Capítulo 24
Estábamos corriendo nuevamente, nos habíamos juntado con Shoji, Izuku y Tokoyami quien había venido con Dark Shadow fuera de control. Pero gracias a que Bakugo hizo una explosión, la luz calmó a Dark Shadow.
-Genial -dice Izuku al escuchar lo que pasó conmigo-. Me alegro de que estén bien.
Sonreí un poco. Esa transformación me había dejado exhausta. Ahora apenas y podía usar mi súper fuerza. Yo estaba junto a Bakugo, Tokoyami estaba atrás. Pero abrí los ojos de par en par al ver una mano acercándose a Bakugo y antes de poder siquiera emitir un sonido, vi completamente negro.
No podía saber lo que había ocurrido o lo que sucedía a mi alrededor, no hasta que empecé a escuchar de nuevo lo que sucedía. Abrí los ojos finalmente e intenté levantarme pero alguien pisa mi espalda para impedirlo.
-¡¿Huh?!
-No te muevas -advierte un tipo pelinegro y con graves quemaduras en su piel y unos ojos azules que me resultaban parecidos a cierta persona.
-Dabi no trates así a alguien muy especial.
-Tomura... -murmuré recordando su nombre.
Escuché los murmullos de Bakugo y lo busqué por la habitación. Estaba sentado en una silla con un bozal y cadenas que cubrían sus manos. Él estaba intentando soltarse y me miraba desesperado. Intenté usar mis sombras pero no podía aunque quisiera.
-Ya detente. No te servirá -comenta Tomura al ver mis intenciones-. Tomamos medidas al respecto.
Apreté los puños sintiendo la frustración llenar mi cuerpo.
-Bueno, a lo que estábamos -ellos se sientan y tratan de convencer a Bakugo para que se una a ellos.
Pero en el momento en que lo soltaron mientras creían que lo habían conseguido convencer, este hace una explosión y me agarra por la muñeca.
-No puedo usar mis dones, lo siento, parece que me drogaron o algo -comenté y él esquiva los ataques de los villanos.
-Tsk, eso será un problema.
La colegiala corre hacia mí, esquivé su cuchillo y le di un rodillazo en el estómago para luego golpearla en la nuca, pero de un momento a otro la pared explota y nosotros prestamos atención a quien había entrado.
-¡Todo está bien! ¿Por qué? ¡Porque ya estoy aquí! -papá entra junto a más héroes.
Sonreí ampliamente cuando vi que capturaron a los villanos pero de la nada algo parecido a lodo nos rodea a todos, incluidos Bakugo y yo.
-¡Pa...!
Caí al suelo cuando aquel lodo desapareció, miré mis alrededores notando que ya no estábamos donde antes. Estábamos en otro lado. Vi a Bakugo atrás de mí pero entonces sentí a alguien en frente, al mirarlo alerta, noté que me tendía la mano para levantarme.
-Al fin vuelvo a verte... hija mía.
-¿Eh? ¿Qué dices? -lo miré confundida y frunciendo el ceño.
Frente a mí había un hombre vestido de traje, con una máscara cubriendo su cabeza.
-¿Ya lo olvidaste? Eres mi hija. Estás viva ahora, todo gracias a mí -acercó su mano a mi cabeza y antes de alejarlo, él apoya su mano y me muestra unos recuerdos que no sabía que tenía.
Era yo, en ese tanque lleno de aquel líquido, él era aquel hombre que todos los días iba a verme y a hablarme, que decía que yo era la que reuniría información sobre los héroes para él... Pero no solo eso, no me mostró solo eso.
Me aparté rápidamente, arrastrándome por el suelo para alejarme lo más rápido posible de él.
-T..Tú... Tú me hiciste esto... Me hiciste ser esto... -murmuré atónita. Negué con la cabeza y la sujeté con ambas manos-. No... Esto no puede ser verdad. ¡No te creo!
-¡Oye, desgraciado. Aléjate de ella! -Bakugo se levanta como si fuera a atacarlo pero lo empujé hacia atrás.
-Bakugo detente... no sabemos de lo que sea capaz -advertí temerosa.
-Hija mía. ________... tienes que venir conmigo, debes cumplir con la misión que te asigné al crearte -habla ese hombre acercándose a mí pero retrocedí enseguida.
-Aléjate. -espeté-. No te me acerques... Solo quiero saber, ¿por qué lo hiciste? ¿Por qué me hiciste así?
-Por supuesto... Para acabar con All Might... -tragué con dificultad-. Tú, en tu forma perfecta. Eres capaz de acabar con él. ¿No te das cuenta? Eres el arma perfecta para acabar con el hombre más fuerte del mundo.
-Por eso no puedo controlarlas... Las sombras fueron creadas para matar... yo... fui creada como un monstruo... -murmuré apretando los puños.
-Si estás conmigo puedo enseñarte a cómo usarlas, como dicen los otros, alcanzar tu plus ultra. ¿No estás cansada de todas esas personas que te despreciaron? Te tenían miedo porque tú eras la más fuerte de todas... ¿No quieres hacer que paguen por eso?
-Cállate -espeté cubriendo mi rostro con ambas manos.
-Ya has matado a alguien, estuviste cerca de matar a otros... ¿Qué más da matar a aquellos que te han hecho llorar por años? Como padre no soporto ver que aquellos que hicieron llorar a mi hija salgan impunes de sus pecados.
-Basta -pedí cayendo al suelo de rodillas-. Yo no... No quiero eso...
-No te mientas a ti misma, cariño. Lo quieres... Quieres que aquellas personas que te miraron con desprecio, con miedo, como si tuvieran al mismo diablo en frente, paguen.
En un segundo Bakugo sale disparado a un lado y antes de que pudiera ayudarlo, aquel hombre se me acerca y apoya su mano en mi hombro.
-Puedes hacerlo, si vienes conmigo... Después de todo eres mi hija... y puedo enseñarte lo que es la verdadera libertad. Nadie volverá a meterse contigo, nadie se atreverá a siquiera pensar en lastimarte, porque todos sabrán... que eres hija de All For One.
Negué con la cabeza mientras empezaba a soltar un par de lágrimas. Miré a Bakugo levantarse, volví la mirada a mis manos en el suelo.
-Por favor... ven por mí, papá.
De repente algo se aproximó a gran velocidad. All For One sale disparado hasta golpearse contra el suelo repetidas veces y destrozar una pared.
-Perdiste el título de padre desde que la dejaste sola en ese lugar. Ahora... no te atrevas a querer llevarte a mi hija.
-Papá... -murmuré al verlo parado con firmeza frente a mí.
-¿Crees que puedes quitarme a mi hija? -volví a mirar a All For One que empezó a levantarse-. Yo la creé, ¡me pertenece!
-¡Nunca te lo pedí! -grité enfadada- ¡Jamás te pedí que me hicieras! ¡Jamás te pedí crearme con este maldito poder que aborrezco! ¡Yo no quise ser un monstruo!
Sollocé sin poder evitarlo. Me levanté del suelo aunque mis piernas se sentían débiles.
-Por tu culpa soy lo que soy... ¡Por tu maldita culpa pierdo el control de mi propio poder y mato personas inocentes! ¡No vuelvas a decir que solo por crearme eres mi padre porque no lo eres! ¡Un padre no le hace eso a su propia hija!
Sorpresivamente atraviesa mi cuerpo con unas especies de espinas negras con líneas rojas que sorprendió a papá y Bakugo. Me acercó a él y me tomó del cuello.
-Quieras o no, eres mi hija. Ya esperé mucho por este reencuentro, eres muy difícil de traer -comenta y ríe un poco-. Después de todo saliste a mí.
-¡Suéltala! -papá corre hacia nosotros pero All For One levanta su brazo y se expande sacando tanto viento que empujó muy lejos a papá.
-¡P..Papá! -grité y traté de liberarme pero cuando me movía, estas espinas se clavaban más en mí.
-Kurogiri, sácalos de aquí.
All For One hace que Kurogiri abra un portal de forma forzada y luego la liga intenta atrapar a Bakugo. Levanté una mano pudiendo crear una espada en el momento en que el efecto de la droga desapareció. Intenté apuñalarlo pero me suelta, haciéndome caer al suelo, aunque rápidamente me alejé de él.
-Deja a Bakugo y a mi papá en paz -exigí empuñando la espada.
-Lo siento, cariño, pero no creo que sea posible.
Papá aparece de nuevo e intenta golpearlo. Di un paso para ir hacia Bakugo pero las zonas donde me había atravesado comenzaron a sangrar.
-M..Mierda... -murmuré adolorida apoyando mi mano sobre la sangre, pero algo llamó mi atención. Aún lado, escondidos tras una pared destruida- ¡¿Huh?!
Izuku, Momo, Shoto, Kirishima e Iida estaban allí, viendo y escuchando todo. ¿D..Desde cuando...? ¿Qué escucharon?
Solté un queido cuando algo parecido a una aguja se clava en mi brazo. La espada se deshizo pero no me impidió apartarla de mí.
-Sí, conseguí bastante sangre -la colegiala mira mi sangre con las mejillas sonrojadas.
Maldije chasqueando la lengua, extendí mis sombras para atacarla pero ella las esquiva dando saltos y alejándose. Corrí hacia ella y la intenté golpear pero solo quebré el suelo donde estaba, di una patada a un lado consiguiendo darle en el pecho, pero entonces aparecen más villanos de la Liga.
Bakugo se me acerca y me ayuda a pelear contra ellos, aunque mis movimientos eran bastante reducidos. Miré de reojo hacia donde estaban los demás, pero por ese despiste, recibí un golpe en el rostro por parte de el villano con una mitad de su traje blanco y la otra mitad en negro.
-Tengan cuidado con mi hija, chicos -advierte All For One luego de esquivar un golpe de papá.
-¡Ah.. Ah... lo siento! -se disculpa el que recién me había golpeado, yo le devolví el golpe.
En un instante se arma una rampa de hielo y los chicos aparecen en la punta de este saltando.
-¡Vengan! -grita Kirishima.
Bakugo me agarra el brazo rápidamente y usa sus explosiones para llegar hasta ellos. Miré hacia papá y vi como peleaba contra All For One.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro