Los días pasaron rápidamente y ya era el día de la boda de Gokú, la ceremonia se realizaría en un famoso y lujoso salón de Tokio, todos los invitados estaban llegando al que sería el evento del año, ya que dos herederos de las mejores familias de Japón unirían sus vidas.

En una habitación privada del salón:

Hermanito ¿cómo te sientes?, preguntaba un joven de cabellera larga.

Mal Raditz, dijo con melancolía el joven de cabello alborotado, que llevaba un traje negro.

Gokú, no te sientas mal por mí, yo ya no siento nada por ella, amo a mi esposa y a mi hijo, dijo el joven de cabello largo.

Ya lo sé hermano y no sabes el gusto que me da que seas feliz, pero yo nunca podre serlo, dijo Gokú con tristeza.

¿No me digas que este matrimonio también fue arreglado?, dijo con molestia el joven de cabello largo que desconocía los verdaderos motivos de la boda.

Si, hermano, dijo Gokú.

Departamento de Milk:

Una linda joven peli azul se encontraba dándole apoyo a una bella pelinegra que se encontraba con el corazón destrozado.

Amiga cálmate, ya no llores más, decía la peli azul.

Bulma, no puedo en estos momentos debe estar casándose, todos mis sueños se rompieron de la noche a la mañana, decía derramando gruesas lágrimas.

Vegueta tenía razón, pensaba la peli azul.

-.Recuerdo.-

Ósea que ahora andas de celestina, decía irónicamente el joven.

Jajajaja, no seas malo Vegui, solo que quiero que mi amigui se enamore de un buen muchacho y yo creo que Gokú es una buena opción.

Bueno eso espero, porque luego no quiero verte haciéndole de pañuelo de lágrimas de Milk y que te sientas culpable por haber sido tu la de la idea, tu sabes Bulma que yo pienso igual que Milk, los sentimientos fluyen solos, no hay que andar forzándolos.

Pero yo no fuerzo nada Vegui, yo sé que ellos dos se gustan dijo la peli azul.

Ojala y así sea Bulma, dijo el joven mientras terminaba su taza de café.

-.Fin del recuerdo: Tiempo actual.-

No debí de insistir en que lo trates, si yo no hubiese ayudado a Gokú, tu no estarías sufriendo, se lamentaba la peli azul mientras abrazaba a su amiga.

No, Bulma no te sientas culpable, tú no tienes la culpa de nada, yo me enamore de él el día que tropecé con él el café, además él solo está cumpliendo las órdenes de su padre, decía llorando.

Como sea Milk, pero lo mejor por ahora es que guardes en tu corazón todo lo que viviste a su lado como un hermoso recuerdo y que a partir de ahora mires hacia adelante, yo siempre te apoyare en la decisión que tomes amiga, dijo la peli azul.

Salón principal:

¿En dónde está tu hijo?, ya debería estar aquí, en unos minutos llega mi Lunch, decía un hombre rubio.

Ahora voy por él, no te preocupes dijo el hombre de cabello negro retirándose a buscar al novio.

Habitación privada del salón:

Hermano, cuanto lo lamento, espero que con él tiempo puedas llegar a amar a Lunch, o de lo contrario cuando ya todo esté resuelto como diría nuestro padre te divorcias de ella hermanito, dijo el joven de cabello largo.

Si Raditz eso es lo que precisamente pienso hacer dijo Gokú.

Un hombre maduro muy parecido a Gokú ingreso repentinamente a la pequeña habitación.

¿Qué haces aún aquí?, tu lugar es afuera, Lunch ya está por llegar, dijo furioso el hombre.

¿Padre, por qué siempre tienes que decidir por nosotros?, pensé que conmigo habías solucionado ya tus problemas dijo Raditz muy cerca del oído de su padre.

¡Pues no¡ y tú mejor cállate, que esta boda no solo es por bien mío sino de toda la familia y eso te incluye a ti, tu mujer y tu hijo, dijo en tono autoritario él hombre. Tú ven conmigo Gokú, dijo mirándolo con autoridad.

Departamento de Milk:

Bulma, él no la ama, él se casa con ella obligado. Él y yo teníamos tantos sueños juntos y ahora no son más que "Sueños rotos", decía entre lágrimas la pelinegra.

Si, lo sé Vegueta me lo dijo amiga.

Me dijo que volvería por mí, dijo entre lágrimas.

Milk, lo mejor por ahora es que no te aferres a esa idea, porque si por algún motivo él no puede cumplir su promesa sufrirás más amiguita. Dejémoslo al tiempo y al destino dijo la peli azul.

Salón principal:

Una rubia cogía un lapicero para estampar su firma en el acta de matrimonio mientras en su rostro se estampaba una gran sonrisa.

Joven Gokú decía un hombre mientras le entregaba el lapicero para que haga lo mismo.

Miles de recuerdos llegaron a su mente, desde el día la conoció hasta el último día en departamento de Milk.

-.Recuerdo.-

Entonces este es el adiós, dijo con temor la bella pelinegra.

No Milk, el adiós nunca, solo es un hasta luego, porque yo pienso volver a luchar por ti sin importarme que estés con otro, volveré por ti, dijo el joven dándole un último beso de despedida.

-.Fin del recuerdo: Tiempo actual.-

El joven cogió el lapicero y empezó a estampar su firma en el papel, mientras una lágrima empezaba a rodar por su mejilla. Perdóname mi niña, pero prometo que volveré por ti, pensaba el jovencito de cabello alborotado. Mientras una rubia sonreía de manera triunfal pensando haber cumplido uno de sus objetivos.