Jungkook, no pudo evitar sonreír cuando despertó y la imagen de un Taehyung totalmente agotado se coló en sus ojos. Realmente no quería despertarlo pero estaba seguro de que Jimin llegaría pronto con Min para llevárselo. Su jefe no estaría feliz sabiendo que en lugar de cuidar a V se dedico a caer ante cada una de sus peticiones entre susurros y encantos.

Ese amargo sentimiento se poso otra vez en su pecho. Demasiadas preguntas se arremolinaban en su cabeza y todas estaban asociadas al muchacho que posaba la frente sobre su hombro sumido en el sueño.

-Taehyung-este cerro los ojos con fuerza y giro escondiendo la cara en la curva del cuello de Kook- Ei. Tienes que despertarte.

-Mmm

Esa fue la única respuesta que el chico le dio. Un murmuro cargado de cansancio.

Jungkook podía notar el profundo dolor que sus extremidades debían sentir pues no fueron pocas las veces que sollozo al moverse de forma demasiado brusca mientras dormía. De alguna manera se sentía culpable por llevarlo de tantas formas al limite con el sexo. Sabia que Taehyung estaba herido pero eso solo le importo cuando tras estirarse sobre la cama los gemidos de placer dejaron paso a los de pura agonía.

Jungkook se levanto sonriendo al escuchar la protesta del escorpión. Busco una toalla limpia en el baño, tras mojarla en agua caliente la exprimió hasta dejarla tan solo húmeda y camino de nuevo hacia el dormitorio.

Taehyung, mantenía la cara enterrada en la almohada. Eso le facilito las cosas cuando comenzó a limpiar con mimo las heridas de su espalda. Noto como en un primer momento los músculos del chico se tensaban para poco después relajarse.

-Tu espalda está destrozada - Kook hablaba prácticamente para el mismo pero Taehyung lo escuchaba con claridad.

-Supongo que se debe a que no le llego a muchas zonas, no logro hacerme bien las curas. Las heridas tardan más en cicatrizar en esa zona precisamente por eso -V escondió aun más la cara en la almohada al sentir la suave caricia de Jungkook en las cicatrices más antiguas.

-Es casi como si tu hubieran quitado las alas- Kook sonrió mientras hablaba - Tus cicatrices se parecen a las que usarían para un ángel caído en las películas de fantasía.

-Bueno eso suena mejor que el verdadero motivo.-Taehyung se mantuvo totalmente quieto.

Le gustaba sentir como el lobo masajeaba algunas zonas de su espalda mientras limpiaba la sangre seca con la toalla húmeda.

Jungkook tardo en reaccionar. Se preguntaba mentalmente si era el momento adecuado para saber un poco más del chico de mirada felina. No quería asustarlo o cohibirlo con un interrogatorio precipitado.

-Qué te sucedió? - finalmente hablo.
Sus manos temblaban con cada suspiro salido de la boca de Taehyung a la vez que sus dedos dibujaban círculos en las zonas de su espalda libres de moratones o heridas.

-A mis compañeros de clase les pareció divertido clavarme hierros para colgarme de la cancha de baloncesto cuando tenía diez años. Cortaron la piel pero no llegaron al hueso así que no lograron su objetivo. La profesora llego antes de que siguieran insistiendo en ello y realmente no sé como hubiese acabado sin su ayuda. Recuerdo que me llevo al hospital inmediatamente y hablo conmigo todo el tiempo hasta que me dejaron irme.

No había nada que Kook pudiera decir. Simplemente no era capaz de imaginarse la imagen del débil Taehyung siendo acorralado y lastimado por sus compañeros de clase a la edad de tan sólo diez años. ¿En que clase de sitio había vivido el chico? ¿Niños de diez años intentando agujerearle la espalda con hierros?

-Los niños pueden llegar a ser realmente crueles- opto por la opción más sencilla. No quería implicarse ni conocer detalles que lo enfadaran.

-Los niños son crueles. Hacen lo que sienten. Una vez escuche que la manera adecuada de saber tu aspecto sin que te mientan se basa en pedirle a un niño que te retrate. - Un pequeño gemido de dolor se escapo de la boca de V cuando Jungkook rozo un fragmento de piel amoratada y este se apresuro a disculparse. Taehyung tan solo le sonrió en respuesta - Aunque supongo que no puedo globalizar. Mis hermanos nunca le han hecho daño a nadie, me aseguro de que sean buenas personas.

Jungkook seguía masajeando la piel del muchacho, enamorado de la forma en la que este respondía. Suaves suspiros de gusto abandonaban los labios de V cada vez que las fuertes manos de Kook lo acariciaban. Estaba entrando en un estado de relajación poco común en él. Al mismo tiempo ese sentimiento lo comenzaba a embriagar demasiado rápido.

-¿Como son ellos?- hablo el lobo.

-¿Mis hermanos? - Jungkook asintió cuando Taehyung giro su cabeza para mirarlo -Supongo que no puedo ser objetivo. Son toda mi vida, sin ellos hace mucho tiempo que me habría rendido.-Kook dejo la toalla a un lado y se estiró a la derecha de V , mirándolo mientras hablaba - Son dos mellizos de siete años, da igual donde vivamos o las pocas cosas que consigo para ellos. Nunca protestan y agradecen tener cada día un plato de comida sobre la mesa. De cierta forma Min me ha ayudado mucho, cuando mi hermana mayor se fue del país recurrí a él. A diferencia de Shark no quiso cobrar el dinero que en cierto momento le pedí.

En la cabeza de Jungkook se recreaba la imagen de Taehyung pidiendo limosna a su jefe para lograr que sus hermanos tuviesen comida que llevarse a la boca. Supo en ese instante , como lo había sabido la noche anterior , que durante su primer encuentro con el muchacho lo juzgo mal.

Quiso seguir preguntándole sobre inmensidad de temas pero el timbre sonó logrando que un escalofrío le recorriera la espina dorsal.

- Espera aquí bebe - agradeció una vez más la obediencia ciega de V. El apodo cariñoso se escapó sólo de su boca, sin darle tiempo a pensar en sí era adecuado o no. Cuando se trataba de Taehyung sentía que necesitaba darle todo el cariño posible. Incluso si eso no borraba el difícil pasado del escorpión.

Diviso su pistola en el suelo de la habitación, en una zona cercana a la mesilla y recordó el momento en que V lo provoco jugando con la boquilla de esta sobre su torso.

Probablemente tiró el arma cuando el chico empezó a tomarse en serio el asunto. Aun se le ponía la piel de gallina al pensar en la forma tan sensual con la que el escorpión lo miraba mientras chupaba y lamia su polla.

Recogió la pistola y asegurándose de estar del todo vestido camino hacia la entrada del húmedo apartamento.
Reconoció a su jefe acompañado de Min en el instante en que miro por una de las pequeñas ventanas y rápidamente abrió la puerta.

Apunto a Min con precaución con la pistola mientras buscaba la aprobación en el rostro de Jimin. Solo cuando este asintió bajo el arma.

Observó como su amigo colocaba una mano en la espalda de Yoongi animándolo a entrar , casi de forma protectora y él ni siquiera protestaba. Una vez más le pareció ver a un escorpión obediente, incluso feliz si cabe ante el echo de seguir cada uno de los mandamientos de Park.

-¿Dónde esta Taehyung? - la voz de Min sonaba nerviosa. Eso logro que Jungkook se preguntara si algo había salido mal con Shark. Jimin empujo un poco más la espalda del hombre haciéndolo entrar por completo en el apartamento.

-Está dormido - contesto sin entender su propia mentira - ¿Os habéis asegurado de que Shark no pueda acercársele?

Jimin miro a Yoongi y este le sonrió de manera cómplice. Jungkook empezaba a perderse ante tal situación. ¿Por qué su jefe y el de V parecían ocultar cosas? De forma repentina simulaban tener algo en común que la noche anterior era inexistente .

-No está muerto si es la respuesta que quieres pero no se atreverá a entrar en nuestros territorios de nuevo mientras sus pulmones necesiten aire. Mis hombres se han encargado de asustarlo. -Min hizo una mueca. Aún desconfiaba de muchas personas y eso no cambiaría fácilmente- Han amenazado a su mujer. Tendrán que marcharse de Daegu. Tampoco podrá pisar Busan. Ahora dime donde esta V, necesito asegurarme de su bienestar. Quiero llevarlo a casa.

Una pizca de celos se instalo en el pecho de Jungkook, ¿Taehyung y Min eran algo más que jefe y empleado? El chico de ojos felinos había mencionado que Yoongi nunca cobro los prestamos que le cedió. Eso era sospechoso. Tal vez Yoongi estuviera interesado en V de una forma lejana a la de la amistad , quizás intentaba comprar los favores del cachorro con regalos y dinero. La sola idea hizo hervir la sangre de Kook.

-¿Por qué tanto interés en Taehyung ahora? -Jungkook se acerco a Yoongi con una mirada amenazante y la mano rozando la pistola en su cintura. Jimin reacciono rápidamente impidiéndole a su amigo avanzar más.

-Kook trae a V de una maldita vez. Min ha dicho que quiere verlo. Tu trabajo ya ha finalizado. - pero Jungkook no se movió - Jeon no juegues con mi paciencia. La palabra de Min es igual de valiosa que la mía en este instante. Si él te da una orden puedes consultarla conmigo pero en ningún momento permitiré que lo amenaces.

-Déjalo -cuando Min hablo Park le presto total atención-Si lo que te interesa es comprobar que va a estar bien puedo jurarte que nunca le haré daño. Llevo toda mi vida cuidándolo. Es la única familia que me queda.

Jungkook miro a Jimin alarmado y su jefe solo asintió. Se imagino que probablemente Min se lo había contado tras pedirles que cuidaran a Taehyung mientras se ocupaba de Shark.

-Soy su hermanastro -los tres se asustaron momentáneamente cuando V apareció cojeando. Jungkook se movió al instante para ayudarlo a avanzar hasta el salón -No sabía que lo...

-Yo... tampoco sabía que tu lo sabias. Mi padre me lo confeso poco antes de morir. Desde ese momento intente ayudarte pero nunca aceptabas nada de lo que te ofrecía. -Yoongi estaba tremendamente tenso. Su cuerpo desprendía nerviosismo.

Jimin se acerco un poco más a él instantáneamente, lo instó a sentarse en el sofá y poso su mano sobre la pierna de este.

Recordó su herida y se pregunto si después de la cantidad de antibióticos que Namjoon le ofreció aun le dolía. Cojeo durante todo el camino. Estaba seguro de que incluso pudo observar muecas de dolor en la cara de Min mientras caminaban por la calles de Busan, sin embargo, cada vez que preguntaba él afirmaba estar bien.

"Los escorpiones son expertos en soportar dolor" -se recordó asimismo- "Por eso quiere a alguien en la intimidad. Necesita ser débil de vez en cuando. Quiere a alguien a su lado y por alguna razón me ha elegido a mi”

Park tardo en volver a poner atención a la charla que estaba teniendo lugar en el salón del apartamento.

-No quiero volver a Daegu- Taehyung hablo con la voz cansada - pero tengo que hacerlo. No puedo abandonar a mis hermanos.

-¿Por qué no quieres volver? -era Yoongi el que hablaba ahora.

Tanto Jungkook como Jimin se mostraban tranquilos y atentos a cada palabra aunque en el interior se preguntaban como era posible que los escorpiones mostrasen tal tranquilidad justo después de que se confesasen mutuamente sus lazos familiares.

-No hay nada en Daegu que me haga querer estar allí. Para ti lo es todo -Taehyung posaba los codos sobre las rodillas mientras miraba hacia abajo y se llevaba las manos a la cara, sentado en el sofá. Jungkook le acariciaba el cuello tranquilizándolo y de vez en cuando introducía los dedos en el cabello del chico.

Jimin los observo curioso con una sonrisa dibujada en la cara al imaginarse el porque del estado sobreprotector en su amigo. Taehyung tenía el aspecto de alguien que necesita ayuda y la naturaleza de Kook siempre tendía a hacer lo correcto. Era tremendamente probable que su compañero estuviera pensando en cómo hacerse cargo de V. No le extrañaría que empezase a ayudar a ese chico tembloroso y golpeado.

-Di el nombre del sitio en el que quieres vivir, te pagaré un buen apartamento para ti y tus hermanos. O una casa. Solo dime que es lo que necesitáis. - Yoongi prácticamente suplicaba la atención de su hermano y eso provocó que una oleada de ternura recorriera el estómago de Jimin.

Le apetecía besarlo. Solo lo conocía desde ayer pero necesitaba experimentar lo ocurrido hace unas horas de nuevo. El sentir que Min lo necesitaba. El saber que lo deseaba y obedecería cada una de sus peticiones para después volverse fuerte e implacable cuando había más gente cerca. Mierda. El echo de comprender que Yoongi sólo se mostraría obediente y pasivo ante él lo estaba volviendo realmente loco. Tenía el poder sobre ese hombre repleto de fortaleza. Algo que ninguno de sus hombres podía decir sin importar lo muy musculosos o valientes que fueran.

- No puedo aceptarlo - la voz de Taehyung temblaba al igual que las manos de Yoongi.

Jimin y Jungkook se centraban en tranquilizarlos sin saber realmente el porque de sus acciones precipitadas con personas del bando contrario que conocían hace tan solo dos o tres días.

-Acéptalo - Jungkook susurraba en el oído de V mientras seguía acariciando su nuca y cabello - Has pasado por mucho. Hazlo por tus hermanos. ¿ No crees que les gustaría tener una buena casa?

Taehyung clavo sus ojos en el chico que acariciaba su cuello. La mirada dolorosa y acristalada por las crecientes lágrimas golpeo a Kook de lleno.

-¿Y si quiero quedarme en Busan?-V habló. Yoongi levanto la mirada para fijarla en su hermanastro. Al fin aceptaba uno de sus regalos. Eso lo llenaba de calidez.

-Entonces quédate en Busan. Hay muchos sitios que vale la pena ver aquí. A tus hermanos les gustará el mar. - el dolor se esparcía por la garganta de Jungkook. La ansiedad avanzaba por sus venas esperando una respuesta-No seas idiota y acepta lo que te están ofreciendo.

Yoongi intento levantarse pero el dolor en la pierna hizo que tuviese que volver a sentarse.

Jimin lo miro con notoria preocupación. Namjoon especifico que necesitaba reposar al menos unos días y había echo de todo menos reposar. Lo instó a sentarse y se levantó en la búsqueda de algún antibiótico. Juraría que tenían un botiquín en alguna zona del piso.

-Te conseguiré el mejor sitio que pueda permitirme. Mi padre no se hizo cargo de ti pero yo necesito mantenerte a mi lado. Eres la única familia que me queda Tae. - Jimin llegó cuando Min estaba terminando la frase . Este protestó cuando le cedió el vaso de agua con la pastilla rosada pero la simple mirada reprobatoria de Park lo hizo callarse y obedecer.

-¿Volverás a Daegu después de que mis hermanos y yo nos instalemos en Busan?-la pregunta de Taehyung sorprendió a los tres chicos.

Yoongi tardo en contestar. Por un lado la respuesta en su corazón era clara pero por el otro su sentido común le gritaba que mantuviera su culo pegado a Daegu.

Jimin bajo la mirada. ¿Por qué no le gustaba la idea de dejar solo a Yoongi con hombres de defectuosa fidelidad? Le preocupaba que no regresará. O que regresará herido y destrozado por confiar en las personas equivocadas. El lo había visto de verdad. Había observado al Yoongi cansado, triste, débil y necesitado de amor. Un Min desesperado por hallar una persona dispuesta a tratarlo como un igual y no como un líder. Un Yoongi al que le gustaba que lo protegieran incluso cuando podía hacerlo por si mismo. Una protección totalmente diferente a la que un guardaespaldas de los suyos le ofrecería.

-Lo haré -dijo finalmente Yoongi. - Necesito ver el mar cada cierto tiempo... y aquí hay algunas personas con las que me gustaría volver a coincidir- Min aumento el contacto de su mano sobre la pierna de Park. Ahora acariciaba su muslo sin preocupación - Por favor cuida de Tae mientras no estoy aquí . Te pagaré la cantidad que elijas. Solo quiero que se mantenga a salvo. Confío en ti. Es extraño pero que me salvases la vida ha influido en todo lo que está pasando entre nosotros.

Jungkook y Taehyung observaban la escena confusos.

-Algo me dice que Jungkook tomará ese trabajo sin problema o pago. Pero me encargaré de que Taehyung reciba los mejores tratos que estén en mi mano. Comida. Alojamiento. Estudios. Lo que pida - Jimin hablo. Sus ojos buscando los de Min , anhelando aprobación y recordando la promesa de volver a encontrarse con él cada vez que este volviese a Busan.

No podía negar el cosquilleo que le recorría el cuerpo al pensar en volver a besarlo, tocarlo, marcarlo   consolarlo... Decir una sola palabra y que este lo complaciera con gusto sin importarle cuán descabellada era la idea de que dos líderes de bandas contrarias mantuvieran relaciones.

Empezaba a sentirse atraído hacia la idea de conservar a una persona con la que pudiese ser el mismo antes que el líder de los lobos de Busan.

-Lo cuidaré - Jungkook hablo rápidamente-No me apartaré de él ni de sus hermanos hasta que se desempeñen bien solos. Prometo que estará bien conmigo a su lado.

Yoongi asintió.

-Es un trato. Traeré a tus hermanos y os conseguiré una casa. -Yoongi suspiro-Mantente en contacto conmigo, es posible que tenga que depositar toda mi confianza en una banda contraria así que si no te encuentras a gusto puedes llamarme. Confío en Jimin y él confía en Jungkook pero la pregunta importante es ; ¿tu lo haces? ¿confías en este chico?

Jungkook miro expectante a V y algo en su interior revoloteo cuando lo vio asentir rápidamente.

-Creo que debería irme. Tengo muchas cosas que preparar antes de volver a Daegu. Encontraré un buen lugar Tae.

Taehyung hizo el esfuerzo de ponerse en pie recibiendo sólo unos segundos después la ayuda de Jungkook.Definitivamente necesitaba unas muletas.

Se acerco a su hermanastro sin saber bien qué hacer. Por suerte Yoongi reaccionó antes de que todo se volviera demasiado incómodo rodeándolo en un abrazo. Intento no chocar con ninguna herida sin embargo la misión fue imposible.

-Lo siento – susurro Min – no solo por esto. Siento no haber insistido antes en ayudarte. Creí que si permanecías en los escorpiones podría cuidar bien de ti..

Taehyung le dedicó una cálida sonrisa. Jungkook al igual que Jimin observaba la escena preguntándose una vez más como era posible que dos personas tan diferentes compartieran realmente lazos sanguíneos.

-Bueno… supongo que es hora de que salga de aquí – Jimin se puso de pie. Estaba justo a la derecha de Yoongi una vez más modificando su posición cuando él lo hacía. Como luna y tierra. O quizás como dos chicos que necesitaban volver a sentirse queridos.

(Play a la música de multimedia. En cado de que el reproductor de problemas es Frenship - capside)

-Deja que te acompañe a la salida – Yoongi asintió con una sonrisa y tras darle una mirada a Jungkook comenzó a caminar con la mano de Jimin de nuevo posada en su espalda.

En el instante en que atravesaron la puerta el aire entre ellos se extinguió.

Los fuertes brazos de Yoongi jalaban la cintura de Park mientras este lo acorralaba contra la pared y besaba sus labios con vehemencia.

Las manos de ambos volaban por el cuerpo del otro, maldiciendo la aparatosa ropa de invierno. Se apartaron un segundo. Jimin posaba la frente sobre la de Yoongi al igual que en la primera noche que se encontraron en los muelles de Busan,  sólo que ahora en lugar de enfrentarse por una pelea de bandas lo hacían por el deseo que quemaba sus cuerpos.

Sentimientos muy similares pasaban por sus cabezas. Detestaban la idea de tener que separarse justo ahora que se habían descubierto el uno al otro.

-¿Sería descabellado pedirte que me folles justo aquí? – las palabras de Yoongi fueron claras. En su voz se hallaba una suplica que Jimin supo descifrar.

Con las manos en la cintura de Yoongi giro su cuerpo colocándolo sin cuidado contra la pared. Era consciente de que cualquier vecino podría verlos , incluso Taehyung y Jungkook lograrían escucharlos sin problemas. Eso le gustaba. La idea de arriesgarse a ser descubierto era algo nuevo. Le encantaba sentir a Min tembloroso por la anticipación.

-No es descabellado si voy a tardar en volver a verte. Haré que me eches de menos con esta despedida. Vas a rogar por mi número de teléfono. – Yoongi sintió un escalofrío recorrer su nuca cuando Jimin le bajó los pantalones y boxers de un tirón comenzando a mover sus dedos por la raja de su trasero. – Chupa.

Min abrió la boca obediente recibiendo los dedos de Park. Lamió hasta que esté lo creyó suficiente y entonces suspiro al saber que el chico estaba a punto de darle justo lo que necesitaba. Una despedida que le proporcionará imágenes interesantes en sus noches solitarias y frías en Daegu.

El suspiro pronto se convirtió en un gemido. Jimin mordía sin exagerada fuerza el lóbulo de su oreja mientras introducía uno de sus dedos en el año de Yoongi intentando dilatarlo.

-No voy a necesitar mucho tiempo para poder follarte. Después de lo de esta tarde tu culo ya está preparado.

Yoongi se atraganto con el aire fascinado por el rápido cambio de papeles. Jimin lograba ser dulce y sucio sin complicación alguna.

-Hazlo ya – Jimin sonrió con descaro al escuchar las palabras de Yoongi y accedió a su petición terminando de dilatarlo para poder entrar en él sin hacerle daño.

El frío ahora era inexistente para ellos. El vapor que salía de sus bocas se debía más a la excitación que a la propia temperatura.

El lobo sintió su miembro palpitar mientras rápidamente se deshacía de sus vaqueros y ropa interior. Con la mano temblorosa se colocó en el punto exacto para lograr penetrar a Min de una sola estocada, este gimió con fuerza pegándose lo máximo posible a Jimin. Su estómago subía y bajaba con fuerza debido a la excitación del momento a la vez que su respiración era pesada, casi como si hubiese estado corriendo durante varios minutos.

Dejo caer su cabeza sobre uno de los hombros de Park maravillado por el suave aroma a menta que este siempre desprendia, aún cuando su cuerpo seguía aprisionado contra la pared acomodo su espalda en el pecho del chico. Jimin aprovechó ese movimiento para lamer el cuello de Yoongi riendo sobre la piel de su mandíbula sólo un segundo después.

Estaban totalmente pegados el uno al otro, la ropa era un obstáculo para ambos y las manos de Park necesitaban sentir el cuerpo del chico que se deshacía en gemidos , cada vez que lo penetraba con ansia, apoyado en su cuerpo.

Sus manos se introdujeron en la camiseta del escorpión y casi abrazándolo lo penetró con más rapidez mientras acariciaba su torso.

-Márcame Jiminie – Yoongi hablaba en un estado de sumisión absoluto – Deja tus marcas en mi cuello, me hará sentir que de alguna forma me quieres a tu lado.

Jimin se estremeció. No solo por las palabras de Yoongi si no porque de nuevo estaba experimentando el intercambio de papeles. Volvía a tener cerca a ese chico desesperado por amor que lo había vuelto completamente adicto.

Antes de pensarlo agarró con fuerza las manos de Min obligándole a colocarlas en la pared y posando las suyas sobre las de este movió sus caderas con fuerza contra su trasero. Llevo los labios al cuello de su chico sin dudarlo ni un instante besando la blanca piel que aún no había sido cubierta por tatuajes.

Yoongi se arqueaba sintiendo quemar sus partes bajas por el placer y moviéndose al mismo ritmo que Jimin para lograr una mayor fricción.

Los gemidos de ambos habían subido de volumen casi en exceso. Ya ni siquiera les importaba el estar en un edificio lleno de pisos habitados. Lo único que veían , sentían y escuchaban se basaba en ellos dos.

La pierna de Yoongi dolió unos segundos pero incluso antes de que pudiera decir una palabra Jimin lo aparto un poco de la pared para sostenerlo entre sus brazos de nuevo con fuerza , sintiendo la espalda del escorpión chocar en su pecho con cada fuerte estocada. Volvió a besar su cuello entreteniéndose después con su mandíbula marcada y su oreja derecha , consciente de que Min amaba esos pequeños detalles.

-Córrete dentro de mi – la respiración de Jimin tembló con las palabras de Yoongi y tras apretar con fuerza sus brazos alrededor de él sintió sus piernas comenzar a temblar.

El clímax lo invadió y silenciosamente cumplió la petición de Min mientras giraba su cabeza para besarlo. Lamió sus labios hasta enrojecerlos. Acarició sus pezones bajo la camiseta y unió sus lenguas en un juego erótico.

-Jimin – el susurro de Yoongi fue lo único que logró sacarlo de su ensoñación. Su chico aún no había llegado al clímax.

Con una cálida sonrisa lo giro y se puso de rodillas ante el. Yoongi tembló en el instante en que anticipo lo que haría.

Los gruesos labios de Jimin envolvieron su extensión mientras fijaba sus ojos en los de Yoongi. Este apretaba ya con intensidad las manos sujetando el cabello del precioso chico que deseaba , marcando el ritmo de cada movimiento.

Quiso apartarse cuando sintió la intensidad de la calor recorrer su cuerpo pero Jimin lo impidió. Aun de rodillas trago con adoración cada rastro del semen de Yoongi que se esparcía por su boca.Pasando con lentitud la lengua por lugares tan sucios que sería un pecado mencionarlos en voz alta.

-No tenías porque hacerlo – se subió los pantalones a la vez que los boxers y le cedió la mano a Jimin para levantarlo. Este beso sus labios con mimo en cuanto estuvo de pie.

No era un beso pasional pero contenía infinidad de sentimientos confusos desperdigados. Así como delicadeza y cariño.

-¿Te he lastimado? – Jimin escondió su frente en el cuello de Yoongi aún excitado por las recientes acciones.Le preocupaba no haber puesto suficiente atención a los deseos de Min.

-No. Mi pierna se resintió durante un momento pero lograste colocarme de forma correcta para que el dolor no continuará antes de que me diese tiempo a avisarte . -Jimin beso la mejilla de Min preguntándose si no estaría siendo demasiado exagerado con el asunto de los besos. Le gustaba hacerlo pero quizás a él no le agradase. – Por cierto… mencionaste algo acerca de tu número de teléfono.

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Heeeeiiiia!!
Okay sé que mis lemon son un asco pero aka una hace lo que puede 😖

Espero que os haya gustado baes.

Besos , Mel xoxo