➷ trigésimo séptimo capítulo
— ¿En qué momento permitiste que Hani lo supiera todo? — casi gritó su madre, casi, pues estaba murmurando algo alterada mientras sus hijos estaban en la sala de estar, viendo una película infantil antes de irse a dormir. — ¿Cómo pudiste, Taehyung? — seguía su madre. — ¡Ella apenas es una niña! — y esta vez sí levantó la voz, llamando la atención de los niños, quienes dejaron de ver la película para dirigir toda su atención en ellos, más Hani que Jungkook, pues este último era apenas un bebé que entendía muy poco.
Tanto Taehyung como su madre les sonrieron a los pequeños, logrando distraerlos de su pequeña discusión, y tras lograr su cometido finalmente decidieron encaminarse hacia el patio trasero de la casa, lo cual estaba lo más alejado de la sala de estar.
— ¡Qué rayos te sucede! — y ahí sí la señora Kim pudo gritar tanto como quiso.
— Baja la voz, mamá, Jungkook es muy sensible y puede que nos escuche. — le advirtió Taehyung, frunciendo su ceño de inmediato. No esperaba encontrarse con su madre tan alterada y menos que esta supiera que Hani estaba al tanto de su hermana menor.
— ¿Cómo quieres que baje la voz si lo primero que me pregunta Hani al llegar es cuándo verá a su hermanita JiYu? — la señora Kim estaba más que alterada, se veía que la sola mención del tema le ponía los pelos de punta y no era para menos, pues anteriormente habían luchado demasiado para que nada de eso se supiera o mejor dicho, para que los niños no se vieran involucrados en un tema tan complejo como la otra familia de Hoseok.
Taehyung suspiró, quedándose callado por un momento. No sabía cómo decirle a su madre que ya había hablado de este tema con su hija, mucho menos que ahora Hoseok estaba pidiendo días de visitas.
— ¡No te quedes callado, Taehyung! ¡explícame qué rayos está sucediendo aquí! — la señora Kim ya estaba más que enojada, quería saber qué rayos había pasado en su ausencia.
— Mamá, baja la voz por favor. — fue lo primero que dijo el omega, como si aquello pudiera tranquilizar a su madre.
— ¡Entonces explícame por qué mi nieta de cinco años me dice que tiene una hermana menor además de Jungkook! ¡No puedo creer que hayas sido tan débil como para dejar que ese desgraciado le haya metido ideas bobas a mi Hani! ¿En qué momento fue? ¡Dímelo!... ¡Claro, todo esto sucedió desde que regresó! ¡No entiendo por qué tenía que regresar, no tiene nada aquí, pero-
— ¡Mamá, ya cállate! — y aunque Taehyung no era de estallar, simplemente en ese momento lo hizo, pues su madre no dejaba de hablar y lo único que quería hacer era detenerla, lo cual logró, pues la señora Kim se mantuvo callada por un buen rato, esperando a que su hijo finalmente decidiera hablar. — Mamá, por favor, solo no hagas tantas preguntas, suficiente tengo con las dudas de Hani como para que ahora vengas tú y quieras saberlo todo.
La mujer soltó un suspiro y asintió, encaminándose hacia uno de los muebles rústicos que tenían en el jardín.
— Hijo, siempre te he apoyado. — dijo una vez sentada y un poco más tranquila. — Admiro la fuerza que sacaste para separarte de un desgraciado como Hoseok y sobre todo, la elegancia con la cual sobrellevaste todo el divorcio y el proceso, pero no estoy de acuerdo en esto. Mi nieta no tiene por qué saber sobre esa niña, menos tiene que estar metiéndole ideas a Jungkook.
Y solo en ese momento Taehyung se preocupó.
— ¿A qué te refieres? ¿Metiéndole ideas? — La señora Kim asintió. — ¿De qué estas hablando?
— No sé que rayos le habrá dicho el inútil de su padre a esa niña, pero Hani está diciéndole a Jungkook que pronto conocerán a su hermanita JiYu y sobre todo, que tienen la misma edad. El bebé no entiende del todo, pero quiere a Hani y se emociona al igual que ella.
Taehyung volvió a suspirar, cansado con la situación, realmente estaba muy cansado con todo lo que había sucedido en esos últimos meses, el regreso de Hoseok, sus terapias, las de su hija, la escuela, sus ganas de trabajar, etc., sentía que ya no podía más, ser un omega de treinta años y con dos niños pequeños le estaba pasando factura.
— Mamá, hablaré con Hani, ¿Esta bien? Pero quiero que esto solo quede entre nosotros. No deseo que papá o SeoJoon estén al tanto.
— ¿Pero de qué estas hablando? Tus hermanos y tu padre merecen saber lo que ese imbecil le está haciendo a nuestra Hani.
Y esa era la razón por la que Taehyung no quería que su familia se entere de todo el asunto que iba sobrellevando, todos se iban a preocupar, su madre iba a exagerar, posiblemente ocurriría algún otro juicio y terminaría todo mal, más para él que para Hoseok y su familia.
— Mamá, las cosas no son tan fáciles, en este momento estoy luchando por tratar de ser un buen padre para mis hijos y no perderme a mí en el proceso. En verdad es difícil, así que por favor trata de evitar hablar de esto con mi padre.
La señora Kim se colocó de pie, claramente con mucha molestia y asintió.
— Ser madre no es fácil, Taehyung, eso lo sabías tú cuando te embarazaste de Hani y eso te lo dije cuando llegaste con ese hombre a nuestra casa.
— Mamá, por favor, no empieces. — se quejó el omega, viendo por dónde iba la cosa. Su madre siempre le recordaba cuando aún era joven y salió embarazado de Hani, siempre que podía lo hacía, pues ellos nunca estuvieron de acuerdo con su relación con Hoseok y tampoco con su compromiso o incluso con su embarazo o así fue hasta que conocieron a la pequeña y se "enamoraron" de ella.
— No le diré nada a tu padre, Taehyung, pero te pido que soluciones este tema. No me interesa cómo, pero no quiero volver a escuchar a mi nieta hablando sobre esa marginada.
El menor rodó los ojos y tras despedirse en silencio de su madre, esta se fue, apenas vio como abrazó a sus hijos y les dio mucho besos, a diferencia de él, que solo le dedicó una dura mirada, la cual significaba que estaba en problemas y que tendría que solucionarlos de algún modo. Solo en esos momentos Taehyung odiaba mucho más de costumbre a Hoseok.
Esa noche acostó a sus pequeños aún con el pensamiento de qué es lo qué haría para solucionar el tema de Hani, su niña no era mala, al contrario, creía que esa era la razón por la cual la pequeña no hacía menos a JiYu, más al contrario la quería ver y conocerla. Sin embargo eso no incluía a Jungkook, quien apenas era un bebé que estaba a nada de cumplir dos años, lo cual incluso lo tenía ocupado con los preparativos.
— Mami... — susurró la pequeña, una vez en su cama, ya arropada y con unos ojitos somnolientos. Taehyung se detuvo en el marco de la puerta, con la mano encima del interruptor de luz. — ¿Podemos invitar a mi hermanita al cumpleaños de Jungkookie?
El omega se estremeció ante la sola pregunta y aunque no quería hacerlo, realmente no lo quería, terminó aceptando y sonriéndole a su pequeña, ocasionando que la niña sonriera por igual procediera a cerrar sus ojitos.
Al llegar a la habitación principal, la cual era suya, Taehyung se dejó caer en la cama, respirando hondo y soltando finalmente un suspiro, como si mediante ese acto pudiera quitarse un poco del peso que andaba cargando. El pelicastaño no sabía cómo manejar el tema de su hija y su media hermana, ni siquiera sabía qué es lo que había hablado exactamente Hoseok con la pequeña, pues hasta el momento cada vez que le preguntaba curiosamente sobre sus videollamadas, la pequeña solo reía y decía que sus conversaciones eran privadas, lo cual también le generaba muchas interrogantes, que al final no tenían respuesta, pues hasta el momento no había entablado conversación alguna con su ex esposo y creía que tampoco quería hacerlo, menos ahora. Tras pensarlo unos largos minutos finalmente el omega se rindió y sacó su billetera de su bolsillo izquierdo, abriéndolo un tanto dudoso y extrayendo la tarjeta de presentación de MinJae.
— No debería... — se dijo, mientras miraba la tarjeta y el número de teléfono del hombre que alguna vez se le declaró. — ¿O si? — siguió hablando consigo mismo, completamente nervioso y dudoso, pues había quedado en llamar a MinJae hace dos meses atrás y no lo hacía hasta ese preciso momento, en el cual necesitaba algo de él, lo que de por sí ya se veía mal.
Aunque no sabía por dónde empezar ni tampoco qué decir decidió tomar su teléfono y marcar el número de MinJae, apenas comenzó a timbrar la vergüenza le ganó y colgó, sabiendo de antemano que estaba exagerando, pues solo se trataba de una llamada relacionado a lo laboral y nada más que eso, pero siendo sincero consigo mismo, Taehyung sabía que posiblemente aquella llamada terminaría en una reunión y eso era lo que más temía, especialmente porque aunque quería negarlo, MinJae se había convertido en un alfa muy atractivo.
— ¡Agh, diablos! — trató de gritar, sí, trató, pues amortiguó el grito con una almohada que se colocó encima del rostro por unos segundos. Prácticamente se sentía como un adolescente. — Solo es una llamada, nada más que eso. — se dijo y armándose de valor nuevamente terminó mandando un mensaje, esperando que quizás MinJae no lo vea hasta el día siguiente, pero para su mala suerte el alfa le contestó al minuto y sin pensarlo le pidió verse al día siguiente, lo cual ocasionó que el omega se pusiera aun más ansioso de lo que ya estaba.
Vería a MinJae al día siguiente, lo vería después de dos meses transcurridos desde la última vez que le prometió llamarlo y aunque eso de por sí le causaba vergüenza, nada se comparaba a sus pensamientos, los cuales estaban en cómo se vestiría al día siguiente. Taehyung, sin darse cuenta, estaba comenzando a sentir nuevamente.
[➷]
Todo muy bonito, pero no creen que hay algo sospechoso por aquí en cuanto al trabajo de Taehyung?
Nos vemos ♡♡
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro