•Capítulo 2•
~•Mikaela•~
Ya había llegado al instituto acompañado por Lacus, caminábamos rápidamente por los pasillos en dirección a clase que entre poco iba a comenzar.
Pero yo ya estaba mas irritado que un p*to limón (y eso que aun no veía la cara de ogro del profesor de geografía) por una querida persona que podría estar seguro que golpearía a cualquiera quien se me cruzase por delante
–¡Tu eres muy bueno en química y en matemáticas! ¿no podrías enseñarle a tu querido amigo? –Lacus llevaba todo el camino suplicando me que le enseñara química y matemática ya que había reprobado dos exámenes de esa materia–.
Y por eso yo había perdido una tranquila mañana con arco iris y unicornios volando por el cielo rosa con nueves de algodón de azúcar.
–¡Ya te deje que no! – detuve mi caminar y le grite sin poder contenerme que provocó varias miradas curiosas– si quieres aprobar tu próximo examen ¡agarra tu jodido cuaderno y ponte a estudiar!–.
Y es ahí cuando quise tomarle una foto, porque su cara debía ganarse un Premio Oscar
–¡Que malo! – exclamó sin poder creerlo– por esa razón solo me tienes a mi –.
Que interesante....una uva me saca de mis casillas...¡Dios!
–¡Callate!, y deja el discurso para mas tarde joder –acelere el paso dejando a Lacus detrás llegando al aula–.
Eso me pasa por ser amigo de alguien así.
Entre a clase y fui a mi lugar al lado de la ventana, deje mi mochila en el respaldar de la silla y me senté.
Coloque mis libros debajo de la carpeta colocándolos en orden.
Lacus entró y dejo sus cosas al lado mio y se sentó. Me empecé a aburrir entonces saqué mis audífonos.
El profesor entró a clase, guardé rápidamente mis audífonos mientras observaba al hombre que paso a su pupitre y dejó sus cosas.
–Buenos días alumnos, hoy a llegado un alumno transferido,–miro hacia la puerta– pasa y presentate–
Dejé de mirar al profesor y observé el cielo azul que se mostraba por la ventana.
-–Yūichirō Ichinose, un gusto –la voz de un chico que capturo mi atención se escucho en la clase–.
No me pude contener y miré hacia al joven al frente mio.
Unas hermosas esmeraldas aparecieron en mi campo de visión.
Estas me miraban curiosas pero poco después sentí algo que nunca antes había sentido.
Era padecido a una descarga eléctrica que recorrió todo mi cuerpo.
Me pareció raro y desvíe la mirada hacia la ventana.
–Bueno, sientate al lado de....Hyakuya, Lacus sientate al lado de...Rene.–
Escuche bufar a Lacus, tomo sus cosas y se alejo de mi lado.
El chico de un ojos esmeraldas se acercó con las manos en sus bolsillos.
–¿Tu eres Hyakuya?–me preguntó el chico–.
No soy bueno interactuando como los demás, no sabia si hablar o no.
–S-si– opte por hablar pero me arrepentí al instante, mi voz salio muy temerosa que me dio ganas de golpearme–.
Sonrió mostrando los dientes y se sentó junto a mí.
–Un gusto ¿tu nombre es Hyakuya ó ...-
–Me llamo Mikaela Hyakuya– mostré una pequeña sonrisa–
–¡Hey! Ustedes dos ya dejen de hablar que la clase ya empezó– el profesor nos miro enojado, yo desvíe la mirada incomodo–.
Empezó la aburrida clase y el chico no volvió a hablarme.
Seguro le caigo mal— pensé
En medio de la clase vi al chico de reojo cuando escribía algo en su libreta, puso el cuaderno delante mio y en una de las esquinas decía algo, empecé a leer.
Lo siento, solo quería hablarte y nos regaño el profesor :'u
Lo mire de reojo y su mirada estaba en mi, me sorprendí un poco.
Tome un lápiz de mi mochila y escribí en la libreta.
No importa, además no era muy importante
Pase la libreta en frente de el y leyó lo que escribí, después tomo un lápiz y escribió.
Me pasó la libreta y leí.
De verdad lo siento D":, tu letra es muy bonita
Sentí la sangre acumularse en mis mejillas, moví mi cabeza a otro lado para que no me viera la cara.
Tomé la libreta y escribí.
Ah gracias, lo siento no soy bueno interactuando con los demás
Le pase la libreta y me arrepentí.
Seguro pensará que soy estúpido– pensé
Escribió y leí
En serio? Pero estas hablando conmigo >:v//
Reí bajo por como lo intérprete en mi mente.
Me refiero a hablar con los demás no escribir
Le pasé la libreta, escribió y leí.
Ahh! Que bruto :"b
Sonó la campana del receso interrumpiendo la clase y a nosotros.
–Bueno, seguiremos con el tema después del receso, salgan todos– el profesor dejo la tiza en su pupitre mientras nosotros nos parábamos de las mesas listos para salir .
–Disculpa...– la voz de Yūichirō se escucho detrás de mi, voltee y lo mire a los ojos echando la cabeza hacia atrás.
Maldición, es media cabeza mas alto que yo.
¿Porque demonios todo el mundo es más alto que yo? ¿porque el universo me odia tanto? ¡¿que le hice yo?!
–Quisiera pedirte un favor...–dijo tocando su nuca– ¿podrías guiarme a la clase 5-C? Soy nuevo y no se donde puede estar –.
–C-claro–respondí algo incomodo– sigueme.
Camine hacia la puerta y podía escuchar los pasos de Yūichirō detrás de mi.
Camine por los pasillos por donde conducía a la clase 5-C, cuando llegamos pude ver a un grupos de chicos que venían hacia nosotros con rostros preocupados, me aleje, ellos notaron mi presencia pero se colocaron a los lados de Yūichirō sin decirme nada o mejor dicho "prácticamente ignorando mi presencia"
–Bakka-Yuu nos tenías preocupados–dijo un peli rosa con lentes– lástima que no estés en nuestra clase–.
–Yuu-kun ¿como llegaste aqui? No conoces la escuela- dijo un castaño-.
–H-ha eso...Mika me ayudo- contestó Yūichirō-.
Diablos...¡espera! ¿¡Mika!?,
Automáticamente todos me miraron interrogantes.
Ahora si que se dan cuenta de mi presencia ¡gracias!—pensé sarcásticamente
Pero hay que admitir que esta situación era algo incómoda
–Ara ara~ pues que extraño que Mikaela-san ayude a otros– una peli morada sonrió pícaramente observándome con ironía –.
–Dejalo en paz enana– dijo Yūichirō–.
–Yuu-san...tienes suerte de que Mikaela-san este aquí pero no tendrás tanta suerte después, nunca se le dice "enana" a una dama – se podía ver como se formaba una aura negra al rededor de la peli morada mientras miraba a Yūichirō–.
Todos se pusieron pálidos mirando a la chica acercarse a ellos.
Pero una chica rubia la interrumpió.
–¡Oigan! Quiero ir a comer me acompañan o se van a quedar aquí como perros– .
–Jajaja, hay Mit-chan obvio que a comer, vamos chicos – dejando atrás a los demás fue caminando a la salida del pasillo como si nada–.
Mejor me voy.
Camine por otra dirección dispuesto a irme pero su voz me interrumpió
–Hey Mika! ¿no vienes con nosotros?–
Voltee y lo observe dudando si responder o no.
–No aceptaré un "no" como respuesta– hablo de nuevo cuando no tenía respuesta de mi parte sonriendo levemente –.
Suspire, no tuve otra opción que asentir y seguir al grupo de chicos que se dirigía al comedor.
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