La rutina de Yukio se había mantenido igual que antes de estar embarazado. Bueno, no tan parecida o era lo que Hyunjin notaba al ser el más afectado.

Mentira, solo es dramático.

El primer cambio que había notado después de que se enterará sobre el embarazo de Kang Yukio fue el que más le afecto.

El omega no podía soportar el olor del café que Hyunjin tomaba. Cosa que a un adicto de la cafeína como el alfa le era algo muy grave.

Ahora estaba encerrado en la sala de reuniones. Él y una taza de un recién preparado americano que mandó a pedir en el piso inferior mientras Yukio respondía una llamada.

Aspiró el aroma del café y suspiró claramente feliz. No dormía bien, jamás lo había hecho y el café era su mejor aliado desde que tenía uso de razón, o eso creía él.

—Hyunjin...—el omega había entrado a la sala de reuniones sin siquiera tocar, y se encontró con Hyunjin a nada de beber de aquella taza de café.

De inmediato se dió la vuelta para correr al baño más cercano a vómitar el pobre desayuno que había consumido.

Hyunjin soltó un grito demasiado agudo para un alfa antes de pedir que se llevarán el café y que los de limpieza pusieran aromatizantes a lavanda uno de los aromas que calmaba al omega.

Salió y fue al escritorio de Yukio antes de tomar un bolso con los utensilios de aseo del menor para dirigirse al baño. Tocó la puerta del cubículo t asomó su cabeza. El Kang estaba pálido, más de lo usual.

—Toma—dijo extendiendo el bolso, el menor lo tomó rápidamente—. Lamento hacerte vómitar tan temprano.

—No importa—el omega enjuaga su boca antes de mirar al alfa—. ¿Me permites privacidad?

—Umm sí.

Salió y esperó afuera moviendo sus pies algo nervioso. Parecía un niño después de hacer una travesura.

Cuando Yukio salió del baño se encontró los ojos arrepentidos del Hwang.

—Estoy bien, no hagas esa cara de cachorro triste—refutó el omega divertido antes de empezar a caminar hacía su cubículo, de no ser porque el alfa lo detuvo antes de tomar su bolso y la pequeña mano del Kang.

—Estás muy pálido, siento que te puedes desmayar. Pediré que traigan algo de comer, y al salir de la oficina tendrás una cita médica en una clínica.

—¿Por qué?—inquirió haciendo un puchero.

—No es normal que te pongas tan pálido, y pues...necesito saber si pueden hacer algo para que yo vuelva a tomar café—el omega gruñó—. Era una broma. No me muerdas.

Yukio tomo asiento en una silla antes de tomar una botella y beber casi la mitad de su contenido. Hyunjin dejó la bolsa del menor en un lugar en el que no molestara al omega.

El omega limpio sus manos y luego tomó su tableta para empezar a escribir varias cosas a la vez que veía la computadora.

—La presidenta Kim, llegará en 15 minutos para la firma del nuevo contrato. Arregla tu corbata y coloca tu celular en silencio.

—Sí mamá—el omega lo fulmina con la mirada.

—Jinnie—el rubio desordena el cabello del menor antes de entrar a su oficina.

Hizo lo encargado por el omega, mientras llamaba para solicitar la cita del omega. Tenía seis semanas de embarazo no podía evitar el control prenatal.

Salió para preguntarle algo al omega cuando no lo vio; sin embargo, sintió el aroma de otro alfa en el lugar.

Caminó de forma rápida hacía la sala de reuniones y al abrir la puerta se encontró a Yukio acomodando varios portafolios frente a todas las sillas que había en la mesa, mientras una alfa de cabellos negros lo miraba desde uno de los extremos de la mesa.

—Kim—gruñó Hyunjin llamando la atención de la alfa que lo miró de forma burlona.

—Hwang—dijo la alfa volviendo a mirar a Yukio—. Tu asistente se ve algo enfermo. ¿Estás mal, Yakishi?

—Es Yukio, presidenta Kim, y no simplemente es la falta de sol—dijo para continuar con su labor antes de ver a Hyunjin que seguía matando a la alfa con la mirada—. Jinnie—llamó en voz baja haciendo que el alfa se sentará—, calma. Iré a llamar a los abogados, ¿desea algo de tomar presidenta?

—Champagne o algo de vino.

El omega no dijo nada, ¿quién era el para juzgar a los alcohólicos cuando su jefe era un adicto del café?

Abrió la puerta para salir pero la brisa del aire acondicionado lo golpeó desprendiendo su aroma.

La alfa azabache olisqueo el aire sintiendo esas feromonas que había sentido tantas veces —al tratar con Hyunjin en distintos negocios— con algo distinto.

Se podía sentir algo maternal. Leche materna, talco de bebé. Abrió sus ojos desmesuradamente al sentir eso y miró a Hyunjin que la fulminaba con la mirada.

Ninguno se agradaba pero sus empresas hacían el suficiente dinero para soportarse.

—Hwang, ¿sabes que tu asistente está en gestación?—la pregunta de la Kim hizo a Hyunjin mirarla claramente asustado—. ¿No lo sabías?

Debía disimular y rápido.

—Claro que lo sé, está esperando a mi cachorro.

Había sido demasiado directo, y se dió cuenta cuando Kim se ahogó con su propia saliva.

—¿Qué?—simplemente sonrió. Yukio lo mataría. Aún estaban pensando cuál sería la historia tras del embarazo para que les creyeran—. Um, felicidades, ¿creo?

—Gracias.

El silencio fue incómodo y durante la reunión, Yukio estuvo extrañado del silencio entre ambos presidentes de las dos compañías. Por lo general siempre decían comentarios sarcásticos sobre el otro.

Al estar firmado el contrato, la Kim se retiró rápidamente, y Hyunjin solamente se llevó a Yukio para que comiera. Estaba muy preocupado por la mala alimentación que el omega llevaba.

Apenas Yukio había tomado sus palillos cuando el celular del omega sonó. Lo tomó y notó que era la madre de Hyunjin.

—¿Quién es?—inquirió el alfa.

—Tu madre—el alfa frunció el ceño y tomó el celular para contestar.

—¿Mamá?

—¡Me harás abuela!—él fuerte grito de la omega al otro lado del teléfono hizo que el omega mirará a Hyunjin asustado.

—¿Qué?

—¡Yukio y tú esperan un cachorro! La presidenta Kim me acaba de llamar para felicitarme—Yukio mataría a esa alfa.

—¿Podemos hablar después? Llevaré a Yukio a una clínica después de que coma algo.

—Los esperamos en la cena. Estoy muy feliz, ya le dije a todos que pronto habrá un nuevo cachorro en la familia Hwang.

Y la llamada finalizó. Yukio miró a Hyunjin.

—¿Cómo la presidenta Kim se enteró?

Y tragó grueso.