-Yo no he dicho eso –negó furioso-. Te dije que somos desconocidos en la escuela, para qué diablos haría algo que me delatara –Sasuke frunció el ceño más, pero Naruto siguió-. Además, contigo, iagh... me da asco pensarlo.

-¿Entonces por qué diablos han venido tus amiguitas a preguntarme por qué lo hice contigo? –esputó, con rabia.

-Yo que sabré, pregúntales a ellas.

Ambos poco a poco elevaban la voz, inclusive llegaron al punto que ni siquiera importaba que fueras sordo para que pudieras escuchar que era lo que sucedía. No se habían atacado, Sasuke sabía que si llegaba a los golpes sería él quien perdería, pero el solo gritarse no calmaba lo suficiente su rabia.

-¡Eres un teme orgulloso! –gritó el rubio, haciendo puños sus manos.

-¡Y tú un maldito ruso gay! –respondió Sasuke con la misma tonada.

Naruto realmente estaba sorprendido que un simple civil le alzara la voz a él, el capitán de un equipo triple S que había cometido asesinatos como la obra de cada día. Sasuke realmente no sabía con quien se metía, o las enormes ganas que tenía que aguantarse para no atacarlo. Al diablo con los demás, jamás le había importado el pensamiento ajeno si es que no sabían todo lo que tuvo que hacer para que sus vidas fueran lo mismo de siempre. Si él se hubiera atrevido a fallar en alguna, de seguro Japón no sería como hoy se conoce, pero este azabache parecía no tomarlo en cuenta.

Tenía ganas de volver a golpear la pared, pero tenía que conservar su apariencia de chico bueno.

-Ya me hartaste –le gritó al final el rubio-. Me importa un comino lo que los demás piensen sobre esto, es también su culpa por ser unos tipos con las hormonas al máximo.

Iba a entrar al aula fastidiado, pero Sasuke se lo impidió sosteniéndolo de la mano. Fue una acción innata, pero para Naruto aquello era una gran provocación.

-Suelta mi mano –susurró con aquel tono mordaz real, su verdadera voz.

-No hasta que le digas a todos que lo que dijiste fueron cosas salidas de tu mente –especificó Sasuke.

-Teme, no estoy de humor. Suelta. Mi. Mano.

Una guerra de miradas empezó entre ambos, los ojos azules se alargaban cada vez más contra los negros que parecían indomables.

Sasuke miró fiero a Naruto, lo miró con aquella expresión que le aseguraba la victoria aunque no lo pareciera. Los ojos de Naruto eran raros, demasiado raros. Tal vez el chico no lo supiera, pero aquel tono azul solía convertirse en un naranja infernal, como el fuego de satanás imposible de apagar. Sus pupilas parecían rasgadas, y las marcas de expresión se profundizaban más. Ahora tenía mayor curiosidad que antes ¿Por qué tenía aquellas marcas en las mejillas? Era algo fuera de lo normal, jamás las había visto en ningún otro lugar.

Entonces en un parpadeo aquel color cambiaba, y los ojos naranja pasaban a ser un amarillo verdoso. Esta vez parecía que tuviera pintado con un delineador naranja los parpados y su pupila se estirara como la de un sapo. Sasuke volvió a parpadear, topándose con aquel azul nuevamente.

-Sé que tenemos un trato –gruñó, pero lo decía en forma de susurro para que solo él pudiera escucharlo-, sin más, si sigues entrometiéndote conmigo, juro que te haré la vida imposible.

Sasuke tragó saliva, pero aun así no se intimidó.

-Lo mismo te recalco dobe. Puede que haya jurado intentar ser bueno contigo, pero si pones en peligro mi popularidad con tus conceptos de "Gay ruso" –dijo entre comillas, a lo que Naruto rodó los ojos- haré lo que sea para que la gente descubra el mafioso que eres.

Los alumnos del aula de historia universal empezaron a salir de poco a poco, rodeando a los dos jóvenes que aún seguían teniendo las manos agarradas. Ni a Naruto ni a Sasuke les interesó esto, la pelea era entre ambos y lo resolverían de la misma manera. Gaara salió al final del resto e intentó volver a entrar, pero esta barrera parecía más fuerte que la anterior.

De adentro solo se podían escuchar los murmullos de ambos, y los alumnos a pesar de ser muy curiosos e intentar saber más, mantenían un margen de acercamiento por seguridad ya que si alguno se alteraba sería el fin del mundo.

-Estás haciendo esto un show, teme.

-No me afecta en nada usuratonkachi, no soy yo quien tiene que mantener una apariencia estúpida.

¡Estúpida! ¿Acababa de llamar a algo que tanto Iruka como Kakashi se habían esforzado en crear estúpida? Puede que él lo diga de esa forma, pero es porque es su hijo, no él. Sasuke no sabía a qué fiera estaba despertando.

Mátalo, susurró su conciencia, mátalo para que aprenda su lección.

-¿Matarlo? –balbuceó él. Sasuke a pesar de todo pudo escucharlo claramente.

Mátalo para mantener tu secreto, haz que desaparezca.

-Asesinarlo –clamó esta vez-, debo asesinarlo.

Haz que todos sepan que asesino a sangre fría eres, extermínalo.

-Exterminarlo.

Sasuke, al igual que el resto de ellos, empezaron a mirar a Naruto mientras este balbuceaba cosas, pero realmente era él el único quien podía oírlas claramente. Él sabía que el rubio era peligroso, y aún más con el aura que empezaba a aflorar de su ser. Inmediatamente le soltó la mano, pero Naruto aprovechó aquello para agarrarlo con fuerza de la muñeca. Sasuke soltó una mueca de dolor por la fuerza que estaba empleando, sus uñas parecían que rasgaban su piel como las de un felino hambriento, e intentó con la misma mano soltarse, pero parecía imposible.

Su orgullo también estaba en juego, pero a comparación del peligrar de su vida, aquello no tenía tanto valor momentáneamente.

Naruto empezó a dar pequeños hipeos, que con el silencio que se desarrollaba alrededor de ellos parecía más una pequeña risa maniática. Empleaba poca fuerza en la muñeca ajena, no quería ver que su presa muriera rápido por un simple desangramiento. Esto sería un escarmiento de los cuales estaba acostumbrado. Sangre y tripas colgadas en las paredes, como la decoración de un cumpleaños.

Rompe sus huesos...

-Y destruirlo por completo –rió agudamente esta vez.

Mata a Sasuke Uchiha.

Sus ojos que estaban enfocados en un punto muerto de la pared se posaron en él rápidamente, sonriendo maquiavélicamente. Sentía ganas de cometer un asesinato en ese momento, su cuerpo le pedía la sangre del Uchiha.

-¿Estás asustado, gatito? –dijo gélidamente en su oído, y luego retrocedió. La distancia entre ambos era casi nula, y Sasuke podía sentir en la cara como de los poros de Naruto despendía excitación de sangre.

El profesor Asuma salió en ese momento del aula apurado para ver qué era lo que se había llevado a todos los alumnos del aula. No solo eran ellos, también estaban los chicos de los otros salones que al escuchar que había una pelea entre Sasuke y el nuevo no dudaron en dejar su comida.

-¡Qué es lo que sucede aquí! –gritó alto, empujando a los alumnos para pasar.

Ambos no supieron que fue lo que pasó en ese momento ya que Asuma intentaba con fuerza llegar al centro. Uno de los chicos que se encontraba detrás de Sasuke como espectador fue empujado para delante sin poder evitarlo, moviendo al Uchiha para adelante logrando que avanzara. Naruto seguía mirándolo cuando ocurrió, y tanto el profesor como Sasuke quedaron sorprendidos. El de ambos, tanto del rubio como azabache, ambos labios se habían juntado.

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Quiero hacer un especial por los 3K votos que hay en toda la historia, y es por eso que necesito que me respondan algo rápido, antes de acabar el siguiente capítulo. 

¿Quieren un Pov Sasuke o un Pov Naruto? Enserio, necesito que me respondan rápido para escribirlo, de lo contrario yo elijo de cual hacer. Asdfghjkl, sé que el beso no me quedó genial, pero debía meterle al menos uno, por los 3K.

El SasuNaru va a demorar, pero ya ven que poco a poco hay al menos cosas que lo incitan.

Bueno, por favor, díganme rápido el Pov de quien quieren y en la noche estaré publicando.

Recuerden que si quieren que les dedique el cap, escribanlo en los comentarios 😉 

¡Voten y comenten!