Traidor
Había un escenario en proceso de armarse, ya casi terminaban de armar todo para los que cantarían. Todos se encontraban emocionados por ver sus bandas favoritas. Alexis quería estar allí pero temía de..Él...No mentiría,no se sentía tranquilo desde que llegó a la sala donde habían distintos tipos de fans. En un momento sintió un escalofrío en la nuca y al voltear logró ver aquellos profundos ojos cafés en él. Ese hombre británico lo miraba con decepción y..no solo a él,sus ojos se iban al matamorense con celos y coraje.
No era como si Will fuera un loco desquiciado,pero Alex sabía que era muy celoso y hasta posesivo. No le preocupaba Geovanny o Sebastián pero sí temía de gran manera por Osvaldo. Wilbur solo sabía de Osvaldo como algo más que solo un amigo del chico de gorro y eso le hacía pensar que le haría algo..Se terminó convenciendo de que solo era paranoico.
La risa ruidosa de Aldo se escuchaba haciendo que sus novios rieran enternecidos. Una fan se emocionó tanto al verlo que lo abrazó y no dejó de soltar su cuello abrazándose a él. Al moreno no le molestaba,le daba ternura y le hacía feliz de gran manera que una fan se emocionara tanto por él,era tierno.
Cuando por fin fue soltado y la chica se despidió,el de lentes volteó a sus novios y los encontró mirándolo con ternura dejando desconcertado al chico. "¿Qué pedo?" Preguntó curioso alzando la ceja.
"Cásate con ella si tanto la quieres." Soltó Roier fingiendo celos. "Puto." Añadió mostrándole su dedo de en medio.
"Cómeme los nuevos,pinche pendejoier." Le respondió sin dudarlo agarrándose la entrepierna al decir las poéticas palabras dignas de un adulto responsable y maduro.
La pequeña discusión de los chicos hizo reír a Alex. Extrañaba verlos discutir de esa manera por algo tan tonto como una escena boba de celos. Lo relajó bastante, por un momento no pensó en su ex amante y sus miradas que provocaban nada más que pánico.
"Tengo un chingo de ganas de una Matcha green tea." Dijo el moreno mayor de todos para mirarlos.
"¿Y dónde vamos a conseguir tu mamada ahora mismo,pendejo?" Preguntó Valdo mirándolo.
"Lo único que podemos conseguir es agua o una coca." Añadió Roier mirándolo. "Podemos ir en putiza antes de que comience el concierto. Invitaron a unos weyes que quiero ver y no me lo perdería por nada."
"No se diga más,vamos a conseguir algo de beber." Dijo Aldo para comenzar a caminar. "Ay de ustedes como les de las ganas de miar en mitad del concierto." Les advirtió con algo de seriedad señalándolos como papá regañando, pero Alex y Ro pensaron que se veía muy atractivo de esa manera. "Pinche bola de calenturientos, me lleva la verga."
"¡Es el Roier!" Se defendió Quackity señalando al mencionado.
"¡¿Yo qué pendejo?!" Chilló el menor mientras todos caminaban a la misma dirección.
Todos caminaron al mismo lugar con calma mientras discutían sobre este tema. Osvaldo los dejó caminar al frente mientras él los seguía con las manos en los bolsillos de su pantalón, le gustaba ver como reían con tonterías como la discusión sobre que ellos eran unos calenturientos y tal.
Los chicos compraron unas bebidas para sentarse en el asiento más cercano a terminárselas con calma. Estaban en esos sofás qué hay de repente en medio de la TwitchCon, en los grandes pasillos con ventanas enormes y que la gente pasaba,tanto partners como staff.
"No se compara a mi Matcha green tea, loco."
"Deja de quejarte y trágate el perro té,Geovanny,no mames."
Desde que se compró el té, Aldo no dejaba de quejarse y quejarse. Alexis miraba su botella de agua agarrándolo con las dos manos y jugando aveces con sus pulgares. Había tanto en su mente ahora que solo sentía su boca seca.
"¿Qué pasa,Alex?" Volteó Roier al chico de gorro con curiosidad.
"No lo sé." Murmuró para mirarlo con el ceño levemente fruncido. "Me siento..ansioso."
"¿Es por ese güero?" Preguntó para darle una palmada en el hombro. "No te preocupes por él, no te hará nada. Lo prometo. Tú confía."
Alexis no dejó de sentirse ansioso pero sonrió por sus palabras.
Volviendo al lugar donde ya había comenzado los conciertos los chicos estaban animados. Todos se veían ansiosos y cantaban todas las canciones que eran cantadas por todas estas personas con talento. Alexis tardó en tranquilizarse pero al hacerlo sonrió suspirando para disfrutar del ambiente. Sus novios jugaban con él haciéndolo bailar mientras el de gorro reía. Todo era tan lindo y tan agradable. Aunque no conocieran la mayoría de las canciones ellos no dejaban de bailar y de hacerlo bailar.
Aldo tomó por unos momentos a Alexis de la cintura y lo presionó contra si mismo mientras cantaba y mal una de las canciones. Roier y Mariana cantaban igual..o intentaban. Lo que conseguían era sacarle carcajadas al de greñas.
Alex se encontró pensando en lo mucho que los amaba.
Y de repente el instrumental cambió y la gente gritó como loca. Voltearon a ver al escenario para encontrarse a aquel hombre británico. Pero la instrumental no era de alguna de sus canciones conocidas, era distinta.
"This song isn't mine." Explicó contra el micrófono mientras arreglaba las cuerdas de su guitarra. "I just felt like I had to sing this song since I been going through some stuff." Sus ojos se encontraron con los ojos cafés del licenciado en el público a la vez que comenzaban a tocar la melodía de aquella canción. "This song is called Traitor by Olivia Rodrigo." Dijo antes de comenzar su show entre tantos gritos. Sabía muy bien lo que estaba haciendo.
"You betrayed me. And I know that you'll never feel sorry for the way I hurt, yeah." Cantaba profundamente mirando directo a los ojos al chico de cabello semilargo y oscuro. "You'd talk to her when we were together loved you at your worst but that didn't matter. It took you two weeks to go off and date her. Guess you didn't cheat but you're still a traitor."
Con pase la canción continuaba Alexis sintió como su panza se revolcaba. Su corazón dolía y sus manos temblaban. Esa canción era para él, no había duda alguna. Y eso lo mataba por dentro. Por instantes, no vió a Wilbur en el escenario. No. El vió a William. Aquel chico que tanto amó y que lo hacía derramar tanta alegría. El que alguna vez juró que era dueño de su corazón y de su cama. Sus ojos se llenaron de lágrimas al pensar que le había herido.
Pero ni Aldo,ni Roier,ni Mariana lo vieron así. Ellos vieron como cantaba la canción con tanto desprecio y brutalidad. Gaslight, era el termino que se utilizada en inglés. Su intención no era desahogarse, su intención era hacer sentir mal a Quackity a propósito para que pensara que el problema era él mismo.
"Vámonos." Dijo Aldo lo suficientemente alto para que le escucharan los chicos. Pero Alexis no se movió de su lugar. Sus grandes ojos cristalinos seguían contra los de aquel chico.
"¡Alex,vámonos!"
Tuvieron que sacar al pelinegro de la mano y a la fuerza. Salieron de la sala y luego de tantas puertas consiguieron salir del gran lugar de la Twitchcon.
"¿Estás bien?" Murmuró Roier mirándolo con preocupación. Al estar lejos de todo esto lo soltaron.
Alex alzó la mirada a ellos y trató de hablar pero nada salió de su garganta. No podía hablar. Estaba bloqueado. Tantos recuerdos de ellos dos años atrás. Eran tan felices y tuvo que arruinarlo todo hiriéndolo.
"Papi, respira. Estás bien,estás bien.." le dijo el más alto de todos tomándole de las mejillas. "Estamos aquí."
Tantos recuerdos de ellos dos riendo a escondidas de todos para abrazarse y sentir la calidez ajena. Las veces que quisieron huir juntos y todos los planes que decían tener juntos. Todo eso y mil recuerdos más que no podía sacar de su cabeza. Y cuando se encontraron una vez más..
"Quackitieeeeh!" Escuchó a sus espaldas sorprendiéndolo.
Su corazón se detuvo por un momento para latir con mucha más fuerza, como si no estuviera agrietado. Volteó lentamente en busca del chico que le llamó. Al verlo justo caminando a él no pudo no sonreír con emoción. Hace mucho no le veía y estaba feliz de verlo de nuevo.
"Wilbuuuh!" Le respondió de la misma forma.
"Quackitieeeh!" Repitió estando cada vez más cerca con una gran sonrisa.
"Wilbuuuh!" Repitió también el chico de gorro yendo a él también.
Al estar lo suficientemente cerca se abrazaron fuertemente.
Recordaba esa calidez. Ese sentimiento de alegría de verlo otra vez y lo contento que estuvo. El aroma de su perfume y todo lo que sintió en ese momento. La forma en la que su corazón quería salirse de su pecho de alegría. Ahora sólo sentía odio.
"¡Alex!" Exclamó Mariana sacándolo de sus pensamientos. Fue entonces cuando se dió cuenta que estaba llorando.
"Quiero irme.." fue lo que logró decir en un susurro.
"Bien,nos vamos." Dijo Roier sin pensarlo para mirar al moreno de lentes que asintió.
...
Lo llevaron de la mano al auto. Alexis no habló en el camino, se mantuvo recostado del hombro de Aldo mientras Mariana conducía y Roier miraba hacia afuera de la ventana. El moreno de lentes le tomaba la mano acariciando esta en todo el camino.
Al llegar al hotel Aldo fue quien les llevó hasta su habitación. Una vez dentro lo dejaron acostarse en la cama. Lo que sea para que estuviera más cómodo.
Y así pasaron las siguientes horas. Alexis tirando boca abajo en la cama con su cabello cubriendo su rostro. Mariana sentado en el sofá mirándolo de vez en cuando y luego volviendo a mirar su celular. Roier estaba acostado al lado del pelinegro y no le quitaba la mirada de encima. Hasta acariciaba su cabello lentamente y aveces su espalda. Aldo pensó en que sería buena idea salir a comprarle algo de comida y eso estaba haciendo.
Mariana miró su celular un vez más y suspiró suavemente para levantarse. "Iré a ver si Aldo necesita ayuda." Les dijo con suavidad. "Cuida de él,¿sí?" Murmuró.
"Claro." Dijo Ro con una sonrisa pequeña.
La puerta se abrió y luego se cerró dejándolos solos. El moreno volteó a ver a Q y le acomodó el cabello fuera del rostro viendo como abría su ojos para mirarle.
"Hola.." le susurró Roier con una sonrisa suave.
Alexis no quiso decir nada. Se acomodó y se arrastró hasta quedar contra su pecho abrazándole. El contrarío no lo dudó y le correspondió con firmeza.
"Sebastián.." susurró Alex.
"¿Dime?"
"Me amas,¿cierto?" La pregunta tomó por sorpresa al chico pero no dudó en responder.
"Mucho." Murmuró. "Demasiado."
Alexis se reincorporó para mirarlo con sus ojos algo rojos por llorar y preguntar. "Tú no me abandonarás,¿verdad?" La pregunta salió con dolor.
"Jamás." Dijo en corto. "En el tiempo que estuvimos separados no podía dejar de pensar en ti. No me permitiría dejarte una vez más." Murmuró con suavidad acariciando su cabello.
El corazón del pelinegro se calmó por un momento. Respiro fuerte y se reincorporó para mirarle cara a cara, momentos después le besó con profundidad. Roier no dudó en correspóndele. Pensó que sería que era un beso inocente y tierno, pero no. El pequeño e inocente beso fue escalando más y más. El mayor fue subiéndose poco a poco por encima del menor hasta quedar ahorcajadas sobre él. Se agarró de sus hombros y continuó besándolo.
"Alex.." susurró el moreno entre jadeos contra los labios del chico. "Relájate." Le pidió agarrándolo de las caderas.
Pero el chico no se calmó. Pasó de besar los labios de su novio para besar su cuello haciéndolo suspirar cerrando los ojos. Ya no eran solamente besos, comenzó a succionar y mordisquear su piel con hambruna al mismo tiempo que comenzaba a mover sus caderas contra el contrario. Ya a este punto era casi faje.
Sebastián entendió que trataba de sentirse querido. Se alguna manera quería este sentimiento y lo quería conseguir a través de algo tan físico como lo era el sexo. Suspiró entrecortado y colocó su mano tras la cabeza del chico para acariciar su cabello con lentitud mientras le repetía lo mucho que lo amaba. Alexis se abrazó con fuerza a Sebastián mientras comenzaba a llorar en total silencio. El menor no dejó de abrazarlo mientras le repetía una y otra vez un suave: "Te amo".
"Ese pendejo no te merece y nunca lo hizo." Le decía con suavidad sin alejarse ni un centímetro. "No le prestes atención a ese manipulador de mierda." Le pidió aferrándose al abrazo que estaban compartiendo con tanto amor.
"Lo traicioné.." susurraba el mayor entre sollozos.
Roier negó otra vez. "No,no lo traicionaste." Susurró de regreso. "Tú seguiste lo que decía tu corazón." Afirmó. "Él te traicionó a ti. Alguien que te ama no te expone y te tortura de esa manera."
Cuando Aldo y Mariana volvieron con las bolsas con comida y una botella de coca se encontraron con los dos chicos acostados abrazados y dormidos. Los dejaron dormir un poco más y cuando la comida estaba servida fue que los despertaron. Comieron todos juntos viendo una película de Disney, Zootopia, para ser exactos. Así pasaron las últimas horas del día juntos.
Bueno, capítulo nuevo y fresquito salido del horno. Ignoremos que tardé casi un mes (en dos días se cumple un mes xdd)
¿Opiniones?
Yo no tengo opiniones, solo déjenme respirar plis dejen de funarme se los suplico
Nos vemos en otro mes kkkkkk
Xao Xao
Quackette
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Si hay faltas de ortografía o un error,por favor déjenme saber.
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