•VII•
El rubio se quedó mirando a los ojos a Sakurai
—¿Qué?— preguntó con molestia
—¿Qué es la cosa que más le gusta?— cuestionó el de rayas en las mejillas
—¿Para que quieres saber?— interrogó con el mal humor que se cargaba desde hace tiempo
—Es que, quiero que sonría— honestamente respondió
Los clientes soltaron un suspiró de ternura, las mejillas del Haruno levemente se colorearon y Naruto no sabía que ocurría
Sakurai tomó el brazo de su empleado y con brusquedad lo introdujo a su oficina
Los compañeros de trabajo del Uzumaki estaban extrañados, solo pensaban que tonto era el de piel bronceada
—No hagas eso— regaño el de pelo rosa —Se puede malinterpretar, además que nos podría hacer perder dinero—
—¿Porqué?— preguntó él
—¿Eres idiota, verdad?— cuestionó con un tic en su ojo jade
—¿Porqué?— repitió con la misma inocencia que la primera vez
—No planeó quebrar porque piensen que salgo con uno de mis empleados— explicó el de mayor altura
El Uzumaki comprendió y se sonrojó bastante —Yo...yo...no... quería'ttebayo—
—Lo sé, no mides tus tonterías—
—Lo que hice no fue una tontería, deseó verlo feliz— exclamó con entusiasmo
—¿Qué intentas hacer?— él no entendía al chico que tenía enfrente
—Te ayudaré en todo lo que necesites— dijo el oji-azul
—Ayúdame a trabajar y no darme problemas, estaré feliz si lo haces— mencionó con una ligera sonrisa
Naruto sonrió con convicción y regreso a su trabajo, Sakurai también lo hizo
Sasuke lo vió, estaba tan feliz, llenó de vida, era diferente a los demás y vió a su jefe
Él no era capaz de entender que los sentimientos de ese chico eran honestos
Shikamaru se acercó a Sakurai cuando tuvo oportunidad, quien tuvo cierto repelus
—¿Qué pasó con él?— preguntó tratando de sonar desinteresado por el tema
—Nada— respondió y sonrió, Sakurai estaba ya más calmado y entendió que esa era una pregunta inocente, que demostraba interés por él —¿Realmente me veo tan mal?—
—Sí— respondió crudamente
—Con razón hasta un torpe como él se dió cuenta— dijo entre risas mientras lo veía
—¿Es homosexual o bisexual?— preguntó el Nara
—No, él no lo es, o no sé— respondió
—Naruto es alguien bueno para tí— comentó huyendo del lado de su jefe
El hombre de cabellos rosas río un poco, realmente creyó que era una broma
[...]
El café cerró por ese día y como siempre, Naruto y Sakurai se quedaron al final
—Te voy a pagar un poco más, por quedarte— habló el Haruno
—Oh...— dejó escapar —Gracias—
—Me gusta el anmitsu— dijo al aire
El Uzumaki dirigió su mirada a él, sorprendido
—¿Irías conmigo a mi puesto favorito? Pero si vas tendrás que pagar— chantajeó con lo esperanza que declinará
—¡Bien'ttebayo!— gritó entusiasmado —Ese platillo no es muy caro— se consoló
El oji-jade se sorprendía más de él cada día
Los dos salieron del puesto para ir al puesto de anmitsu
—Puede retractarse— advirtió el Haruno
—No lo haré— contestó lleno de convicción —Tal vez así pueda olvidarse de esa oxigenada creída—
Los ojos de Sakurai se abrieron de impacto y paró su caminar
—¿Quién te contó de ella?— enojado preguntó
Naruto lo sabía, lo había arruinado pero no tenía que decirle que su padre y él lo vieron en ese restaurante en su almuerzo
—Por ahí— soltó alejándose de Sakurai
—No pudo ser de "por ahí" todos están obligados a no hablar de ella— enfrentó acercándose al rubio —Alguien te debio haberte dicho— exigió implícitamente empujando un poco a el oji-azul
—Yo lo averigüe— respondió empujando levemente a el Haruno, que se molestó
El de cabellos rosas sabía que estaba mintiendo y ese gesto solo hizo que él se enojara más
Sakurai lo empujó con fuerza, tirando al adverso a la nieve
Naruto se quejó de dolor en medio de ese campo blanco, el oji-jade no tuvo resentimiento y lo dejó en ese lugar
El Uzumaki se levantó y enojado corrió y los lanzó a ambos a la nieve
El Haruno fue quien cayó a espaldas y el oji-azul estaba en su pecho
—No importa como lo sé— exclamó Naruto —Solo quiero ser amable porque me agradas—
El oji-jade lo veía de una forma extraña, algo que nunca había hecho
—Eres una molestia— dijo mirándolo a los ojos —Un tonto... pero...—
El de cabellos rosas paró con miedo a lo que podría decir porque en ese momento sus palabras no pasaban por el filtro de su cerebro
—Me alegró que estés aquí— confesó con la nariz roja por el extremo frío que había —¿No fue uno de los chicos?—
Naruto negó con una sonrisa, su corazón latía de forma extraña mientras lo veía debajo de él
—Naruto— llamó Sakurai
—¿Qué?— cuestionó el rubio
—Quitate de encima, tengo frío— informó
El Uzumaki se quitó y limpió su ropa al igual que Sakurai
—Por cierto, la próxima vez que hagas algo así te despediré— amenazó
El Haruno lo vió afirmar con su cabeza, seguía sin entender porque querían emparejarlo con él
Naruto estaba retirado de los pensamientos de amor, para él solo estaba ayudando a un amigo, pero hasta para él ciertas actitudes eran extrañas que pensaba de vez en cuando como cuando ambos caminaban al puesto de comida
—Aquí es— anunció el Haruno con una leve sonrisa lo que hizo sonreír a Naruto
Ambos se sentaron juntos y una mesera muy feliz los atendió
Los dos la notaron algo extraña así que se le quedaron viendo
—¿Ustedes están saliendo juntos? ¿En una cita?— preguntó con emoción
—¡Eh! ¡No, no, no!— gritó nervioso el Uzumaki
—¿Demasiado Yaoi?— preguntó calmado Sakurai al ya estar acostumbrado de que lo hicieran pareja de sus empleados en la imaginación de algunas mujeres
—Lo siento, y sí— respondió dando una leve reverencia
—No hay problema ¿Verdad? Naruto— preguntó mirando al mencionado
—No hay problema— respondió con una sonrisa nerviosa
Pidieron la comida ambos y ella se fue
—Debes acostumbrarte, en el café también lo hacen— aconsejo el oji-jade
—Pero me regaño hoy, por algo así— alegó el oji-azul
—Es diferente, ella se lo imaginan, además tú eres el inocente del café, no va bien con tu personalidad, además ahí chicas que les gustas—
—No me gusta ninguna— dijo desanimado —Me gustaría que me gustará alguien—
—No te lo recomiendo— soltó con un suspiro calmado —Menos llegar a amar— dijo pensando en Ino
El Uzumaki sonrió de manera forzada y sus ojos denotaban un poco de tristeza, sabía en quien pensaba cuando lo decía
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro