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Parte 43 (Devuelta a casa)


Antes de comenzar me gustaría decir un par de cosas.

1- Me disculpo rotundamente por mi larga, larga, pero ahora si, MUY larga ausencia con esta historia. Digamos que he tenido muchos impercances.

2- La narrativa de esta historia cambiara ¿Y que quiero decir con esto? Pues ya no pondré  los típicos diálogos de 

"X personajes: ....."

Nop, ya no más, me acostumbre ahora en hacerlo con un guion ahora más simple. Puede o no, no lo se, que los capítulos anteriores los vaya cambiando para que todos estén iguales.

3 - Tengo otras historias al pendiente, así que podre demorarme un poco en actualizar, pero les asegurare que no volverá a pasar de perderme por varios meses, o al menos haré mi mejor esfuerzo.

Sin más nada que aclarar, disfruten del capítulo (^◡^ )





Continuación:

Narradora:

—¡Hay no, hay no, hay no! — murmuraba con total nerviosismo y paranoia la villana con ahora nuevamente tomado el aspecto de su jefe — ¡Esto es malo, esto ahora muy muy malo! ¡Demonios, y justo cuando creí que todo no podía salir más del asco!

—¿Cariño estas bien? — se escuchó la voz de Veronica del otro lado de la puerta. Sin esperar nada, cerro con seguro la puerta y aguanto su furia insaciable hacia esa mujer para fingir ser Black Hat lo mejor que le saliera.

—Haaa si, sí, todo está...malvadamente bien — hablo con aquella gruesa voz que la hacía enloquecer — ¿Qué diablos? Black Hat nunca diría algo como eso... ¿O sí? — dijo para sí misma. Miro su propio cuerpo inerte en el suelo, estaba entrando en pánico.

Los nervios le ganaron, tomando su propio cuerpo para salir corriendo lejos de la mansión, saltando por la ventana; el poderoso cuerpo de Black Hat resiste hasta una bomba nuclear a su lado, era evidente que caer del piso de arriba no era nada.

Apresuro su paso con su cuerpo en hombro, deteniéndose por un pensamiento un tanto irónico.

— ¡¿Qué rayos? Pude haberla matado en ese instante! — hablo en alto y con enojo. Retrocedió con la intención de volver a la casa en forma de sobrero — No, no, no — retrocedió — ¿Qué pasa si me embruja? estaríamos oficialmente perdidos! — medito la situación con total temor — ¡Agggh al diablo! — refunfuñó con fastidio, decidida a correr con la gran agilidad y poder de Black Hat que en menos de un minuto llegaron a la casa de Alan. Lo difícil ahora era explicarle a Flug lo que había ocurrido — ¿Me creerá si le digo que por accidente termine a dentó de la mansión? — hablo consigo misma —¡¿Pero que estoy diciendo? Claro que no, es un genio, no un idiota — volteo su cara, mirando nueva cuenta su cuerpo aún desmayado, Demencia supo que intentar hablar con Flug era el menor de sus problemas, frunció el ceño para finalmente armarse de valor y tocar un par de veces la puerta de la casa.

5.0.5 la abrió con su característica amabilidad de siempre, no obstante su expresión alegre cambio uno muy aterrorizado apenas contemplo con sus propios grandes y adorables ojos a un Black Hat en la puerta, con el aparente cuerpo de Demencia.

— ¡BAAUUWW! — chillo con pavor, cerrando de un portazo la puerta otra vez, Demencia bufo de lo absurda de la situación, pero no era su culpa, por obvios motivos el pobre osito no sabía de su cambio de cuerpos por segunda vez.

La abrió la entrada de una sola pata, destrozando por completo la puerta de madera fina de está. Al entrar, se postro con la imagen de Flug y el oso, abrazándose y temblando de horror, suponiéndose ya que su hora había llegado, reforzando aquel conocimiento al ver como su ahora ex jefe cargaba el cuerpo de Demencia, esto hizo que los ojos de ambos lagrimearan.

— S-Señor — susurro con todavía más pavor el pobre científico — sé que no nos recuerda y todo, p-pero...¡Por favor, no nos mate! —suplico en un chillido.

Demencia rodó los ojos enseriándose.

—No soy Black Hat, nerd — hablo Demencia en el cuerpo del más grande, y fue ahí donde el científico lo comprendió. Su tono, su forma de expresarse, más el cuerpo cargado fueron quienes la delataron sin la necesidad de explica más.

—¡¿Demencia?! — pregunto perplejo, acomodándose sus goglees oscuros —¡¿Eres tú?! — se levantó del suelo, haciendo que 5.0.5 imitara su acción.

—Ejejeee...sorpresa~ — intento ligerar el ambiente con su icónica sonrisa, siendo ahora un poco alterada al tener literalmente la sonrisa de Black Hat; siendo ahora está un poco forzada.

—¡GRRR CHAMACA INVENTORA! ¡¿Qué hiciste ahora?! — la cuestiono con una gran ira en su tono.

—No fue mi culpa lo juro. Pase sin darme cuenta por la mansión y...— se excusaba la joven, rascándose el cuello para buscar paz mental.

—¡No, no, no. No quiero oír ninguna de tus excusas! — Seguía en su sermón —Mejor entra y explícame mejor las cosas ¡Sin mentiras! Mientras que yo te analizo para hallar una explicación a todo esto — propuso el chico de la bolsa de papel. Asegurándose de acomodar lo mejor posible la puerta principal e ir a lo que era "Una laboratorio improvisado"

Al cabo de un rato, y una serie de revisiones, Flug dio su veredicto.

—Así que dices que solo lo tocaste y al instante el jefe y tu cambiaron de cuerpos ¿No? — seguía en su interrogatorio, junto con su chequeo, mirando el fondo de la boca de Black Hat con un paleta de manera.

—Seee — contesto con ya un gran fastidio la chica a atrapada en la caratula masculina —No sé cómo paso.

—Bueno. Al comprobar tu cuerpo — señalo su carcasa acostada a su costada quien en la conciencia era Black Hat —y el de Lodr Black Hat — te apunto a ti —Veo unas mini-partículas esparcidas por todo sus cuerpos, algo de lo que ya anteriormente te mencione — hablo mirando en su microscopio — solo que ahora con su contacto espontaneo se formó una capa más homogénea de manera invisible, haciendo que los efectos del mismo brotaran a la luz sin la utilidad del rayo. Provocando así el cambio de sus cuerpos nuevamente — explico con deleite el hombre de ciencia.

—¿Y ahora qué hacemos? Apenas Blacky se despierte estará tan confundido que no lo pensara dos veces en atacarnos — señalo su cuerpo noqueado.

—Podría darle una serie de tranquilizantes...pero sería muy arriesgado si contamos los efectos del rayo en proceso — se frotaba la barbilla encima de la bola, pensado mejor las circunstancias —Ya se. Con solo volver a dispararles, cambiaran automáticamente a sus respectivas carcasas.

—¡Así podremos curar a Black y salir de una vez de esta pesadilla! — sonrió con sus colmillos a la luz de la alegría.

—En efecto — asintió Flug, casi igual de emocionado, solo que él se mantenía controlado para no tener que arruinar absolutamente nada —Dame un momento para buscar el rayo y ¡BUM! Asunto arreglado — salió feliz el chico, dejando a Demencia al cuidado de su propio cuerpo.

Ella no pudo evitar darle la mirada, visualizando como ella misma estaba ahí, respirando profundamente y con tranquilidad. Sus ganas de acariciar su mejilla con tal de saber que era su amado la invadían, pero tenía miedo de volver a provocar otro cambio más repentino y otorgarle más daño, decidió quedarse quieta, y por primera vez en toda su vida, obedecer al ñoño de su compañero para no tener que provocar otro problema.

—Descuida, mi horrendo horror...pronto saldremos de esto~ — susurro para ella y a Black, sonriendo en el proceso.

Ya su compañero se estaba tardando...demasiado en realidad, haciendo que Demencia se impacientara cada vez más, pero se mantuvo al margen de todo.

"Que aburrido era portarse bien" — pensaba la jovencita.

Al poco tiempo de pensar seriamente y buscar a su amigo, apareció él, con una cara llena de preocupación. Eso también asusto a la chica.

—D-Dem hablo de una forma casi ahogada —No esta~ — fue todo lo que dijo.

—¡¿Cómo que no está?! — se levantó la chica con aspecto del demonio, con la energía repleta de angustia que esparcía el doctor con su noticia.

—N-No esta...salimos tan atropelladamente de la mansión que debí de olvidarlo — se tocaba la cabeza con las pupilas dilatas del miedo.

Ambos parecieron estar en un callejón sin salida. No podían poner un pie en la mansión sin ser atacados nuevamente, no obstante, un plan ya se le estaba formulando a Flug y Demencia al mirarse mutuamente, junto con la imagen del cuerpo de la chica peliverde dormida.

—Debemos de volver a nuestra casa — hablo sin miedo alguno la chica con el cuerpo del hombre todo poderoso.

—¿Estás segura de eso? — seguía sin estar seguro aun.

—No...— se sinceró la chica —pero tampoco es que tenemos muchas opciones — alzo sus brazos incrédula, sabiendo que tenía razón.

Flug frunce el ceño, tomando uno de los lápices y papel más cercanos que tenía.

—Bien — posiciono la punta del grafito en el lienzo blanquecino —pero si vamos a entrar...debemos de tener un plan, y quiero que lo sigas. No más improvisaciones, no más juegos. Esta puede ser una verdadera oportunidad para salvar al jefe de las garras de esa mujer desquiciada ¿Confió plenamente en ti? — le pregunto con seriedad.

—Confía plenamente en mi — cerro sus ojos al hablar. Si para salvar a su amado jefe debía de comportarse seria. Sería la más seria de todas las serias.

—De acuerdo...

Asintió para proseguir a explicarle lo que tenía en mente.

Después de muchas altercados y lluvias de ideas llegaron al fin a una decisión.

10pm en la Mansión Hat.

Ya hacían dos villanos más su oso afuera de la construcción, visualizando y analizando bien la mirada. Entrar no era sencillo, pero con las habilidades de Demencia junto con la capacidad física que ahora poseía, era más que suficiente para poder cargar su cuerpo, el de Flug y el de 5.0.5 en su brazo izquierdo, siendo el derecho con el que trepaba una de las pareces traseras de la casa.

Fueron los más discretos posibles. Llamar a Alan y pedirle que los ayudara a desactivar el sistema de seguridad junto con un par de cosas más era efectivo, pero no correrían el riesgo de que lo atraparan en el acto, ocasionando posiblemente el fin su plan, y muy probablemente el de ese joven creador.

Al colarse por unas de las ventanas, se dieron cuenta que cayeron en un corredor un tanto apartado. Flug se aseguró de que nadie estuviera a la vista para caminar con el más absoluto de los cuidados, provocando que de vez en cuando corrieran. Desconocían el paradero de las personas dentro de la casa, ocasionando que la situación se vuelva más cuchicheante y temerosa. Con solo doblar una esquina podían toparse con el peor de los personajes. No debían de cometer ni el más mínimo error al caminar, trotar o correr.

—Síganme, por aquí~ — hablo en un susurro Flug, mirando a su equipo para dar la orden de caminar. Teniendo arma en mano por si la situación lo ameritaba, pero algo no estaba saliendo según a sus pensamientos.

—Mhh~...¿Qué...Que pasa?~ — hablo con dolor y soñoliento el cuerpo de Demencia, siendo claramente Black Hat quien estaba recuperando la conciencia.

El equipo entero se paralizo, más Demencia al cargarlo entre sus brazos. En medio del pánico y el miedo, no tuvo más que solo proporcionarle una buena cachetada a su propio cuerpo, provocando así que volviera a caer en la inconciencia total.

—¡Demencia!~ — susurro algo alto en su regaño.

—¡¿Qué demonios querías que hiciera?! ¡Era una emergencia! — se excusó la mujer.

El científico refunfuño, pero ceso al ver que apesar de que no fue tan ética la solucón, fue totalmente útil para mantener sedado e su jefe, y más viéndose en aquella situación de vida o muerte.

No le dieron más lata a la cuestión para seguir caminando en silencio, cruzando una de las esquinas para que hacia un par de metros más pudieran llegar al laboratorio.

Todo estaba marchando según lo planeado, parecía que al fin el equipo Black Hat estaba por triunfar a la primera...sin embargo, algo se les cruzo por el camino, topándose ciertamente que se le erizaron cada vello de sus cuerpos a tenerlo cara a cara...

Continuara:











Sé que lo dije antes, pero lo volveré a decir, me disculpo bastante por la falta de atención de esta historia, no se repetirá nuevamente, ya algunos me estaban pidiendo que lo actualizara y que no lo dejara en el olvido, gracias por apoyarme siempre y que el todo poderoso los cuide, nos vemos en el siguiente cap, bye, bye.

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