Parte 1 El día en que mi vida cambío
" ... TAL VEZ TODO LO QUE NOS ASUSTA ES, EN SU ESENCIA, ALGO INDEFENSO QUE QUIERE NUESTRO AMOR" RAINER MARIA RILKE
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Todo comienza en una época ya muy antigua de China, de forma más especifica en el alejado pueblo de Xin de Kaishi, este lugar a pesar de ser solamente un pueblo tenía una pinta más sofisticada que cualquier otro lugar en aquella época, pues era aquí donde solían pasar los grandes ejércitos del emperador para abastecerse de recursos cuando eran tiempos de guerra, además solían asistir personas reconocidas (taoístas, comerciantes, etc.) solo para tomar un pequeño descanso de sus rutinas de carácter noble.
Shi Zan, nació en este poblado, pero claramente acompañado por su familia, la cual es compuesta por sus padres y una hermana mayor, su vivienda era pequeña y de apariencia muy humilde; además eran de las personas más rechazadas en el lugar ya que el padre de la familia había huido de ahí cuando era joven cuando eran tiempos de guerra y por temor a la muerte escapo a pesar de que esto destruyera el honor a su emperador y patria, pero no solo esto había dañado la reputación del hombre a su regreso después de terminada la guerra y regularización de las cosas, si no cuando llegó casado con su mujer embarazada perteneciente a una pequeña tribu que no pertenecían a China, por lo cual a vista de las personas ignorantes de todas las clases sociales era una gran ofensa y les parecía que eran inferiores y asquerosos. A pesar de estos hechos se veían obligados a permanecer en Xin de Kaishi por cuestiones de economía y en todo caso a pesar de los malos tratos, en cierto punto resultaba ser el lugar donde más "tolerancia" podían llegar a recibir, ya que en todo caso nunca llegaban a nada que sobrepasara los límites de siempre.
Shi Zan en este punto de la historia tenía una edad de alrededor de los 9 años, su cabello azabache, ojos grisáceos, y de una apariencia agradable pero muy reservado y no tenía amigos debido a los prejuicios que les habían inculcado a los demás niños sobre la pequeña familia. A causa de esto los niños (sobre todo los de la nobleza) se volvieron crueles hacia Shi Zan e incluso llegaban a golpearlo (cosas que ignoraban la familia del niño), pero el no se quejaba ya que sabía que resultaría inútil hacer algo al respecto y solo angustiaría a sus padres, además el chico tenía mayores cosas por las que preocuparse como los trabajos que tenía que cumplir con el objetivo de contribuir un poco con la familia, ya que todos ponían de su parte.
Todo tenía su rumbo habitual, hasta que un día que parecía ser simple y cualquiera, cambió el rumbo de las cosas para su vida sin siquiera imaginárselo.
- hijo, hoy tengo que cumplir con un encargo de la familia Yijun por lo que llegaré un poco más tarde ¿de acuerdo? - Su padre era igualmente un hombre muy correcto y paciente a diferencia de su madre que a pesar de ser muy cariñosa tenía un carácter dominante al igual que su hermana.
- Claro, les avisaré a madre y a Shi Lei- contesto tranquilo y con su sonrisa habitual, pero internamente le desagradaba siquiera escuchar el nombre de la noble familia Yijun, pues estos eran los que más problemas les ocasionaban y no les quedaba más que agachar la cabeza.
- Muchas gracias, Shi Zan, trataré no demorarme más de lo necesario... ahh, casi lo olvido, por favor ve por algo de leña ya que realmente se ve que a partir de hoy nos cubrirán muy fuerte las nieves, pero de igual forma no hagas nada peligroso, si no puedes me encargo yo o incluso tu hermana ya vez que es incluso más fuerte que yo. - dijo el buen hombre
- No te preocupes, puedo hacerlo- dijo riendo un poco, no quería que su su familia trabajara más de lo necesario cuando él también podía ayudar a aligerar su carga.
- Esta bien, confío en ti. Y no vayas tan lejos y mucho menos cuando oscurezca- el padre a pesar de todo prefería ir él, aunque estuviese agotado, pues su familia era todo su mundo.
- Lo se, no haré nada riesgoso y si necesito ayuda la pediré- con su voz calmada logro tranquilizar a su padre, pues el niño sabia que tenia que tener cuidado y no solo por los humanos y animales, si no por los espíritus demoniacos que a pesar de ser escasos en Xin de Kaishi no estaba de más ser precavidos.
Después de haberse despedido de su padre, fue para avisar a su madre y hermana (las cuales solían hacer trabajos con telas y atendían algunos cultivos que tenían en la vivienda), las cuales se ofrecieron para ayudarle lo cual al niño agradeció, pero rechazó ya que realmente quería demostrar que era capaz y lo suficientemente maduro para su edad.
Como ya estaba empezando a caer copos de nieve se dirigió lo más pronto posible a las orillas del pueblo en dirección al bosque pues debía conseguir rescatar la madera no mojada o no serviría de mucho. Lo que el infante no esperó en ningún momento al estar concentrado en su tarea es que el grupo de niños que más lo molestaban (en donde iba como cabecilla el hijo único de la familia Yijun el cual siempre hacia lo que le placía en el momento) que querían jugarle una "pequeña broma" tal y cual dirían si se metían en problemas (lo cual nunca pasaba pues todos estaban a favor de las familias nobles y sobre todo a la de Yijun)
Así que Shi Zan solo se acerco a la orilla del bosque con una pequeña hacha (principalmente iba a buscar ramas pequeñas y no demasiado difíciles para el) y empezó manos a la obra ignorando los pequeños temblores que ya tenia a causa del frio que le causaba el mal clima que se avecinaba. En un momento estaba concentrado cortando unas ramitas bajas de un árbol cuando escucho de la nada un sonido como si alguien o algo se moviese de entre los arbustos bajos de más adentro del bosque pero esto solo duraron unos breves segundos, lo que sea que provoco el sonido se detuvo como a la expectativa; este hecho le hizo tener escalofríos y se quedo mirando hacia más adentro del bosque donde se había escuchado las hojas ser movidas (más que nada estaba debatiendo entre seguir ahí o salir corriendo, pues incluso podía ser cualquier animal pequeño como un conejo.) pero no pudo distinguir nada pues ya estaba algo oscuro lo cual era raro pues se suponía que faltaba un buen rato para que anochezca; pero Shi Zan no tuvo tiempo para seguir pensando en lo que estaba ocurriendo en los adentros de los arbustos pues del lado contrario lo derribaron el grupo de jóvenes nobles (que no se habían percatado de lo que había llamado la atención anteriormente al menor) por lo cual se le cayó y desperdigo la leña y la pequeña hacha, la apartaron por si acaso (aunque Shi Zan no hubiese tenido nunca intenciones de lastimarlos).
- ¡jajaja!, ¡lo tenemos, ey sujétalo bien! - dijo Yijun Heng (el cabecilla) a uno de sus compañeros
- ¡Qué idiota! ¡Pensé que seria más listo, pero realmente fue fácil! - dijo otro.
Shi Zan intentó moverse desesperadamente pero no funciono pues a pesar de no tener una complexión demasiado débil, lo superaban en numero, y gritar no serviría cuando estabas a las afueras del pueblo y con una nevada aproximándose más rápido de lo previsto. Tenia que pensar en algo para sacarse de ellos, pero tampoco le dio tiempo de procesar si quiera una idea pues entre todos empezaron a golpearlo consecutivamente (en lugares donde a simple vista no se notaran ya que sabían que el otro jamás los acusaba por lo que al final seria un asunto que nadie más sabría), así que también podían insultarlo todo lo que quisieran a gritos, mientras el otro buscaba aguantarse esperando a que todo terminase mientras contenía las lagrimas cuando los demás reían.
Mas en ese momento de forma sorpresiva para todos los presentes cayó al suelo el hijo de los Yijun que soltaba alaridos de dolor y maldecía; todos sus compañeros detuvieron los ataques pero aun tenían inmovilizado a Shi Zan pero aun así el también pudo ver que en la espalda de Yijun Heng había marcas de un zarpazo, el cual rompió la vestimenta del atacado y salía bastante sangre, antes de que los amigos de este reaccionaran para ayudar al compañero caído escucharon el sonido de algo que se movía rápidamente alrededor suyo pero sin dejarse ver por su velocidad, todos entraron en pánico y sujetaron como pudieron a Yijun Heng ya que la cosa que produjo el ataque dio un golpe a un árbol cercano y lo derribo de un golpe hacia el suelo produciendo un estruendoso choque que termino de horrorizarlos provocando su huida inmediata mientras gritaban. Shi Zan fue pisado en medio de la retirada así que no pudo correr y cómo pudo, intentó arrastrarse con tanto terror que sentía que le explotaría el corazón, pero trató de no hacer ruido para no llamar la atención de lo que estaba ahí. En eso logro visualizar un bulto entre uno de los arboles, de este solo logró distinguir unos brillantes ojos que lo observaban sin moverse si quiera un poco. El niño no supo como reaccionar, no sabía si eso significaba que todo intento de salvarse sería en vano, ahora solo quería estar con su familia a la cual probablemente nunca mas volvería a ver. Pudo ver que la oscura figura del lado contrario hizo un movimiento de la nada para dirigirse hacia su dirección, esto asusto al adolorido chico, el cual sintió un hueco en el estomago y cerró los ojos esperando sentir cualquier ataque; pero lo único que sintió fue la cercanía de aquella cosa desconocida pero no más, incluso cuando abrió los ojos solo pudo ver que en el suelo estaban apiladas todas las ramas e incluso muchas más de las que había recolectado e incluso la pequeña hacha estaba ahí; se sintió realmente confundido pero aliviado por el extraño hecho y mas debido a que no vio rastros de la misteriosa figura. Así que intento volver a reincorporarse, pero realmente estaba tan adolorido que volvió a caer en el suelo, no quería permanecer más tiempo en aquel sitio y mucho menos porque la oscuridad ya impregnaba el ambiente solitario; pero realmente los muchachos se habían excedido de lo habitual de sus abusos.
La nieve comenzó a caer con mayor intensidad y el frio le empeoró las cosas, seguramente su familia estaría muy preocupada a esas horas y acudirían para buscarlo (el problema sería el tiempo en que tardarían para encontrarlo con las circunstancias que se avecinaban). Realmente tenía a simple vista la apariencia de un animalejo moribundo que se ha dado cuenta del triste final del que será parte. En medio del silencio volvió a escuchar el sonido de hojas moviéndose a causa de algo que pasaba entre ellas pero que se detenía cada cierto tiempo cómo evaluando la situación. El miedo que sintió Shi Zan no se había detenido, pero no tenía mayor defensa que la pequeña hacha que sabía no serviría de nada si fuese atacado pues a pesar de todo él solo era un niño inexperto de la defensa y muy herido por, sobre todo.
Agarró con fuerza el hacha en caso de que tuviese que luchar con las ultimas fuerzas que le quedaban; y en eso la figura de entre las sombras sobresalió de los arbustos y claramente volvía hacia su dirección, pero esta vez el niño mantuvo bien abiertos los ojos intentando controlar lo mejor posible su propia respiración. La figura de la "criatura" al estar más cerca pudo identificarla como algo que no esperaba, era de una estatura incluso algo más pequeña que la suya y cuando se acercó lo hizo lentamente como tanteando el terreno (incluso se podría decir que ambos estaban igual de asustados sin saber como reaccionar), el extraño sin duda era otro niño (tal vez dos años menor) de rasgos finos, cabello castaño en medio de una pequeña trenza, sus ojos eran del color del verde jade y su expresión formaba una mueca muy tierna a simple vista de inseguridad.
Instintivamente y sin darse cuenta Shi Zan soltó el arma (su inconsciente parecía decirle que no se encontraba en peligro ya). Y lo único que hizo fue mantener su mirada en la del otro y formo una de sus típicas sonrisas que realizaba para tranquilizar las tensiones, aunque tuviese dificultad por el dolor que le producía siquiera respirar. El menor pareció captar que no iba a ser atacado por lo cual se acerco frente a frente y se acuclillo ahí. Este chiquillo acerco sus pequeñas manos hasta tocar uno de los brazos del otro.
-Auch!- sé quejó Shi Zan involuntariamente, esto provoco que el otro se tensará y retiró su contacto inmediatamente. El de cabello oscuro se arrepintió de haber asustado al más pequeño y después de todo no quería quedarse solo- perdón, no quería asustarte, por favor no te vayas.
El niño desconocido pareció dudar unos segundos, pero no se alejó; y este volvió a tomar cuidadosamente el brazo del mas grande mostrando la piel llena de cardenales, para sorpresa de este último vio como las heridas desaparecían junto con el dolor en todo el cuerpo.
- ¿cómo hiciste eso? -
-... te di algo de mi energía- contesto el otro mientras apartaba sus manos, incluso mostró una pequeña sonrisa
- ¿porqué? - tenía muchas preguntas, ¿no era acaso este niño un feroz demonio? ¿de qué le servía curarlo? ¿Cómo le compartió de su energía?... el otro solo hizo un gesto de negación como contestación-... soy Shi Zan, yo no te haré daño.
-mi nombre es Deshi Daquan, tampoco te haré daño-
- ¿eres un...? - no completó la pregunta, no sabia si se estaba sobrepasando al cuestionarlo y en vez de eso lo mejor seria retirarse lo mas pronto posible
- ¿un demonio? ...emmm...si... y tu eres humano- habló como si fuese una contestación que se debería tomar uno a la ligera
-jajaja- rio bajo de forma nerviosa- sí, pero será mejor que me vaya. Me estará esperando mi familia en casa- debería irse pronto y no molestar al demonio.
-o-okay...- el niño se sentó cerca de un árbol de forma de que sus brazos abrazaron sus propias piernas, su gesto se volvió a apagar, pero claramente no iba a evitar que el otro se fuera
Shi Zan se detuvo y observó más detenidamente al pequeño demonio, y pudo ver que este también tenía heridas (pero en partes notorias como el rostro), pero extrañamente sus ropas eran de una excelente calidad como la de los nobles (a diferencia de las que su propia familia acostumbraba a usar).
-estas herido ¿puedes curarte? ¿Los demonios tienen casas y familias? - estaba nevando ahora muy fuerte y a pesar de saber que probablemente a un demonio no le afectaría algo como eso, su naturaleza amable y gentil no le permitía arriesgarse a eso y mucho menos cuando el otro pequeño no le había lastimado, más bien parecía que lo había defendido e incluso facilitado su labor de recolectar leña y de sanar cada una de sus heridas.
-no tardaré mucho en curarme, tal vez mañana ya este completamente bien; los demonios si pueden tener familias... yo no tengo ya-
-si te quedas aquí solo, ¿estarás bien? -
-los humanos no se preocupan por demonios, ve con tu familia- dijo el otro mientras ocultaba su rostro entre sus rodillas.
-bien, cuídate... oye ¿te volveré a ver? - a pesar de lo extraño que sonase el querer ver por voluntad propia a un demonio, quería hacerlo, pues era la primera vez que tenía una conversación tranquila con alguien de casi su edad.
Deshi Daquan asomo su rostro en seguida mientras le brillaban los ojos como de emoción, seguramente era la primera vez que escuchaba algo como eso y sobre todo de parte de un humano.
-no- contestó tan diferente a lo que hace un momento indicaba toda su figura, seguida de esta respuesta fría y cortante se reincorporo de inmediato y corrió velozmente a los adentros del profundo bosque sin dejar rastro de su presencia.
Todo esto desconcertó al niño humano, ni siquiera pudo agradecer correctamente al más pequeño por su ayuda y al parecer no habría ningún otro encuentro. Así que tomo sus cosas y se dirigió a su hogar donde al parecer no había pasado mucho tiempo al parecer, y además se decidió a contar a sus padres sobre lo que había sucedido, omitiendo ciertas cosas, como que había visto un oso y que otros habían sido atacados al estar haciendo travesuras (no gravemente); al final logro tranquilizar a su familia, los cuales tendrían que dar seguramente algunas pequeñas explicaciones a la familia Yijun.
Esa noche al irse a dormir tuvo como ultimo pensamiento consciente, a aquel pequeño niño que al contrario de lo que sabia de demonios había sido mil veces mejor con el que el pueblo entero, pero lo mejor seria olvidar el asunto pues de lo contrario podría incluso causarle problemas a su pequeño benefactor.
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NOTA
Xīn de kāishǐ - significa "nuevo comienzo"
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