—Ahí vienen —dijo Furlan—. Nos persiguen.

Miré momentáneamente hacia atrás, donde pude ver a la policía militar y unos encapuchados persiguiéndonos.

—Así que la policía militar. Esos no se cansan —dijo Isabel, con burla—. ¿Esa frase no te pareció genial, hermano Levi?

—¿Eres tonta?

Realicé un movimiento rápido en el aire, lo cual ocasionó que algunos de la policía militar se cayeran. Luego retrocedí velozmente, pasando muy cerca de los encapuchados, donde mis ojos se cruzaron una fracción de segundo con los de una persona que portaba en su chaqueta el estampado de unas alas.

—No hay duda —dije, acercándome a mis compañeros—. Esas alas de la libertad... Es el cuerpo de exploración.

—Se nota que los que combaten con los gigantes son diferentes —soltó una risa amarga Furlan.

—Ustedes. Lo saben, ¿verdad?

—Lo sé —dijo Isabel.

—Trabajo, ¿verdad?

Los tres nos fuimos en distintas direcciones para así separar a los del cuerpo de exploración. Entonces comencé pensar que tan buenos eran estos tipos para atraparme, por lo que realicé un rápido movimiento para así despistarlos. Sin embargo, cuando pasé bajo un lugar este se destruyó y sobre mí cayó uno del cuerpo de exploración.

He tenido que realizar movimientos rápidos y fuertes para alejarlo. Entonces cuando tomé mi cuchillo e iba a clavárselo, fui detenido por la misma persona con la que crucé mirada anteriormente.

—Impresionante —dijo ella, mientras formaba una sonrisa—. Tienes unos movimientos geniales.

—Tch... —chasqué mi lengua, mientras intentaba deshacerme de su agarre y de la gran cuchilla que se encontraba en mi cuello.

Ella era bastante fuerte por lo que estaba costándome alejarla.

—Yo no intentaría nada si fuera tú —dijo, sin dejar de sonreír. Su simple sonrisa me molestaba demasiado—. ¿Por qué no miras a tu alrededor?

Miré hacia atrás, donde he visto como los otros tipos del cuerpo de exploración traían a mis compañeros. Suspiré derrotado, ya que así no podría hacer nada por lo que aflojé mi agarre y solté el cuchillo de mi mano.

—Buena decisión, muchacho —dijo, alejándose para luego mirar a otro tipo del cuerpo de exploración—. Todo tuyo, Hermano.

Su hermano simplemente alzó una mano y entonces otro tipo se acercó para colocarme unas esposas a mí y mis compañeros.

Aquello me hizo comprender que las personas frente a mí eran Erwin Smith y su hermana; las personas a las cuales debía matar.

—Tengo algunas preguntas. ¿Dónde consiguieron esto? —preguntó Erwin, sosteniendo mi equipo de maniobras. Pero ninguno de nosotros respondió—. Sus habilidades también son buenas. ¿Quién les enseñó? —Nuevamente ninguno de nosotros respondió. Entonces comenzó a acercarse hasta donde me encontraba—. Tú eres el líder, ¿verdad? ¿Has recibido entrenamiento en el escuadrón?

Miré de mala manera a Erwin con 0 intenciones de responderle y entonces mi cabeza fue fuertemente sostenida para luego ser bruscamente lanzada al suelo.

La rabia comenzaba a consumirme al sentir como el agua sucia se impregnaba en mí. Odiaba completamente la suciedad.

—Te lo preguntaré de nuevo. ¿Quién les enseñó a usar el equipo?

—Nadie nos enseñó —respondió Furlan—. Aprendimos por cuenta propia.

—¿Cuenta propia? —preguntó la hermana de Erwin—. Eso es difícil de creer, ¿verdad, hermano?

—Así es.

—Lo hemos aprendido para poder salir de esta basura —prosiguió hablando Furlan—. Quienes ven la luz de todos los días no nos entenderían.

—¡Suelten a mi hermano en este momento! —exclamó molesta Isabel—. ¡Y dejen de tratarnos así solo porque son soldados!

Quien sostenía mi cabeza contra el agua sucia la alzó poco a poco hasta que pudiera volver a mirar a Erwin.

—Mi nombre es Erwin Smith —dijo este, agachándose y mirándome fijamente—. ¿Tú eres?

—Levi —respondí sin ganas.

—Hagamos un trato, Levi.

—¿Un trato?

—No los culparé por lo que hicieron —dijo, sin despegar su mirada de mí—. Pero a cambio de eso quiero que seas de ayuda. Únete al cuerpo de exploración.

—¿Y si me niego?

—Los enviaré con la policía militar —respondió, tranquilamente mientras se levantaba—. Pensando en todo lo que hiciste, a ti y tus compañeros no los tratarán bien.

Las cosas estaban sucediendo tal como esa persona dijo. Así que no me quedaba más opción que aceptar.

—Está bien —dije, mientras escupía el agua sucia que pasé a tragar—. Me uniré al cuerpo de exploración.

Erwin miró unos segundos a su hermana, la cual sonrió y se acercó hasta donde me encontraba para así alejarme del tipo que hizo que me ensuciara.

—Tomaste la decisión correcta —susurró ella—. Desde este momento las cosas cambiarán para ti y tus compañeros... Por cierto, soy ____ Smith.

Las cosas cambiarían, pero para ellos, porque encontraría la oportunidad adecuada para acabarlos y así conseguir que mis compañeros tuvieran un pase definitivo al exterior.