PM DE
Advertencias: Uso de mi propia oc (tenía esto en mi papelera, lo leí de nuevo y dije: Messi). Mención al uso de drogas.
Era extraño el olor de la mafia en las mañanas, te dejaba un sentimiento de vacío pues las actividades nocturnas se quedaban impregnadas en las paredes como recordatorio permanente de su naturaleza violeta.
Algunas personas aún transitaban los pasillos tambaleantes, ya sea por el cansancio, o por fechorías cometidas dentro de las instalaciones. No era raro ver a desafortunados arrastrarse buscando la salvación que jamás llegaba. La mujer de nombre extranjero aguantaba la respiración hasta llegar a su puesto pues a veces era insoportable pero su sonrisa confundía al resto de la organización.
—Que bueno que llegas, necesito ayuda con algo —la voz de un joven la hizo sentir hormigueo en la columna vertebral, volteó encontrando al ejecutivo más joven en un estado deplorable—. Quiero que me cubras en la reunión con los contrabandistas, usé mucho fentanilo para morir, pero cierta babosa me hizo vomitar y la deseada muerte se escapó entre mis dedos. ¿Aún sigues aquí después de mi orden?
La de ojos verdes asintió en silencio por la incomodidad que le causaba, incluso ella le tenía miedo al demonio prodigio. Sin decir más dió la vuelta y trató de seguir su camino pero se vió bloqueada por los brazos del hombre vendado y como se enrollaban en sus hombros.
Se acercó a su oreja para susurrar algo ahí—. Por cierto, ten cuidado, es temporada de brujas.
—¿Brujas? —preguntó confundida al mismo tiempo que se soltaba de su agarre.
El de ojos avellana le regaló una sonrisa a medias—. Así es, te van a devorar si no tienes cuidado, me gustaría verlo pero me tomaré el día libre.
"Brujas" pensó mientras se alejaba del ejecutivo más raro de todos. Ahora con su nueva tarea no tenía tiempo que perder divagando en sus códigos extraños. Cuando llegó la hora de su reunión pensó que dejarlo a su suerte no sería mala idea, pero como siempre terminó haciendo lo que Dazai quería.
La sala aún estaba vacía, por lo que repaso su programa para no tener errores. El sonido de la puerta siendo golpeada la obligó a ponerse recta nuevamente, por la entrada se veían a dos hombres pasar orgullosamente. Al verla el más alto arqueó la ceja curioso—. ¿Una zorra antes de la reunión? Que gesto tan amable.
La mafiosa entrecerró los ojos y formó una sonrisa ladina—. Lo siento, no brindo esa clase de atenciones. Yo platicaré con ustedes sobre nuestro arreglo y las armas que retienen.
Ambos tomaron asiento frente a ella, pero realmente no le prestaron atención. Uno de ellos jugaba con los dulces del centro y el otro revisaba su celular. Ya estaba planeando su siguiente movimiento cuando recordó la frase de su antiguo acompañante, "temporada de brujas" y la analogía de ella misma siendo devorada por los sujetos.
—Bueno, fue suficiente charla de cosas aburridas, me gustaría conocer mejor a las personas que nos proveen de armas —al instante ambos la miraron divertidos—. ¿Están casados?.
El de aspecto juvenil arrojó su envoltura a la cabeza de su compañero—. Él lo está, pero no a tiempo completo.
El otro sonrió por su atrevimiento—. Bueno, él es terrible en la cama según me dijeron todas sus conquistas.
Asqueada por su presencia cruzó los brazos—. Bueno, yo también estoy soltera. Es bueno saber que tenemos algo en común.
—Tendremos más en común si nos conocemos a fondo —el más alto apretó los labios evitando que una risita escapará, pero fué inútil.
—¿Les gusta su trabajo? —preguntó la adolescente.
El hombre casado le dió espacio a su compañero para contestar por ambos—. Claro, si no fuera así te meteríamos una bala en esa bonita cara. Sería tan tedioso.
La de traje negro asintió notando que el aire cambiaba, se esforzó mucho por descubrir que se había impregnado de pólvora—. A mí no me gusta mi trabajo, no porque sea aburrido, nunca me aburriré de las personas que conozco, pero es horrible despertar cada mañana y caminar directo a la muerte de la que intentó escapar —pudo ver cierta incomodidad en sus invitados y decidió cambiar la plática—. Es extraño, pero creo que ya sé porque retienen las armas. Tienen un trato con la policía para que nos reunamos con ustedes y puedan crear una emboscada a campo abierto donde las autoridades tienen la ventaja. Por eso tú no dejas de grabar la conversación con tu teléfono.
El castaño abrió las puertas y detrás de él pasaron sus subordinados cargando toda clase de armas apuntandole a los contrabandistas—. Te lo dije, era temporada de brujas, hay que quemarlas —esas palabras fueron suficientes para que el fuego cayera directamente sobre los hombres y en cuestión de segundos no fueran más que una masa sangrante. Dazai caminó directo a Jane para revisar que no estuviera herida—. Debes dejar el asco por la mafia, de lo contrario no serás capaz de identificar su verdadera esencia.
La azabache le dió la razón. Se quedaron callados mientras los hombres sacaban los cuerpos en bolsas para dejarlos frente al edificio de gobierno como recordatorio de qué la Port Mafia era de naturaleza violenta.
El de vendas dió un golpecito en su hombro para que su atención se centrará en él—. Eso estuvo bien, ahora necesito que le digas a Mori-san que estuve todo el tiempo contigo, creerá que conspiro en su contra si se entera de mi ausencia.
—¿Y no lo haces? —cuestionó la más baja.
—Oh no, jamás estaría interesado en dirigir esta organización —alzó los hombros—. Aunque también me regañará si se entera que dormí casi todo el día en mi oficina.
Jane descifró algo que era casi obvio para el jefe—. La Port Mafia huele mal por tí, no solo es la sangre, algo de pudre desde dentro.
Los colmillos del suicida se asomaron mientras reía eufóricamente—. ¿De verdad? Yo podría apostar que es por tu hipocresía, Jane —logró articular después de recomponerse—. Tú eres la bruja aquí, en algún momento que no seas útil arderás junto a la mafia por mi propia mano.
La de ojos verdes no pudo retener la risa por su chiste -que era más una amenaza-. —¿Leíste alguna novela, o algo así?.
El castaño asintió dándole la mano, pues sabía que Jane fingía no saber sus verdaderas intenciones sobre la mafia y prefería reír nerviosamente antes que delatarlo.
Jane salió tambaleante de la sala por el miedo a ser alcanzada por la oscuridad del demonio prodigio. Pero así se daba cuenta que ya era de día.
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Bono:
Chuuya y Dazai terminaron su misión exitosamente. Ya que el menor no sabía manejar le dejó esa tarea a su compañero ejecutivo, mientras que él pasaba al asiento trasero para buscar una jeringa, eso se ganó la mirada de asco por parte de Nakahara.
—No hagas esa mierda cerca de mí —gruñó apretando el volante.
—Verás mi horrible babosa, ya me inyecte y poco, quizá deba aumentar la dosis para que sea efectivo —buscó su vena lo mejor que podía por los movimientos del auto y cuando lo consiguió se pinchó—. Listo, estoy mejor ahora, pero por si acaso tomaré el resto.
Nakahara lo miro por el retrovisor y negó moviendo la cabeza—. Eres horrible, vete a morir a otro lado.
—Y tú eres un alucín pero yo no lo menciono constantemente —cuando se sintió cerca de la liberación balbuceó algo para molestarlo—. ¿Mi muerte la pondrá triste? ¿La mafia se quemará con todos ustedes?.
Eso bastó para que su compañero frenará y bajara del auto, pese a estar en medio de la nada. Caminó a la puerta trasera y sacó a Dazai arrastras para subir a su pecho y meter sus dedos en la boca del suicida, claro que fue casi imposible porque el menor se negaba a cooperar, incluso mordió al manipulador de la gravedad, hasta que Chuuya lo golpeó en la nariz y se quedó quieto repitiendo lo mucho que lo odiaba.
Vomitó la mayoría de su ingesta ahí mismo, eso lo puso de mal humor y ya planeaba cómo fastidiar al mafioso de baja estatura. Haría que Jane sufriera un poco.
Notas de la autora:
La verdad Chuuya y Dazai de adolescentes eran bien alucines y seguro cogían drogados después de sus misiones.
Recuerdo que este OS lo escribí escuchando "season of the witch" interpretada por la mujer más hermosa del mundo, Lana del Rey. De ahí que tuviera muchas insinuaciones a la rolita.
En fin, la neta denme ideas para escenarios y/o one shots para ver cuál adapto y redacto, es que debo tener algunos escritos antes de octubre porque quiero participar en "Dazai Bottom Week" con escritos bien marranos que hasta chillen.
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