Moon Sky, Extra 2 - Nuevas Experiencias
Eran de esos días donde Aldo y Mariana se iban a entrenar fuera dejándolos en la casa. Roier estaba aburrido en su habitación hasta que recordó que podía ir a aburrirse en otro lugar, por esta misma razón estaba en la habitación de su novio. Llevaban rato muerto acostados en la cama viendo una serie desde hace ya media hora en silencio. La serie era Shameless y estaban recién por una escena que un personaje y su esposo discutían sobre quien era el hombre de la relación y entre todo esta discusión especificaban que uno de los era el que "la metía" en el otro. También hablaban de los tamaños de sus miembros y tal, era una escena graciosa.
"Entre tu y yo, ¿quien es el hombre?" Preguntó Roier para mirar a Alex aún acobijado.
"Yo." Dijo el mayor volteando a mirarlo.
"¿Con qué huevos dices eso?" Preguntó alzando la ceja dudoso.
"Con estos dos pares de huevos." Le dijo agarrándose la entrepierna de forma vulgar provocando la risa del moreno.
"A ver, sácatelos si tantos tienes, cabrón."
"No tengo que probarte que tengo una riatota."
Entre risas y bromas constantes Roier se sentó para mirarlo. "Pero, al chile, sácatela, a ver quien tiene una riata más grande, ¿o le tienes miedo al éxito?"
"No." Gruñó el pelinegro de greñas. "Deja de molestar, cabrón."
[...]
Ro le insistió tanto que fue molesto. A pesar de que el mayor le decía que no era necesario le terminó convenciendo. Entonces, allí estaban con una apuesta de que quien la tuviera más pequeña iba a limpiar los platos. Era tonto pero el moreno insistió tanto que se volvió algo en serio.
Estaban sentados en la cama sin pantalones y con sus piernas entrelazadas, como si fueran tijeras. A pesar de la tan incomoda y cercana posición no lograban dar con una medida exacta, tampoco querían aceptar que eran casi del mismo tamaño. Literalmente eran pocos milímetros de diferencia.
"¿Ya viste? La tengo más grande." Le dijo Alexis con una sonrisa victoriosa y con arrogancia ante sus palabras.
"No, no, no, ¿cuál la tienes grande? Tengo vibradores más grande que tu pendejada." Se notaba que Roier era mal perdedor. Con su mano los tomó a ambos uniéndolos. Ante el roce el mayor no pudo sonrojarse un poco, no era por toda la situación, si no por como se sintió. "¿Ya viste? ¡El mío es más grande!" Sonrió para mirarlo.
"Eso es porque está dormida. Cuando se me para es grande." Insistía Alexis sin querer perder.
"A ver, vamos a asegurarnos." Dijo el menor para acomodarse un poco.
"¿Vas a usar una cinta?" Preguntó el licenciado con un tono divertido burlándose de él. "¿Una regla?"
"Una chaqueta." Sonrió Roier ladino notando un sonrojo en la carita de su novio.
Antes de que pudiera decir algo el moreno ya estaba moviendo su mano, misma donde tenía ambos miembros con firmeza. Se podía sentir sus carnes y eso les daba escalofríos a ambos. La situaciones les gustaba, no mentirían, algo de encantador tenía el hecho de que ambos fueran lo que catalogarían como pasivos y que estuvieran en esa posición frotándose y jadeando con suavidad.
La mano de Roier se iba moviendo con técnica. Aveces frotaba las cabezas con la palma de su mano en forma de una C. Era justo donde él era muy sensible, asumió que podría ser lo mismo con Alex, por eso le dió importancia a sus expresiones. Quería ver donde le gustaba y donde no, era como un premio ver cuando hacía esas expresiones tan..dulces. No hacía falta decir lo erectos que ya estaban.
"Mierda, Sebastián.." gimió el pelinegro de greñas sin poder aguantarse más tiempo por si solo, sus brazos dolían.
"Amo cuando me llamas así, ¿te lo he dicho?" Murmuró el moreno entre jadeos con un sonrojo en su rostro.
Si alguien entraba y los veía así deduciría al instante que ambos eran unas pasivas. Lo eran, por cierto, pero esto no hacía que les gustara menos, les encantaban juguetear entre ellos. Alexis se reincorporó como pudo y con su mano atrajo a su novio para besarlo. Fue un beso viscoso y lujurioso con lengua, les encantaba sentir cada centímetro de sus pieles y músculos, podían decir que ambos eran adictos a esta sensación de sus pieles rozando con la humedad del sudor.
La mano de Ro avanzó aún más rápido haciendo que se escuchara lo húmedos que estaban. Su mano estaban mojada con fluidos y esto provocaba que fuera fácil moverla. Con suavidad comenzó a mover sus caderas contra las caderas ajenas queriendo sentir más fricción, más piel y más excitación. Lo que lo cegó por completo fue ver como el mayor se inclinaba un poco hacía al frente y dejaba caer su saliva sobre los dos miembros para lubricarlo un poco.
El moreno sonrió de lado y suspiró. "Bebé." Le llamó deteniéndose y recibiendo su atención en el proceso.
"¿Porqué te detienes?" Preguntó Alex con un hilo de voz que mostraba lo sumiso que estaba ante él.
"¿Quieres jugar con mis juguetes?" Preguntó divertido con una sonrisa ladina que daba escalofríos. El mayor no pareció entender pero su sonrisa le hizo entender con rapidez. "Tengo muchos, te van a gustar." Aseguró para alejarse muy en su contra.
Alexis nunca fue fanático de los juguetes sexuales. Principalmente porque no le llamaban la atención, pensaba que no se sentiría igual. Ante sus ojos era plástico y no le interesaba esto, pero una vez allí, cegado y caliente, no lo pensó mucho antes de aceptar.
"Te gustará, confía." Le dijo el moreno buscando algo en su armario. "Tienes que verlo como si solamente fuéramos a jugar y ya. Como si fuéramos a jugar a las muñecas o algo así."
Algo en la voz de Roier lo calentaba, se sentía algo muy oscuro en él por este tema de los juguetes.
"Siento como si estuviera compartiendo mis muñecas." Murmuró al dejar una caja en la mesa. "Es emocionante." Y al alzar su cabeza Alexis vió su sonrisa dulce, era la misma de siempre, pero había algo que no estaba correcto y esto era la gota de lujuria que se veía tras sus ojos.
El mayor se levantó de la cama sentándose y se quitó su camisa sin pensar mucho. Decían que nunca terminas de conocer a las personas y él quería experimentar cada rincón de los fetiches de sus novios. Con cada día que pasaba les iba conociendo más de lo que ya les conocía y eso era emocionante. Roier se acercó a él para atraerlo en un beso corto pero profundo, al separarse le sonrió con amor viendo como le miraba, Alex estaba ido por él y se le notaba en la cara. Ro le soltó para abrir la caja. De la mencionada sacó varias cosas y era algo nuevo para el de greñas, nunca había explorado ese mundo pero siempre había un principio para todo.
"Cariño, ¿estás seguro? No quiero incomodarte." Le preguntó el menor mirándole algo preocupado luego de ver su cara de sorpresa. "Si no quieres no hay problema. No estás obligado. Entiendo que puede ser algo raro hacer— Ver..todo esto y demás. No es tan normal que alguien tenga tantos juguetes sexuales, supongo.." Su voz que era tan dulce le enterneció de una gran forma, se veía tímido, se veía pequeño.
"Sebastián.." Alex le atrajo con cuidado para darle un beso en la nariz. "No me incómoda. Quiero conocer este lado tuyo." Le sonrió provocando que el contrarío hiciera lo mismo. "No es raro jugar consigo mismo, es normal." Insistió.
"Alex, ¿te he dicho lo mucho que te amo?" Le dijo para tomar sus mejillas plantándole un gran beso, mismo que hizo reír al de greñas.
Roier le indicó como ponerse y una vez estuvieron como tijeras. Podía ver el cuerpo completo de su novio y eso le gustaba mucho. No solos tener esa curiosidad por cuerpos delicados, siempre le gustaron los hombres grandes y que le impusieran dominancia con solo verlos, pero Roier era distinto. El menor tenía unos brazos fuertes, eso no se podía negar, pero su cintura pequeña junto a esas caderas y sus glúteos era algo que lo hacían ponerse como adolescente calenturiento.
Esto era nuevo para Alex. Se sentía como si no estuviera siendo dominado como suele ser cuando tenía intimidad con cualquiera de sus chicos, se sentía como si ambos fueran tan delicados, tan sumisos....Era como si no hubiera nadie que dominara, como si estuvieran en el mismo nivel.
Roier le mostró un vibrador que extrañamente tenía dos extremos. Ya se podía hacer una leve idea. Lentamente lo introdujo dentro de Alex antes de hacer lo mismo consigo mismo. Ambos soltaron un suave gemido por eso mismo pero no se quejaron, pensaron que se sentía bien.
"Ven, bebé." Murmuró Roier extendiendo uno de sus brazos.
Alexis al tomarle la mano fue atraído con cuidado hasta quedar aún más cerca de su novio. Se debía recalcar que también sintió como el juguete entraba más en él sacándole un gemido. "Puta madre.." gimió.
"También lo sientes, ¿no?" Murmuraba el moreno con una sonrisa ladina.
El mayor asintió y susurró para morderse el labio inferior. "Se siente bien."
Con una de sus manos entrelazadas y semi sentados ambos se comenzaron a mover con cuidado soltando gemidos. Ambos entrecerraban los ojos de vez en cuando por la abrumadora sensación de sus interiores estirándose.
Roier sabía que podía ser mejor, por eso, tomó el control de cinco niveles que traía el juguete y sin avisarle a Alex primero lo encendió en el tres. Esto le sacó un gemido desgarrador al de greñas, no estuvo nada preparado para esto. Ro también gimió pero fue opacado por su novio.
"¡Sebastián!" Gimió el pelinegro.
"Vamos, tú puedes con esto." Dijo el moreno entrecortado y con una suave risa divertida.
Ro no detuvo sus movimientos en ningún momento, podía sentir su miembro palpitar contra el de su novio de una forma deliciosa. Les encantaba la sensación que les brindaba y querían más. Fueron yendo más rápido moviendo sus caderas con ritmo, el menor no dudó en subirle un tono más al aparato haciéndolos gemir más, ya era ridícula la forma en la que lo estaban disfrutando. Sentían que en cualquier momento iban a terminar.
La forma en la que se movían, la posición, los gemidos y toda la situación era algo que le volaría los sesos a cualquiera. ¿Dos chicos lindos jugueteando entre ellos mientras se besaban ocasionalmente? Definitivamente era algo que la gente pagaría por ver.
Roier tomó la pierna de su novio pasándola por encima de su hombro para seguir moviéndose contra él. Podía sentir como el juguete entraba y salía de él y como sus penes rozaban con frecuencia haciéndolos temblar de la excitación, esto solo lo hizo moverse lo más rápidamente posible.
"Sebastián—" chilló Alex agarrándose con fuerza del muslo del moreno. "¡Me vengo!" Sus mejillas estaban rojas y sus mechones estaban pegados a su piel por el sudor. Esa expresión de placer lo decía todo, no tuvo que haberlo dicho en voz alta.
"Yo también.." respondió Roier gimiendo desconsoladamente.
Con sus últimas fuerzas puso el aparato al máximo nivel y se comenzó a mover lo que más pudo. Con los gemidos se podía asumir que habían dos gatas en celo en la habitación. Eso y que la cama rechinaba descontroladamente eran factores que no hacía falta decir porque se escuchaban a leguas.
Incluso en la planta baja se escuchaba todo el estruendo. Cuando Aldo abrió la puerta y puso el primer pie dentro seguido de Mariana escucharon todo. Primero se quedaron helados tratando de descifrar lo que ocurría, luego lo entendieron y suspiraron. Se habían espantado por un segundo.
Cuando ambos estallaron con un orgasmo explosivo sintieron que no podían más, pero sus cuerpos les exigía más.
La tarde se les fue así, jugando entre ellos con diferentes juguetes gimiendo como gatas en el proceso. Llegó un punto donde no pudieron más y quedaron dormidos por tanto cansancio. Ni se pudieron duchar antes de dormir. Ya en la mañana fueron a recoger el desastre y a ducharse. Aldo no pudo evitar hacer la pregunta del millón cuando los vió en el desayuno.
"¿Qué tanto hacían?"
"Estudiando." Bromeó Roier tan pronto se sentó con su taza.
"¿Estudian por la cola o cómo?" Y no los dejaron de molestar hasta que se cansaron de reír tanto.
Fue una nueva experiencia para Alex y no le molestaría repetirla otra vez. Pero le gustaría llevar esto a otro nivel, quería explorar más y ver que tanto podía hacer..
"Ten, las compramos ayer. Roier casi se las come." Le dijo Mariana al licenciado cuando se le acercó con una caja de galletas.
Alexis lo miró. Alto, con músculos, apuesto, dominante y activo en cualquier forma que lo vieras.
Oh, ya tenía una idea.
Sin editar
Que onda mis perras JAJDIQJFIWW
Capitulo semicorto pero algo es algo
No tengo mucho que decir
¿Les gustó? (:
¿Qué más podría suceder en futuros extras?
Eso es todo xd
Nos vimoh
Xaooo
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Si hay faltas de ortografía o un error,por favor déjenme saber.
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