Seok Jin sabía que la paz de esos otros cuatro días no sería eterna. Podía sentir la tensión y el plan ser trazado con paciencia por los ingleses. Odiaba ser pesimista, pero era la realidad, sabía que algo frío se traían ellos entre garras. JungKook y su madre parecían estar al tanto también. Con los días se ponían cada vez más tensos y nerviosos, como si presintieran algo de lo cual ni ellos mismos podrían hacer algo al respecto.

La Manada Secreta intentaba buscar una solución, pero las cámaras del edificio no funcionaban y ellos no podían arriesgarse a poner nuevas. Sería una misión suicida y ya bastantes problemas tenían.

En ese tiempo de "paz", NamJoon y DongYul se habían recuperado bastante de las heridas. Ya podían salir a dar una tranquila caminata por el pasillo y comer por cuenta propia sin sentirse demasiado débiles. Jin solía bromear diciendo que era gracias a los cuidados excesivos de Alex y ChungHee, pero sabía que ambos eran alfas fuertes, esas heridas, aunque fueron graves, sanarían rápido en ellos.

Por otra parte, JiMin había contado dos días atrás que YoonGi estaba raro. Pero pronto dejaron de darle importancia diciéndole que eso se debía a que su pareja era un viejo profesor que seguro tenía algún problema respecto a su edad o quizás ya había comenzado a tener reuma. O tal vez se trataba de la andropausia, aunque JiMin lo negaba diciendo que el apetito sexual de su pareja era el mismo de siempre. Bueno, como siempre, eso no era tan importante.

SoMi, por otro lado, había dado sus primeros pasitos. Fue un momento importante que Sun Hee filmó de mil ángulos diferentes. Sus amigos insistieron tanto que terminaron reuniéndose todos en la casa para ver a la pequeña y hacer que caminara hacia ellos, haciendo un pequeño juego de quién era el tío favorito. TaeHyung les había ganado. También Chung Hee, aunque él le había ganado a Sun Hee en el reto del abuelo favorito (algo que solo hizo para molestarla). Dong Yul, por un instante, lo miró con miedo cuando su pareja le dijo de tener otro hijo. Hee Sook intervino haciendo bromas hasta que se olvidaron del asunto, al menos eso esperaba el alfa Jung.

Seok Jin veía a JungKook jugar con SoMi en el jardín, haciéndola caminar en el césped y mostrándole las diferentes flores que Sun Hee amaba. La pequeña sonreía y miraba a su padre, quien cada tanto dejaba un beso en su mejilla como muestra de cariño.

-¿Tae te dijo algo?-preguntó Sun Hee en un tono bajo cuando se acercó a él, simplemente negó en respuesta-Nadie puede saber nada, es estresante.

-Necesitaríamos nuevas cámaras, pero es una tarea suicida.

-¿No pensaron en pedirle a Aiden ayuda?-Jin volvió a negar.

-No confiamos del todo en él. Si llega a ser un doble agente, es probable que nos delate y nuestro plan se vaya a la mierda-dijo mirando a SoMi arrancar una pequeña flor que le dio a JungKook.

-Chung Hee está preocupado, dice que ahora que no tenemos vigilancia sobre ellos es más fácil que ataquen por sorpresa. Ya tuvimos esos ataques y no terminaron bien, es mejor evitarlos.

-¿Tienes algo en mente para evitarlo?-Sun Hee negó derrotada.

-Esto es más difícil que los Marginados, a este paso...lograrán darnos donde más nos duele-los ojos de Jin fueron de su alfa a su pequeña omega.

Sun Hee asintió, mirando a su nieta y a su hijo. Abrió la boca, dispuesta a decir algo que jamás Jin escuchó porque la voz de Hee Sook la censuró al instante. La omega se giró a mirarla ante el llamado y, por la mirada de su alfa, sabía que no eran buenas noticias.

-¿Qué pasa?-le preguntó acariciando el brazo de su pareja, Hee Sook la miró.

-Mis padres están aquí-la información hizo que Sun Hee apretara los labios-Sé que no es agradable, pero deben venir. Quieren conocer a SoMi.

Sun Hee se veía claramente dispuesta a negarse, pero Jin intervino.

-Iré a decirle a JungKook-Sun Hee bufó y se quedó ahí para esperarlos mientras Hee Sook iba con sus padres.

JungKook no recibió muy bien la noticia, a decir verdad le había disgustado. Cuando su madre los había llamado tuvo que contarles la verdad, que realmente SoMi no era una Jeon como se les dijo en un inicio o, de lo contrario, no entenderían el problema que estaban teniendo. Ellos no estuvieron contentos y se mostraron en contra, pero aceptaron ayudar.

El alfa tomó a su pequeña en brazos y decidió entrar a casa para terminar con todo de una vez. Jin, por su parte, no estaba muy feliz de verlos por primera vez. Los Jeon, por lo general, estaban lo suficientemente ocupados como para jamás visitarlos, aunque según Sun Hee era una simple excusa ya que no la querían a ella y evitaban verla. Además, no parecían ser unos amorosos padres.

Al llegar pudo notar la mirada de Jeon Chin Hwa hacia su hija. El alfa parecía repudiarla, mientras que la omega, Jeon Jin Kyong, solamente miraba a su hija y su nieto.

-Sang, ha pasado tiempo desde la última vez que nos vimos-dijo la omega, con voz casi solemne y seria, irguiéndose en su corta estatura mientras miraba fijamente a Sun Hee.

-No me hubiera molestado que pasara más tiempo-dijo la omega, cruzándose de brazos, realmente estaba descontenta con las visitas.

-Tuvimos que venir, hay problemas y tenemos que ayudar a solucionarlos, al parecer-la voz dura de Chin Hwa le recordaba a la de JungKook cuando se enojaba-¿Dónde está la pequeña y su padre? Me gustaría saber quiénes son los principales causantes del problema antes de proseguir.

Una mueca de desagrado se pintó en el rostro de su suegra, pero no dijo nada. Hee Sook se puso al frente y con su mano lo señaló a él y a la pequeña SoMi.

-Jeon Seok Jin y Jeon SoMi-presentó ya que nunca antes los habían visto, siquiera por fotos.

Chin Hwa los analizó con su dura mirada antes de chasquear la lengua.

-No puedo creer que vine hasta aquí para esto-murmuró, aunque Sun Hee lo escuchó y le gruñó.

-Te invito a marcharte de esta casa entonces, tu presencia no es necesaria.

-Nuestra hija no nos dijo lo mismo-dijo Jin Kyong mirándola, por un instante Jin se preguntó si realmente esa omega le enseñó a Sun Hee a defenderse.

-Su hija tuvo un momento de desesperación, eso es todo-Hee Sook tomó la mano de la omega para que se calmara, pero Sun Hee, descontenta con la visita, iba a ser difícil de calmar.

-Aun así, sería bueno que estemos. Aunque, sinceramente, me da lo mismo si matan a la niña o no. No es una Jeon, no vale la pena el esfuerzo-dijo cruelmente Chin Hwa, mirando despectivo a la pequeña omega en brazos de JungKook.

-Entonces váyase, no necesitamos aquí a un alfa viejo y estúpido para que nos ayude-dijo Seok Jin enojado, tomando a SoMi en brazos dispuesto a irse.

-No tengo por qué irme-dijo el alfa molesto por el atrevimiento del omega-esta es mi casa, no tuya. Tú solamente vives aquí porque mi hija es demasiado generosa.

-Lo sé, si su hija no fuese generosa usted no estaría aquí-dijo Jin mirándolo, no permitiéndose ser intimidado por el arrugado alfa.

Chin Hwa, sintiéndose ofendido, le gruñó al omega quien, por instinto, se encogió en su sitio pero le gruñó en respuesta. SoMi, al escucharlo, se escondió en su cuello temerosa. Aquello había sido casi una invitación a un enfrentamiento. Jin lo sabía, en especial cuando el alfa avanzó unos pasos amenazante hacia él. Sun Hee intervino, poniéndose frente a él.

-Antes de que lo toques te haré una vasectomía con un abrelatas-amenazó firmemente, sin bajar la mirada.

El alfa sacó sus garras, enojado y casi descontrolado dispuesto a atacar por la osadía, cuando Hee Sook tomó su muñeca para frenarlo.

-Aléjate-gruñó mostrándole los colmillos, las garras presentes en sus manos-o lo lamentarás.

Chin Hwa era un alfa inteligente, sabía que enfrentarse a su hija sería una batalla perdida. Él tenía sesenta y ocho años, veintidós años más que Hee Sook.

-Será mejor que sepas que esto es una pérdida de tiempo. Puedes entregarlos y librarte de todo por el bien de todos.-murmuró cerca de ella, aunque ellos lograron oírlo.

Pensaban que realmente le importaba poco si lo escuchaban o no.

-Ahora, si nos disculpan, tenemos que ir a descansar. El viaje fue largo-dijo Jin Kyong tomando del brazo a su esposo para encaminarse a alguno de los cuartos de arriba.

Pero antes de empezar a subir la escalera, Hee Sook decidió aclarar algo.

-Si agreden verbal o físicamente a mi esposa, mi hijo, mi nieta o mi yerno, tengan por seguro que ya no volverán a ser bienvenidos aquí y que, además, deberán sacar pasaje a otro lugar porque se irán inmediatamente de aquí, ¿oyeron?

-Me quedó claro-dijo entre dientes Chin Hwa antes de desaparecer de la vista de todos.

Definitivamente, Jin pensaba que la visita de los Jeon solamente pondría todo más tenso.

***Cacería de omegas***

A la noche, luego de una incómoda cena, Jin fue a su habitación. SoMi dormía luego de un largo día, tranquila en su cuna sin ser acechada por los ojos duros de Chin Hwa y los despectivos de Jin Kyong. Mentalmente se sentía agotado, la simple presencia de los padres de Hee Sook era mala y terminaba sus energías en un chasquido.

-Bebé-cuando JungKook entró, cerró la puerta con seguro-¿SoMi duerme?

-Sí, está cansada. No me extraña, el matrimonio de arrugas la cansaron.-comentó tomando su pijama para comenzar a colocárselo.

-Lo sé, mis abuelos son molestos. Nunca tuve mucho trato con ellos pero el poco que llegué a tener me bastó para desear no verlos seguido.

-¿Cómo es que tu mamá no es como ellos?-JungKook comenzó a quitarse la ropa también para reemplazarla por el pijama, Jin terminaba de abotonarse la camisa de seda.

-Por mami, ella la cambió y por eso a mis abuelos no les agrada mami. Si hubieran tenido otro hijo ese seguramente hubiera heredado el liderazgo y el poder y mamá estaría como segunda al mando. Pero solo pensaron en tener una hija así que-el alfa se encogió de hombros.

-Dime que no todos eran así-su pareja sonrió y negó.

-Los padres de Dong Yul, Young Soo y DaHyun no lo son. Son más simpáticos, aunque Jung Chung Ho y Min Iseul cambiaron tras el fallecimiento de sus omegas. Pero, por lo que recuerdo, eran buenos alfas, simpáticos y no tan estrictos como mis abuelos.-tras ponerse la pijama, JungKook se metió en la cama-¿Sabías que antes de estar con mami, mamá no se llevaba bien con Young Soo, Dong Yul y DaHyun?

Eso era algo nuevo. Seok Jin conocía a la alfa amable que lo aceptó en su familia, no a la que alguna vez fue gracias a sus horrorosos padres.

-No, pensé que siempre se llevaron bien.

-No, mamá no solía tener una buena relación con ellos, ya sabes, ideologías diferentes. Mis abuelos tenían la idea de que no importaban las parejas destinadas, lo importante era conseguir un omega que pueda dar un alfa, para así tener un solo hijo que era lo suficiente para evitar guerras entre hermanos. Mamá pensaba así, hasta que conoció a mami, su pareja destinada. Mi abuelo alguna vez conoció a su pareja destinada, pero jamás quiso nada con ella, así que luego de que ella insistiera para estar con él, la asesinó, creo que más que nada para evitar caer en la tentación de ser feliz. Así que libre de omega, se casó con mi abuela y la marcó. Una historia horrible, bueno, al menos para mí. Mis madres me enseñaron a amar de verdad, a valorar, a apreciar y no simplemente a desear el poder.-cuando se acostó, JungKook lo tomó de la cintura y lo acercó a él-Fue por eso que, aunque aceptaron a SoMi cuando pensaron que era Jeon, se sintieron decepcionados de que sea omega.

-Piensan...muy arcaicamente-comentó apoyándose en el pecho de su alfa-Sun Hee hizo un buen trabajo con Hee Sook.

-En realidad, mamá cambió su pensar antes de estar juntas, luego de darse cuenta de lo que mami provocaba en ella. Se dio cuenta de que lo que decía su padre no era muy acertado, que amar no era malo y que básicamente le importaba poco tener o no un hijo alfa si podía estar con mami. Aunque tuvieron suerte de tenerme a lo primero, porque mami tiene problemas para quedar embarazada y mantener un embarazo. Otro punto en contra para mis abuelos.

-Tus abuelos harían bien en dejar de molestar y simplemente irse a un geriátrico-JungKook rio.

-Mami siempre dice eso, aunque ella no dice lo del geriátrico. Ella es más cruel-Seok Jin se imaginó lo que le desearía a sus suegros y, sinceramente, no podía culparla-. Como sea, vamos a descansar, estoy cansado.

-Sí-Jin se acercó y le dio un pequeño beso en los labios-espero que mañana sea un día mejor.

-Yo espero despertarme con la noticia de que los ingleses se murieron durmiendo-comentó el alfa sosteniéndolo fuertemente con su brazo.

Seok Jin asintió contra su pecho y cerró los ojos. Con el matrimonio Jeon en la casa el día difícilmente sería mejor, pero esperaba que, al menos, no hubiera problema con los ingleses.

Quería decir que estuve pensando y he llegado a la conclusion de hacer una precuela donde narraría la historia de los padres de jk, jin, jm, jh, nj, yg y th, entre otras pequeñas cosas, aunque no sé aun cuando lo subiré

Nos vemos cuando tenga el proximo! besos :D