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⇏𝘛𝘸𝘦𝘯𝘵𝘺






ᴄʜᴀᴘ. ᴛᴡᴇɴᴛʏ. "sᴇɢᴜʀᴀ ʏ sᴀɴᴀ."




𝔖𝔲𝔰 𝔡𝔦́𝔞𝔰 𝔢𝔰𝔱𝔞𝔟𝔞𝔫 𝔠𝔬𝔫𝔱𝔞𝔡𝔬𝔰 𝔶 𝔰𝔞𝔟𝔦́𝔞 𝔮𝔲𝔢 𝔢𝔯𝔞 𝔰𝔬𝔩𝔬 𝔠𝔲𝔢𝔰𝔱𝔦𝔬́𝔫 𝔡𝔢 𝔱𝔦𝔢𝔪𝔭𝔬. No se atrevió a mirar más el número que estaba estampado en su brazo, porque no quería pensar en eso. No quería pensar en cuánto tiempo le quedaba para sentarse en una cama de hospital repitiendo lo mismo una y otra vez. No quería pensar en el hecho de que iba a seguir vomitando sangre y bilis hasta que oficialmente se le acabara el tiempo y no tuviera nada más por lo que vivir. No quería pensar en nada de eso. No quería pensar en las cosas horribles que le estaban pasando. Peor aún, no quería pensar en lo que les iba a pasar a todos los que amaba y por quienes amaba.

Se le había quitado el cabello de la cara mientras yacía en la cama del hospital, sin siquiera recordar lo que había pasado el día anterior. Sabía que era una operación en un intento por salvar su vida después de que se había caído de la cama. Una parte de ella deseaba que la hubieran dejado en el suelo mientras se ahogaba con su propia sangre, pero habrían hecho todo lo posible para salvarla. Le encantaba eso de los Vengadores, cómo lucharon por los suyos. Pero sabía que solo podía ayudar hasta cierto punto antes de que fuera demasiado tarde.

Aunque cuanto más pensaba en ello y pensaba en ello, sabía que no había nada que pudiera hacer. Que no se podía haber hecho nada para ayudarla. Su vida había cambiado tan drásticamente que no sabía qué podría ayudarla con cualquier cosa que sucediera. Cassia quería poder estar allí para aquellos que amaba y por quienes se preocupaban durante sus pruebas más grandes, pero sabía que no podía. Ella no podría estar allí para ellos, incluso si quisiera. Solo tenía que esperar y rezar para que hubiera alguien cuidando de ellos.

Incluso cuando ella se había ido.

Ella miró hacia el techo mientras se acostaba en la cama antes de volver su atención a la puerta para ver que Tony estaba parado allí. Los dos se miraron el uno al otro durante unos segundos, antes de que él entrara a la habitación. Tony se acercó a su cama y se sentó en la silla a su lado. Se acercó y tomó su mano entre las suyas, presionando un beso contra el dorso de su mano.

Los dos se sentaron en silencio durante unos segundos, antes de que Tony fuera el que parecía que iba a decir algo. No quería que él sintiera que tenía que decir algo para hacerla sentir mejor. La hizo sentir bien el solo hecho de saber que él estuvo allí para ella durante el período más oscuro de su vida y que estaba allí para asegurarse de que ella no estuviera sola. Ella solo quería que él tomara su mano y le dijera que la amaba más que a nada en el mundo. Cassia sabía que había tantas cosas que quería poder hacer como estaba con Tony. Quería vivir su vida con él y poder hacer todo lo posible para salvar el mundo que la rodeaba.

Pero ella no pudo. Y le rompió el corazón. ⠀⠀⠀⠀⠀

- Sé lo que estás pensando, pero no quiero que lo digas - Cassia le habló con voz ronca mientras lo miraba. Ella frotó su pulgar contra el dorso de su mano y le dedicó una pequeña sonrisa. - Haría cualquier cosa para poder vivir el resto de mi vida contigo, pero esto es lo que me depara el destino.

- Uno pensaría que alguien que pasó tanto tiempo estudiando el Efecto Mariposa y haciendo que su vida siguiera su ejemplo habría tenido un mejor resultado - le respondió Tony en broma, y ​​la hizo sonreír. A ella le encantaba su forma de afrontar la situación, pero sabía que solo iba a ayudar mucho. Sabía que él solo iba a poder bromear un poco con lo que sucedía a su alrededor. Por eso se alegraba de que se olvidara de ella cuando se fuera. - Ojalá hubiera algo que pudiéramos hacer.

- Sé que lo haces - le respondió Cassia mientras inclinaba la cabeza hacia un lado. - pero no hay nada que podamos hacer para detener lo que sea que me esté pasando.

- Haría todo lo que pudiera para salvarte - Tony le habló y ella vio como las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos. Ella se acercó a él con la otra mano y la apoyó contra su mejilla. - Haría cualquier cosa y todo para asegurarme de que tengas la vida que te mereces.

- No querría otra vida, Tony - le señaló Cassia con un suspiro en la punta de la lengua, antes de negar con la cabeza. - Esto es algo que tenemos que aprender a afrontar y a afrontar. No hay nada más que podamos hacer para detenerlo.

La miró durante unos segundos, antes de negar con la cabeza.

- ¿Cómo puedes estar tan bien con lo que está pasando? ¿Cómo puedes ser tan positivo con lo que sucede a tu alrededor?

Apretó los labios durante unos segundos mientras pensaba en cómo iba a juntar las palabras correctas. Y cuando pensó en ellos, no dudó en decirlo.

- Porque sé que cuando todo esté terminado y desaparecido, todos ustedes estarán sanos y salvos. Pase lo que pase.

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