La cola para la tienda era el doble de lo esperado, tan larga que le hubiera tomado todo el día estar parado ahí esperando a que los niños delante suyo eligieran entre chocolate o vainilla para su helado. No se precipitaba, pero le estresaba estar formando columnas delante de mocosos que solo le desperdiciaban el tiempo.

-No creo que el importe tomar agua del caño, igual, sigue siendo agua –se dijo, sacando una botella vacía que tenía en su morral.

Los baños estaban junto a la tienda y vacíos para su fortuna. Era toda una asaña para el no verle el lado negativo a las cosas, si tomábamos en cuenta que por más que se esforzara en convivir como un japonés, sus rasgos rusos afloraban continuamente.

Entró al primer lavamanos que encontró y se fijó que estuviera solo para rellenar la botella. El gran espejo del centro tapaba la pared y mostraba el reflejo de los cúbicos, que se encontraban vacíos de igual manera. Cuando se llenó por completo la botella, cerró los caños y se dispuso a salir en búsqueda del azabache mareado. Fue una sorpresa encontrarlo a entrada del baño, buscándolo.

-Hasta que te encuentro dobe –suspiró Sasuke apoyándose en una pared-, pensé que seguías en la tienda.

-Después de comprar me dieron ganas de ir al baño –mintió, sacando la botella de agua-. Toma, solo para ti.

-¿Agua Voss? ¿Venden este tipo de botella en un parque de diversiones?

-De seguro quieren innovar.

Tomó varios tragos antes de devolverle la botella por la mitad, elevando la vista para que los mareos no lo atacaran nuevamente. No lo entendía, la sensación era la misma a lo que tuvo cuando se subía a la moto con el rubio, pero su estómago no parecía hacer la comparación y solo mezclaba sus intentos por seguir cuerdo.

Cuando salieron, fueron directo al Insasphere para volver a unirse al grupo ya que estos debían de haber bajado del juego, pero el parque se había llenado en los pocos minutos que estuvieron encerrados en el baño y se les era imposible avanzar rápido.

-¿Por dónde estamos? –preguntó después de pasar por el túnel negro que debería encontrarse en los juegos acuáticos.

-Nos movimos al norte, ellos están en el suroeste.

-¿Acaso no sabes leer mapas Usuratonkachi?

-Cállate teme, si no fuera porque te mareas rápido no nos hubiéramos separado –se quejó mientras daban lentos pasos. Los chicos que debían ser del paseo estudiantil empezaban a separarse por todos lados, no había momento en que los pasos estuvieran libres para desplazarse, y casi se separaban entre ellos cuando uno fila de jóvenes se interpuso entre ambos por petición de sus profesores.

-¿Entonces qué hacemos, los esperamos aquí o les decimos que nos juntamos en otro punto? –indagó después de rendirse a salir del noreste.

Chasqueó la lengua antes de sacar su celular para escribirle a Kurama e informarle que debían encontrarse en la fuente central. Les sería más simple para todos encontrarse en una distancia pareja. El sol estaba en su punto medio, se sentía las suaves brisas del aire calentar el ambiente con sus abrazadores rayos.

Entonces, volvió a sentir aquellos ojos en su espalda, apuntándolo como si se encontrara solo él en todo el local.

-Dos veces son mucha coincidencia –estipuló casi en un susurro-, demasiada coincidencia.

-¿Dices algo?

-Cállate.

Miró a los jóvenes que seguían en la tienda y los puestos de juegos que se rellenaban de personas, personas que podían ser asesinos expertos esperando el momento para atacarlos y matarlos. Sus mejillas le picaban, sus marcas parecían reaccionar al hecho de que posiblemente entraría en una pelea aquel día. El Uchiha se percató, y bajó su mano para poder sentir el frío del metal rozar con sus dedos.

-Juntémonos con los civiles, no atacarán si es que hay muchas víctimas.

No esperó a que se lo repitieran dos veces, inmediatamente avanzó hasta la fila de niños y se quedó a una distancia prudencial de ellos. Naruto se le apegó, lo sujetó del antebrazo, y se acercó a su persona como si fueran una pareja que iban juntos a divertirse.

-¿Qué haces?

-Si es que tú eres su víctima, le impido que tengan un buen perfil de disparo. Y si soy yo la víctima, no creo que quieran correr el riesgo de matarte en el proceso –murmuró todo en un silencioso comentario, restregando su cara como si estuviera feliz de estar en esa posición-. Solo sigue así hasta llegar con el resto, después improvisa.

Elevó la cabeza para ver a través del túmulo de estudiantes. No sabía que buscar, todos parecían tan comunes que podía sospechar hasta de su propia sombra. Ni siquiera estaba seguro que aquel hombre de chamarra negra podía o no buscar su muerte, o que aquel rubio de alta coleta que volvía a aparecer cerca de ellos para subirse a la montaña rusa esperaba el momento de atacarlos.

-¿Qué tan lejos seguimos de la fuente central?

-Si es que el grupo no se mueve rápido, estaremos por aquí más de diez minutos.

El corazón le palpitaba muy fuerte, culpaba a la sensación de desconocimiento que le rondaba. Intentaba mirar al rubio que seguía apegado a su pecho como un pequeño niño; no es que se percatara mucho, pero a pesar de la corta diferencia de edad, le sacaba una cabeza y un poco más. Era como si Naruto hubiera nacido pequeño especialmente para que al abrazarse, no le interpusiera mirar a sus espaldas.

-Se siente muy cerca, no intentes buscarlo –criticó, apretando más su brazo-, lo alertarás.

-¿Pero qué quieres que haga?

-Finge que te encuentras pensando en otra cosa. No sé, ¿Miss universo? No tienen que darse cuenta que sabemos de ellos.

Era más fácil decirlo que hacerlo, pero lo intentó. Su mano recorría los pliegues del tintineante filo de la cuchilla como una alerta, mientras que la otra intentaba abrazar al rubio para evitar que notaba su temor. Desde la lejanía, podían ser una pareja feliz que iba caminando por ahí demostrando su amor a base de caricias y mimos, aunque la realidad era mucho más oscura.

Se tensó después de salir del norte, y podía asegurar que con cada paso, un pequeño puntillo rojo lo señalizaba solo a él.

-Paranoias del trabajo, malditos gajes de oficio -repetía mentalmente cuando su corazón volvía a él.

Fueron los chicos quienes terminaron encontrándolos a ellos dos en viceversa. Kurama quería ir antes que el resto por cuestiones de aburrimiento, y caminando un poco adelantado, se topó con el abrazo afectuoso que ambos jóvenes se daban.

-No lo toques –gritó, jalando a Naruto para él-. Eres muy Uchiha para contaminarlo con su mezquindad.

Frunció el ceño y se enfocó en el rubio que le había sido arranchado, seguía igual que con él, aunque un poco más tranquilo de estar con personas que también podían defenderse por su cuenta. Le picó un poco la rabia de que lo considerara más una molestia que apoyo, por lo que no dijo nada mientras pasaba por el lado del pelinaranja.

-¿Celosillo por su princesa rubia? –bromeó, girando los ojos cuando sus codos se rozaron.

-Ya quisieras Uchiha, mi Naruto es mucho para Uchi-conda y todos sus derivados.

No era la primera vez que Kurama reaccionaba mal al verlos juntos, tampoco esperaba que sea la última, pero había algo ahí, una pequeña sensación que le repetía cada rato "¿Acaso esto no es normal? ¿Querer abrazar... a un asesino?"

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Y volví, como siempre ¬-¬

Chicos, tengo una pequeña preguntita para ustedes, una simple preguntita que me ha estado recorriendo la mente últimamente.

¿Alguna vez le han deseado la muerte -hoguera y derivados- a un escritor?

Yo varias veces cuando este se demoraba en escribir, hasta que me percaté... ¡Qué yo también me demoraba :o!

Y no solo eso, que también había dejado muchas historias en hiatus sin aviso, lo cual me dio directo en el riñón y pulmón derecho. No saben la cachetada que el café me dio por la deshonra, casi me quitaba mi herencia. Fue muy explícito lo que sentí, casi intentaba llorar por lo cruel que había sido, así que me propuse tener un mayor control de mis trabajos.

Y aquí es donde entran ustedes ¿Hay alguna obra mía en particular -de las que ya están estrenadas y no aquellas que inician en el 2017-, que quisieran que siguiera?

Hay que ser sincera, tengo usualmente problemas de atención, por lo que -aunque no parezca- cada obra ya tiene un fin, solo que se encuentra como cortos fragmentos y no texto. Si me enfoco en solo uno, puedo escribirlo, pero hay tantos que no sé con cual iniciar.

¿Podrían decirme cuál les llamó más la atención para ir directa a esa?

Lo siguiente en mi lista de avisos... ¿Voy muy lento con el trama? Suelo colocar muchas descripciones, por lo que nunca me doy cuenta de la rapidez hasta el final. A partir del capítulo 100, estos serán más largos para ocupar mayor espacio, por lo que el trama irá más rápido -ya que cada capítulo tendrá más palabras-, pero me hubiera gustado que me avisaran antes. Quién sabía, podía haber acelerado la cantidad de palabras hace mucho y ahora nos encontraríamos en otra parte del trama.

Y por último...

MENSAJE IMPORTANTE - OBLIGADO LEER

Levanten las manos hermanos y hermanas e invoquemos al fandom yaoi de Naruto. Estamos aquí para informarles del gran acontecimiento que va a suceder. ¡Un concurso de Fanfics Yaoi (por ahora) De Naruto! Si están interesados pasense por aquí: 》 http://my.w.tt/UiNb/3IWM6FZlrv 《 e infórmate de todo lo que necesitas saber para el concurso.

★♡No te olvides de llamar a más gente♡★

Eso sería todos mis comentarios y dudas por ahora, sean buenos, domen a la perra del café -esa perra debe conocer su lugar- y dejen comendrogis para que se reproduzcan. Ellos son el motor de todo escritor.