El invierno se desvanecía lentamente, dando paso a la promesa de la primavera. Las calles estaban llenas de flores brotando, y el aire se llenaba con la dulzura de los nuevos comienzos. Felix y Hyunjin habían compartido el primer mes del nuevo año creando recuerdos que atesorarían para siempre.

Los días se convirtieron en semanas, y cada momento que pasaban juntos fortalecía su relación. Se apoyaban mutuamente en sus sueños y desafíos, y poco a poco, la conexión que habían forjado se transformó en algo aún más profundo.

Una tarde soleada, decidieron dar un paseo por el parque donde habían construido su famoso muñeco de nieve. Mientras caminaban, las risas y las historias fluían fácilmente entre ellos. El paisaje era vibrante, lleno de vida, reflejando la alegría que sentían en su interior.

-¿Te acuerdas de aquella guerra de bolas de nieve? -preguntó Felix, sonriendo al recordar los momentos divertidos que habían compartido.

-Cómo olvidarlo -respondió Hyunjin, riendo-. Nunca pensé que me lanzaras esa cantidad de nieve.

Felix se rió, sintiéndose afortunado de tener a Hyunjin a su lado. Se detuvieron junto a un pequeño estanque que brillaba bajo el sol, y mientras contemplaban su reflejo, Hyunjin tomó la mano de Felix.

-¿Sabes? He estado pensando en nosotros -dijo, su voz seria pero tierna.

Felix sintió que su corazón se aceleraba. -¿En qué has estado pensando?

-Sobre lo que queremos en el futuro. Me gustaría que esto que tenemos se convirtiera en algo más serio. Quiero construir un futuro contigo -dijo Hyunjin, sus ojos fijos en los de Felix, llenos de sinceridad.

La emoción llenó a Felix, y sonrió de oreja a oreja. -Yo también lo deseo. No puedo imaginar mi vida sin ti.

Con la conexión entre ellos más fuerte que nunca, se abrazaron, sintiendo la calidez y la seguridad que solo el otro podía brindar. Mientras la brisa suave movía los árboles alrededor, ambos sabían que estaban listos para enfrentar lo que viniera, juntos.

A medida que la primavera avanzaba, comenzaron a planificar nuevas aventuras: explorar nuevos lugares, hacer pequeños viajes y seguir soñando juntos. Cada día era una nueva oportunidad para crecer, reír y compartir sus esperanzas.

El 14 de febrero, día de San Valentín, decidieron celebrar su amor de una manera especial. Hyunjin llevó a Felix a un lugar que ambos amaban, un pequeño café que solían visitar. Allí, en una mesa iluminada por velas, Hyunjin le entregó a Felix una pequeña caja.

-Ábrelo -dijo, con una sonrisa nerviosa.

Felix lo miró, sintiendo un cosquilleo de emoción. Abrió la caja y encontró un hermoso anillo.

-Hyunjin... -susurró, sorprendido.

-Quiero que este anillo sea un símbolo de lo que tenemos. No tengo una promesa formal, pero quiero que sepas que estoy aquí para ti, hoy y siempre. -Hyunjin tomó una profunda respiración-. Felix, ¿quieres ser mi compañero en esta aventura llamada vida?

Felix sintió las lágrimas asomarse a sus ojos, la felicidad inundando su corazón. -Sí, quiero. Quiero ser tu compañero para siempre.

En ese instante, rodeados por la luz tenue del café y la promesa de un futuro brillante, supieron que habían encontrado el hogar en el corazón del otro. La conexión que habían forjado en la temporada de fiestas había florecido en un amor fuerte y verdadero, y no había límites para lo que podían lograr juntos.

A medida que la primavera se deslizaba hacia el verano, Felix y Hyunjin abrazaron cada momento, cada día, como un nuevo capítulo en su historia compartida. Estaban listos para escribir su propio cuento, lleno de amor, aventuras y sueños cumplidos.

Y mientras caminaban hacia un futuro lleno de posibilidades, ambos supieron que, sin importar lo que les esperaba, lo enfrentarían juntos, con el amor y la amistad que habían cultivado en esos meses mágicos gracias a un calendario de aventuras en invierno.

☃️Fin☃️

Read you soon...
-Mimi 🦋