BY MY SIDE
꒰ ۫₊˚ɞ chapter eighty-seven .˚ׅ🗡 ຊ ҂
❝ when i get home ❞

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LAS BARRAS DE LA PRISIÓN estaban frente a mi, cubrían la mitad de mi rostro que miraban a Negan con curiosidad.

Sonreí -¿Buscas mi perdón, no?- asintió -¿Que más quieres? Te daré lo que quieras.

-Un filete, cerveza, tal vez un buen cono de helado- bromeó -¿Por qué me lo preguntas?

Encogí mis hombros -¿Y si no tuvieras que morir?

-Bueno...- titubeó -No entiendo por qué vienes a encargarte de mi, cuando para mi deberías estar con la mirada puesta en la reina susurradora.

Fruncí mi ceño desalentada-¿Y qué crees que estoy haciendo ahora?

-Diablos- sonrió -Tienes cojones.

-¿Lo harás o no?

-Se dice que eres una verdadera fiera, pero fallaste el tiro, ¿Qué pasa si yo también fallo? Podría empeorar las cosas para cada hombre, mujer y niño que vive aquí dentro y a pesar de lo que puedan pensar de mi, te puedo asegurar que no deseo eso.

Negué -Tampoco yo, pero necesito que lo hagas y así ayudaras a cada hombre, mujer y niño que vive aquí dentro.

-¿Y yo qué gano?

-Ellos jamás olvidarán lo que hiciste, a menos que hagas algo que los obligué a hacerlo- contesté -Tráeme la cabeza de Alpha y a cambio, mi perdón, un nuevo inicio, la oportunidad de volver a confiar y volver a tenerme como familia.

Bajo la mirada, -¿Tengo tu palabra?

Asentí extendiendo mi mano -Tienes mi palabra.

CAROL COLOCÓ LA CABEZA de Alpha sobre la pica, mientras me cruzaba de brazos junto a Negan.

Él me miró -¿Eso era lo que querías?

No sabía que contestar a esa pregunta.

-Si.

-Bien, entonces, ¿Qué tal si volvemos?

Nos miró a Carol y a mi en busca de respuestas, en cambio, ninguna podía contestar

-Alex...- llamó -A Alexandria, nuestro trato, empecemos a correr la voz.

Carol nos miró, en especial a Negan -¿Por qué diablos tardaste tanto?

Frunció su ceño con indignación -¿En tardar tanto, en hacer su trabajo sucio? Uh, bueno, no lo se, quizá porque quería salir de ahí con mi cabeza en su lugar, estas cosas llevan tiempo.

-Debías darte prisa.

-Ya está, ¿Bien?- me miró -Ya hice mi parte, ahora, Lexie, te pido que cumplas tu promesa.

Le miré suspirando.

-Llévenme allá para poder empezar un nuevo capítulo del libro de Negan.

-Yo no voy a volver- informó Carol, haciéndome mirarle -Aún no.

-Si yo vuelvo allá solo, tendré una soga en el cuello en el instante en el que ponga un pie dentro.

-Espera.

Hablo antes de encaminarse lejos, dejándome a solas con Negan, quien me miraba con súplica para cumplir mi trato.

-¿Cuánto tiempo debo esperar?- cuestionó.

-Eres libre Negan, haz lo que tú quieras, no esperes si no quieres.

-¿Y la otra parte? ¿Tu perdón? ¿Eso si lo vas a cumplir?

-Si- las palabras no salían de mi boca.

No podía decirlo en voz alta, decir: te perdono frente a él me resultaba difícil.

El sonido de un arma cargarse me hizo girarme rápidamente, levantando ambas manos a la altura de mi cabeza.

Pronto noté como Negan había hecho lo mismo junto a mi, pero al darse cuenta de que eran Susurradores, simplemente se colocó de su lado.

-¿Tu has matado a nuestra Alpha?- dijo el que sostenía el arma, susurrando muy lento y confuso.

Se trataban de cuatro de ellos, los cuales aparte del que me amenazaba con la escopeta, solo observaban en su lugar la cabeza detrás de mi.

-Si, lo hice- respondí entre dientes.

Se miraron entre sí, mi ceño se frunció cuando este extendió el arma frente a mi por la culata, miré a Negan y él a mi así que, con cuidado tomé el arma.

Las rodillas de todos ellos se doblaron lentamente hasta caer al suelo en un movimiento demasiado débil.

-Mataste a Alpha, eso la convierte en la nueva Alpha- se limito a decir el adulto.

Los cuatro observaron con recelo a Negan, haciendo que este... también se inclinará frente a mi.

Entrecerré los ojos en ese silencio, mientras los gruñidos de la cabeza detrás de mi se hacían más y más ruidosos cada vez. Tomé el arma en un suspiro, mientras la analizaba y miraba al resto frente a mi.

Jamas pensé que me convertiría en la nueva Alpha de ellos así como lo llamaban, porque no lo era, yo jamás sería como ella y no tenia pensado serlo.

Apunté el arma a la cabeza del susurrador frente a mi y sin pensármelo disparé, fue así las siguientes veces, notando el horror entre los demás y la sangre brotar hasta mi ropa y rostro. Tomé aire, girandome esta vez a Negan.

Me quedé de pie, mirándolo directamente a los ojos y sin soltar el arma. Él se encontraba de rodillas aún, con una mirada suplicando piedad.

Pero no podía.

No podía apretar el gatillo, no podía dejar de apuntarle. La mitad de mi vida había esperado este momento y ahora que sucedía estaba siendo demasiado cobarde.

Tengo que hacerlo, decía una parte de mi, tienes el arma, solo hazlo y termina con el asesino de tu padre, el de Glenn, el culpable de toda tu miseria.

Siento que no puedo moverme, que cada hueso de mi se paralizó en la luz del día mientras Negan seguía frente a mi, el arma era su bate, él era Glenn y yo... yo era negan.

-Corre- susurré a duras penas.

Me asombraba tener voz todavía.

El ceño del hombre se aligero, mientras se levantaba lentamente.

-Realmente lo siento, Alex- susurro él.

Y sin dudarlo, no deje de apuntarle hasta que se alejo hacia el bosque.

Fue entonces cuando pude respirar y cuando todo en mi se tranquilizo.

No quiero jugar esta parte, pero lo hago, todo para ti.

VIAJAR EN SILENCIO ERA más cómodo que cualquier cosa, aunque, tenía que estar alerta cada treinta segundos a mi alrededor.

Cuando encontré el punto de encuentro suspiré con alivio al mirar a todos dentro, tan tranquilos después de todo el desastre en Hilltop.

Abrí la puerta, asomando mi cabeza antes de entrar para mirar al resto, lo cual me hizo tranquilizarme al mirar a todos.

-Hola- saludo Magna junto a mi, le sonreí.

-Hey.

-Sigues viva, ¿Dónde estabas?

Tomé aire -Uh, haciendo un par de cosas.

Ella asintió -Seguro, ¿Ella está...-

Asentí rápidamente -Sí.

Sonrió, colocando su mano sobre mi brazo -Gracias, Lexie.

Aclaré mi garganta adentrándome a la casa, mirando a mi alrededor en busca de mi familia.

-¡Mami!- gritó Gracie con ambos brazos extendidos.

Sonreí mirándola -Hey.

Acepte su abrazo rápidamente, mirando a Glenny y besando su frente al mismo tiempo en el que lo tomaba también.

-Te extrañamos- murmuró la rubia, separándose de mi.

Asentí -También yo, mis niños.

Me levante mirando a Carl, el cual no dudó en abrazarme, aferrándose a mi como si fuese lo ultimo en la tierra.

-Creí que habías muerto- sollozo en mi oído, -No sabía que hacer, por un momento me perdí.

Asentí sintiendo mis ojos lagrimear -Esta bien, estoy aquí.

Besé castamente su mejilla, asombrándome cuando tomó mis mejillas dejando un largo beso sobre mis labios, luego de juntar nuestras frentes.

-Iugh- Gracie formó una mueca -Van a traumar a mi hermano.

Extendió ambos brazos, entonces le entregué al pequeño bebé y ella se alejo con él en brazos.

Reí ligeramente al verla irse para ir con los otros niños a jugar.

-Estas con vida- señaló Becca al verme.

Sonreí -Hierba mala nunca muere, ¿O si?

Ella rió acercándose a mi hasta abrazarme también, haciéndome soltar un quejido cuando me apretó demasiado fuerte.

-También te extrañe- dije a duras penas.

-No vuelvas a irte así sin despedirte- pidió -Por favor, eres lo único que me queda y no quiero perderte, Alex.

-Está bien, lo tengo en cuenta- sonreí -¿Qué hay de ti? ¿Estás muy herida?

Negó -Estoy bien, más porque estás aquí.

-Estoy feliz de volver- admití tomando la mano de Carl -Los extrañe.

-Espero que a mi también- Ron se paró frente a nosotros.

Le sonreí -Por supuesto que si, engendró del diablo.

Rió por su apodo, sabiendo de dónde venía, abrió ambos brazos y me apachurro fuertemente.

Reí mientras me zarandeaba -Tranquilo, me vas a partir en dos.

Me aleje de él, mientras el silencio inundó el lugar, quite la mirada de Ron por unos segundos para mirar a la persona detrás de él.

Era ella.

Sophia.

Estaba de pie a unos metros de mi, jugando con sus dedos titubeando y observándome indecisa.

Bajé la mirada mientras me aferraba a la mano de Carl, había pasado tanto tiempo, tanto tiempo en el cual no la había visto.

Los recuerdos de todo lo que dijo la última vez venían a mi cabeza.

-Y bueno- interrumpí ese silencio, llevándome una mirada de ella. Sin embargo yo solo miré a Carl -¿Quién mas esta con vida?

-Alex...- murmuró él.

-¿Dónde esta Lydia?

Me miró unos segundos, mientras yo mantenía mi postura y él entendía.

-Esta con los niños, vamos.

Tomó mi mano y lo seguí, pasándola de largo, pasando de largo todos estos años y todo lo que habíamos vivido.

CUANDO LYDIA ME RECIBIÓ juraba que se me había roto más cosquillas de las que ya sospechaba, ella prometió que cuidaría de los niños mientras me recuperaba o al menos hasta que pudiéramos volver a Alexandria.

-Déjame ver- Carl tomo mi rostro con ambas manos.

Tomé sus manos -Estoy bien.

-Tu rostro esta rebanado como una pizza- contradijo, haciéndome reír ante su comparación.

Lo deje analizar las cortadas sobre mi rostro, había exactamente dos, una en la mejilla y otra en mi frente pero era algo superficial a comparación de la herida en mi pierna.

-Tienes suerte de haber llegado hasta acá- me dijo en un murmuró cuando todos estaban distraídos.

Suspiré, en lo que él cosía la herida de mi frente -Lo se.

-Creí que... habías muerto.

-Bueno, sigo aquí- sonreí -Es lo que importa, ¿No?

Asintió -Me asuste mucho, Michonne estaba ahí cuando me dijeron.

-¿Y ella...?

-Le dije que habías vuelto, que estabas viva, pero tuvo que irse a ayudar a unas personas, dijo que volvería en cuanto pudiera.

Solté un leve quejido -Espero que vuelva pronto.

-Si, yo también.

Beso parte de mi frente que no estaba lastimada, dándome una sonrisa, la cual con gusto devolví.

-¿Sigues enojado?- me atreví a preguntar.

Él negó -No, jamás lo estuve, no contigo, no puedo estar enojado contigo.

-Me alegra oír eso.

-Disculpen- Eugene llamo la atención de todos, haciéndome callar de inmediato -Disculpen... ¿Pueden poner atención, por favor?

Asentí levemente, -Hay una cosa que... quiero confesar y...- nos miró a Carl y a mi -Solicitar... he estado comunicándome con radio con alguien fuera de nuestra órbita, una persona nueva, con la que me voy a reunir.

Mi expresión se aligeró rápidamente, mirando a Carl, quien tenía la expresión igual o quizá peor que yo.

-¿Qué tú vas a qué?- cuestiono Carl.

-¿Quién es?- inquirió Ron.

-Bueno, se llama Stephanie.

Sophia frunció su ceo -Espera, ¿Está en otra comunidad?

-Eugene...- llamé -¿Qué le dijiste sobre nosotros?

-Podría ser una espía como Dante- murmuró Magna.

Rosita me miró desde la distancia y yo a ella. Todos y cada uno comenzaron a hacer preguntas hasta dejarlo sin palabras, él titubeaba sin saber qué contestar al respecto.

-Yo tengo las mismas dudas- Ezekiel se levantó de su asiento -Pero si su insisto le dice que... Stephanie podría ser una aliada, escuchémoslo antes de juzgar a la ligera.

Todos asintieron de acuerdo, incluyéndome -Si, todos estamos del mismo lado- le sonreí para que siguiera.

Eugene asintió -Como todos saben, me trasladé a Hilltop para empezar metafóricamente de cero, ah... no fue fácil, ocupé mi tiempo trabajando y cumpliendo tareas y de ese trabajo surgió una voz en el vacío y... se volvió mi amiga, algunos dirán que soy ingenuo al creer en amistades y nuevas alianzas pero... después de lo que hemos perdido me permito ser ingenuo, solo les pido que se ahorren todo y me permitan creer que aún hay gente buena por la que vale la pena arriesgarse...- suspiró al finalizar.

HICE DE MIS PASOS LENTOS cuando me acerqué a los niños, tanto los hijos de Jerry como los míos estaban jugando, distraídos entre ellos y riendo incluso después de todo lo que estaba pasando, me alegraba saber que ellos no estaban conscientes de eso, del peligro por el que pasábamos.

Glenn se encontraba ya sentando sobre el suelo mientras Gracie lo cuidaba junto a Judith, les sonreí a ambas cuando mi bebé comenzó a estirar sus brazos hacía mi mientras intentaba lo que parecía ponerse de pie.

-Yo tambien te extrañe- lo cargué en brazos a duras penas.

Mi bebé comenzó a enredar mi cabello con sus manos, mientras yo lo arrullaba y caminaba por el lugar. De pronto miré a Carl recargado sobre la madera, asusyandome al inicio.

-No hagas eso- rodé los ojos con una sonrisa.

-Lo siento- sonrió mientras avanzaba.

Primero tomo la mano de nuestro bebé y después le planto un beso en el cabello.

-Se nota que será muy, muy pelirrojo- admitió él.

Sonreí al darme cuenta que era verdad, pues en su cabeza comenzaban a brotar pequeños rizos pelirrojos.

-¿Decepcionado, Carl?- arquee una ceja.

Él negó, besando esta vez mi mejilla -No, estoy feliz de eso.

Los pasos del rubio adentrándose a la habitación llamaron nuestra atención, provocando que ambos miraramos al causante.

-¿Ustedes van a ir?- inquirió Ron al acercarse.

Ambos negamos -Creemos que es mejor si nos quedamos a terminar esto, el consejo está de acuerdo.

Tomé su mano -Si, ellos... van a venir otra vez así que debemos estar listos.

-¿Quién mas irá?- se preguntó Carl.

-Yumiko, Ezekiel y Becca- respondió Ron mientras se cruzaba de brazos -¿Podemos... hablar, Alex?

Miré al pecoso y él a mi, mientras le asentía con la cabeza y entonces le daba una última mirada al bebé en mis brazos antes de dejarnos solos.

-¿Qué pasa?- le mire preocupada.

Glenny balbuceo hacia él, haciendo sonreír a Ron en el proceso.

-Apenas lo conocio hoy- empezó, refiriéndose al bebé -Se volvió loca, metafóricamente.

-¿Sophia?

Asintió -Lo intenta, Lex.

Negué -Si vas a hablarme de eso no quiero escuchar.

-Está arrepentida- insistió -Y aún así se encargo de cuidarlo.

Eso me hizo mirarle -No me importa lo que hizo después, si no lo que hizo que nos llevara a esto, no sabes cómo me sentí, Ron.

-No, tienes razón, no estoy diciendo que la perdones ni nada- tomó la mano de Glenny -Esto queda entre ustedes, no me voy a meter.

Asentí, mientras le daba una leve sonrisa -Gracias.

━━━━ ⋆ AUTHOR'S NOTE: spoiler del siguiente cap: díganle adiós a Alex y Carl.

También a Sophia y Alex.

chau 🚶‍♀️