No puedo decir mucho del planeta Verte, no estamos caracterizados por nuestra tecnología; sin embargo, poseemos métodos de curación avanzados pero que no superan al extinto planeta Sage. Poseemos una gema muy especial, llamada Vermeral, es un tesoro de nuestro planeta, ¿Su función? Ser hermosa, lo que hace a Verte un planeta de reliquias y si alguien la toma debe ser asesinado. Nuestra raza está poblada únicamente por guerreros y solo unas cuantas hembras, ellas solo son nuestro medio de reproducción de guerreros, y cuando nace una hembra está destinada a ser solo reproductora.

El peligro no abunda en nuestro planeta, porque existen los guerreros. Pero no sólo existen ellos, también existen los monarcas, ellos dirigen a la población y mantienen todo en orden, además de guardar la Vermeral.

-Harry Komish -Escucho que el mayordomo real me llama. Sí, yo soy el príncipe de Verte, próximamente rey.

-¿Qué se te ofrece? -pregunto. El mayordomo se inclina ante mí.

-Tenemos unos visitantes especiales, el rey solicita su presencia. -responde él, gira sobre sus talones y se retira del lugar. Suspiro cansado.

Mi padre me pide estar presente en todo lo que él haga, para que yo en un futuro sepa gobernar bien. Hago presencia en la sala real donde encuentro a mi padre sentado en su trono y frente a él dos sujetos con capuchas.

-Padre, -hablo para llamar su atención. Mi papá me observa y me sonríe.

-Harry, acércate -dice él. Me acerco y cuando lo hago puedo observar con más claridad los rostros de ambos sujetos-. Quiero presentarte a nuestros visitantes.

-Un placer estar en este planeta -saluda uno de ellos, quitándose su capucha, puedo observar que su piel es diferente a la nuestra. Me quedo sorprendido porque nunca había visto alguien así-. Veo que está sorprendido, querido príncipe. Si se está preguntando qué raza es la nuestra, somos humanos.

-Es un gusto tenerlos por aquí, humanos. -hablo un poco desconcertado. El otro sujeto se quita su capucha, revelando ser una hembra de la raza de ellos. Es hermosa, su figura es esbelta y puedo decir que es similar a las hembras de nuestra raza. Pero parece que en el planeta de ellos no son solamente para reproducción.

-¿Sucede algo, príncipe? -pregunta ella confundida. Niego saliendo de mi trance, ella parece notar eso y ríe de forma dulce. Su risa es hermosa

-¿Que se les ofrece, queridos visitantes? -cuestiona mi padre.

-Venimos desde nuestro planeta a explorar el suyo, en nuestro planeta nosotros estamos desarrollando expediciones a diversos planetas para descubrir diferentes tradiciones o formas de desarrollo de la economía. Queríamos saber si tenemos permitido estar aquí por al menos unos meses, señor. -habla el sujeto. Mi padre los observa atentamente.

-Está bien, permiso concedido -anuncia mi padre. Gira su rostro a dónde se encuentra el mayordomo-. Llévalos a sus habitaciones.

El mayordomo asiente y abandona la sala junto con los "humanos", observo atentamente a la hembra de ellos, ella parece notar mi acción y sonríe tiernamente.

✨✨✨

Ha pasado cuatro meses desde que ellos llegaron, la humana y yo entablamos una relación de noviazgo como le llaman en su planeta. Desde que la ví me llamó la atención su forma de ser, su forma de pensar, ella parece que también se interesó en mí y cuando le expresé como me sentía con ella, me confesó sentir lo mismo, me dijo que se llama enamoramiento y me explicó lo que es el noviazgo.

Este tiempo con ella ha sido hermoso, me ha demostrado que las hembras no son solamente para reproducción cómo siempre se nos ha enseñado, a ella no le gusta ver a nuestras hembras ser despreciadas, por lo que mandé a nuestros guerreros a respetarlas y ayudarlas en lo que hagan, eso la hizo muy feliz.

Mi padre ha aceptado nuestra relación, porque le gusta verme feliz y si ella quería se podía quedar para ser mi reina, ella aceptó la propuesta porque se sentía feliz conmigo. El humano que vino con ella es su padre, quién también está de acuerdo.

En estos momentos estoy con ella disfrutando del paisaje que posee Verte, nuestros padres salieron a dar una vuelta por el planeta para culminar la expedición del humano. Ella gira a verme mientras me dedica una sonrisa, le devuelvo el gesto mientras tomo su mano.

-Ya regreso, iré a traer comida-le digo a ella mientras me levanto para dirigirme al palacio, ella asiente.

Cuando estoy llegando al palacio, unos guerreros salen a mi encuentro, preocupados.

-Señor -habla uno de ellos. Los observo confundido-. La Vermeral fue robada.

-¿¡Qué!?

¡La gema fue robada! ¿Quién se atrevería a robarla? Me dirijo junto a algunos guerreros al lugar donde está mi novia, pero cuando llego encuentro su cuerpo sin vida en el suelo y la Vermeral a su lado, junto a uno de los guerreros vertinos que empuñaba una espada.

-¿¡Qué hiciste!? -cuestiono molesto mientras corro hasta el cuerpo de ella para arrodillarme y sostenerla entre mis brazos. Su rostro sigue siendo hermoso a pesar de no tener vida, y eso me duele más, porque la única razón de mi felicidad ya no está conmigo.

-Señor, ella tenía la gema robada, según la ley debía asesinarla. Lo lamento mucho -responde el guerrero mientras guarda su espada. Recojo la Vermeral, es imposible que ella haya robado la gema, lo hubiera hecho hace tiempo.

-Eso es mentira -susurro furioso con el guerrero. Él me observa confundido-. ¡Tu robaste la gema para culparla y así poder asesinarla! ¡¿Cómo pudiste hacerme esto?!

El guerrero me observa con seriedad, para luego cerrar sus ojos.

-Es cierto, yo robé la gema para culparla y poder asesinarla -admite con tranquilidad. Su actitud me está empezando a molestar-. Pero lo hice porque quiso cambiar las cosas en nuestro planeta, ¿Porqué debíamos respetar a las hembras solo porque a ella no le gustaba? No le convenía esa humana, señor.

Me levanto del suelo con el cuerpo de mi novia entre mis brazos, y la Vermeral entre las manos de ella. Lo observo con molestia.

-Yo soy tu príncipe, y no vas a venir a decirme lo que me conviene. No te lo perdonaré jamás -hablo con frialdad. Los guerreros que me acompañan se acercan a él amenazándolo con sus armas-. Ya que tú robaste la gema y no la humana, entonces tú serás muerto por tu propia causa.

Me doy la vuelta mientras camino con el cuerpo de ella, y a mis espaldas escucho los gritos de dolor del guerrero vertino siendo asesinado por los demás guerreros vertinos.

✨✨✨

Quería enterrar su cuerpo en mi planeta, pero su padre no quiso y se molestó con nosotros, prefirió llevársela a la tierra a enterrarla ahí, dijo que lamentaba haber llegado a este planeta porque había perdido lo más valioso que tenía en su vida, y que se arrepentía de haberle permitido ser mi novia.

Todos los días sufro su pérdida, pero siempre intento mantenerme positivo y quizás encontrar a una humana igual a ella, que pueda hacerme sentir como ella me hizo sentir a mí. Mi padre me apoya en mi forma de pensar, dice que una humana llegará y podré volver a ser feliz.

Estoy caminando por un campo, cuando puedo doy una caminata por el planeta tratando de alejar pensamientos negativos. A lo lejos observo una nave que parece diferente a las de mi planeta, me acerco a ella y noto que su color es verde. Empiezo a tocar su superficie pero por accidente presiono un botón que abre la compuerta de la nave, entro a ella y me encuentro con un asiento y varias pantallas. Me siento y presiono todos los botones que hay, hasta que empujo una de las palancas que activa la nave.

-Sistema Calix activado. Próximo destino; refugio Calix.

La nave empieza a elevarse, y sale del planeta Verte. No sé a dónde me dirijo pero espero encontrar a una humana que llene el vacío que tiene mi corazón.