó el menor —- Me da asquito esa palabra, pero... ¿Gritarte por eso? ¿No debería alegrarse?
—- Eso mismo le dije —- asintió frustrado el mayor —- Pero solo dijo que no le dé problemas.
El tiempo pasó, con Dan contándole más detalles de lo sucedido y Yoon-Gu enfadándose más con alguien que antes admiraba.
—- Joo Jaekyung no te sabe valorar —- mencionó el menor —- No lo vuelvas a tratar con cariño, así que se joda. Trátalo como él te trata.
El mayor negó avergonzado —- Me gustaría, pero no puedo... Mi corazón no me lo permite.
El pelinegro suspiró intentando buscar las palabras correctas para refutar el pensamiento de este.
—- A mi también me gusta Heesung —- mencionó el menor —- Pero le dije a mi estúpido corazón que le trate como la persona qué es.
Dan, miró sorprendido al menor, sintiéndose curioso por algo —- ¿Y cómo es?
Yoon-Gu inhalo, necesitaría mucho oxígeno para describirlo —- Es un idiota mentiroso, que nunca tiene en cuenta mis sentimientos, se hace el importante, siempre quiere arreglar todo con sexo, coquetea con cualquier cosa que se mueva aunque prometió no hacerlo, me da la culpa de varias cosas, no quiere que me acerque a nadie, celoso, posesivo, abrumador y cuando lo decía hasta intimidante.
—¿Qué yo soy qué? —- preguntó un pelirrosa que "curiosamente" pasaba por ahí, con una sonrisa fingida pero una mirada molesta.
FIN DEL FLASHBACK
Con solo recordar eso, Dan tembló ligeramente, no sabía en qué había terminado esa discusión pero no parecían llevarse mal.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro