Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

D

No teniendo tiempo para actuar, Yugi me acorralo contra la puerta, me sentí tan indefenso, casi no puede ver nada entre la penumbra que hay.

— Yugi, debes tranquilizarte. El efecto de la sustancia. —

—Afrodisíaco. — Me interrumpe. — Es un afrodisíaco. —

— Eso. — Le digo, quiero poder distraerlo para poder distanciarlo de mi, si eso pasa, me dará tiempo de salir de la habitación y encerrarlo hasta que pasen los efectos.

— ¿Piensas en dejarme encerrado aquí?. —

Abro mis ojos sorprendido, ¿acaso me ha leído la mente?.

— Se te pueden ver en tus ojos las intenciones que quieres hacer. — Se apega más a mí. — Pero no voy a dejarte Yami. — Siento como toma mis manos . — ¿Sabes por qué?. —

— Temo responder eso. — Contestó con un poco de dificultad, su otra mano se ha dirigido hacia mí parte íntima y va acariciando la de apoco. Inevitablemente sacó uno que otro suspiro y gruñido.

— No tienes por qué tener miedo, Yami. Soló dejame complacerte en todos los sentidos posibles. — Su voz se oye cerca de mi oído, aquel aroma delicioso se vuelve más intenso y me marea. — Déjame saber tus secretos Yami. — Su voz me engatuza, se vuelve deiletante  — ¿Qué es lo que más deseas en el mundo?. —

Suelto un gemido ahogado, me siento tan débil, las fuerzas se me van como la arena entre mis manos, algo extraño me esta pasando.

— Lo que más deseo en todo el mundo. — Otro gruñido sale de mi boca, mi pantalón a sido bajado junto con mi bóxer y mi miembro está expuesto y despierto. — Es a ti. — Confieso.

Enseguida siento como Yugi comienza hacerme una felación, su boca introduce mi miembro sin miedo, su boca es tibia y me hace querer pentrarla de manera tan brusca hasta que me venga, pero me logro controlar. No quiero lastimarlo, alguien cómo Yugi debía ser tratado con las mejores atenciones.

Así que lo separó lentamente de mi miembro, Yugi me ve con necesidad y el deseo se refleja en sus ojos brillantes.

— Tenemos que parar. — Suplique roncamente, si seguíamos de esta manera... Yo realmente me dejaría llevar.

Yugi se levanta lentamente, se acerca más a mi, toma mis mejillas con delicadeza, sus ojos vieron fijamente mis labios.

— ¿Me dejas besarte?. — Me pregunta tímidamente. Mis mejillas se sonrojan por el tono tan tierno en lo que lo dijo.

— Eso no se pregunta, Yugi. — De inmediato le robo un beso y me alejo, el me ve un poco sorprendido. — Eso se hace. —

Y no tarda mucho para que Yugi comenzará a besarme, me besa con algo de torpeza, pero a la larga comprende un ritmo que me hace que lo siga, hago que ese beso se haga más húmedo y profundo haciendo que mi pequeño comienza a gemir entre los besos mientras pellizco uno de sus pezones.

— No tan fuerte. — Logra articular con sus labios rojos e hinchados.

— Lo siento, es solo que no puedo evitarlo. Me vuelves loco. — Confieso, el aroma que desprende Yugi funciona como si fuera alguna sustancia que me hacia revelar la verdad de mis pensamientos y mi corazón. Me sentía al borde del colapso, aquellos efectos que producía ese afrodisíaco experimental era que  confesaras todo de ti.

“Es por eso que se le suministraron, para hacerle confesar todo... Mi lindo Yugi, es bueno saber que llegaste a tiempo a la basé. ”

—¡Ah!... —

— Lo siento. — Le susurro a la par de su oreja, Yugi ladea su cabeza al otro lado dejándome expuesto su cuello, estoy sentado en su cama, Yugi esta sobre mis piernas, mientras lo preparo con mis dedos que salen y entran en su entrada. —¿Duele?. — Le preguntó.

— Se siente muy raro... Ah... Pero me gusta. — Eso era lo único que quería oír, él lo disfruta, le gusta. — Yami, ¿por cuánto tiempo...? ¡Ah!... ¿Por cuánto tiempo me has querido?. —

Las preguntas siguen y yo confieso nuevamente, me es inevitable no responderle, aquel aroma me obligaba a responderle.

— Desde hace mucho tiempo, aibou. — Le digo, beso su cuello mientras meto el tercer dedo, Yugi gime de nuevo y prosigo. — Desde la primera vez que te vi, ¿y sabes?, me ha costado mucho el poder contener mis sentimientos hacia a ti, porque se, que no estas preparado para tener una relación conmigo. Pero aun así, déjame. —Beso. —Estar a tu lado.  — Confesé y se me llenan los ojos de lágrimas.

Duele mucho no callarme la boca, he confesado demasiado y me duele pensar que cuando este termine, Yugi me odiara. Es por eso que yo debía de pedirle esto.

— Por favor, solo por esta noche perteneceme y déjame pertenecerte. —

Y la respuesta llega de inmediato cuando los labios de Yugi besan los míos con algo de dificultad cuando me toma del mentón y me atrae a él.

El beso termina, me mira fijamente a los ojos y me sonríe.

— Esta bien Yami. Solo por esta noche. — Me limpia mis lágrimas y comienza a mover sus caderas conforme voy pentrandolo. — Gracias por confesarme tus secretos. — me susurra al final.

Siento cómo mis dedos están humedecidos y como su entrada me aprieta como si deseara algo más, esta ansioso y yo también.

—¿Tienes hambre?. — Le preguntó divertido.

— Sí, tengo mucha hambre. — Me responde con el mismo tono.

Sacó mis dedos de su interior, se acomoda mejor entre mis piernas, ahora está volteado de tal forma que nos vemos cara a cara.

— Quiero verte. — Me dice mientras toma mi miembro. — Quiero ver tus expresiones. — Lentamente va introduciendo mi miembro en su entrada, gruñó lleno de placer, su entrada me da una cálida bienvenida, me aprieta gustosamente.

— Eres tan... Tan... — Jadee un poco cuando estuve por completo dentro de él. — Eres tan estrecho. —

— ¿Duele?. — Me pregunta con curiosidad. Niego de inmediato, lo que me sorprende es que Yugi no se ha quejado de dolor.

— ¿Y a ti?. — Le preguntó.

El me sonríe divertido y pícaro.

— Me has preparado muy bien. — Me dice, mi sonrojo aumenta mucho, siento que voy a explotar de la vergüenza. — Además... — Prosigue. — Antes de que tu llegaras me estaba preparando para ti. —

— ¿P-para mi?. —

El asiente.

— Sabía que vendrías. —Me dijo.

×Continuará...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro