Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

:D

Petición de: @myachan1

Espero que les guste ^_^

P-D: No se me ocurrió otro titulo XD

Había sido un accidente la primera vez.

Chester había estado leyendo tranquilamente, sentado en el sillón y moviendo ligeramente la cola, sin prestar real atención a su alrededor...hasta que sintió un toca en su hombro izquierdo. Se había volteado solo por instinto, su pelaje erizándose al instante del puro miedo al encontrarse con el cuerpo del conejo-vampiro sin cabeza y con una gran boca con colmillos abriéndose en su panza. Su libro salió volando de sus manos, su cuerpo tropezando para retroceder en su lugar. Se había girado dispuesto a escapar despavorido, quedando tieso y con los ojos bien abiertos al sentir un hocico contra el suyo. Parpadeo un par de veces, sin poder creer que la cabeza de Bunnicula volaba con sus orejas convertidas en alas frente a él.

-Hola~- rio, besando rápidamente la nariz del gato. Chester no tardo mucho en fruncir el ceño pero agradeciendo mentalmente el tener pelaje, podía sentir en esos momentos sus mejillas arder. Agarro la cabeza del conejo, lanzándola como si nada por sobre su hombro. -Wiiiii-

-Tonto...- murmuro, suspirando mientras agarraba su libro abandonado y empezando a caminar.

Y así empezó.

Cada vez que se descuidaba, Bunnicula se le acercaba sigilosamente y le daba un "beso esquimal" sorpresa o le robaba un beso rápido, alejándose entre risas.

... ... ... ...

-Y se acabo la paz...- murmuro el gato siamés una vez que noto que era de noche, bajando las orejas al empezar a escuchar risitas muy conocidas acercarse.

-¡Bun!- Harold sonrío enormemente al ver al conejo volar hacia él. Bunnicula sonrío, chillando lo que parecía ser un saludo y volviendo sus orejas a la normalidad, cayendo de pie. Chester suspiro, escuchando como el perro hablaba con emoción y el conejo le respondía con emoción. Comió algo de lo que había en su plato, masticando con expresión tranquilidad y tragando, limpiándose la boca con el dorso de la pata. Se rasco la nuca, para después pararse sobre sus cuatro patas y cuando estaba por empezar a caminar, sintió unas pequeñas pero fuertes manos agarrar su rostro.

-¿Eh?- sus ojos se abrieron como platos, sus mejillas empezando a arder bajo su pelaje al sentir una boca ajena sobre la suya, dándole un firme beso. Retrocedió todo lo que pudo una vez que lo soltaron, el conejo volando con sus orejas transformadas en alas riéndose a carcajadas. Chester movió su cola con nerviosismo, intentando calmar su frenético corazón.-¡Bunnicula!- gruño, agradeciendo que su voz no salió temblorosa. -¡Deja de hacer eso!- camino hacia la puerta, ignorando los chillidos y risitas del conejo.

-¡Oh mis amigos!- el gato jadeo, un brazo marrón saliendo de la nada y rodeando su cuerpo, atrayéndolo hacia uno mucho más grande. Se quejo cuando Harold apretó el agarre, dándole un gran abrazo de oso. -¡Sabía que algún día se llevarían bien! ¡Lo sabía por completo!- apretó una vez más al felino, dejándolo caer sin aliento. -¡Tenemos que celebrarlo!- rio.

-Cielos...- Chester tosió, levantándose y mirando como el perro hablaba de algo con gran emoción. Miro de reojo a su lado, viendo que Bunnicula volaba a su lado con una gran sonrisa y ojos alegres. Rodó los ojos, sin moverse en cuanto sintió la pequeña mano acariciarle la cabeza.

... ... ... ...

Había aprendido una cosa con el tiempo, Bunnicula hacia lo que quería y a la hora que quería, sin importar lo que le dijeran. Así que, Chester termino resignándose: sin molestarse cuando el conejo apoyaba su hocico contra el suyo, sin quejarse en cuanto besaba la punta de su nariz o le acariciaba la cabeza.

Suspiro, relajándose en el sillón y cerrando los ojos, disfrutando de la tranquilidad que pocas veces tenia.

-¡Oye!- abrió ligeramente los ojos, encontrándose con un alegre conejo parado frente a él. -¡Beso~! ¡Beso~!- frunció los labios, para después darle una gran sonrisa.

-¿No tienes otra cosa que hacer?- murmuro.

-Nop- negó rápidamente. -¡Beso~! ¡Beso~!-

-Bien- rodó los ojos pero no pudo evita sonreír ligeramente. Cerro los ojos y levanto la cabeza, sintiendo casi en seguida el hocico ajeno contra el suyo. Se quedo ahí unos segundos, separándose de golpe al escuchar un chillido. Abrió los ojos con pánico, encontrándose con Mina que los miraba con ojos brillantes y una gran sonrisa.

-¡Son tan tiernos~!- rio, saltando de emoción. -¡Buscare mi cámara!- salió corriendo hacía su habitación, su sonrisa prácticamente partiendo su rostro.

-Agh...- el gato hizo una mueca. Miro de reojo a su lado al escuchar una risita, entrecerrando los ojos hacia Bunnicula. -...sabías que ella vendría, ¿no?-

-Sip- asintió. El siamés suspiro, moviendo ligeramente las orejas.

-...te odio- murmuro.

-¡Yo también te amo~!- rio, sabiendo que el otro no lo entendía pero sin importarle. Le gustaba ver lo avergonzado que se veía su felino amigo por sus acciones.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro