— No tienes por qué seguir llamándome. — dijo la jovencita, aún cubriendo su rostro con una mascarilla y lentes oscuros, a pesar de encontrarse dentro de un hospital.

Hoseok miró a su hermana y su sonrisa se extendió, agradeciendo que al menos ella sí haya acudido a su llamado, a pesar de que sus llamadas telefónicas no entraban y parecía que los mensajes tampoco los leía, aunque ahí estaba, así que probablemente estuvo pendiente de él y sus llamados en todo momento.

— JiWoo, gracias a Dios, llegaste. — dijo más que alegre el alfa, acercándose a su hermana para darle un abrazo, uno que realmente necesitaba en ese momento. Sin embargo la mujer se alejó, evitando a toda costa tener algún tipo de contacto cercano con su hermano menor.

— Solo vine porque nuestro padre así me lo pidió. — dijo la joven, alegrando aun más a Hoseok, pues al parecer su padre también estaba de su lado. — No te alegres tan rápido, Hoseok, nuestro padre quiere que solucione este asunto antes de que se haga más grande.

El alfa cambio rápidamente su expresión, sin entender muy bien a qué se refería.

— ¿Q-qué?

— Sí, Hoseok, papá no quiere saber nada de ti, ni de tu aventura, menos de aquella mujer o tu bastarda. — el hombre de inmediato se enojó, tratando de decir algo al respecto sobre el insulto hacia su segunda hija, pero JiWoo fue mucho más rápida. — No me mires de esa forma, todos sabemos que un hijo extramatrimonial es solo un error en nuestra sociedad, has traído a esa niña a un mundo en el cual solo recibirá rechazo en todos lados apenas lean su hoja de vida.

— ¡Es mi hija, JiWoo! — gritó el alfa, llamando la atención de algunas enfermeras que pasaban por ahí.

La chica siguió cubriendo su rostro con la mascarilla y los lentes, queriendo que se abriera la tierra y la tragase, pues lo que menos quería era ser pariente de un hombre infiel como Hoseok. A los infieles los condenaban de por vida, incluso a sus conocidos o familiares.

— Déjate de estupideces, Hoseok. — susurró la mujer. — y mejor dime para qué estoy aquí, no pienso conocer a esa niña y tampoco ser parte de la familia feliz que quieres formar a base de denuncias y dolor de un omega.

El hombre suspiró, sabiendo que no podría lidiar con JiWoo, ella era una mujer correcta, siempre lo había sido.

— Tengo una orden de alejamiento que procedió esta mañana, no puedo acercarme a Taehyung o a Hani hasta que visitemos a un juez. — La mujer seguía sin inmutarse, importándole muy poco todo lo que estaba pasando su hermano. — Solo quiero que hables con Taehyung para que pueda retirar la denuncia de Jennie y que así nuestra pequeña no pase por exámenes que podrían hacerle daño en su estado.

JiWoo casi se ríe delante de su hermano tan solo por decir algo tan bajo como aquello, a pesar de todo lo que estaba pasando, seguía protegiendo a su amante y aquello definitivamente era un pecado.

— ¿Enserio crees que sería capaz de hacer eso? — preguntó la mujer con clara molestia. — Le debo lealtad a mi cuñado, con el cual te casaste frente a un juez y delante de nuestros padres, no a una mujerzuela que creyó que podría jugar a la casita con un hombre casado.

— Por favor, JiWoo, ella no tiene la culpa de nada, yo solo-

— ¡Claro que la tiene! No seas idiota, Hoseok, tú tienes mucha más culpa que ella, pero eso no le quita la responsabilidad en este maldito juego del cual saliste perdiendo. Apoyaré a Taehyung hasta el final, porque es mi cuñado y la persona más afectada en esta tontería.

— Por favor, hermana, solo te pido eso y luego si deseas ya no hablaremos ni tampoco nos-

— Claro que no nos volveremos a ver. — aclaró la mujer. — Nuestra madre está en el hospital por tu culpa, ella recibió la carta y no pudo aguantar la sorpresa de saber que su hijo era un incompetente.

— ¿Qué? ¿Cómo que mamá está en el hospital? — Hoseok nuevamente trató de acercarse a JiWoo, pero esta se alejó, asintiendo con la cabeza.

— Mamá está en el hospital por tu culpa, así que te pido que nunca vuelvas a buscarnos, soluciona tus problemas tú solo y déjanos en paz.

Y sin esperar respuesta la mujer dio media vuelta, saliendo de aquel lugar, sin mirar atrás.

JiWoo era una mujer mayor, muy respetada en su campo y creía que su familia era una admiración, hasta que su hermano decidió cometer una atrocidad, sin embargo seguía siendo su hermano y la bebé seguía siendo una bebé, por lo que al subir a su auto trazó camino hacia la casa de Taehyung, sabía que no tenía ningún derecho de pedirle absolutamente ningún favor al omega, menos con la falta de respeto que había cometido toda su familia, pero creía firmemente que el pelicastaño todavía tenía un poco de corazón como para evitar que le hicieran daño a una recién nacida.

Al llegar a la casa se encontró con NamJoon, quien iba sacando algunas maletas y objetos que Taehyung le estaba indicando. Se sorprendió un poco, pero al reconocer que se trataba de las pertenencias de su hermano no dijo absolutamente nada.

— JiWoo. — susurró Taehyung al verla, mientras que la mujer también lo miraba, de pies a cabeza, notando claramente al embarazo del omega.

No podría ser cierto.

— ¿E-estás embarazado? — preguntó la mujer, esperando que todo esto sea una confusión, pues no podía creer que Hoseok no se haya percatado de eso o en todo caso, que no se los haya dicho antes.

El omega de inmediato se sintió un poco cohibido y se colocó rápidamente la polera que siempre solía utilizar, pero que en ese momento se quitó para sacar todas las cosas de su aún esposo.

— Hola JiWoo. — saludo NamJoon, mientras seguía sacando algunas maletas.

— ¿Qué haces aquí, Nam? — pregunto nuevamente la mujer.

— Estoy ayudando a mi cliente a proceder con el desalojo correspondiente de su esposo Jung Hoseok.

JiWoo entendió muy poco, en realidad no prestó atención por estar pendiente del cuerpo de su cuñado. Taehyung estaba embarazado, de eso no había duda.

— ¿Cómo es posible que estés embarazado y Hoseok no lo sepa?

— JiWoo, mi cliente no piensa revelar su embarazo hasta que este sea seguro, así lo ha decidido, así que por favor te pido que te mantengas al margen.

Taehyung se quedó callado en todo momento, quizás muy temeroso porque alguien de la familia de Hoseok descubriera que estaba en espera de nuevo.

— ¿Qué es lo que deseas, JiWoo? — se atrevió a hablar luego de unos minutos el omega, al ver que JiWoo parecía tener mayor interés en su vientre que en él mismo.

La mujer aún muy sorprendida levantó su mirada hacia el rostro del omega y tras un suspiro dijo algo que realmente Taehyung no se esperaba.

— Retira la denuncia en contra de la amante de Hoseok, por favor.

— ¿De qué rayos hablas? — se apresuró a decir el omega, extrañado con todo, incluso miró a NamJoon, esperando que este le dé una respuesta, pero no sabía nada de lo que hablaba la mujer.

— ¿A qué te refieres con la denuncia en contra de Jennie? — preguntó Nam, acercándose a la mujer.

JiWoo no quería decirlo, realmente no quería sacar cara por su hermano, ni siquiera quería estar ahí, sentía vergüenza de estar de pie frente a la casa y del omega que fue engañado por su propia sangre.

— Han denunciado a aquella mujer y piensan sacarle algunas pruebas a ella y a la bebé.

Taehyung abrió sus ojos en par y miró a NamJoon nuevamente, esperando una respuesta, pero él no la tenía.

— Yo no he hecho ninguna denuncia. — dijo por fin el omega. — Pero creo saber quién sí lo hizo.

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Tenía la idea de este capítulo, pero no sabía cómo escribirlo, hasta el día de hoy que recién pude hacerlo.

Nos vemos 🥺