Capítulo 14
No se que decir sobre este cap. Así que solo voy a saludarlos 🖤
A jack siempre le habían gustado los aeropuertos. Las diferentes culturas mezclándose. Los turistas comprando mierdas.
Por lo general el amabas cada vez que ponían un billete de avión en sus manos. Era como un tiket a la aventura y Dios, el siempre había amado probar cosas nuevas.
Elegir un sitio al azar y lanzarse al vacío sin saber dónde caería.
Cualquier sitio por descubrir era un buen sitio. Jack era un trotamundos hecho y derecho.
Vamos, pero la parte mala. El único boleto que odiaba era ese que tenía en sus manos en ese momento.
Liverpool.
El vuelo saldría a las 12 horas.
Primera clase.
Sintió su estómago retorcerse en un nudo mientras esperaba en las frías bancas del aeropuerto con una valija en la mano, podría haber pedido un avión privado para no esperar, su hermano se lo había sugerido, pero no quería que su padre le quitara las últimas horas de libertad que le quedaban antes de tener que bajar la cabeza al yugo del patriarca Harrel.
su teléfono móvil volvió a sonar.
Llevaba así como media hora.
Era Billy. Dios, Jack se sentía incapaz de responder.
Había tomado una decisión.
La más sensata si se lo preguntaban a su cabeza, aunque su corazón acelerándose por el sonido insistente del móvil no parecía pensar lo mismo.
Tenía un hijo y un deber, debía colgar la toalla de la juventud y hacerse responsable de una vez por todas.
No podía seguir actuando como un cobarde, que el bebé no le había pedido venir al mundo ¿no?
Era un jodido problema en el que se había metido solito.
Era un hombre adulto, hecho y derecho. O lo sería pronto cuando asumiera todas sus responsabilidades al llegar a Liverpool.
No podía seguir huyendo.
Piensa con la cabeza, Se dijo viendo el nombre iluminado en la pantalla.
Apretó las manos en puño en sus bolsillos para mantenerlas en su sitio.
El teléfono dejó de sonar y Jack soltó el aire que había contenido en sus pulmones sin darse cuenta.
Sé un adulto por una vez y al menos cogele el teléfono y explícale por qué te vas, deja de huir como un cabron cobarde. Se lo merece.
Sí, se lo merecía. Era lo mínimo que le debía. Desaparecer como pensaba hacer era otra trastada de crío, no.
Seré adulto, le explicaré la situación, se prometió.
Tomó el móvil y buscó el contacto, pero se arrepintió de nuevo antes de presionar send.
Huir sin dar explicaciones siempre era más fácil.
Si vuelve a llamar, se prometió. Si vuelve a llamar antes de abordar le cogeré y le explicaré todo como un adulto.
Sí, esa parecía una buena promesa.
Jack esperó , casi aliviado por unos 20 minutos hasta que el teléfono volvió a sonar.
Dos tonos, suspiró y por fin tomó la llamada.
—Billy lo siento…—comenzó a disculparse pero no fue la voz de Billy lo que encontró del otro lado, sino la de una alterada Angie que en esos momentos parecía estar llorando.
—Billy está en el hospital—lo interrumpió dejando a Jack seco.—lo han golpeado, creen que fue un crimen de odio. Lo dejaron por muerto. El está muy mal. El querría que lo supieras.
Él querría… la chica hablaba en pasado de Bill como si el hubiera… No...
Jack tuvo sujetarse de un hombre que pasaba en ese momento para no caer al suelo. El tipo lo miró extrañado, pero algo en su rostro hizo que el hombre en vez de molestarse le preguntar si estaba bien.
La chica al otro lado lloraba .
Joder. No. No lo estaba. El definitivamente no estaba bien.
Era como si acabaran de arrancarle algo del pecho.
—¿Dónde?—consiguió decir y Angie fue lo suficientemente comprensiva para entender que lo que quería era saber la dirección del hospital.
No supo en qué momento llegó, solo supo que actuó en piloto automático hasta que una enfermera le informó donde debía esperar.
Jack estudió el cuarto con atención. Brandon estaba allí, pálido en un rincón , casi ausente de lo que pasaba a su alrededor. Hizo una mueca de desagrado al verlo pero no dijo nada, no estaba muy seguro de cual era su relación con Bill pero lucía afectado, tal vez más afectado que todos en esa sala.
Jack hubiera sentido pena por él, quizás, por ser un cabron idiota que parecía no darse cuenta lo mucho que Billy de verdad le importaba. Pero dado el caso, a él le importaba Bily, él quería a Billy y a pesar de que no supiera bien cuál era su posición en la vida del pelirrojo definitivamente no era simpatizante de su ex.
Dos bancos más allá, había una pareja bastante mayor cerca de la puerta, Jack supuso que eran los tíos de Billy o sus padres , Billy le había dicho que la relación con sus padres era nula. Pero si lo habían llamado a él era lógico que los llamaran a ellos ¿no? La mujer lloraba desconsolada en los brazos de su pareja.
Jack vio a otro par de personas que no pudo reconocer hasta localizar la mata de cabello pelirrojo de la prima de Bill.
Angie se levantó nada más verlo y fue hasta Jack, su cara completamente descompuesta por las lágrimas , se abrazó al hombre un par de años mayor que ella y balbuceó algo inteligible.
—¿C-como esta?—Jack tuvo que carraspear y volver a preguntar, su voz demasiado áspera apenas arañando la superficie.
—Dijeron que el pronóstico era reservado. No dijeron más. Llevamos horas sin saber nada. Esos malditos…. ¡el no le hacía mal a nadie! ¡era solo un niño!
—¡Basta!—Jack se sorprendió a sí mismo de las rudeza de su palabras. La chica lo observó con sorpresa en sus ojos castaños. Jack la sujetó de los hombros y la obligó a mirarlo.—Él es—le dijo irracionalmente molesto por eso— el está vivo. No hables de el como si hubiera muerto. Él está vivo ¿de acuerdo?
La chica asintió y Jack la envolvió en un abrazo frotando su espalda.
Sí, puede que no se conocieran demasiado, pero si había algo claramente en común entre ellos era lo mucho que en ese momento se encontraban sufriendo por Bill.
Jack no supo si fueron días, horas o años el tiempo que pasó desde que llegó al hospital hasta que les dejaron pasar a ver al pelirrojo.
Pero supo que no se movió ni un segundo de aquellos fríos bancos de la sala de espera. No podía. Simplemente estaba clavado a ellos como si fuera su vida la que estuviera en riesgo y no la del chico pelirrojo.
Cuando por fin salió una enfermera a decirles que estaba estable y los mandó a casa Jack respiró pero no hizo caso.
Se quedó durmiendo en aquellos fríos bancos hasta que lo dejaron pasar a la habitación del pequeño.
Lo que vio, cuando por fin lo dejaron entrar, lo destrozó. Billy sobre una cama de hospital con vendas y suturas por todo el cuerpo. Si Jack no hubiera sentido en ese momento que algo se rompía dentro de él, hubiera sido capaz de ver el rostro culpable de Brandon a pocos metros, que había entrado detrás de él, pero en esos momentos no había nada más en la mente de Jack, todo estaba opacado por una visión de túnel en la que Billy era todo lo que podía ver en ese momento.
Billy herido. Billy tirado en una cama con su cuerpo magullado, Jack se acercó y le tomó la mano con mucho cuidado. El chico aún estaba dormido. Sentir su suave piel entre sus dedos fue una extraña mezcla de alivio y dolor.
Quería verlo abrir sus ojitos de nuevo, quería poder acurrucarlo entre sus brazos, pero no pudo.
A los poco minutos fue sacado de la habitación por los familiares del chico que contaban con la prioridad para verlo.
Jack no pudo poner queja sobre eso, que a fin de cuentas ¿qué era él del chico pelirrojo?
A Billy lo tuvieron casi semana y media retenido en el hospital hasta que lo dejaron ir a casa.
Sus declaraciones a la policía fueron que no había podido reconocer a sus agresores. Pero eso era todo, Billy no hablaba, no comía, se pasaba el día hecho un bollito en su cama, completamente ido mientras su cuerpo se esforzaba por sanar.
Tenía un brazo entablillado y unas cuantas costillas rotas, brazos y muslos llenos de cortaduras y moretones.
De no ser porque había atinado a cubrirse la cabeza con los brazos probablemente los golpes en su cráneo hubieran sido fatales. Eso había dicho el doctor, y de solo pensarlo a Jack le hervía la sangre por matar a quién fuera que hubiera lastimado de esa forma a su niño. el hombre les sugirió una preocupación preventiva durante los siguientes meses por los que le había mandado un control regular hasta que fuera dado de alta por completo.
Dos semanas después Jack estaba verdaderamente desesperado por verlo y comenzaba a odiar a Angela, la muchacha se comportaba como una gata celosa de su cría, no había dejado que lo vea ni una sola vez desde que habían mandado a Billy a casa.
Que una parte de Jack la entendía, si por él fuera también se hubiera comportado así.
Él solo quería envolver al chico en sus brazos y no soltarlo más. Alejarlo de todo y todos lo que pudieran causarle algún daño. Mantenerlo a salvo…
Sí, Jack podía comprender por completo el sentimiento de protección de su prima. Pero llevar más de dos semanas viendo una puerta cerrarse en sus narices sin mayor información sobre Bill lo estaba destrozando.
Cada maldita tarde luego de sus clases volvió hasta la casa de Bill y golpeó, su suerte no era mejor con sus tíos, se había alquilado un pequeño piso no muy lejos para mantenerse cerca. Y como todas las tardes antes de ir a su departamento se pasó por allí.
Casi estaba esperando un portazo para esos momentos. Se estaba preparando mentalmente cuando a diferencia de todos los días anteriores la puerta se abrió y lo que lo recibió fue una preocupada pelirroja que parecía haber estado esperando su llegada con ansiedad.
—tienes que hablar con él. Convéncelo de que se levante.— le dijo sin esperar respuesta arrastrándolo al interior de la casa.
No pregunto con “quien" debía hablar, eso estaba más que claro, lo que no entendía era a que se debía el repentino cambio de actitud de la joven. Jack frunció ligeramente el ceño.
—Es lo que llevo intentando hace más de dos semanas y no me has permitido verlo ¿por qué ahora de pronto si?
Sí, Jack probablemente debiera haber subido hasta el cuarto de Billy aprovechando el repentino cambio de actitud de su prima. Pera algo no estaba bien en toda la situación.
Angela parpadeó, como si estuviera despertando de un letargo, Sus ojos desesperanzados observaron a Jack por un momento. Desvío la vista a la escalera oscura que daba al cuarto de Billy y volvió los ojos a Jack, diciendo por fin aquellas dos palabras que nadie dentro de la casa se había atrevido a pronunciar desde la mañana en la que lo habían encontrado.
—Intentó suicidarse.
—¿qué?—su voz sonó extraña hasta en su cabeza.
Pero es que el suicidio y su mocoso sinvergüenza no iban en la misma oración, solo no. Billy era pura vida y alegría, era todo lo contrario a...
Angela hizo una mueca con sus labios.
—yo lo siento tanto. No sé como protegerlo. Creí que estaba mejorando. Ayer se levantó de la cama por primera vez en semanas. Estuvo conversador, nos sonrió—la chica parecía debatirse entre la incredulidad y la indignación en ese momento mientras sus ojos se empañaron.—y luego… cuando lo encontré ni siquiera lo negó, ni siquiera luchó, solo me miró cansado ¿y sabes que me dijo? Que ellos siempre iban ganar, que siempre iban a haber más de ellos. Y no puede negárselo, esos hijos de puta siempre están ahí, no importa que nombre lleven son todos iguales …lo vi soporta tanto todos estos años…luchar tan duro contra ellos para que terminaran por quebrarlo…no puedo verlo así. No puedo…
Angela lucia al borde del llanto para ese momento.
—Llévame con el—pidió suave. La chica asintió y lo condujo por el pasillo del primer piso hasta el cuarto del pelirrojo.
Era la primera vez que Jack estaba allí, el sitio era pequeño y acogedor, gritaba Billy por todos lados y Dios, Jack se hubiera sentido a gusto allí de no ser por el pequeño muchacho que estaba hecho un bollito en su cama.
Jack lo observó, estaba acostado con sus ojos fijos en la pared opuesta a la entrada, el chico ni siquiera se movió al oírlos entrar. De no ser por la ligera tensión en su espalda Jack hubiera jurado que ni siquiera los había oído.
Se veía tan malditamente pequeño y destrozado que Jack comprendió de inmediato a que se había referido Angela con quebrarlo, no hablaba de los huesos partidos que le habían dejado de recuerdo los matones que lo habían atacado.
No. Billy en esos momentos lucían mucho como un pajarito indefenso al que le hubieran roto las alas...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro