Confusión en los sentimientos
En el Santuario
Artemisa llego a su casa, se recostó en su cama y solo recordó aquel día tan terrible
Flashback
Corrí lo más rápido que pude, no pude ser, me van alcanzar, en eso vi un árbol había un agujero, me metía esperando que no me encontrarán, estaba asustada llorando, estaba bastante cansada, después no escuche pasos, ni voces y me quede dormida, al día siguiente, salí de mi escondite, camine sin rumbo, tenía hambre, sed...
Había pasado bastante tiempo, la niña seguía caminando, hasta que llego a un pequeño pueblo, quiso correr pero ya no tenía energía, antes de llegar a la entrada se desmayo... cuando despertó, una anciana estaba a su lado.
- Vaya ya te despertaste ¿cómo te siente?
No conteste.
- Me llamo Mima, te encontramos en el camino desmayada y te trajimos aquí, ¿dónde están tus padres?
No sabía, estaban en casa y no sabía que les había pasado, tal vez estaban muertos... ese pensamiento me puso demasiado triste.
- No lo sé...
- ¿Tienes a alguien más?
- No –si le dijo de mi hermano lo pondré en peligro- estoy sola.
- Muy bien descansa pequeña.
La niña durmió bastante... cuando se despertó se sentía mejor, salió del cuarto buscando a Mima...
- Linda, que bueno que ya te despertaste, toma come algo.
- Gracias, me llamo Artemisa.
- Qué lindo nombre y ¿cuántos años tienes?
- 5 años.
La mujer le sonrió, Artmisa se dispuso a comer, Mima, le platicaba que habían viajado para visitar a unos familiares de su esposo, que ellos Vivian en Rodorio, en eso llego el esposo de Mima...
-mira que tenemos aquí, me alegra que estés bien, pequeña.
Después de eso, los escuche hablando sobre mi y que iban hacer, me querían llevarme a la policía para que me pudieran ayudarme, yo les dije que no, que no tenía a nadie que estaba sola, que no me dejaran , se veían buenas personas, tanto que decidieron adoptarme y llevarme con ellos a Rodirio.
Fin del Flashback
En eso tocaron la puerta con mucha insistencia...
- Ya voy, que pesado.
- Rayos, del llanto, al enojo, esa es la Artemisa que conozco.
- Jaja que gracioso Camus, hoy comiste payaso, ¿Qué ocupas?
- Vaya alguien no está de humor, nada, solo pase a verte, como hoy es tu cumple, quería ver si pensabas hacer algo.
- Disculpa, pues pensada ir con Mima y Marcus, siempre me hacen algo este día ¿por?
- Ya veo, pensaba que si querías ir a cenar, yo invito.
- Vaya, tan esplendido, dime ¿qué quieres? Y no salgas que por mi cumpleaños.
- Uno ya no puede hacer nada lindo, digo somos amigos.
- Si, amigos... -dijo un poco decepcionada- está bien te veo a las 7 pm en Rodorio.
- Va, ahí te veo.
Amigos... si amigos, porque él, en un principio fue un antipático conmigo, pero el universo la trae contra mí, pero que es esto que siento sera que me guste o solo le tengo un cariño por lo cercanos que somos, ahora que lo pienso jamás lo he visto sonreír... bravo una más en mi lista de confusión.
Era medio día, Artemisa se metió a bañar, no quería que se le hiciera tarde, porque tenía varias cosas que hacer y quería ir a hablar con Shaka sobre su sueño, ya que era el único que conocía sobre la existencia de su hermano y su pasado, no porque se lo contara, de alguna forma Shaka lo había descubierto, una parte de mi se sentía aliviada de tener a alguien con quien hablar.
Salió del baño se puso lo primero que vio, unos jeans y una blusa blanca, tomo rumbo... la primera casa fue la de Aries, se le hacía raro... el caballero de esa casa, nunca estaba, de hecho ni se acordaba de cómo era.
La siguiente casa fue la Geminis, ahí se encontraba Saga y Kanon.
- Artemisa... feliz cumpleaños.
- Saga, Kannon, gracias que gusto verlos.
- Si lo mismo decimos –dice Kannon- a ¿Dónde vas?
- Voy a ver a Shaka.
- Ya veo, toma de parte de los dos – Saga le entrega un paquete-
- Gracias no se hubieran molestado -lo abre- que lindos son unos aretes de la constelación de Géminis.
- De nada, sabes que te queremos – dijo saga-
- Kannon: Si solo porque eres de nuestro mismo signo, porque si fueras de otro, por ejemplo Leo, que terrible tragedia – saga le da un codazo- solo te falto un hermano gemelo y serias nuestra adoración.
- Ya cállate, eso a que viene al caso -dijo Saga-
- Jajaja déjalo, Eres malo, pero si jajaja los quiero nos vemos luego.
Salió de la casa de Géminis escuchando como Saga regañaba a su hermano, en el camino no pudo eviatar la risa de imaginar esa escena. En fin siguió su camino hasta que llego a la casas de Cáncer, donde se encontró con Afrodita algo que le parecio extraño ya que este no era su templo.
- Querida, feliz cum... pero, no me digas que estarás vestida de esa manera para tu cumpleaños.
- Pues... si, que tiene.
- - la revisa de arriba abajo- es que no te has visto, te vez terrible, debes de verte espectacular es tu día.
- Tu sabes que no me agrada mucho mi cumpleaños.
- A mi no me importa, no puedes verte así hoy ni nunca ¿tienes algún plan?
- Si, voy a ir con Mima y Marcus... aaah y Camus me invito a Cenar.
- ¿Cómo dices?, copito de nieve al fin se animo.
- ¿Qué?
- Sí, que la nevera, por fin te invito salir... ya era tiempo.
- Lo mira raro-
- No me digas que no te habías dado cuenta, a él le gustas.
- Aja, si claro, él y yo somos amigos.
- Son tal para cual, te lo digo yo y todos, a él le gustas, pero no lo demuestra... en fin pásate por mi casa en un hora para arreglar todo el desastre que eres.
- Si claro, por cierto, ¿qué haces en este templo?
- Nada, cállate y vete tienes otras cosas que hacer.
Qué cosas dices Afrodita, ojala fuera cierto que le gustara, pero bueno...
Salió de la casa Cáncer recordando lo que dijo Afrodita, hasta que por fin llego a Virgo.
- Shaka –grita-
- Aquí estoy, no grites.
- Disculpa, quería contarte algo.
- Si dime.
-le cuenta sobre su sueño-
- Ya veo.
- Crees que signifique algo, el sueño ha sido recurrente en estos meses.
- Puede que sí, dicen que los gemelos tienen una conexión.
- Sí, pero aun no entiendo.
- Eso es algo que no sabemos, tal vez es una señal del universo de que es momento que ambos crucen sus caminos.
- Puede ser... pero tengo años que no sé nada de él, ¿cómo saber donde esta? o si esta vivo.
- El cosmo te guiara, a veces las cosas no son claras como uno quisiera, el destino ya ha lanzado su movida solo espera a que suceda, tu sabrás que hacer cuando el momento llegue.
- Tienes razón, debo de confiar, se que hay una razón por la cual he tenido estos sueños, por eso me gusta platicar contigo siempre haces que me tranquilice.
- De nada, para eso están los amigos – se queda en silencio por un buen momento.
- Shaka, Shaka, ¿qué te pasa?
- ¿Cómo está eso de que vas a salir con Camus?
- ¿Cómo te enteraste? – se pone pensativa- Afrodita, imposible si apenas le dije.
- Telepatía.
- Chismoso, no puede dejar las cosas así.
- Ya era hora.
- Ahora resulta que todos saben.
- Te diré una cosa, Camus es muy bueno ocultando sus emociones, suele ser muy calmado en los momentos tensos, pero contigo se muestra diferente, es alegre a su modo, se preocupa por ti... raro y a veces se comporta como idiota cuando está contigo.
- Oye... no, yo lo veo igual.
- Claro, claro si tu lo dices, no hay peor ciego que el que no quiere ver, y no, no hablo de Shiryu.
- Vaya- lo mira extrañada- jajaja no sabia que hacias ese tipo de chistes.
- Una vez al año no hace daño, pero ya es suficiente.
-Bien, me tengo que ir.
Me dirigía a la casa de Afrodita, en el camino no pude evitar pensan de verdad le gustare a Camus, es que no me lo puedo creer, creía que me veía como amiga, digo si pasamos tiempo juntos, y desde hace tiempo que me pongo nerviosa cada vez que lo veo, pero yo no note ningún cambio en él como dice Shaka, aunque él lo conocen de más tiempo que yo, Basta, deja esos pensamientos, para que te ilusiones en algo que solo dicen, controla tus emociones como dice Camus.
- Vaya por fin llegaste, - dice Afrodita- ¿estás lista?
- Sí, pero no quiero nada extravagante, quiero algo sencillo.
- Dicen que menos es más, pero conmigo más es más y me vale, el experto soy yo déjame arreglar el desastre que eres.
Paso un buen rato, cuando por fin Afrodita termino, Artemisa se vio en el espejo, no podía creerlo, de verdad es muy bueno haciendo eso, me alaciaste mi cabello, me veo tan diferente, y el maquillaje esta impecable... no sé qué decir más que gracias.
- Solo dime que tienes, mínimo ropa decente porque si no solo serás una andrajosa con buen peinado y maquillaje.
- Aaah...
- No puede ser.
- Tranquilo, si tengo algo, casi no lo uso, pero es perfecto para esto, gracias.
- Menos mal, que te vaya bien con copito de nieve, me lo saludas.
- No le diré que le dices así, si no lo único que va querer hacer es matarte.
Hola, hola, aqui les dejo un capitulo más, espero les guste...
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