Aún no podía creer lo que había pasado, a pesar de que nosotros comíamos tranquilamente, yo aun me sentía tensa.

-En serio, no sé como Jimin aún no hace nada- Hoseok miró a sus amigos.

-Hobi, no puedes esperar que Jimin todo lo arregle con violencia - Jin le contesto tranquilo pero sonriendo.

-Antes lo hacía- Tae apoyó a su novio.

-Sí, muy bien lo que dijiste, eso fue antes- le contesto Namjoon, quien después me miró. - Eso cambio gracias a Dani, es mejor que Jimin se quede tal cual es ahora-

-En realidad yo prefiero a este Jimin, no quiero que vuelva a ser ese chico frívolo, sin sentimientos y que no confía en nadie, quiero que vuelva a ser ese niño que sonreía y amaba a todos-

Todos quedamos callados con las palabras de Seokjin, yo también pensaba lo mismo. Prefería a este Jimin, lo prefería así. Pero amaba ambos lados de él, pues él no tenia la culpa de nada.

Cuando terminamos de almorzar, solo nos quedamos sentados en la mesa, platicando de la fiesta que ya se aproximaba.

-¿Vas a ir?- me miró Jungkook.

-Claro, ya le había dicho a Jimin que si-

-Nos juntaremos en casa de Namjoon y de ahí nos iremos- hablo Hoseok.

-Ya hablé con mi amigo, irá el DJ. Que tanto te gusta Kook-

Este último nombrado sonrió radiante, feliz por esa noticia.

-Éata fiesta promete, escuché que irá también un tatuador- sonrió Tae mirando a su novio.

-Oh no, ni pienses que me dejaré ponerme algo en mi piel- hablo asustado Hoseok.

-Será algo chiquito, solo nuestras iniciales-

-No, ni loco-

-Por favor -

Taehyung miro con ojos de cachorro a Hoseok, quien hacia una mueca de horror ante el hecho de pensar siquiera en esa aguja perforando su piel para marcarlo.

-No pueden tatuarse aún, Tae, aun eres menor, olvídate de eso - Seokjin lo reprendió.

-Pronto seré mayor, así que...-

-Así que cuando cumplas la mayoría podrás hacer lo que quieras, así que aún no -

-Tacaño- se enfurruño en su lugar, abrazándose a sí mismo.

Era divertido verlo asi, era como ver a un niño en el cuerpo de un adolescente.

El timbre sonó haciendo que todos nos levantaramos de nuestros asientos, caminando hacia nuestros salones. Solo Tae caminaba a mi lado, pues los demás estaban en grados más avanzados.

Pasó su brazo por mi cuello.

-Entonces, ¿como te va con Jimin?-

Lo miré sin entender bien a lo que se refería.

-Bien, supongo, ¿que pasa?- sonreí.

-¿Acaso es extraño que pregunté por ustedes?- alzó una ceja.

-Sí, un poco, además de algo incómodo, ¿pasó algo? Tal vez me quieras pedir dinero, déjame decirte que soy pobre-

Soltó una carcajada y después negó soltandome.

-No, nada de eso, verás, solo quería pedirte algo.- su rostro se puso más sereno después de reír como loco.- Pronto cumpliré un mes con Hobi, quería regalarle algo, se que tú y él son buenos amigos, así que, pensé que podías saber que le gustaba-

Parecía nervioso, su gesto hacia Hobi lo hacía verse tierno. La manera en que esos dos llevaban su relación, parecía más bien dos niños enamorados, ese tipo de amor inocente.

-Bueno, no se mucho, pero creo que cualquier cosa está bien-

-Eso no me ayuda mucho ¿sabes?- me miró entre cerrando los ojos.

-Lo siento, pero en verdad cualquier cosa está bien, mientras venga de ti, Hoseok ama lo sencillo, y si tú eres la persona que le da ese regalo, estoy segura que lo amará -

Asintió algo pensativo, miro hacia el frente.

-Gracias, creo saber que comprar, aquí te dejo- miré la puerta de mi salón.

¿En que momento habíamos llegado?

Se despidió con su mano y sonriendo con esa sonrisa cuadrada que tenia, lo vi perderse.

Entré al salón, dándome cuenta que Baek estaba sentado en su mesa de trabajo, me encaminé lo más rápido que puede sin prestarle atención alguna. No pensaba hablar con él, no desde lo que paso hace un rato en la cafetería.

Jimin entró al poco tiempo. Su rostro estaba mostrando puro fastidio. Sonreí de lado, cuando se sentó acaricié su mano con mis dedos.

-¿Todo bien?- negó.

Dejó caer su cabeza en la madera de la mesa, bufo.

-Explicarles es mas difícil de lo que pense, no entienden a la primera los problemas, se supone que los que están ahí son unos ratones de laboratorio-

Se quejó, sonreí tratando de comprenderlo. Obviamente no me gustaba que hablara así de las personas pero, no se le puede pedir que cambie eso de la noche a la mañana.

-¿Que tipo de problemas les estas explicando?- pregunté interesada.

Sin levantar su cabeza, sacó un par de hojas de su bolsillo, las cuales estaban algo arrugadas y dobladas.

Mire las hojas con detenimiento, y a medida que avanzaba me quedaba boquiabierta. ¿Esto era lo que les estaba mostrando? Mire las hojas y después a él.

-¿Esto es lo que les estas enseñando?- señale con mi dedo las hojas.

-Sí, ¿verdad que son unos tontos al no entender ésto? -

Sólo pude mirarlo, estaba totalmente perpleja.

-Jimin, creo que estas exagerando un poco, la verdad es que ni yo entiendo esto... -

-¿Que dices? Pero son algunos problemas fáciles -

Negué mirándolo aún sorprendida.

-Estos problemas son de universidad avanzada-

-Más bien vienen de Harvard, le hable a un amigo de mi madre para que me ayudara un poco hace un rato, me los explicó por mensaje y yo los entendí de inmediato, no entiendo como esos cabeza hueca no pueden- frunció su ceño y miró hacia el frente molesto.

-Jimin, cariño, no todos tenemos tu inteligencia. Y déjame decirte que yo me incluyo en esos cabeza hueca, no entiendo nada de esto -

Hice una mueca ante esas palabras, él estaba por decir algo pero el profesor entró exigiendo nuestra atención. Empezó la clase, la cual ambos tuvimos que poner atención, podía sentir como Jimin, a pesar de estar molesto y fastidiado, se sentía culpable ante las palabras dichas hace un momento.

Mientras escribía lo que el profesor ponía en el pizarrón. De reojo vi como Jimin sacaba su teléfono, le había llegado un mensaje.

Su rostro fue cambiando considerablemente, de sorprendido a furioso. Levantó su rostro y miró hacia donde estaba sentado Baek. No me hizo falta mirar en la pantalla de su teléfono, para saber que alguno de los chicos ya le había contado lo que había pasado. Suspire, en serio que este día sería largo.

🐼🐼🐼🐼🐼

Pov. Jimin.

-¿No vendrás a casa hoy?- la voz de Dani me sacó de mis pensamientos.

-Puedes adelantarte, yo tengo que hacer algo aún -

-Oh ya veo, tienes que reunirte con el director ¿cierto? Bueno, nos vemos en un rato -

Ella se despidió de mi dándome un beso en la mejilla, vi como se perdía entre la muchedumbre.

No quería mentirle, no a ella, pero si le decía mis verdaderas intenciones estaba seguro que ella protestaria y me convenceria de no hacer nada. Pero no podía dejar pasar esto más.

Los chicos me lo habían dicho, Hobi me mando un mensaje diciéndome sobre lo que había pasado en el almuerzo. Si no fuera por ellos... negué meneando mi cabeza.

Y como por arte de magia, él apareció, salía del edificio sujetando su mochila en el hombro. Camine en su encuentro, al verme acercándome a él, sonrió.

-No me digas, ya te contaron tus amiguitos, son unos chismosos-

No dije nada, solo lo miré. Sí, él era mucho más alto que yo, pero no por eso me acobardaria.

-Quiero que te alejes de Daniela- fui directo al grano.

-¿Y si no quiero?-