/ Italia /
/ Mansión Vongola /

Después del desayuno, Timoteo se despidió de sus nietos y en compañía de Reborn, se dirigió hacia su despacho.

Mientas que Giotto y Hitoshi guiaban a Shun y compañía a sus respectivas habitaciones.

HITOSHI: esta es de Tsuna y Len... - señalando una puerta blanca -, y esta otra, es de Kuon y Kon... - señalando la de a lado, la cual era de color roja -.

GIOTTO: esperó que les guste.

SHUN: gracias, Giotto.

LEN: si. Lo que el dijo... - jalando a Shun junto con el a la habitación -.

Tras ver como entraban y cerraban la puerta, Kuon y Kon suspiraron.
Mientras que Giotto y Hitoshi vieron la puerta con una sonrisa nerviosa.

KUON: disculpenlos, necesitan tiempo de calidad... - dirigiéndose a la habitación de a lado -.

KON: si... - siguiendo a su hermano —.  A solas... Si saben a lo que me refiero. ¿ No ?.

Kon los miró de forma sugerente y una ceja levantada.

GIOTTO: c-claro... - sonrojado -.

KON: entonces... Con su permiso.

Tras esas palabras, los hermanos entraron a su habitación.
Dejando en el pasillo a unos sonrojados Giotto y Hitoshi.

/ Mientras tanto /
/ Con Reborn y Nono /

Ambos se encontraban sentados en los sillones del despacho de Nono.

TIMOTEO : ¿ Y bien ?... - mirando fijamente a su amigo -.

REBORN: - suspirando -, me gusta tu nieto.

Dijo de repente el sicario.

Soltando la bomba de golpe.

Derramando la sopa.

Diciéndole la inyección de información y sin anestesia.
(Bueno, ustedes me entienden, ¿ No ?)

Causándole una mini-impresión al pobre y viejo Timoteo.

TIMOTEO: ¿ Perdonadme ?... - incrédulo -.

REBORN: así es... - cubriendo su mirada con su fedora -, fue inevitable... Caí rendido tan solo verlo la primera vez.

Timoteo al ver que su amigo no estaba mintiendo.
Solo pudo suspirar.

TIMOTEO: hay, viejo amigo... - recargándose en su sillón -, ¿ Ahora que harás ?, mi nieto ya tiene una pareja. Y se que tu no eres, de esos de los que comparten, como dicen la juventud de ahora.

REBORN: si, lo se... - hundiéndose más en el sillón -, lo único de lo que si estoy seguro, es que me he enamorado de ese chiquillo como nunca antes lo he estado.

TIMOTEO: oh... - alzando una ceja -, ¿ Ni siquiera de aquel antiguo Cielo que tenías ?... - mirándolo atentamente -.

REBORN: no, ni siquiera Luce fue capaz de hacerme sentir lo que este chiquillo a logrado... - se lamento -.

TIMOTEO: hay, viejo amigo... - negando con pesar -, solo esperó que con el tiempo, ese intenso amor que ahora sientes por mi nieto se te vaya olvidando poco a poco.

REBORN: o se intensifique mucho más...

/ En la habitación de Len y Shun /

Los nombrados se encontraban abrazados en la gran cama de doseles, en la que se hallaban acostados.

LEN: Shun... - acariciando los suaves cabellos del nombrado con su mano derecha, mientras que con su izquierda lo abrazaba por la cintura -.

SHUN: ¿ Mmn ?... - disfrutando las caricias con los ojos cerrados -.

LEN: ¿ Y si jugamos un poco ?... - sonriendo juguetonamente -.

SHUN: ¿ Aquí ?... ¿ En este cuarto ?... - abriendo los ojos con sorpresa -, ¿ En la casa de ELLOS ?.

LEN: si, ¿ Que tiene de malo ?... - atrayendo a Shun más hacía si -, ellos ya saben de lo nuestro.

SHUN: si, lo se amor... - volteandose de lado y acurrucandose contra Len -, pero eso no es lo indicado. Y además sería una falta de respeto al abuelo, ¿ No ?.

LEN: - pensativo -, tienes razón... - suspirando -, el abuelo se ha portado de maravilla con nosotros. Ni modo, toca aguantar.

SHUN: jajajajaja... Pobre de mi amor... - besando la mejilla de Len -, no recibirá mimos por la noche.

LEN: moow... El latir de mi corazón, se burla de mi desgracia... - fingiendo enojarse -.

Por su parte, Shun siguió riéndose y burlándose de su amado Len felizmente.

Sin notar la suave mirada y la leve sonrisa que el nombrado tenía sobre sus labios.

/ Una hora después /

La puerta de la acaramelada pareja fue tocada varias veces por un feliz e hiperactivo Lambo.

LAMBO: mamá, papá... - volviendo a tocar -, ¡¿ Hola, hay alguien ahí ?!... ¡¡ MAMÁ, PAPÁ !!... - tocando aún más fuerte -, ¡¡ Maaamaaa !!... ¡¡ Paaa... !!... ¿ Hu... ?...

Al ver la puerta abrirse, Lambo tubo que callarse de repente.
Ya que por ella salió un adormilado y muy... Pero muy despeinado Len, quien vestía sólo sus pantalones.

LEN: ya, ya, ya... - revolviendo perezosamente su cabello, mientras trataba de contener un bostezo -, ¿ Por que tanto ruido ?, ¿ Sabes que hora es, Lambo ?.

LAMBO: sip, Giotto dijo que era la hora de dar un paseo por Italia... - alzándose de puntillas para intentar ver el inferior de la habitación -, y es mejor que se apuren, a Giotto no le gusta que lo hagan esperar.

LEN: ok, ok... - cerrando la puerta un poco más -, diles que ya bajamos.

LAMBO: - suspirando con decepción al no poder ver nada -, bien. Les diré que tengan un analgésico preparado.

LEN: ¿ Analgésico ?... - confundido -, ¿ Para que ?.

LAMBO: para mamá... ¿ Para quien más ?... - mirándolo como si estuviese loco -.

Tras un último intento de mirar el interior de la habitación por parte de Lambo, el nombrado se alejó de Len dando saltitos por todo el pasillo.

Len por su parte, tras suspirar para si mismo, volvió al interior de la habitación y se dirigió hacia la gran cama de esta.
Donde yacía un Shun dormido a pierna suelta.

LEN: - suspirando -, no sabes como quisiera que terminaras tu sueño en paz amor mio, pero los niños nos llaman... - sentándose a lado de Shun -, solo espero que no me mates... O de perdís me disloques un brazo... Y no los dos...

A continuación, y con el temor de ser golpeado hasta morir Len se paro de la cama, se dirigió hacia el reproductor Mp3 que ahí había... Y lo prendió, metiéndole un disco de Rock, subiéndole todo el volumen.

En seguida, el tema; “ Hasta Aue El Cuerpo Aguante ”.
De; “ El Mago De Oz ”.
Se oyó retumbar por toda la habitación.

Puedes arrancarme el corazón del pecho
y convertir en murmullo
tenue mi voz
reducir toda una vida solo
a un renglón.

Mientras que los vidrios de la habitación vibraban.
Shun se empezaba a remover un poco en su lugar.

Puede sobre mi dar una
opinión sesgada
criticar mi oficio que no es porvenir
que alimento la hoguera
de la imaginación.

A la vez que Shun se daba la vuelta y se tapaba de pies a cabeza con las sabanas, Len se iba acercando poco a poco a Shun.

Puede que la lluvia caiga sobre el cielo,
que el mar, confundido, vaya a un río a morir,
que en la noche cante el gallo a la mañana,
que con ánimas se fue a divertir.

Una vez a lado de Shun, Len se sentó en la cama con cuidado.

Vivo con la pasión a flor de
piel,
entre estrofas encontrarás mi hogar,
ella espera a que regrese
y mientras yo guardo sus
besos y su voz...

Y una vez estando en posición Len...

LEN: ¡¡ En mi corazón !!.

Canto sobre el oído de Shun.
Causando que este se despertará de golpe.

                            Continuará...