-Tengo que ser delgada, solo así seré hermosa.-Dije Viéndome al espejo estaba gorda.-¡Maldito cuerpo! ¡¡Te odio!!.-Grite, todos los días me odio frente al espejo fui a la cocina y saqué un plato de papas fritas que había comencé a comer sin control.

-Mirate nada mas comiendo como cerda con razón estas gorda.-Llego mi hermana mayor a molestarme.-Adiós cerdita te dejo comiendo tu porquería.-Se fue riendo no soporto que me trate así encima mi mamá, me reclama diciendo que tengo que ser como ella así de delgada me encantaría serlo Por que estoy gorda, ¿a quien le gustaría de novia una cerda? ¡A nadie! .

Estaba en el baño de la prepa mirando mi cara y brazos tenia mis brazos muy grandes gordos y soy muy cachetona, odio ser así.

-Miren la cerdita ya se esta viendo al espejo.

-De tanto verse se romperá.

-Largate nadie te quiere por "Gorda".-Como siempre las chicas populares de la preparatoria me molestan decidí irme para no soportar más esto.
Al término de clases llegue a mi casa y me encerré en mi habitación a llorar odiando- me y odiando mi cuerpo, fui donde estaba el tocador y tome una hoja de sacapuntas, lo acerque a mi muñeca y lo deslice rápidamente,lo que provocó que el corte sangre,rápido caían las gotas al piso puse en mi celular la canción "My Inmortal" Mientras sonaba seguía cortando mis brazos hasta que quedaron, cubiertos de mi sangre no fueron profundos como para matarme pero por lo menos así el dolor pasaba."para mi" luego fui por mis piernas me quite el pantalón y lo tire,me volví a sentar mientras cortaba mis piernas decía algo horrible de mi.

-Gorda.-Un corte.
-Fea.-Otro corte.
-Estúpida.-Otro corte.
-Ojala mueras.-Otro corte.
-Obesa.-Otro corte.
-Cerda.-Otro corte..

Y así, hasta que no sentía dolor y finalmente pare, me puse de pie y me dirigi, al baño para limpiar la sangre cuando termine me eche en mi cama a llorar mientras abrazaba fuertemente mi almohada y, pegaba mi rostro húmedo por las lágrimas a esta.

Al otro dia me levante y me bañe mire mis cortes y realmente era hermoso lo que veia. Cuando termine salí y me puse un pantalón negro una camiseta blanca y encima una camisa negra, y unas convers negras tome unas cuantas gillettes y las guarde en el bolsillo de mi pantalón tome mi mochila y baje, vi a mi mamá sola mi papá estaba trabajando.

-Mamá ya me voy.

-cuidate cielo

-Si gracias.

-Adios que te vaya bien.

- te quiero.-le dije sonriendo aunque por dentro moría Sin mas salí caminando mientras lloraba comenzó a llover, pero no me importó amo la lluvia es igual a mi es como si el día estuviera triste, llegue toda mojada pero me valió..

-Hey.-Me dijo una de las chicas que me molesta.

-¿Que pasa?.-Le pregunte tranquila para no tener problemas...

-Hoy va a venir un chico esque es mi novio y espero ni te le acerques por que si no te va a ir muy mal cerda ¿entiendes?.

-Como tu digas.-Le dije desanimada. Ella solo me miro con asco y fue a sentarse la clase transcurrió normal, hasta que finalmente llegó la hora de irse por ir apurada choque con alguien.

-Au.-Por la voz sabía que era un chico lo ayude a levantarse y también sus cosas.

-Lo siento mucho yo .-trate de disculparme,pero al ver su rostro me quede en shok. ¡Era demasiado guapo!.

-No te preocupes yo fui el distraído.-Me lanzo una linda y tierna sonrisa ¡dios!.

-Gracias pero en parte igual fue mi culpa.

-Disculpa, de casualidad
¿no conoces a Raquel?.

-Ah si ella va en mi salón de clases.

-Nico mi amor te estaba buscando ¿donde te habías metido?. Y que haces hablando con ¡Está gorda!.-Dijo Raquel molesta..

-Mejor me voy.-Dije al borde del llanto, fui al baño cerré la puerta y me senté en el piso a llorar, sollozar, saque una Gillette, y comence a cortar otra vez pero decidí hacer algo mejor ya era el momento de acabar con todo. Me levanté camine hacia donde se encontraban los lavamanos y espejos, me mire mientras la sangre corría por mis brazos manchando la blanca, y fría cerámica subí mi temblorosa y fría mano hasta mi cuello apoye el frío metal en mi piel, puse presión mientras lloraba desesperadamente..

-Es hora.-Dije y cuando me disponía a cortarme, alguien me arrebato la hoja y la tiro mire a la persona que evitó mi suicidio y era el.

-¡En que estabas pensando!.-Me grito.

-¡No es de tu incumbencia! ¡Déjame en paz! Tu y yo no podemos hablar.

-¡¡Por que!! ¡No te hice nada!.

-No lo entenderías solo vas a despreciarme cómo todos aquí.

-Claro que no yo jamás haría algo así.

-¿Como se que no me mientes?.

-Sólo cree en mi te lo demostrare con el tiempo.

-Lo siento pero no quiero que te me acerques sólo alejate.

-No lo haré y menos ahora muestrame tus brazos.-Me ordeno serio cuando vio que los escondi.

-No tengo por que hacerlo.-a la fuerza saco mis brazos de detrás de mi.

-¿Por que lo haces?.

-No lo entenderías.

-Puedes decírmelo? Por favor.

-¿Quieres saberlo? Bien te lo diré si con eso te alejas de mi. ¡Yo me odio!.-vi su expresión era de sorpresa.- ¡Odio mi cuerpo, me odio a mi misma!. Odio ser gorda soy fea. ¡¡Todo!! Debería estar muer.. -Quéde muda al recibir un abrazo fuerte de su parte yo no sabía que hacer o como reaccionar

-Estoy sola nadie me quiere sabes todos me odian no sirvo para nada mejor me muero.

-No vuelvas a decir eso..

-¡Es la verdad!.

-¡No lo es!.

-....

(Medio mes despues).

-Parece que no entiendes.
Te quiero alejada de Nicolas que ¿¡no te, queda claro maldita gorda!?.

-Yo..-Me llego una fuerte patada en mi estomago me hizo caer al piso enseguida comencé a llorar no podía hablar me costaba respirar. Tocia sin control.

-Sólo eres una gorda insignificante me das asco y a los demás también. -Me miró con asco.

Solo se fue dejándome ahí tirada como la basura que soy, solo me levanté con dolor y debilidad, me diriji al sanitario cerré la puerta y metí mis dedos en mi boca Los movía hasta que salio todo mi líquido interior era ya la primera vez que lo hacía se sentía raro y asqueroso pero me importaba muy poco, solo quiero ser delgada como Raquel.

Llegue a mi casa llorando
Nadie se tomó la molestia de, preguntar como me había ido o como estaba.
Llegue y puse la canción "Cómo un guerrero" mientras deslizaba la Gillette por mi piel, y la sangre caía.

"Gorda"
"Fea"
"Basura"
"Inútil"
"Bola de grasa"
"Ballena"
Y más de esas palabras de todos mis compañeros golpeaban mi cabeza sin cesar, cada vez me odiaba más.

Al otro dia cuando mi mama hizo el desayuno se veía delicioso eran huevos revueltos con tocino y pan tostado.

Me llego un mensaje que decía.

"Si sigues asi serás más gorda y asquerosa"

Ese mensaje acabo con todo el apetito que tenia.

-No tengo hambre.-Dije y me levante de la mesa me fui y cuando llegue Raquel me esperaba sola, no otra vez.

-Ya llego la gorda.-Me dijo con odio se acercó a mi.
-Me das asco.-Me dijo para luego golpearme luego entraron dos chicas que suponía eran sus amigas y entre las tres comenzaron a patearme, me sangro la nariz me dolía todo el cuerpo sentía que un gran pedazo de concreto me caía encima. Luego al inicio de la clase me dejaron
Como pude me levante para que nadie me viera así.

Luego me senté sola en el recreo como siempre, lloraba en silencio nadie se me acercaba al contrario todos me miraban con asco con desprecio, como si yo fuera una escoria.

*Deja de comer esa es la solución*
*¡Vamos!*
*¡No es tan difícil!*
Las voces
.En mi mente no me dejaban en PAZ.

La ultima clase estaba Aburrida.

-Atención alumnos harán trabajos en parejas.-O genial, ahora quien tendrá la mala suerte de trabajar con la gorda, esperemos que no sea un chico.

-Verónica y Nicolas trabajarán juntos..-Cuando dijo eso lo mire y el me sonrió, pero enseguida cuando el volteo la mirada al frente Raquel me miró enojada sabía, lo que haría.

Al término de clases.
Todos se fueron.
Raquel me obligó a ir al baño, cerró la puerta, tenia miedo mucho no sabia de lo que era capaz ella.

-Me canse, parece que los golpes no sirven, para hacerte entrar en razón. Basura.-Me agarro de mi cabello y me tiro fuertemente contra el frío suelo, nuevamente comenzó a patearme, cuando terminó conmigo y se fue, hice lo mismo.

Estaba en la ducha llorando Mirando mi cuerpo lleno de moretones y golpes, tenia marcas por todos lados incluso rasguños que me hizo al golpearme
¡Odio esto, odio todo! Pero sobre todo, ¡me odio!.

Cuando termine me acosté llorando.

Al otro dia comi un poco de comida, pero enseguida con la excusa de que me olvide unos libros fui y vomite lo poco que había comido, aunque sea poco tiene bastantes calorías, luego al volver, solo deje la loza en el fregadero y fui a la preparatoria.

Al llegar Raquel me recibió con un fuerte y lindo puñetazo en mi rostro que me hizo sangrar el labio.

-Para que ni lo mires perra.-Me dijo enojada para después irse
Me pregunto cómo es que Nico no sabe de esto, luego los vi desde mi lugar entrando abrazados. Sonriendo muy felices luego me sorprendi al verlos besarse, eso acabo con la poca felicidad que tenia Supongo que son novios Bueno era mas que obvio digo, quien se fijaría en una Bola de grasa como yo Raquel es hermosa, delgada alta, unos hermosos ojos unas curvas. ¿y yo?

Soy una gorda asquerosa, el no me vio sólo me ignoro Debi saber que era igual a los demás.

En el recreo, le dije a mi mamá que no me hiciera almuerzo con otra excusa de que no me daba hambre, me impresiona que lo haya creído. Estaba mirando al frente mientras el viento soplaba en mi largo cabello Nico me miró y me sonrió le devolvi la sonrisa, pero me percate de que Raquel me veía, con odio.

Al término de clases como siempre.

Llego y me acorralo contra un muro.

-Eres estúpida ¿o te haces?.

-...

-Te dije mantente alejada de Mi novio.-vaya ahora son novios como lo suponía.

-Pe-pero no tie-tiene nada de m-malo.-la mire con temor
-El pu-puede..-Fui silenciada por una cachetada de su parte luego me tiro al suelo Y me dio una fuerte patada De las que siempre me da.

-A ver si con esto te queda claro.-Saco unas tijeras agarro bruscamente mi cabello y lo corto, veía como caía mechón por mechón de mi largo y hermoso cabello mojado, cuando terminó se fue, dejándome con mis restos de pelo en el suelo Mis lagrimas caían sobre aquel rubio y largo cabello el que había cuidado durante años. Solo quería que esto acabará de una vez.