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"Lo tengo." Dijo Jimin sin aliento con una amplia sonrisa, volviéndose de la computadora para mirar a su amigo tirado en la cama. Taehyung levantó la vista de su teléfono después de horas de solo mirarlo, probablemente enviando un mensaje de texto a Minjae, y le dio a su amigo una mirada en blanco.
"¿Qué?" preguntó, su voz ronca por tanto tiempo de no usarla.
"El refugio de animales ... conseguí el trabajo" elaboró Jimin, su sonrisa cada vez más amplia. "Dicen que no pueden darme un puesto cerca de los animales dada mi condición, pero que puedo trabajar en el taller por ahora. Bueno, una vez que dé a luz ".
"¡Amigo, eso es genial!" exclamó Taehyung de pie desde la cama para abrazar a su mejor amigo. "Maldita sea, estoy tan feliz de que hayas conseguido el trabajo. Siempre te ha gustado trabajar con animales ".
Jimin siguió sonriendo ampliamente. Siempre le habían gustado los animales, pero no se consideraba lo suficientemente inteligente como para seguir una carrera como veterinario. Se había ofrecido como voluntario en refugios de animales antes, por lo que tenía experiencia en cuidarlos, así que cuando vio la oferta de trabajar en un refugio envió la solicitud. Fue muy considerado de su parte contratarlo dada su condición, incluso esperarlo más tarde para cuando estaba programado el nacimiento de Hyejin. Hoy era un día feliz.
"Estamos celebrando esta noche". dijo Taehyung emocionado. "Deberíamos salir a cenar ... ¡también invitaré a Minjae!" gritó Taehyung, desbloqueando instantáneamente su teléfono para compartir la noticia con el otro adolescente. Jimin se rió entre dientes, divertido por la obsesión de su amigo con su nuevo novio. Para ser honesto, Minjae era un tipo realmente agradable y siempre lograba poner una sonrisa en el rostro de su mejor amigo. Parecía estar disfrutando tanto de su relación y Jimin no podría estar más feliz por su amigo.
"¿Deberíamos invitar a Jungkook?" preguntó Taehyung de mala gana. Jimin miró a su amigo por un segundo antes de bajar los ojos al piso alfombrado. Jimin estaba apreciando el esfuerzo que Taehyung estaba haciendo para incluir a Jungkook en sus vidas, parecía que el otro había comenzado a aceptar más la presencia constante de Jungkook una vez que comenzó a salir con Minjae y no podía pasar tanto tiempo con Jimin como antes, apreciando cómo parecía Jungkook para cuidar al chico embarazada. Pero Jimin estaba un poco herido, resentido por las palabras del otro. A pesar del tiempo que había pasado, todavía le dolía un poco pensar que a Jungkook le repugnaba tanto la idea de que formaran una familia.
"No, creo que está ocupado esta noche, probablemente de fiesta con sus amigos" se encogió de hombros con una sonrisa amable. Taehyung frunció el ceño ligeramente, probablemente sintiendo la mentira escondida en las palabras de Jimin; no eran mejores amigos por nada y Jimin estaba seguro de que el otro había sentido que algo había pasado entre ellos, pero decidió mantener la boca cerrada, y Jimin lo agradeció. "Vamos a pasar el rato solo nosotros tres".
Taehyung asintió, escribiendo en silencio en su teléfono para programar la celebracion con Minjae.
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"Está bien, Jeon, puedes hacer esto". Susurró Jungkook para sí mismo. Revisó su cabello por enésima vez en su reflejo en el espejo retrovisor, asegurándose de que cada mechón de cabello estuviera en su lugar. Llevaba veinte minutos sentado en su coche, esperando que tuviera el valor de aparecer y llamar a la puerta.
Sabía que se veía un poco espeluznante sentado en su auto envuelto en completa oscuridad y vistiendo un traje. Debería estar en la escuela, divirtiéndose con sus amigos y la pareja a la que debería haber invitado al baile de graduación, pero en cambio estaba estacionado en la casa de los Kim sudando mientras su corazón seguía bombeando sangre a toda velocidad.
Taehyung se había enfrentado a él hace dos días, explicando con los dientes apretados que Jimin estaría solo esa noche ya que asistía al baile de graduación con Minjae. Al principio, Jungkook no se dio cuenta de lo que Taehyung estaba tratando de decirle, pero cuando el otro dijo "hazle compañía, idiota", el cerebro de Jungkook entendió la idea.
Jimin no pudo asistir al baile de graduación, hacía calor ya que el verano estaba lleno de fuerza ese año y estaba muy embarazado, demasiado embarazado. Su barriga ha crecido considerablemente y se había estado quejando la última semana de clases de lo mucho que le dolían la espalda y las piernas.
Entonces Jungkook pensó que si Jimin no podía asistir a su baile de graduación, podría llevárselo. Había preparado un picnic con lindas luces y un poco de música en las afueras del pueblo, diez minutos en auto. Sabía que era bastante romántico, pero ese era el punto de todo esto, quería hacer las paces con el otro y después de tanto tiempo pensando en cómo hacerlo, finalmente se le presentó la oportunidad. Después de tanto pensar que su cerebro casi se derrite en un charco, llegó a la conclusión de que quería a Jimin y no solo como su amigo. Quería más, quería tomar su pequeña mano, acariciar su protuberante barriga mientras le susurraba a su futura hija y hacia reír a Jimin, besarlo, abrazarlo. Jungkook se había dado cuenta, tal vez un poco tarde, de que lo que la gente dijera en la escuela no debería importarle, probablemente no los vería después de la graduación, y que debería disfrutar de las pequeñas cosas de la vida para poder ser feliz. Y sabía que Jimin era lo primero en la lista que lo haría feliz.
Sin embargo, no pudo evitar sentir que la inquietud le retorcía dolorosamente el estómago, porque Jimin había estado bastante distante con él y eso, sumado a su estado, era muy probable que dijera que no para salir con él esta noche.
"Al menos lo habrás intentado..." murmuró, tratando de convencerse a sí mismo por enésima vez de que era una buena idea y saldrá como lo había planeado.
Finalmente salió del auto, se alisó la chaqueta del traje y con pasos decididos se acercó a la puerta principal y llamó con fuerza.
Esperó mientras se balanceaba hacia adelante y hacia atrás sobre las puntas de sus talones y sus manos se balanceaban a los lados antes de que, finalmente, una mujer de mediana edad abriera la puerta.
"Uh H-Hola." tartamudeó, deteniendo su movimiento tan repentinamente que casi perdió el equilibrio. Ella lo miró con curiosidad con los ojos muy abiertos que le recordaban a Jungkook a los de Taehyung. Se parecían mucho. "Uhm, ¿es- Ji- quiero decir, soy Jungkook, un amigo de su hijo y ... está Jimin en casa?".
Ella arqueó una ceja mientras se mordía la comisura de la boca, probablemente tratando de no reírse de la repentina incompetencia de Jungkook para comunicarse con otros seres humanos.
"Sí, está en casa ..." murmuró ella, sus ojos lo escudriñaron de la cabeza a los pies. "¿Quieres que lo busque?".
"Sí por favor..."
Jungkook esperó en el porche mientras ella regresaba adentro. El corazón le palpitaba en el pecho, estaba tan nervioso que seguía sudando y lo odiaba. Siempre sudaba mucho, especialmente cuando estaba nervioso, lo que lo hacía sudar aún más y sabía que probablemente ahora se veía hecho un desastre. Mierda.
"¿Jungkook?" llegó la voz de Jimin desde la puerta. Jungkook, que estaba de espaldas a la puerta, se dio la vuelta rápidamente y volvió a enderezarse la ropa al ver a Jimin mirándolo con un ceño confuso adornando su rostro.
"Uh, hey". rápidamente se pasó el dorso de la mano por la frente para deshacerse de las gotas de sudor que estaban a punto de caer. Probablemente no era algo realmente higiénico ni atractivo de hacer, pero sería peor si esas gotas cayeran sobre su traje y lo arruinaran. "Estaba pasando por el vecindario y ... bueno, pensé que tal vez, si no estás ocupado o demasiado cansado, ¿podríamos salir?".
"¿No es muy tarde para salir?" preguntó Jimin. Se veía realmente suave con pantalones cortos holgados que le llegaban hasta la mitad del muslo y una camiseta de gran tamaño. A pesar del calor de la noche, Jungkook tenía tantas ganas de abrazarlo. "¿Estabas en la escuela?" preguntó después de un momento de pausa, mirando la ropa de Jungkook.
"Pensé que podríamos ir juntos al baile de graduación". murmuró Jungkook. Maldita sea, esto fue un desastre. Había preparado lo que quería decir para convencer a Jimin de que saliera, pero su cerebro se había apagado y ya no estaba realmente seguro de lo que estaba diciendo. Quizás debería dar marcha atrás e irse a casa y fingir que no había pasado nada.
"¿Al baile?" preguntó Jimin confundido. "No estoy en condiciones de-"
"Lo sé." cortó Jungkook, dando un paso adelante y lamiendo sus labios nerviosamente "Por eso preparé algo especial, solo para nosotros dos".
Jimin lo miró fijamente por un segundo, Jungkook preparándose para el rechazo que estaba a punto de llegar, pero luego una sonrisa juguetona creció en los labios de Jimin.
"¿No dijiste que estabas pasando?".
Jungkook se sonrojó y Jimin se rió, esas carcajadas agudas tan características de él que siempre lograban hacer sonreír a Jungkook.
"¿Realmente has preparado algo?" preguntó Jimin, con la sonrisa aún en la boca. Jungkook asintió, sin confiar más en su boca para hablar. "Sin embargo, no puedo quedarme por mucho tiempo".
Jungkook asintió de nuevo distraídamente hasta que las palabras se hundieron y sus labios formaron un "oh" y Jimin se rió de nuevo.
"¿Necesito cambiarme?" preguntó Jimin, bajando el dobladillo de su camiseta.
"Uhm, no, está ... está bien, solo seremos tú y yo".
"Está bien, déjame conseguir unos zapatos y vuelvo enseguida". Jimin volvió a entrar con pasos lentos, probablemente sus piernas pesaban mucho, y regresó diez minutos después.
El viaje estuvo en silencio durante los primeros dos minutos hasta que Jimin murmuró "No me estás secuestrando o algo así, ¿verdad?" y ambos se rieron lo suficiente como para relajarse y quedar atrapados en una charla informal.
Una vez que llegaron a su destino, Jungkook entrelazó sus dedos con los de Jimin para guiarlo por el camino hacia el pequeño lago donde había preparado su picnic.
"Cierra tus ojos." dijo Jungkook cuando casi estaban allí. "Quiero que sea una sorpresa".
Jimin obedeció y Jungkook se apretó contra su costado para ayudarlo a caminar con más seguridad. Se sintió cálido por el hecho de que Jimin confiaba tanto en él.
"Está bien, ¿listo?" Esperó a que Jimin asintiera, sus labios se curvaron en una sonrisa. "Abre tus ojos."
Jimin jadeó ante la vista. Estaban al otro lado del lago, no el habitual que todos visitaban, y eso tenía una hermosa vista de la ciudad, especialmente ahora con todas las luces encendidas. Casi llegando a la costa había una estructura de madera en forma de cabaña con grandes aberturas y que había sido construida probablemente para que los caminantes la usaran como mirador. Pero ahora estaba decorado con cordones de bombillas conectadas a una pequeña batería portátil, iluminando el interior donde se colocó una pequeña mesa con mucha comida, en su mayoría dulces, encima.
"¿Tú hiciste esto?" preguntó Jimin girando la cabeza hacia el lado donde Jungkook había guardado silencio todo el minuto que Jimin tardó en reaccionar.
"Sí ..." Jungkook sonrió tímidamente, sus mejillas se tiñeron de un rosa pálido, visible a pesar de la oscuridad que los rodeaba. "Quería hacerlo especial ... ¡Incluso tenemos música!" gorjeó y se acercó a la cabina para encender la radio.
Jimin no pudo evitar reírse, el entusiasmo de Jungkook era contagioso, y caminó hacia la cabaña con cuidado para no tropezar.
"¿Quieres comer algo?" preguntó Jungkook cuando Jimin no dijo nada. "Compré estas galletas porque te gustan. Oh! Y también estas galletas con sabor a melón, me dan asco pero parece que te gustaron cuando las probaste el otro día y- ".
"Jungkook".
"¿Si?" Jimin lo miró con los ojos húmedos por las lágrimas no derramadas y llenos de emociones. Jungkook tragó saliva nerviosamente.
"Gracias por esto." Jungkook negó con la cabeza, dispuesto a encogerse de hombros, pero Jimin siguió hablando. "Nuestra relación ha sido un poco ... difícil pero, últimamente, estás actuando muy bien e incluso hiciste esto por mí ... no sé qué decir, honestamente. Me estás confundiendo."
"Sé que no lo he puesto fácil ... por eso estoy haciendo esto, quiero que te sientas bien conmigo otra vez".
Jungkook dio un paso adelante, agarrando la mano de Jimin con la suya para acercarlo a su propio cuerpo. Jimin parecía confundido, incluso un poco nervioso por su proximidad, pero no dijo nada cuando las manos de Jungkook guiaron a Jimin hacia sus hombros y luego sus manos se apoyaron en la cintura del más bajo y comenzaron a mover sus cuerpos al ritmo lento de la música que había preparado.
Se mantuvieron en silencio por un rato, solo bailando y disfrutando el momento que habían creado, sus cuerpos se acercaban cada vez más a medida que pasaban los segundos.
"Esto es bonito." murmuró Jimin, su voz apagada en el hombro de Jungkook. Jungkook tarareó en respuesta, sus brazos ahora completamente abrazando la pequeña cintura de Jimin en un agarre seguro.
"Me gustas" espetó después de otro minuto de silencio. Jimin se tensó y dejó de moverse antes de inclinarse hacia atrás para mirarlo. No era así como planeaba decirlo. Quería decir algo significativo y romántico que hiciera que Jimin ni siquiera dudara en decir que le correspondía sus sentimientos. Pero la noche no iba exactamente como la había planeado y su boca parecía seguir hablando por sí sola.
"¿Qué?"
"Me gustas." repitió, esta vez más fuerte, decidido. Pero Jimin dio un paso atrás y lo miró con el ceño fruncido.
"No, no es así". él afirmó. "Dijiste que no, dijiste que no funcionaríamos".
"Sé lo que dije, pero quiero retirar esas palabras". Jungkook dijo con valentía que no sabía de dónde venía. Hace dos minutos ni siquiera podía mirar a Jimin a la cara sin sonrojarse. "Lo siento por decir eso. Fue tan confuso y no estaba pensando- "
"No quiero escucharlo Jungkook". Jimin negó con la cabeza y dio otro paso atrás. "Llévame a casa."
"Jimin-".
"¡No, llévame a casa!".
El viaje de regreso a la casa de los Kim fue silencioso e incómodo. Jungkook seguía volviéndose para mirar a Jimin, quien tenía la frente presionada contra el frío vidrio de la ventana con los ojos fijos en la carretera y su mano alisando la curvatura de su vientre hacia arriba y hacia abajo.
Jungkook quería llorar, el rechazo se sentía horrible y dolía bastante, y el hecho de que Jimin ni siquiera lo miraba lo hacía aún más doloroso.
"Lo siento." soltó Jungkook antes de que Jimin pudiera salir del auto. Jimin hizo una pausa, la puerta ya estaba abierta y una pierna colgando. "Sé que sigo arruinando las cosas entre nosotros, simplemente... no sé cómo arreglarlo. Quiero arreglarlo Jimin, quiero hacer las cosas bien contigo ".
"No puedes rechazarme y luego decir que te gusto. No después de haber trabajado tan duro para ignorar los sentimientos que resurgían cada vez que eres amable conmigo, o me sonríes o me llevas a algún lugar contigo ".
Jimin se había vuelto para mirarlo con ojos llorosos. Y Jungkook se derrumbó, no pudo contenerlo más y permitió que las lágrimas cayeran.
"Yo estaba asustado, ¿de acuerdo?" sollozó. Jimin pareció entrar en pánico por un segundo al ver sus lágrimas. "Fui lo suficientemente estúpido como para preocuparme más por lo que dirían los demás en lugar de creer en mis instintos e ignorar todos esos estúpidos idiotas. Joder, me gustas desde esa noche en la fiesta. ¿Crees que te habría jodido si no lo hubiera hecho?" gritó desesperadamente. Había levantado la voz inconscientemente, pero no le importaba menos si todos lo escuchaban en medio de la noche. "Me gustas, maldita sea, Jimin".
"Ven aquí, idiota". murmuró Jimin mientras tiraba de Jungkook por el cuello de su camisa. Sus labios chocaron con dureza, los dientes chocaron un poco dolorosamente, pero a pesar de eso, el beso fue perfecto.
Tras la torpeza inicial debida a su nerviosismo, sus labios se ajustaron perfectamente entre sí. La mano de Jungkook ahuecó el rostro de Jimin para inclinarlo perfectamente para profundizar aún más el beso y lamió el labio inferior del otro antes de usarlo para abrir la boca para que su lengua se encontrara con la que esperaba Jimin. De alguna manera, el beso se convirtió en una sesión de besos más acalorada, con ambos chicos gimiendo y tocándose desesperadamente, permitiendo que sus sentimientos reprimidos salieran con toda su fuerza.
"Mierda." Exhaló Jungkook cuando finalmente se separaron para respirar. Jimin se veía tan hermoso bajo la luz de la luna, sus ojos entrecerrados y sus labios hinchados brillando con saliva.
Jungkook se inclinó hacia delante para capturarlos nuevamente en un beso más lento, descuidado y húmedo, y Jimin gimió en su boca. Sonido que fue directamente a las regiones inferiores de Jungkook.
"Me gustas tanto." dijo Jungkook entre besos, haciendo que Jimin riera tiernamente mientras sus manos descansaban una a cada lado del cuello de Jungkook. "Tanto..."
"Tú también me gustas." Jimin dijo finalmente, despertando una amplia sonrisa en la boca del otro. Jungkook tenía tantas ganas de escuchar esas palabras saliendo de la boca de Jimin.
"Lo siento, Jimin ..." murmuró en la boca del otro. Jimin presionó su frente contra la de Jungkook, sus narices chocando cariñosamente.
"Si realmente lo dices en serio, puedo perdonarte".
Jungkook asintió con la cabeza antes de besar a Jimin una y otra vez, y nuevamente se detuvo cuando sus labios estaban rojos e hinchados.
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