La música sonaba fuerte, como es toda fiesta. Los alumnos se divertían, los maestros también lo hacían mientras ponían orden, incluso algunos héroes profesionales y ex alumnos asistieron. Todo parecía ir bien, claro, si exceptuabas que los chicos de la clase 2-A parecían zombis andantes. ¿Dónde estaban los muchachos que querían divertirse? ¿Que vivían sus emociones al máximo? Esas y mas preguntas pasaban por las cabezas de los tres profesores mas cercanos a la clase.

Toshinori Yagi, Hizashi Yamada y Shota Aizawa.

Así es, y como padres adoptivos -y héroes profesionales- de la clase, iban a llegar al fondo de esto. Así que arrastrando a Aizawa fueron a preguntarles a los chicos lo que pasaba.

- ¿Jóvenes, porque esas caras? ¿No deberían de estar bailando o en la mesa de bocadillos? – pregunto amablemente el profesor Toshinori cuando se acerco al grupo de jóvenes reunidos junto a las mesas.

- YEAH! Deberían de estar divirtiéndose, bailando con sus amigos, comiendo y bebiendo ponche hasta que exploten. No acá con cara de entierro. – hablo el Yamada mientras volteaba a Aizawa para que les diera la cara a los chicos.

La única respuesta que recibieron por parte de los chicos fue una mirada de desagrado hacia su tutor.

- No me vean así. No es mi culpa que no tuvieran las agallas para hacer una simple pregunta.

- Usted nos lo prohibió.

- ¿Y desde cuando me hacen caso?

Touché

- ¿Pregunta? ¿Pregunta de qué? -pregunto extrañado Toshinori mientras miraba a Aizawa y luego a los muchachos, esperando a que le respondieran. Y antes de que los chicos pronuncien alguna palabra Aizawa se les adelanto.

- Recuerdan que dos semanas antes de este dichoso baile, estos engendros, hicieron todo un desastre y como castigo yo les prohibí venir con parejas.

- Si claro, pero creí que lo habías dicho de broma Shota.

- Pues no.

- ¿Es por eso que los niños no tienen parejas?

- Creí que nunca te hacían caso.

- Y no lo hacen. Solo que esta vez su cobardía pudo más. ¡Ja! Quieren ser héroes, pero no pueden pronunciar una simple pregunta. - dijo mientras bebía un poco de ponche.

- Eso sí que es patético. - dijo un joven pelinegro de ojos turquesas, junto a él se encontraba un rubio de cejas tupidas y una sonrisa cínica.

- Ni que lo digas. Qué vergüenza Tokoyami, yo creía en ti. Me has decepcionado -negaba la cabeza mientras ponía una mano sobre en hombro del nombrado. Mientras que este se sonrojaba de vergüenza.

- ¿Qué haces aquí Touya?

- Vine a bailar -dijo tranquilamente mientras se servía poche.

- Yo lo invite. -dijo el héroe N°2 mientras que le daba un giño.

- Pero tu no eres ex alumno y mucho menos estudiante.

- Pero si un héroe con invitación – dijo mientras sonreía y mostraba la invitación. La cual se le fue arrebatada por el hermano menor de su pareja.

- Esta invitación es para el viejo.

- ¿Y? ahí dice Todoroki. Yo soy un Todoroki. Además, soy mejor yo que él. -dijo mientras le quitaba la invitación de las manos. – como sea, no estamos hablando de eso. Si no, de lo patéticos que se ven ustedes sin pareja. – volvió a decir, ganándose una mirada de desprecio de su hermano menor -y Bakuguo- y otra de vergüenza por parte de la clase.

y es que el ex villano tiene razón. Son los únicos sin pareja. Todos en la academia tienen. ¡Hasta los profesores! Y ellos no. Y ahora venia el hermano mayor de uno de ellos a restregarles en la cara que hasta el tiene pareja y eso que es un ex villano con pintas de gótico desgarbado.

Si que eran patéticos.

- Saben, deberían por lo menos disimularlo un poco sacando a bailar a alguien. Uno nunca sabe cuándo la canción perfecta puede sonar.

Estaba aburrido. Y eso es mucho decir viniendo de él.

Todos sus compañeros se habían ido a bailar o solo se dispersaron por ahí. Podía ver a Bakuguo juntos a Kirishima hablando junto a la mesa de bocadillos. Sero y Mina bailar junto a Uraraka e Iida en medio de la pista de baile. Tokoyami, Tsuyu, Hagakure y Ojiro parecían tener una linda charla un par de mesas mas allá. Incluso Midoriya y Todoroki parecían haber arreglado todo entre ellos, porque bebían ponche junto a una de las ventanas.

Todos parecían pasarla bien, menos él.

Ojalá hubiera mandado a volar a mina cuando irrumpió a su habitación y lo obligo a ir a ese estúpido baile. Así él podría estarse sintiendo miserable, pero en su cómoda cama mientras veía Pokémon y comía un galón de helado y no en una incomoda silla juntos a una mesa llena de copas vacías. Ni siquiera podía parecer ser el tipo ebrio de la fiesta, porque esas copas no contenían ni una pizca de alcohol al ser una fiesta escolar. Genial.

- Si sigues suspirando así, te vas a quedar sin aire. -dijo una muchacha sentándose en la otra silla vacía a su costado derecho.

- No me importaría.

- Si sigues con esa cara, nadie te va a invitar a bailar.

- No me interesa.

- Es una fiesta Den, creía que te encantaban las fiestas.

- Lo hacen, pero no está.

- ¿Porque estas con cara de entierro?

- Solo no estoy de humor.

- Denki Kaminari no esta de humar para fiestas? Wow, quien eres que hiciste con el Pikachu idiota?

- Esta en su habitación, bajo sus sabanas viendo Pokémon junto a un litro de helado y no en esta estúpida fiesta.

- ... es por Shinsou que estas así?

- Jirou, no deberías no se de estar bailando en medio de la pista o besuqueándote con Yaomomo en una de las esquinas o en los baños. -dijo irritado el joven ganándose un golpe de su amiga.

- Idiota.

- Eso dolió tonta.

- Te lo ganas por idiota. Y para que sepas, Momo fue por ponche.

- Hummm que suerte por ti.

- Denki... si esto te afecta tanto debería de intentar hablar con él.

- Lo intente. Y no quiso.

- ¿Qué te dijo?

- Ni siquiera me abrió la puerta de su cuarto.

- Tal vez... solo estaba ocupado.

- ¿Dos horas? Si... no lo creo.

- Que vas hacer? – pregunto mientras intentaba buscar la mirada de su amigo. Que desde que empezaron a hablar sobre el tema lo único que miraba era su copa medio vacía de ponche.

- Pues... me comeré estas mini hamburguesas, tomare lo que queda de mi ponche y luego iré a deprimirme a mi cuarto con helado. -dijo mientras suspiraba y levantaba la cabeza para mirar a su amiga, regalándole una sonrisa que no le llegaba a sus ojos.

- Sabes que no hablo de eso. -le dijo mirándolo seria.

- ¿Entonces de qué?

- Si Shinsou...

- No lo menciones. -la interrumpió mientras se cruzaba de brazos.

- ¿Enserio?

- ...

- ...

- ...

- Bien. Si el, intenta... hablar contigo...tu... ¿lo dejarías?

- No.

- ¿Porque no?

- ¿Porque debería?

- Denki.

- Es que enserio. ¿Porque debería? Estuve afuera de su cuarto DOS HORAS.

- Si, pero...

- Pero nada. Las dos ultimas semanas me la pase persiguiéndolo para saber si quería ir conmigo al baile y ¿cómo me lo encuentro? Revolcándose con Midoriya en su cama.

- No se estaban revolcando

- ...

- No de esa forma.

- Como sea, ni siquiera vino a explicarme lo que paso. -dijo bajado su mirada hacia sus manos.

- Pensé que no querías una explicación...

- ¡Claro que la quería! -dijo volteándose a verla con los ojos llorosos- por supuesto que quería una explicación! Pero yo no tenía que pedírsela. Si fue un mal entendido se supone que él tenía que venir a explicármelo. Claro, si yo significaba algo para él, como lo que el significaba para mí. Y al parecer no es así, ya que él ni siquiera pudo estar afuera de un cuarto por dos horas como estúpido. Así que no. No quiero saber nada de él.

- Wow, si lo dices así... suena a que soy un verdadero imbécil. -dijo un joven a sus espaldas

- Lo eres.

- Lo soy.

- Yo... creo que mejor me voy a buscar a momo. Nos vemos Den, llamas si necesitas algo. -termino de decir la muchacha, para parase e irse. No sin antes empujar con su hombro al pelimorado. Al cual le dio una mirada de: "si lo haces llorar te mato"

- Claro... - le dio una pequeña sonrisa. Le hacía sentir feliz que sus amigos se preocuparan por él.

Lo hacía sentirse querido. Aunque su sonrisa desapareció en cuanto vio al pelimorado sentarse en la silla que había deja su amiga. Enserio no quería ni verlo.

- Yo... bonita fiesta ¿no? -pregunto el joven recién sentado a su lado nervioso.

- ...

- ... están ricas las hamburguesas? -volvió a preguntar mientras cogía una del plato del rubio

- ...

- ¿Qué tal el ponche?

- ...- nada, más silencio por parte del rubio.

- Que...

- ¿Qué haces acá? – no lo dejo terminar.

- Vine al baile – le dijo con una sonrisa intentado bromear. Denki no le siguió el juego. Solo lo miraba serio con sus ojos apagados. - yo...

- ¿Qué quieres? – volvió a preguntar el rubio mientras sentía como sus ojos se ponían vidriosos.

Shinso se odio en ese momento. Era... es, un completo imbécil.

- Quería verte...- dijo mientras alargaba una de sus manos hacia una de las mejillas del rubio. Quien rechazo el contacto volteando su cara al frente.

- Ya me viste. -dijo serio. Joder, ¿dónde estaba Bakuguo con sus explosiones cuando se lo necesita? – si eso es todo, puedes irte.

- Eso no es todo

- ¿Entonces? Que mas quieres para que te vayas y me dejes en paz.

- Quería hablar contigo...

- ¿Quería? ¿Tiempo pasado?

- Quiero.

- ¿De qué? Hasta donde yo se no tenemos nada de que hablar.

- Denki...

- Kaminari. Solo mis amigos me llaman por mi nombre.

- Yo... ¿ya no soy tu amigo?

- No lo sé, tu dime. Llevas ignorándome dos semanas.

- Se... que fui un imbécil pero

- ¿Fuiste?

- Soy, pero tengo una explicación. Lo juro. Solo que...yo... no sé, como

- Calla. No quiero oírla.

- Pero

- Te lo voy a dejar fácil Shinsou. No quiero oír ninguna explicación. No la necesito. Lo dejaste muy claro. ahora, si eso es todo me voy. -dijo mientras se paraba y emprendía camino a la puerta de salida. Quiere largarse lo más rápido posible a su cuarto y no salir jamás.

- No, no, no, espera. ¡Espera! – grita el joven mientras se paraba de un salto al ver a Denki salir corriendo en dirección a la puerta. – deja que te explique, no es como tu crees. Lo que paso fue

- No. Quiero oírlo. -le grito sin voltear adentrándose a un pasillo huyendo del pelimorado. – déjame en paz!

- No. -dijo mientras lo jalaba del brazo obligándolo a voltearse y enfrentarlo cara a cara. – no quiero dejarte en paz. No quiero dejarte.

- No entiendo. No te entiendo. ¿Qué quieres de mí? – dijo lloroso.

No lo entendía, a veces pensaba que sí. Que cuando volteaba a verlo, con ese brillo en su mirada y esa pequeña mueca que se asemejaba una sonrisa, o cuando le daba palabras de aliento o lo abrazaba cuando ambos estaban a solas, era porque lo quería. Pero luego se portaba tan frio con él, a veces no le hablaba en publico o cuando estaba en la sala común y él le decía para hacer algo juntos, se iba con otra persona o le decía que ya tenia planes, incluso lo ignoraba. El pensaba que era porque su personalidad era tímida, fría y seria; pero después de estas dos semanas ya no sabe que pensar.

- Cinco minutos, por favor -dijo desesperado al ver lágrimas en sus hermosos ojos. - solo cinco minutos. Déjame explicarte, solo déjame hacerlo y si... después de que yo te explico, tu... ya no quieres... saber nada de mi... te dejo en paz. Pero por favor solo dame cinco minutos.

Estaba rogando. Y no le importaba. Si en esos momentos Denki le pedía que se tirara de la ventana o se golpeara contra la pared, el lo haría. Si eso hacia sentir mejor al rubio, el lo haría.

- ...

- Por favor...

- ... bien... solo, cinco minutos. No más. Y me dejas en paz.

- Bien. Gracias. -dijo con una sonrisa de alivio, al fin el rubio lo escucharía. - te parece mejor si vamos a hablar a otro lado?

- No creo que...

- La música esta muy fuerte y no nos va a dejar hablar bien.

- No lo sé...

- No tenemos que ir a los dormitorios si tu no quieres... podemos ir al patio ¿qué dices? La noche esta hermosa. Hay luna llena, como te gusta.

- ...

- Anda, vamos... por favor.

- Esta bien. -dijo el rubio mientras asentía

- Bien, vamos.

***

Shinso tenia razón, la noche estaba hermosa. El cielo nocturno esta salpicado en estrellas, sin ninguna nube a la vista y la luna era la protagonista blanca, redonda y hermosa. Brillando en lo alto, además, no hacia frio, al estar ya en primavera, se sentía cálido con un aroma flores. Romántico, aunque por el momento tenso que tenían los jóvenes, no pudieran apreciarlo bien.

Ninguno de los dos sabía cómo cortar el silencio en el que estaban envueltos. Uno por no saber como explicar todo el desorden en su cabeza y el otro al no saber que esperar de las palabras del otro. Denki sabía que Shinsou no iba hablar a menos que le dieran un empujón, así que lo hizo.

- ¿Y bien? que tienes para decir? Te escucho.

- Yo... veras, lo que paso fue... - carraspea, pasa el nudo en su garganta y vuelve hablar- yo si lo iba hacer, pero luego la caja quedo hecho papel y, luego el otro floto, explosiones y él dijo que, si quería, y luego más empujones y yo, solo estaba parado en medio de todo y...

- Espera, espera, espera, no estoy entendiendo nada. ¿Caja? ¿Flotar? ¿Explosiones? ¿Que? ¿De que estas hablando? – pregunto confundido Denki- no entiendo, de que estas hablando?

- Del viernes

- Del viernes. ¿Qué viernes? Ayer, la semana pasada, la antepasada ¿De qué viernes estás hablando? Shinsou, estos tres últimos viernes han sido un completo desastre.

- Si lo se... pero al que yo me refiero fue el de hace dos semanas. El viernes cuando Aizawa nos castigó.

- Aja, ¿qué paso?

- Ese día... yo, te había dicho para almorzar juntos. ¿Recuerdas?

- Si, ¿qué tiene? Solíamos almorzar juntos de vez en cuando.

- Si, lo sé. Solo que, ese día era especial.

- ¿Especial? ¿Por qué?

- Se suponía que ese día íbamos a almorzar solo los dos. Tu y yo -dijo mientras miraba como el rubio asentía- bien. Además de eso, se suponía que... te... diría, si tú. Ya sabes.

- ¿Ya sé qué? Shinso, estamos acá porque no sabemos nada de lo que está pasando -entre nosotros quiso agregar, pero no pudo.

- ...

- Shin -no logro terminar puesto que el pelimorado exploto.

- Ese día yo me iba a declarar y a preguntarte si querías ir conmigo al baile. – lo soltó de una y sin anestesia el pelimorado

- Oh...- eso lo agarro frio. Si antes no sabia que decir, ahora menos.

- Si, oh. Pero no puede.

- ¿Porque, porque no pudiste?

- Ese día acabo en un completo desastre. -dijo negando mientras daba una sonrisa irónica. – tenía preparada una declaración, no era tan elaborada o romántica, pero por lo menos era decente. Pero todo se fue a la basura en el momento que sonó el timbre ¿recuerdas? Todo el caos que se formó. -le dio una risa resignada- Yo tenía una cajita de fresas con chocolate, se que son tus favoritas, así que te compre una, iba dártela en el almuerzo, pero luego sonó el timbre y todo se fue al tacho. Quedo aplastada en medio del caos.

Denki recordaba bien ese día, o al menos parte de él, ya que lo último que recordó fue estar ayudando a Kirishima a quitarse el pastel y luego que volaba; para de ahí despertarse en la enfermería junto a mina. Ese día fue un caos.

- Vaya... no lo sabía, lo siento.

- ¿Porque te disculpas?

- No lo sé, solo sentí la necesidad de hacerlo.

- Si bueno, yo también lo siento. Se veían deliciosas, te habrían encantado. -dijo mientras volteaba a verlo con una sonrisa triste.

- Seguro que sí. -dijo devolviéndole la sonrisa. – bien, ya explicaste un viernes, te quedan dos.

- El viernes, que tu me viste con Izuku... así, fue porque, yo no quería ayudarlo en algo que él me había pedido.

- ¿Qué cosa te pidió?

- El me dijo que si podía ayudarlo en... -suspiro, se masajeo la frente con los dedos. Estaba cansado, su cabeza dolía, pero le debía esto a Denki. -él quería poner celoso a Todoroki y quería que yo lo ayudara con eso.

- Como ibas ayudarlo a... oh. – entendió. Midoriya quería poner celos a Todoroki con Shinsou. Wow, esa pelusita es un lobo con piel de conejo.

- Si... pero yo me negué. No veía el propósito, y conociendo a Izuku algo iba a salir mal.

- Entiendo, el porque estaba en tu cuarto, pero aun no entiendo porque estaban en esa posición.

- A eso voy, cuando yo me negué y el al ver que no lograría nada, hizo un berrinche y se subió a mi espalda, me tomo desprevenido así que caímos en mi cama, yo intentaba quitarlo de mi encima y en uno de esos empujones yo quede encima y luego tu entraste y pues... ya sabes el resto.

- Así que... eso paso...

- Si...

- Si eso había pasado, ¿porque no me explicaste?

- No lo sé, no podía.

- ¿Por qué?

- Porque no soy bueno con las palabras, porque me trabo cada que te veo a los ojos y eso me da vergüenza.

- Yo nunca me reiría de ti Toshi -dijo mientras lo miraba a los ojos y ponía su mano sobre la suya- lo sabes.

- Si, lo sé... solo que, soy inseguro y no confió en mí. – Toshi, le dijo Toshi. Que bien se sentía cuando él lo llamaba así. – y para cuando reuní el valor, paso lo de la cocina.

- Ya veo... - lo de la cocina, un desafortunado accidente que lo dejo llorando gran parte de la noche. – si fue un día de locos ese viernes.

- Si, ni que lo digas.

- Yo no me declare a Todoroki. Lo que paso

- Se lo que paso. Uraraka me conto lo que les dijiste, desde el incidente con la puerta de refrigerador y hasta el porque de la supuesta declaración.

- Entonces... si sabias, porque ... -alejo su mano de la mano del pelimorado- porque me dejaste...

- Recién me entere hoy. -dijo mientras volvía a agarrar la mano del rubio- cuando escuche... tu supuesta declaración... fue como si... como si me quedara sin aire... mi oxigeno se iba y mi mundo se apagaba. No veía muy bien donde estaba parado, o quien estaba a mi costado. Todo esta oscuro, mi sol se había apagado. Así que corrí, lo más rápido de pude a mi cuarto. -sus ojos perdidos, encontraron a los brillantes ojos del rubio. Estaban brillantes por las lágrimas.

- Que mas -lo animo a continuar, expectante a lo que diría después. Recordaba como sus nudillos se inflamaron y estaban rojos de tanto golpear su puerta.

- Cuando llegue me sentía perdido. No sabia que hacer, mi cabeza me dolía... y el pecho también. Así que me encerré en el balcón. puse la música a máximo volumen, me coloque lo audífonos, puse el celular en modo avión y me quede ahí casi toda la noche. -apretó las manos del rubio mientras veía un par de lágrimas caer. – no podía escucharte. Lo siento tanto. De verdad lo siento. Se que fui un imbécil, por haber hecho eso, pero... me sentía herido, y no se... nunca he sido bueno con las emociones... y tu me produces tantas... que no... no entiendo, pero me gustan, porque son por ti. Porque... porque me gustas. Porque estoy enamorado de ti.

Ya está.

Lo dijo.

Al fin lo dijo.

Joder. No se había sentido así de bien, desde que le dijeron que entro a la clase de héroes. Pero ahí, viendo como los ojos de Denki brillaban mas que el sol. Como se formaba la sonrisa mas hermosa que el vio jamás. Supo que nada se iba a sentir igual de genial que ahora. O tal vez sí.

Denki estaba en shook, se quedo en blanco. Lo único que sabes es que el quiere lanzarse a los brazos de Hitoshi y llenarlo de besos. Gritarle que el también estaba enamorado de él. Que lo quería. Pero ahí estaba el, llorando como bebe.

- Yo... ta-tambien...-sollozo- yo también estoy enamorado de ti.

- ¿Enserio? – dijo mientras lo acercaba para abrazarlo. – ¿de verdad Den?

- Si...-dijo mientras de aferraba a él.

- Entonces... es una pregunta obvia, pero... ¿quieres salir conmigo? -dijo mientras se separaba del rubio, no demasiado, solo lo suficiente como para mirarlo a los ojos – ¿quieres ser mi novio? No soy nada romántico y a penas y hablo mas que Todoroki, pero yo te quiero. Te quiero tanto que no se como expresarlo. Pero estoy dispuesto aprender si es contigo.

¿Se puede llorar de felicidad? Algunos dicen que eso no existe, otros que son de frustración, que luego de liberarse de ella, salen. Él no lo sabe, pero le da igual. El solo sabe que esta feliz y que lo único que quiere gritar es un...

- ¡SI! ¡Por supuesto que quiero salir contigo! -grito abalanzándose al pelimorado, el cual ahora llevaba el titulo de novio. De SU novio. – no me importa si no eres muy romántico o si no sabes bien como expresarte, no me importa. Porque yo te quiero así. Imperfecto. Porque yo también los soy. Hablo hasta por los codos, soy pegajoso y empalagoso. En nuestras deficiencias y diferencias, es donde nos complementamos. Mientras yo soy una tormenta, tu eres un mar en calma. Somo muy diferentes, pero eso es lo que nos atrae. Es como si tuviéramos una gravedad inexplicable que nos atrae uno al otro. Así que sí. Si quiero ser tu novio.

- Gracias. Gracias. Gracias- repetía una y otra ves el pelimorado mientras lo apretaba en un fuerte abrazo.

- No, gracias a ti. Gracias a ambos. A los dos Toshi, porque una relación es de dos. Porque estamos juntos en esto.

- Tienes razón, no sé qué va a pasar a partir de ahora, esto es nuevo para mí, pero voy a poner todo de mi parte para que lo nuestro funcione.

- Se que sí, yo también lo voy hacer. -dijo separándose un poco para mirarlo a la cara.

Bien, creo que después de hablar, explicar lo que paso en estas dos semanas. Se merecen empezar su relación con un beso ¿no lo creen?

.

.

.

- DENKI! BROOO! ¿DONDE ESTAS?

- SHINSOU! ¿DONDE ESTAS? ¡TE VAS A PERDER LAS FOTOS!

Como sabrán, la clase A es conocida por tener mala suerte.

- Creo que nos buscan

- Puedo usar mi Quirk, y obligarlos a golpearse contra el árbol unas cien veces.

- Toshi...

- Ok, unas mil.

- Eres imposible -dijo riendo mientras se levantaba de la banca en donde ambos estaban sentados. – anda vamos, sabes como son. No van a dejarnos en paz si no vamos con ellos.

- ¿De verdad tenemos que ir?

- Hitoshi... -dijo mientras lo jalaba a su lado- anda vamos.

- Pero...

- Ve el lado positivo.

- Yo no veo nada positivo en esto.

- Vas a poder restregarles en la cara que somos pareja. -dijo el rubio con una sonrisa mientras lo abrazaba por la cintura- sé que quieres hacerlo.

- ... si tienes razón... aunque eso también podemos hacerlo mañana en el desayuno.

- Si, lo sé peroooo... quiero bailar algunas canciones contigo -dijo mientras hacia un puchero- anda vamos, ¡di que sí!

- ... eres una amenaza – mientras le daba un beso en la frente- está bien vamos...

- ¡Si!

- Hablando de canciones, creo que tengo la indicada para bailarla juntos.

- ¿Así? ¿Cual?

- Te la diré cuando lleguemos.

- Oh vamos, no seas así... anda dimeeee

- Nop.

- Pero...

- Nada.

- Bien. Por lo menos dime que canción escuchabas cuando te quedaste en el balcón.

Ni bien termino de decir eso, Shinso se quedo parado en medio del patio. Se volvió hacia él y le dijo.

- Gravity. Estaba escuchando Gravity.

The End. 

¡AL FIN JODER! ¡AL FIN ACABAMOS CON ESTO! WUUU

Estoy pensando en hacer un epilogo. Tengo algunas líneas ya escritas, pero aun no estoy muy segura.

Gracias de verdad por seguir esta pequeña historia ♥

Fue escrita con mucho cariño.

Y la verdad no sé qué más decir.

Solo que, muchas gracias a todas las personas que leyeron y siguieron esta historia. Se los agradezco de corazón ♥

Nos vemos Good Guys (si es que les interesa XD)

Los quiero ♥

Kisses A.

PD: en este último cap, Denki y Hitoshi tienen algo de sus personalidades de GG XD sep mis personajes en esa historia van a ser ¡super intensos!

¡Ahora si bais!