Un sueño
Las oscuras tinieblas de la oscuridad, el silencio reinaba se podía escuchar las respiraciones de los espectros caminando por el inframundo sentada en una roca observando el cielo estrellado en el manto de la oscuridad que le rodeaba soltando un suspiro de cansancio a la lejanía se podía observar como un pequeño castillo donde descansaba el rey del inframundo su alma vagaba como una pequeña esfera de luz roja.
Pandora al estar observando el cielo todo estaba tranquilo en su entorno hasta que una presencia le recorrió un escalofrió al voltear se arrodillo unos momentos para después levantarse y observar aquella presencia que le otorgaba respeto.
Pandora: –Mi señor Hades–mirando fijamente aquella esfera de luz que apareció cerca de ella
Hades: –Pandora es hora de despertar a los espectros–con voz gruesa y directa
Pandora: –Como ordene mi señor Hades–con una seriedad en su rostro ante su señor para empezar a caminar al castillo donde revivirían a los espectros para la batalla
Cuando llegaron al palacio Hades esparció una luz de color rojo por todo el lugar donde al poco tiempo una sala donde había cuerpos como una pasarela donde la luz enfocaba sus cuerpos, cuando la luz roja toco sus cuerpos se comenzó a sentir sus presencias a través de sus cosmos que volvían a renacer eran nada más que los espectros caídos de la antigua guerra santa.
Sus cuerpos comenzaron a responder donde una pequeña sonrisa adorno el rostro de Pandora y mirando de reojo a su señor quien solo elevo más la luz para que le prestaran atención en un segundo todos los espectros al percatarse de su presencia se arrodillaron ante él.
Espectros: –Señor Hades–hablaron en conjunto ante su dios
Hades: –Me alegra que hayan despertado–su voz parecía neutra y fría sin ninguna pisca de verdadera alegría por ver a sus espectros solo estaban con la cabeza agachada esperando las palabras de su dios
Hades: –Como ya saben la guerra santa ya está por dar inicio y los caballeros de la odiosa Athena están rondando por todos lados así que pronto un grupo atacara y más les vale no fallar–lo último lo dijo que una voz intimidante que provoco un pequeño escalofrió a sus espectros que solo atacaron la orden con la cabeza
Espectro: –Nosotros le juramos lealtad al dios Hades–comentaron en conjunto para demostrar unos rostros llenos de determinación como también malicia por ver caer a los patéticos humanos bajo sus manos
[JÁPON, MUSUTAFU]
Los pasillos blancos sin ningún ruido en una habitación un hombre con aspecto de vagabundo descansando sobre la camilla a los pocos minutos abriendo con pesadez sus parpados sintiendo su cabeza palpitar y buscando con la mirada lograr localizarse hasta que enfoca una cabellera rubia descansando sobre el respaldar de la silla observando y tratando de recordar el motivo de su colapsó hasta que unas pequeñas imágenes del sucedo aparecen frunciendo el ceño ante lo sucedido dejando escapar un suspiro de frustración.
Aizawa: –Me gano–murmuro sujetando su cabeza unos minutos para después fijar su vista en su acompañante
Aizawa: –¿Me estuvo cuidando todo este tiempo? –pregunto dentro de su cabeza observando a su amigo con detenimientos algunos segundos para apartar la vista
Mic: –...Aizawa.... Aizawa–hablado un poco soñoliento, pero entendible dejando que su compañero arqueara una ceja por lo escuchado
Aizawa: –No le prestare atención es muy extraño–dicho eso se volvió a acostar dentro de las suaves sabanas de la camilla para dejar que el sueño llegue y cerrar sus ojos
A lo lejos una casa no tan grande un chico se encontraba descansando en su aposento dentro de su sueño se le veía sonriendo junto a su familia en un campo lleno de flores.
X: –Mamá hoy es un día encantador– sonriendo mientras sujetaba su mano
X: –Tienes mucha razón mi pequeño–sonriendo para después desaparecer del lugar
X: –¿Mamá dónde estás? –preguntaba mientras miraba a los alrededores buscando con la mirada
Luego de que desapareciera el lugar se comenzó a tornar oscuro de un relámpago de luz el escenario cambio dejando ver toda una ciudad en ruinas los cuerpos de la gente por los suelos, los gritos y sangre en todas partes.
X: –Que... es .... Ta.... Pasando... –su pequeño cuerpo temblaba un poco por el miedo que veía
Después de ver ese escenario a los lejos se veía como una capilla donde con un poco de curiosidad entro buscando con la mirada algún rastro de alguna persona mientras caminaba dejando manchas de sangre con sus pies por el lugar algo le llamo la atención era un cuadro dejando ver un retrato de su persona.
X: –Soy.... yo...–con un poco de asombro al ver la pintura dentro del lugar donde dentro de la oscuridad se dejó escuchar una voz captando su atención
X: –Pronto despertaras–lo dijo para que el eco de las paredes del lugar llegara a sus oídos del chico
Cuando dijo aquello el chico se despertó de inmediato del sueño su respiración estaba agitada, tenía sudor por todo su cuerpo y un dolor punzante se apoderaba de en su pecho causando que llevara sus manos a su cuerpo, observo el lugar en busca de aquella voz se levantó de la cama para acercarse al balcón observando el cielo nocturno buscando algo de calma sujetando un collar que su madre le había regalado cuando era un niño.
X: –Que extraño sueño... parecía muy real......–dejando escapar un suspiro de cansancio para caminar de nuevo a su cama y volver a dormir
[GRECIA, SANTUARIO DE ATHENA]
Athena quien estaba descansando en sus aposentos percibió el cosmos de los espectros con rapidez se levantó de su cama para salir de su aposento encontrándose en el camino al patriarca que tenía una mirada seria donde ambos caminaron cerca de su estatua para poder conversar.
Shion: –Athena-sama también lo sintió–observando como su diosa asistió con la cabeza
Athena: –El cosmos de los 108 espectros por fin revivieron–hablando seriamente
Shion: –Es verdad, pero aún no han despertado los dioses gemelos–mirando las estrellas
Athena: –Tenemos que ir a buscar los recipientes donde están encerrados de ambos antes de que ellos lo hagan–con mucha seriedad
La mañana ya había llegado al santuario los caballeros que estaban en la sala del patriarca descansando se levantaron a excepción de algunos por ejemplo piscis, acuario, Aries y capricornio que aún seguían dormidos.
DM: –Ja este pececito parece que aun duerme–observando cómo estaba recostado sobre su hombro
DM: –*Solo por esta vez*–con delicadeza se acercó para cárgalo y llevarlo a su templo
Eri: –Sí que papa quiere a mamá–comento susurrando y caminando junto a su papá para ir al templo de piscis
Los siguientes en despertad fueron Milo quien al ver a Camus dormido su corazón se aceleró y lo cargo en forma nupcial para llevarlo a su templo no antes robarle un corto beso en sus labios por otra parte Mü estaba durmiendo en el hombro de Shaka quien apenas sintió algunos rayos del sol decidió despertar a su borreguito.
Shaka: –Mü... despierta–dijo un poco bajo para no asustarlo mientras acariciaba sus cabellos lilas sin que los demás lo notaran
Mü: –Hummm mm...–abriendo un poco los ojos para después bostezar y mirar que Shaka estaba muy cerca de él, logrando que su cara se pongo rojiza
Shaka: – Buenos días–Soltando una pequeña risa al sentir como su compañero estaba rojo no necesitaba tener los ojos abiertos para saber bien que Aries estaba hecho un manejo de nervios ahora mismo
Mü: –Sha-ka... bueno días–ya más calmado sonrió y se estiro unos momentos para ver como su compañero le ofrecía la mano para ayudarlo a levantarse lo cual acepto gustosamente
Shaka: –Vamos a desayunar–dijo para caminar junto a Mü quien tenía una sonrisa de oreja a oreja
Ambos guardianes comenzaron a bajar por las escaleras del santuario donde a la lejanía uno de sus compañeros sentía un poco de celos al verlos tan juntos estaba tan en sus pensamientos sin prestar atención a que alguien lo miraba.
En el templo de piscis su guardián descansaba sobre las bellas sábanas blancas de su aposento en la cocina Death Mask estaba intentando cocinar algo para dar de desayuno a la pequeña Eri en los aposentos de piscis el guardián ya se encontraba despertando.
Dita: –hm ... mm ... –abriendo los ojos poco a poco mientras trataba de localizarse
Dita: –¿Cómo llegue a mi templo? – confundido se levantó de su cama para ir al baño y comenzar a arreglarse una vez termino salió de su habitación ya alistado y cambiado
Dita: –Tengo que ir a ver a Eri–saliendo de la habitación para dirigirse a la cocina donde abrió los ojos al ver lo que estaba frente a sus ojos
Dita: –Death Mask cocinando–sorprendido y llamando la atención de su compañero e hija
Eri: –¡Mamá! –corriendo para abrazarla con una sonrisa en su rostro
DM: –Tienes hambre–saliendo de la cocina con un plato en la mano y dejarlo sobre la mesa
Dita: –Creo que estoy soñando–soltando una pequeña risa para volver a hablar–no creí que cocinaras
Eri: –Papá cocina rico–sonriendo al ver la cara de duda de su madre
Dita: –Eso lo tengo que comprobar–acercándose a la mesa para sentarse
Dita: –Espero no morir por un cangrejo–hablo con burla y escuchando como el otro bufo por su comentario
DM: –Chistoso–desviando la mirada ante el comentario dicho por el pececito
–Dita con todos los modales perfectos sujeto los cubiertos para probar un bocado de la comida de su compañero mientras su hija sonreía cuando lo probo mirado a su compañero que alzo la ceja por la mirada–No voy a quejarme cangrejo esta delicioso
DM: –Soy todo un cocinero–sacando una sonrisa orgullosa en su rostro
Dita: –Ya no seas orgulloso–desviando la mirada, aunque tenía que admitir que si le gusto la comida que preparo
Dita: –¿Una pregunto cómo llegue a mi cama? –alzando su ceja y mirando a su compañero
DM: –Fácil te cargue y te lleve a tu cuarto–alzando los hombros mientras que cierto pececito casi se atraganto por lo que escucho causando una pequeña risa a su hija
Eri: –Está todo bien mamá–acercándose para darle un poco de agua
Dita: –Cof..cof si está todo bien no te preocupes *espero que nadie lo haya visto cargándome todo el camino por los dioses como paso esto*–con un ligero sonrojo adornando sus ojos y mirando de reojo a Death quien estaba de espalda en la cocina
Todos los guardianes ya habían terminado sus respectivos desayunos y acudieron al llamado de su diosa ahora se encontraban arrodillados frente a su diosa para hablar sobre un tema importante.
Athena: –Mis queridos caballeros el día de ayer en la noche las estrellas de los 108 espectros comenzaron a brillar–con un poco de tristeza al saber que la guerra daría inicio
Shion: –Por lo tanto, los caballeros de Escorpio y Acuario irán a buscar los recipientes que contienen las almas selladas de los dioses gemelos junto algunos caballeros de plata–decretando la orden para que ambos guardianes acataran con un asentimiento en sus cabezas
Athena: –También les tengo que informar que los caballeros que irán a la academia serán Piscis, Capricornio, Cáncer y Géminis–Ellos asistieron, pero uno de los gemelos la miro para pedir permiso de hablar
Athena: –Que sucede Saga–mirando a su caballero que procedió a hablar
Saga: –Quería saber cuál de los iríamos a la misión que nos asignara–dejando sonriendo a su diosa
Athena: –En esta misión iras tu Saga ya que para que el santuario no este desprotegido se quedara Kanon en géminis–con una sonrisa tranquila mientras ambos guardianes de géminis solo acataron la orden sin ninguna queja ante su diosa
Athena: –Se pueden retirar, iremos a la academia dentro de 3 semanas–dicho eso todos los caballeros se levantaron para ir a sus respectivos templos
Todos se retiraron de la sala del patriarca dejando solo a Athena junto al patriarca y el caballero de libra que estaban discutiendo algunos asuntos sobre la guerra santa mientras tanto en el templo de Acuario se podía ver al guardián de Escorpio en el regazo de Camus quien leía un libro mientras el contrario jugaba con el pelo del contrario.
Milo: –Cam me gusta tu cabello–pasando sus dedos por la larga cabellera aguamarina
Camus: –Gracias a mí también me gusta el tuyo–sin apartar la vista de su libro
Milo: –Enserio–con estrellita en sus ojos e interrumpiendo la lectura de su compañero
Camus: –Milo no me dejas leer–tratando de apartar la cara de milo
Milo: –Te amo Camus–dijo para acariciar la mejilla del contrario
Camus: –Yo también a ti Milo– acompañado de una sonrisa
Sin nada que decir Milo se acercó a sus labios del contrario para unirlos, Camus por su parte no opuso resistencia y correspondió el beso que poco a poco comenzó a subir la intensidad parecía que estaban realizando una pequeña guerra dentro de sus bocas con sus lenguas.
Milo: –*Me encantan sus labios*–con su mano alejo el libro que tenía en la mano Camus para acercarlo más a su cuerpo
Camus: –*Sus labios saben a manzana*–riéndose internamente por lo que pensaba mientras con su mano acariciaba los largos cabellos del contrario
Cuando se separaron un fino hilo de salivo los unía no paraban de mirarse mientras que el caballero de acuario sus mejillas estaban adornadas de un pequeño color carmesí y el otro sonreía por la vista.
Milo: –Me encantas Camus–sonriendo viendo como el otro sentía como la sangre se le subía a la cabeza
Camus: –Tu igual a mi– lo dijo en casi un susurró que fue escuchado por el escorpión, pero solo alzo una ceja en modo divertido
Milo: –Escuche bien lo que dijiste–con una sonrisa burlona en su rostro
Camus: –No lo voy a repetir–desviando la mira avergonzado mientras escuchaba al otro reírse
Camus: –No te burles mejor voy a preparar algo de comer–apartando al bichito de su lado para levantarse un poco molesto por la actitud de Milo
Milo: –Este enojado cubito–mirando como lo ignoró para seguir haciendo sus cosas
Milo: –*Si está molesto* –pensó mientras se divertía al ver a su cubito comportarse de esa manera
Como pudo se levantó para abrazar a su cubito por la espalda causando que no volteo a verlo solo seguía con sus cosas en un movimiento fugaz el griego volvió a unir sus labios, pero Camus solo frunció el ceño por unos minutos separándose del beso para mirar fijamente al griego que sonrió triunfante.
Camus: –Bicho tonto–mirando fijamente al griego
Milo: –Tu eres mi cubito–sonriendo para darle un corto beso que no dudo en corresponder
Dejando a ambos tortolos en el templo de Sagitario Aioros estaban preparan un rico almuerzo para su acompañante y para él, al terminar se acercó a la mesa que tenía en su templo para sonreír.
Aioros: –Espero te guste Saga la verdad me agrada mucho tu compañía–sonriendo mientras dejaba el plato sobre la mesa solo para que el contrario lo miraba atentamente
Saga: –No te debiste molestar, aunque me trajiste a la fuerza–recordando cómo le propuso almorzar en su templo
Flashback
Todos ya se estaban retirando a sus templos otros acompañados de sus amigos, pero cierto arquerito vio a Saga y con una sonrisa lo llamo captando su atención el cual estaba conversando con su hermano.
Kanon: –Pero mira quien te llama es el arquerito–con un tono de burla hacia su hermano que solo lo miro de mala gana
Aioros: –Lamento interrumpir su conversación chicos–sonriendo causando que rápidamente que el hermano mayor hablara
Saga: –No interrumpes Aioros–devolviendo la sonrisa mientras el otro solo rodo los ojos
Kanon: –Los dejare solo suerte–para empezar a descender a su templo dejando a los dos solos
Saga: –Y... que es lo que me querías decir–mirando al contrario que solo sonrío por unos minutos para después responder
Aioros: –Te quería invitar a almorzar en mi templo–viendo como el otro se sorprendió por lo escuchado
Saga: –No quiero molestarte Aioros–tratando de convencer al arquero solo cruzo los brazos mirando a Saga quien supuso que no aceptaría un no por respuesta
Aioros: –No acepto un no como respuesta–mirando al contrario que sabía que no se rendiría
–Saga solo soltó un suspiro de derrota por lo escuchado cerrando los ojos unos segundos para ver a Aioros que esperaba su respuesta–Ok tu gana acepto
Con toda la felicidad Sagitario sujeto la mano de Saga para empezar a bajar por las escaleras ante el asombro de Saga por la acción realizada de su compañero de armas solo se dejó llevar con una pequeña sonrisa decorando su rostro.
Fin del Flashback
Ambos guardianes comenzaron a comer en tranquilidad Aioros sabía que Saga era de las personas que le gustaba la tranquilidad pues se conocieron de chicos en el santuario por lo que sabía que le incomodaba como también las cosas que le gustan.
Narra Aioros
Desde niños siempre éramos unidos tratando de controlar a los pequeños siempre desde lejos te admiraba y las pocas veces que sonreías me encantaba verte así, aunque también siempre escribía en mi diario diciendo lo que siento por ti sé que talvez no sientas lo mismo y no tengo el valor para decirte.
Narrador omnisciente
Apenas terminaron de comer fueron a lavar los trates una vez terminaron se sentaron para comenzar hablar de cosas triviales que no faltaron las risas por ambos.
Aioros: –Me hace acordar cuando Death, Milo y Aioria siempre te sacaban una vena en tu frente–conteniendo la risa
Saga: –No me lo recuerdes esos tres eran un dolor de cabeza–llevando su mano a su frente para negar con la cabeza
Aioros: –Si tienes razón ellos siempre realizaban travesuras cada vez que podían–sonriendo
Saga: –Tienes razón los únicos que eran tranquilos eran todos los demás menos esos tres mocosos–afirmando con la cabeza
Aioros: –Espero que todo salga bien en la misión de Milo y Camus–dejando escapar un suspiro
Saga: –*Siempre preocupándose por los demás*–mirando con una sonrisa boba en su rostro
Aioros: –¿Qué pasa? porque la sonrisa–mirando como el otro al darse cuenta de lo que hizo desvió la mirada a otra parte causando curiosidad a Sagitario
Saga: –Nada solo pensaba en algo–sin dejar de sonreír
Después de aquel momento divertido entre ambos siguieron conversando amablemente sobre varias cosas y recuerdos que vivieron de niños al igual que sus risas no se hicieron esperar al recordar las travesuras de sus hermanos en ese tiempo por todo el templo.
En el coliseo los caballeros de bronce se encontraban entrenado entre ellos para mejor su resistencia para la guerra santa donde el caballero de Andrómeda y de cisne se estaban tomando un descanso e viendo a los demás entrenar.
Hyoga: –Shun que piensas tanto–mirando de reojo a su compañero que solo sonrío
Shun: –No es nada solo pensaba en lo que sucederá cuando inicie la guerra–sonriendo para tomar un poco de su botella de agua
Hyoga: –Creo que solo nos queda proteger a Athena como siempre lo hemos hecho–mirando un rato al cielo para sentir la brisa
Shun: –Tienes razón me alegro mucho estar a tu lado–levantándose para ir donde su hermano para poder ayudarlo a practicar
Hyoga: –Yo igual Shun–un poco sonriente para dejar un suspiro y ver como uno de sus compañeros se acercaba
Hyoga: –Que sucede Shiryu–viendo como camino para sentarse a su lado
Shiryu: –No solo descansó un poco, pero tu cuando le dirás–con sus brazos cruzados y mirando a su compañero de reojo
Hyoga: –A que te refieres– tratando de sonar confundido ya que tenía una idea de que quería decir
Shiryu: –Sabes a lo que me refiero Hyoga–dejando escapar un suspiro de su boca
Hyoga: –No sé cómo decirle aun no es tiempo–bajando la cabeza para mirar al suelo
Shiryu: –Si necesitas ayuda no dudes en venir–levantándose para caminar en dirección al santuario
Dejando a tras a Hyoga quien solo se quedó pensando en lo que dijo Shiryu aquellas palabras rondando en su cabeza, pero aún no se sentía listo para decirle lo que sentía por Shun por lo que decidió volver a entrenar para despejar su mente de aquellos pensamientos.
A lo lejos Shun conversaba con su hermano con una sonrisa en su rostro, pero mirando de reojo a cierto rubio que entrenaba aquello no pasó desapercibido por su hermano quien lo miro con una ceja alzada.
Ikki: –Que sucede estás viendo mucho a Hyoga–mirando con curiosidad a su hermano que se puso nervioso
Shun: –Que dices hermano no es verdad solo me llama la atención que este muy emocionado por entrenar eso es todo–sonriendo ante la mirada de su hermano
Ikki: –Soy tu hermano te conozco cuando estés listo para decirme me avisas– para colocar su mano sobre su hombro y empezar a caminar dejando atrás a su hermano
Shun: –No sé qué es lo que pienso realmente–mostrando una cara de confundió que fue notado por su compañero lo cual llamo su atención
Hyoga: –SHUN–captando su atención que solo sonrío al escuchar su nombre
Shun: –¿Qué pasa Hyoga? –respondiendo ante el llamado
Hyoga: –Vamos a entrenar juntos–mientras recibía una sonrisa enorme por su parte
Shun: –Claro que si me gustaría–sonriendo y caminando a su encuentro
Hyoga: –*Tiene una hermosa sonrisa*–para devolver la sonrisa
-------------------------------
MOMENTO DE NARRADOR
Yo: Espero que les guste mucho esta historia, me inspiro mucho ya que soy fan de Saint Seiya y agradezco mucho a las personas que están leyendo este Fic también por el apoyo que le dan a mis otras historias.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro