chapter twenty-three. there is no sanctuary
𝐁𝐘 𝐌𝐘 𝐒𝐈𝐃𝐄 ━━ volumen tres
capítulo veintitrés
❝ there is no sanctuary ❞
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—¿VISTE A SOPHIA SALIR?— le pregunte al ojiazul y forme una mueca cuando negó con la cabeza.
—Ella debe estar bien, sabe cuidarse sola.
Asentí levemente —Lo se, pero no quiero perderla a ella también.
—Parecían amables pero algo olía mal— escuche a Abraham contarle todo a Rick —Parecían amables pero... diablos, ya quería irme y cuando les conté lo de Washington nos tocó un gesto del imbecil que está a cargo para que sacaran sus armas y pudiéramos estar hasta el cuello de mierda.
—Antes de que los encerrarán... ¿No vieron a Tyresse?— inquirió Sasha a Michonne.
Ella negó con la cabeza —No.
—¿Y qué hay de Beth?— mire a Daryl.
—Se la llevó un auto negro con una cruz blanca blindada— me contestó —Trate de seguirlo, trate.
Le mire con preocupación.
—¿Pero está viva?— le inquirió Maggs.
—Está viva— aseguró y asentí intentando respirar más tranquila.
Mientras trataba de afilar el pedazo de madera lo más filoso posible, junto a Carl quien trataba de hacer lo mismo.
Levante la mirada cuando escuche voces fuera de los muros de este vagón.
—Oigan— llamó Daryl, mirando por los pequeños orificios que se hacían en la entrada —Hay cuatro viniendo hacia acá.
—¿Tienen comida? Porque muero de hambre— dije, llevándome miradas confundidas de todos, en especial de Daryl.
—Ya saben que hacer— indicó Rick, haciéndome levantar del suelo —Ataquen primero a los ojos y luego al cuello.
Asentí, tomando con fuerzas la madera, junto a Eugene quien se escondía detrás mío y de Carl.
—¡Pónganse de espaldas contra las paredes del vagón!— escuche gritar a uno.
Carl y yo miramos a Rick en busca de una respuesta pero él asintió en forma de que siguiéramos con nuestro plan.
Con Michonne frente a nosotros para cuidarnos, espere a que abrieran la puerta aunque no fue así, al contrario de eso, el techo del vagón fue abierto y una bomba de humo cayó.
—¡Corran!— gritó Abraham cuando explotó.
Sintiendo a Carl abrazarme por la cintura para tirarse al suelo antes de que esa cosa explotara.
—¿QUÉ RAYOS sucede?— cuestionó Abraham, golpeando la puerta.
Carl le miró asustado y luego a mi, a lo que abrí mis ojos encogiendo mis hombros.
—Alguien los atacó— supuse, cuando el ojiazul tomó mi mano para entrelazar nuestros dedos.
—Quizás fueron los nuestros— apoyo Sasha.
—Disculpen— Eugene me empujo para hacerse pasó, haciéndome fruncir mi ceño.
—¿Qué demonios haces?— le cuestiono Rosita.
—Tal vez pueda romper la puerta con esto— le contesto —Puede que no quede nadie vivo si sale mal.
—Eugene perdón pero, cállate— le pidió Tara.
Este asintió —De acuerdo.
—Oigan— llamó Carl, haciéndome mirarle —Mi papá va a volver, con todos.
Asentí de acuerdo —Lo harán y tendremos que pelear así que estén preparados.
Rosita y Abraham me miraron con detenimiento.
—Maldición, Abraham, si es tu hija— mencionó la latina.
Trague en seco, volviendo a la pared para intentar ver algo por el orificio.
—Entonces... ¿Él es tu papá?— musitó Carl solo para que yo pudiera escucharle.
Asentí levemente —Eso parece.
—¿Cómo pasó? Apenas nos separamos como tres días— se preguntó asustado.
Sonreí levemente —Te lo contaré cuando salgamos de aquí— golpee levemente su sombrero, desacomodándolo.
Sonrió levemente besando mis labios, haciéndome sentir escalofríos.
—Espero no nos esté viendo o seguro me muero— le escuche musitar, cuando nos separamos.
Ambos giramos las miradas hacia detrás nuestro, con la mirada atenta de Abraham, en lo que Rosita y Tara cuidaban que no interrumpiera.
—IF I DIED TONIGHT I'ma make it look pretty— canturree abrochando mis cintas y peinando mi cabello.
—Yeah I'm in your spot, yeah I'm in your city— siguió Tara, sorprendiéndome.
—Cada vez eres más mi amiga, Tara— le dije sonriendo.
—¿Cuál es la cura?— ambas miramos a Sasha, dándome cuenta que su pregunta era dirigida a Eugene.
—Eugene— llame cuando no hizo caso.
—Es clasificado— contestó únicamente.
—No sabemos que va a pasar.
—Déjenlo en paz— pidió Abraham.
Cruce mis piernas recargándome en el hombro de Carl.
—Sigamos preparándonos— indicó Maggie.
—Si, pero quiero saberlo— insistió Sasha —No sabemos que nos espera.
—Nos espera salir de aquí— dijo Tara.
—Aunque se los dijera, pasó a paso les diera las instrucciones completas, con ilustraciones y una sesión de preguntas frecuentes bien detalladas... la cura morirá conmigo.
—No voy a dejar que eso pase— aseguró Abraham.
Entrecerré mis ojos —¿Tu eres la cura?
Todos le miraron, sabiendo que podría ser una posibilidad.
—¿Qué?— me pregunto y encogí mis hombros.
—En las películas casi siempre es un paciente el causante del virus... y un paciente es la cura de ese mismo virus, su sangre y no me vean así, saben que podría ser una posibilidad— dije cuando todos me miraron confundidos.
Eugene negó —No es así, en el mejor de los casos nos meteremos en una tormenta de balas, fuego y caminantes, no soy muy veloz y no soy capaz de lidiar con un muerto solo con mis manos y mi confianza.
—Pero nosotros si— agregó Michonne —Y lo haremos.
Sasha se levanto del suelo —No nos debes nada, aún no, pero queremos oírlo.
—No es necesario— mire a Rosita.
Eugene titubeó pero contestó —Era parte del proyecto Genoma Humano que convertía enfermedades en armas, para combatir enfermedades, microorganismos patógenos contra microorganismos patógenos... fuego contra fuego, reuniones interdepartmentales, salidas, información compartida... estoy al tanto de cada detalle de los sistemas concebidos para matar a todo ser vivo de este planeta, confío en que teniendo acceso a las terminales de Washington puedo ponerle fin, eliminar hasta el último muerto, fuego contra fuego.
Todos nos mantuvimos en silencio, procesando la información que Eugene acababa de decirnos.
—¿Qué dijo?— me susurró Carl.
—No tengo idea, pero dijo algo sobre matar a los caminantes— agregue negando con la cabeza.
—Aunque si resulta según lo planeo suena espectacular— agregó Eugene.
—Entonces manos a la obra.
Asentí de acuerdo con Maggie, cuando la puerta comenzó a abrirse hasta hacerlo por completo, Carl y yo nos levantamos de inmediato para atacar a quien sea que la hubiese abierto, aunque me sorprendí cuando vi a Rick con un arma en sus manos, disparando a todos los caminantes.
—¡Vamos, vayan al cerco!— grito y asentí.
—No te separes— le pedí a Carl, saliendo del vagón y matando a cada caminante que se nos cruzaba.
Mate al caminante antes de que se comiera a Eugene enterito, llevándome una mirada sorprendida de su parte, seguí caminando junto al resto.
Llegue hasta la cerca, cruzando del otro lado antes que el ojiazul también lo hiciera, tomándolo en un leve abrazo que recibió.
AHORA CAMINÁBAMOS por el bosque, en busca del maletín que Rick había guardado cerca de Terminus para en caso de emergencias.
—Aquí— indicó Daryl, desenterrando la pala para que Rick pudiera cavar y encontrar la maleta.
—¿Por qué demonios seguimos aquí?— le cuestiono Abraham.
—Armas, municiones, vayan al cerco y usen los rifles— le mire confundida —Eliminen a los que quedan.
—¿De que hablas?— le pregunte, cruzándome de brazos.
—No los quiero vivos— me miró levemente.
Mirando a los adultos en busca de respuestas, los cuales, estaban igual que yo, Glenn fue el único en hablar.
—Rick es suficiente— indicó el asiático —Se terminó.
—No se termina hasta que se mueran todos.
—El lugar está en llamas y lleno de caminantes, es una locura— mencionó Rosita.
—No pienso acompañarte ahí, acabamos de salir.
—No tienen defensas— mire a Maggie —Tendrán que correr.
Mirando detrás de Rick, mi expresión se aligero cuando vi aquellos cabellos rubios tan familiares y una gran sonrisa se ensanchó en mis labios.
Sophia se lanzó a abrazarnos a ambos, con una gran sonrisa y chillando de la emoción.
—¡Pero como extrañé a mis dos babosos enamorados!— chillo de felicidad, haciéndome reír a Carl y a mi levemente
—También te extrañamos— le dije, abrazándola más fuerte.
Abrace a Carol una vez que logre zafarme de Sophia, ella dejó un beso en mi cabello y en el de Carl.
—¿Tu lo hiciste?— le pregunto Rick, acercándose.
Carol asintió —Nosotras— miró a su hija, aceptando el abrazo de Rick —Deben acompañarme.
SEGUÍ A CAROL, tomando fuertemente la mano de Carl y soltándola cuando vi aquella imagen.
Mis ojos lagrimearon de inmediato y corrí tan rápido como pude hacia aquella bebé, sintiendo mis mejillas mojadas debido a las lágrimas constantes que salían de mis ojos.
Rick fue el primero en abrazar a Judith, tomé su mejilla con una sonrisa en mi rostro.
—Judith, estás viva— musitó Carl junto a mi.
—Mi pequeña palomita, estás con vida— lloriquee, abrazándola cuando Rick me la entrego.
Se la devolví a Rick, dejando que la abrazara y tuviera tiempo con ella y Carl, cuando posó su mirada en mi, uniéndome a su abrazo familiar y yo dejándome abrazar por él.
Primer capítulo del acto tres, Dios mío, cada vez más cerca de Negan 😭
Solo puedo decir... ¡Pañuelos, lleve sus pañuelos! 🧻
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